La Santa Fe de Sosa le frustró la victoria a Colón en Avellaneda

Lo mejor del partido estuvo al final. En los últimos minutos; si se quiere, en los veinte finales, pero para ser más justos con el drama y la emoción que despierta este deporte único, debemos decir que el minuto final del tiempo reglamentario y los seis que adicionó el árbitro del partido entre Independiente y Colón, Silvio Trucco, fueron los más importantes del juego.

Ya llegábamos al final cuando partió el centro pasado, de derecha a izquierda, para la fuerte palomita que metió Lucas Rodríguez para sellar la igualdad a los 89′; el partido quedaba 1 a 1 y todo indicaba que ese iba a ser el marcador final, pero el juez adicionó seis minutos más y las emociones crecieron.

El Rojo, envalentonado por el empate agónico y por el buen juego que había producido en la segunda mitad del complemento, a partir de los ingresos de Lucas González, Federico Martínez y Alan Soñora, creyó que lo podía ganar. Y Colón, que había tenido sus chances en el complemento a partir de buenos contragolpes, lo fue a buscar con convicción y en el instante final se encontró con un penal por una mano de Lucas Romero. Antes de la ejecución se lo veía tranquilo al arquero uruguayo Sosa, quien analizaba las posibilidades de donde fuera a ir el remate. Y acertó, porque Emanuel Olivera, a los 90+5′, eligió el palo derecho del arquero y hacia allí fue el vuelo de Sosa, para rechazar el remate y dejar sellado el 1 a 1.

Incluso, en la reanudación, Romero tuvo una oportunidad, pero la pierna de Olivera desvió su tiro al corner. Y todo concluyó con un reparto de puntos para dos equipos que pueden clasificarse a la zona de arriba.

Antes hubo un partido, cuyas emociones más importantes, también, se produjeron al inicio del encuentro.

Porque Independiente llegó apenas comenzó el juego con una buena jugada de Pablo Hernández, el pase de taco a Velasco, el centro de este y el cabezazo de Hernández que controló Burián.

Colón respondió con una llegada de Chancalay y muy pronto abrió el marcador, a los 12′ cuando Wilson Morelo conectó un tiro de esquina y con dos intentos inauguró la cuenta para que el equipo de Eduardo Domínguez se pusiera 0-1.

Independiente se repitió con pelotazos a Silvio Romero, para que este pivoteara y tratara de bajar de cabeza para que los volantes armen el juego. Colón se apoyaba en el trabajo de Aliendro, Bernardi, Lértora, para que Chancalay fuera el arma de fuego del conjunto visitante.

Y el primer tiempo se fue en esa paridad, aunque el resultado le sonreía a Colón.

El Rojo mejoró con las tres variantes que propuso Lucas Pusineri a los 63′, cuando dispuso que Lucas Gonzalez entrara por Pablo Hernandez, Federico Martinez ingresara por Blanco y Alan Soñora lo hiciera en lugar de A. Roa. Mejoró el local con la frescura de los pibes, y a los 69′ tuvo una llegada clara con una media vuelta de Silvio Romero, y a los 81′ tuvo un mano a mano que tapó muy bien el arqueo Burián.

Y al final, lo dicho. La igualdad que logró Independiente, la chance que tuvo Colón y el empate que tuvo un gusto más dulce para el Rojo que para el equipo visitante, por esa Fe que Sebastián Sosa tuvo en la última jugada del partido.

Hernán O’Donnell