Milan empieza a recobrar la memoria extraviada

Es probable que no le alcance para ser el candidato a ganarel próximo “Scudetto”. Es posible que aún le falte un par de temporadas para volver a coronarse. Es verdad que su archi rival, el Inter se corone en las próximas horas. También que arrastraba dos derrotas consecutivas que lo habían metido en una laguna de preguntas. Pero el Milan está otra vez en la senda que marca su historia, la de discutir los títulos de la Serie “A” del calcio italiano, la de ser uno de los protagonistas temibles de la Champions League. Pre pandemia nevagaba en la intrascendencia de la mitad de la tabla, con una serie de resultados que lo alejaban de los habituales primeros planos. Pero el año pasado retomó su sana costumbre enhebró victorias en cadena y se convirtió en uno de los mejores conjuntos del 2020. Y este año quiere acomodarse una vez más en las grandes marquesinas que siempre ocupó a lo largo de su rica historia.

Contra Benevento salió a jugar con la soltura que lo caracterizó el año último. Rotación, circulación, el eje en Calhanoglu, el pivoteo en la rica experiencia de Zlatan Ibrahimovic y el peligro generado en cada subida de Theo Hernández por el lateral izquierdo. Y de una combinación entre ellos, el pase de Saelemaekers, el amague del dinámico Kessie y el remate de Calhanoglu llegó el gol a los 5′ para poner el encuentro 1 a 0.

Benevento intentó salir y darle pelea al equipo local. Le costó un tiempo poder salir del asedio de Milan, pero a los 30′ tuvo una chance con un tiro de esquina que se cerró, podía entrar en modo “olímpico”, pero las manos de Donnarumma evitaron la caída de la valla.

Milan respondió con una buena jugada de Calhanoglu a los 34′ y un centro que Leao no pudo conectar bien en su cabezazo final. Y a los 36′ Theo Hernández esperó en el área, encontró el hueco y sacó un remate fuerte y cruzado que el arquero visitante logró desviar al tiro de esquina. Y a los 45+2′ Zlatan cerró la primera etapa con una escapada solitaria, tras haber recibido la habilitación de Kessie, y su disparo fue tapado por el arquero visitante.

Milan comenzó el complemento con una variante; Tonali reemplazó a Bennacer, amonestado, pero de correcto partido. Y volvió a tomar las riendas. A los 54′ Zlatan armó una jugada bárbara en el área y su disparo fue rechazado por Montipó, el arquero visitante.

Llegó la primera variante de la visita: a los 54′ Roberto Insigne reemplazó a Falque. Y a los 59′ Milan amplió la ventaja; Hernández combinó con Zlatan y fue a buscar la devolución. Ibrahimovic prefirió girar y patear al arco. Montipó dio rebote y el propio Hernández, que había ido a buscar la pared, se encontró con el balón. Así sacó un disparo fuerte y cruzado que se transformó en el 2 a 0 para el local.

Benevento fue adelante. Entre Viola y Artur Ionita buscaron asociarse con Insigne, abrir la cancha con Improta y Dabo, para llegar a la búsqueda de Lapadula. Era un poco más arriesgada su propuesta, mientras que el Milan se apoyaba en la sabiduría conductiva de Calhanoglu y el trabajo colectivo de un equipo que empieza a aparecer.

A los 74′ el local abrió una ventana para introducir tres modificaciones: S. Castillejo ingresó en lugar de A. Saelemaekers, A. Rebic entró por R. Leão y D. Calabria reemplazó a Theo Hernandez; también Benevento aprovechó para variar su alineación. Iban ya 75′ cuando Adolfo Gaich reemplazó a G. Lapadula y G. Caprari ingresó por R. Improta.

El partido no varió demasiado con las modificaciones. No tuvo la visita profundidad, le costó elaborar maniobras y Milan siempre se sintió cómodo en el partido. A los 84′ Brahím Diaz entró por Calhanoglu y en la visita Andrés Tello reemplazó a Dabo.

Los minutos finales mostraron algunas sutilezas de Ibrahimovic, quien aún es uno de los futbolistas más carismáticos y de mayor jerarquía del mundo. Milan ganó bien, con pocos sobresaltos y con la expectativa grande de la visita a Juventus en la próxima fecha, mientras que el futuro próximo aparece con una sonrisa.

Hernán O’Donnell