Juventus detuvo la marcha del Milan y encendió el campeonato italiano

Fue un primer tiempo a todo ritmo, con dominio alternado, varias llegadas claras, muy buen trato de balón por parte de los dos equipos y algunas jugadas sobresalientes. Mucho ritmo y vocación ofensiva. El choque de los dos colosos de Italia, Milan y Juventus, generó un encuentro lleno de emociones y alternativas interesantes.

A los 7’ Milan tuvo su chance con un disparo de Castillejo, quien aprovechó un error de Betancur, que se enredó en la salida y dejó atrás el balón; el remate del delantero local se fue cerca del palo derecho de Szczesny.

Tras esos minutos iniciales, Juventus tomó la “batuta” del partido. Se hizo dueño del balón, empujó al local contra su campo y lo maniató en ese territorio. Con las trepadas de Danilo y Frabotta, el trabajo ordenado de Bentancur, la dinámica de Rabiot y las pinceladas de Paulo Dybala, la “Vecchia Signora” aguardaba por la aparición rutilante de Cristiano Ronaldo para definir todo lo que empezaba a generar.

A los 15′ tuvo una oportunidad clara; tras varios cabezazos en el área local, Chiesa sacó un remate fuerte que dio en el palo derecho de Donnarumma. Y a los 17′ Chiesa se fue por derecha, enganchó hacia adentro, superó a Hernández, se la pasó a Dybala y el cordobés, con una genialidad, se la devolvió de taco en profundidad para que entrara libre por el callejón derecho. Chiesa aprovechó la asistencia y con un remate cruazdo abrió el marcador: 0-1 para la Juventus.

Milan sintió que debía acelerar el paso para salir del asedio. estaba atrapado en su campo y con el resultado adverso. Apostó a la velocidad de Leao, quien a los 21′ probó desde afuera y su remate se fue muy cerca. A los 26′ Hauge habilitó al portugués y Leao, de media vuelta, sacó un tiro potente, que Szczesny desvió al corner. Y al final logró el empate; iban 40′ cuando Leao se fue por izquierda, cruzó el balón al medio y Calabria, habitual lateral que esta vez jugó de volante junto a Kessie, sacó un remate bárbaro, que se metió en el ángulo superior izquierdo del arco visitante. 1 a 1 y fin de un primer tiempo con dominio alternado.

En el segundo tiempo Juventus retomó el dominio de las acciones. Volvió a apoyarse en el talento de sus individualidades y el trabajo colectivo asociado. creció la figura de Ramsey. Aumentó la dinámica Chiesa. Dybala se contactó aún más con la pelota. Y a los 61′, tras una asistencia del ex hombre de Instituto, Chiesa volvió a marcar para la Juve, que pasó al frente por 1-2.

Y fue concretar y rearmar las líneas. Pirlo determinó, a los 62′ las dos primeras modificaciones en la visita: D. Kulusevski entró por el lesionado F. Chiesa y el estadounidense W. McKennie ingresó por Paulo Dybala; salían los dos mejores de Juventus, pero los ingresantes iban a cumplir muy bien su rol.

Después Stéfano Pioli metió mano en su equipo; a los 67′ entró Barhim Diaz por Hauge. Pero se le hacía difícil al local, Juventus ya estaba muy acomodado en el partido. a los 70′ Ronaldo habilitó a McKennie y este sacó un tiro fortísimo que Donnarumma desvió al corner. Y de ese tiro de esquina el arquero local atrapó el balón, cedió a Theo Hernández, este se fue solo, y cuando llegaba al área, Danilo le robó el balón para luego pisarlo. El referí entendió que hubo falta, y el tiro libre de Calhanoglu se fue muy cerca del palo izquierdo.

Juventus iba a hacer dos cambios más a los 73′ en tanto se acercaba la definición del partido. El brasileño Arthur entró en lugar del uruguayo R. Bentancur y F. Bernardeschi reemplazó a A. Ramsey.

Kulusevski consiguió el balón por derecha y asisitió a Mckennie, quien en el medio del área y con un tiro fuerte, seco y al medio, marcó el 1-3 para Juventus. Los ingresantes habían estado a la altura de los que habían reemplazado un rato antes. Y así como el primer gol llegó de una combinmación de Dybala y Chiesa, el tercero vino por una asociación de quienes los reemplazaro, Kulusevski y McKennie.

Ya jugado en el partido, Pioli metió tres variantes a los 79′: P.K. Kyatengwa entró en lugar de D. Calabria, A. Conti ingresó por S. Kjaer y D. Maldini reemplazó a D. Dalot.

Milan iba a tener una última chance clara con un tiro fuerte de Calhanoglu que Szczesny controló bien a los 83′. Luego hubo un par de maniobras fallidas, una de Maldini quien se jugó por la individual cuando Brahim Diaz estaba solo y el cambio final en cada uno de los conjuntos: iban 86′ cuando M. Demiral entró por G. Frabotta en la visita y Colombo por Castillejo en el local.

Fue para Juventus porque tuvo un poco más de control, de dominio y de poder de fuego. En un partido vibrante, la “Vecchia Signora” supo hacer valer su jerarquía, golpeó en los momentos justos, detuvo la marcha del Milan y le puso emoción al campeonato italiano.

Hernán O’Donnell