Liverpool tuvo su noche de furia en Bérgamo

Por la tercera fecha del grupo D, Liverpool visitó al Atalanta en un partido de alto voltaje ofensivo y en el que se esperaban muchas emociones de ambos equipos. Sin embargo, el campeón inglés fue amo y señor del encuentro, goleó a domicilio y se encaminó rumbo a la fase eliminatoria. Liverpool convirtió ‘a piacere’ y dejó atrás algunos fantasmas recientes.

Tras unas actuaciones previas poco convincentes, los dirigidos por Klopp necesitaban una actuación convincente para despejar dudas y ganar confianza de cara al cruce dominical ante el Manchester City por Premier League.

Jota y una sutil definición para el 1-0

El encuentro comenzó con una tendencia demarcada y que se mantuvo los 90 minutos: Liverpool aguardaba de forma paciente y en los contraataques aprovechaba la velocidad de sus delanteros. Diogo Jota sustituyó a Firmino en el 11 inicial y el portugués tuvo otra gran noche futbolística.

A los 16′ Alexander-Arnold asistió a Jota, quien se quitó de encima la marca y definió pinchando el balón sutilmente y junto al palo derecho de Sportiello. 1-0 para la visita. Liverpool no se conformó e insistió, asedió el arco rival y pasada la media hora del partido, duplicó su ventaja. Fue a los 33′ y tras un pelotazo al área de Joe Gomez, Diogo Jota controló y definió con un violento remate al primer palo.

El primer tiempo tuvo otras llegadas del Liverpool, en las que el arquero rival se lució y salvó su valla. Sin embargo, en el segundo tiempo no tendría la misma fortuna.

Los “Reds” salieron determinados a liquidar el encuentro y en diez minutos de inspiración propia y frustración ajena, lograron su cometido. El egipcio Mohamed Salah encontró la red a los 47′ con un auténtico golazo, en el que exhibió su velocidad y su exquisita capacidad de resolución dentro del área. En los jugadores de Atalanta se evidenciaba el desgaste físico y la impotencia ante un equipo muy competitivo y difícil de enfrentar.

Salah, a colocar y a cobrar.

No hubo piedad en los jugadores del Liverpool y a los 49′, Sadio Mané definió por encima de Sportiello, y de emboquillada, para sancionar el 4-0 parcial. Una definición excelsa del “10”. Liverpool hizo un gol mejor que el otro, y parecía haber una competición interna por ver quien convertía de manera más vistosa. Tal vez eso fue lo que mantuvo vigente el hambre en sus jugadores y esa intensidad característica de los equipos de Klopp.

Para Diogo Jota había una ambición adicional y a los 54′ obtuvo su cometido. Tras una recuperación de Robertson y un excelente pase filtrado de Mané, Jota eludió la salida del guardametas y empujó el balón a un arco despoblado. Selló su “hat-trick” en una noche soñada y confirmó su excelente momento futbolístico. Jota es el jugador más determinante, en la actualidad del equipo, y buscará consolidar su puesto y asegurarse un lugar en el tridente ofensivo. Sin dudas su llegada ha sido un éxito y paga con goles los €40M invertidos en su fichaje.

Mané dijo presente con este golazo.

Liverpool tuvo una noche de ensueño; todos sus jugadores estuvieron a un altísimo nivel. Incluso Alisson Becker fue crucial para mantener su valla invicta, negándole el gol en reiteradas ocasiones a Duván Zapata. La defensa dejó una buena imagen, mientras intenta dejar atrás la lesión de Van Dijk y Fabinho. Su ataque no requiere descripción, los 5 goles hablan por sí solos.

Triunfo de suma importancia, tanto en los puntos como en el ánimo del equipo que ahora torna su foco en la visita al Etihad Stadium. Klopp y Pep se verán las caras, una vez más, en un nuevo encuentro entre los dos equipos más competitivos de la máxima categoría inglesa.

Federico O’Donnell