Quilmes fue audaz y estuvo cerca de dar el golpe en Villa Crespo

La derrota, injusta, frente a Agropecuario significó algo más que un resbalón y la pérdida de tres puntos. Fue también dejar el invicto, el único que se mantenía hasta el momento en el Campeonato de Primera Nacional 2021, ceder la ubicación de privilegio en la Zona “1”, esa posición que lo lleva a la final por el primer ascenso a la Liga Profesional de Fútbol, resbalar también hasta el tercer lugar…para Atlanta la visita a Carlos Casares no fue productiva y el encuentro ante el siempre complicado Quilmes significaba un excelente posibilidad para recuperarse.

Fue más duro de lo pensado. Porque el equipo de Facundo Sava salió a apretar desde el inicio, con un esquema agresivo. Cuatro defensores en la hilera, donde Bindella se soltaba de modo permanente, Drocco y Calello para la contención, Jonás Acevedo suelto y cerca de los delanteros: Tomas Blanco, Anselmo y Bonetto. Así, a los 3’ tuvo una chance clara, cuando Julián Bonetto se fue solo en contragolpe y ante el achique de “Pancho” Rago sacó un remate desviado, en una posibilidad clarísima para su equipo.
Lo tuvo después Atlanta, a los 6’ cuando Ochoa Giménez aprovechó una mala salida de la defensa visitante, pero no pudo usufructuarla pues su tiro también salió desviado.

El partido se hizo más complicado de lo que Atlanta imaginaba. Porque Quilmes fue audaz y valiente, y no lo dejó salir al “Bohemio” de su campo. Por lo menos, con la comodidad que lo suele hacer. Los cuatro hombres de ataque tapaban a los centrales, Flores no tenía libre el andarivel y Ramiro Fernández no hallaba progreso por izquierda. Y si bien cerró el primer tiempo con un tiro alto de Pedrozo a los 42’ y y un centro del mismo Pedrozo que Alan Perez cabeceó al medio y Saracho controló con facilidad, Quilmes dejó una imagen de superioridad.

Erviti entendió lo mismo, que el equipo no había estado bien en el primer tiempo y decidió tres variantes para comenzar la segunda etapa. Modificó el sector izquierdo de la defensa; afuera García y Fernández, adentro López y Luque, además de Facundo Taborda en reemplazo de Ramirez. Más ataque y salida por los costados.

A los 52’ Pedrozo tuvo un mano a mano con Rodrigo Saracho y el arquero de Quilmes le desvió su tiro al córner. A los 54’ Colombini metió un buen cabezazo, aunque desviado. Respondió la visita con otro golpe de cabeza, por medio de Julián Bonetto, tras un tiro de esquina. Y a los 65’ Ochoa Gimenez elevó un remate arriba del travesaño.

Era otro partido. Aunque Quilmes volvió a apretar, Atlanta mostraba otra imagen. A los 66’ Facundo Sava movió el banco visitante. Fernando Luna entró por Drocco y Mariano Barbieri reemplazó a Tomás Blanco.
A los 70’ le llegó una oportunidad, tras una pelota perdida por Ochoa Gimenez, Bonetto se fue de contra y su disparo salió alto.
Y más cambios en el partido. A los 73’ Cristian García reemplazó a Pedrozo, para reforzar el ataque local. Pero Quilmes volvía a avisar, con un tiro libre, el rebote le quedó a Bindella y su tiro fue atajado por Pancho Rago.

A los 79’ salió el capitán visitante, Calello y lo reemplazó Tomás Bottari. En Atlanta, a los 85’ Alejo Dramisino ingresó por Santiago Solari, y en los pocos minutos que estuvo en el campo de juego fue dinámico, profundo y hasta se dio tiempo para probar al arco.
Quilmes hizo su último cambio a los 89’ cuando Emmanuel Moreno ingresó por Bonetto y tuvo, a los 90+2’ una chance más, quizás la más impactante del partido. Martin Ortega sacó un par largo para Jonás Acevedo, de buen segundo tiempo, este parecía que perdía el balón con Lopez, pero el zaguero local no controló la pelota y Acevedo aprovechó para sacar un centro al que Rago no llegó y Anselmo desvió su remate, en una posición inmejorable. Quilmes desperdició una última oportunidad.
Fue una tarde fría y gris para Atlanta. Como el tiempo helado de esta Buenos Aires, en la que salvó un punto, pues el partido fue muy complicado y Quilmes estuvo cerca de hacerle un daño mayor.

Hernán O’Donnell