Las manos de Sommer brillaron, pero las de Simon le dieron justicia a la clasificación de España

Un partido larguísimo, que parecía España lo iba a resolver a lo largo de los noventa minutos reglamentarios, luego la sensación fue que la “Roja” estuvo siempre cerca de ganar en la prórroga, pero las manos del arquero Yann Sommer impidieron una y otra vez que España se adelantara en el marcador . Y todo se resolvió por la vía de los penales.

A los 8′ se adelantó el equipo de Luis Enrique con un gol en el que el desvío en Zakaría le dio la oportunidad de ponerse 0-1. Y allí el equipo español intentó manejar el balón, darle circulación y tener el control del juego con su clásico estilo de posesión.

Fue importante Pedri en la conducción y en la distribución. Koke para darle vitalidad a la mitad de la cancha. Azpilicueta y Jordi Alba siempre listos para subir y adelante Morata, asistido por Sarabia y Ferrán Torres preocupaban a Suiza. Claro que los de Vladimir Petkovic mostraron lo suyo. La velocidad punzante de Shakiri, el trajinar de Zuber y el peligro que siempre lleva Seferovic.

A los 23′ se lesionó Breel-Donald Embolo y fue reemplazado por Ruben Vargas, en tanto el equipo se agrandó en los diez minutos finales de la primera etapa y forzó un par de situaciones ante el arco de Unai Simon.

España salió al segundo tiempo con una variante; Dani Olmo ingresó en lugar de Pablo Sarabia. Y le dio más aire al equipo. Ya a los 49′ ejecutó un centro que Koke elevó de cabeza; era un aviso, aunque Suiza estaba viva y a los 51′ Shakiri ejecutó un corner cerrado, casi olímpico, que pasó muy cerca del primer palo y a los 53′ Gerard Moreno entró por Morata.

Suiza insistía y a los 67′ llegó al empate; un rechazo de Laporte rebotó en la espalda de Pau Torres y el balón le quedó a Freuler, quien se la pasó a Shakiri y el delantero de Liverpool definió bien ante la salida de Unai Simon. 1 a 1 y volver a empezar.

España fue para adelante como lo marca su historia y a los 76′, cuando se fue expulsado Freuler, ya el partido quedó definido: El conjunto ibérico al ataque y los suizos refugiados con dos líneas de cuatro y un delantero que flotaba por delante de ellos. Entonces Sommer apareció en la tarde/noche de San Petersburgo. Porque Petkovic pretendió reforzar la zona del medio y decidió dos modificaciones a los 81′ de juego: D. Sow entró por X. Shaqiri y M. Gavranovic por el centro atacante, H. Seferovic. Sobre el cierre del partido, Suiza realizó una nueva variante, Fassnacht por S. Zuber y España reemplazó a Koke por Marcos Llorente. Y para comenzar el alargue, Oyarzábal, el talentoso volante de la Real Sociedad de San Sebastián.

En la prórroga comenzó el show del arquero Sommer. Suiza retrocedió, de modo peligroso, en tanto España puso toda la artillería en el campo rival. A los 100′ fue Gerard Moreno el que exigió a Sommer y el arquero respondió. Enseguida Oyarzábal enganchó desde la derecha, sacó el zurdazo abierto y otra vez surgió el arquero de Borussia Mönchengladbach para desviar el balón. Suiza hizo dos cambios a los 101′: K. Mbabu entró en lugar de S. Widmer y F. Schar reemplazó al defensor D. Zakaria. Poco después, Oyarzábal repitió esa jugada, casi calcada, a los 105+1′ y volvió a atajar Sommer.

España sumaba una y otra llegada. A los 110′ Busquets abrió a la izquierda para Jordi Alba, el centro fue para Dani Olmo y el remate del delantero de RB Leipzig fue atajado por Sommer.

A los 112′ Thiago Alcántara reemplazó a Pau Torres y otra chance tuvo la “Roja”: a los 115′ Busquets lo tuvo de cabeza tras un buen tiro de esquina y Sommer se quedó con la pelota. Lo último para destacar fue el cambio de Rodri por Pedri a los 118′. Y los penales, que tejieron una historia increíble.

Siempre creemos que lo mejor es empezar en la serie de remates, porque da la sensación que existe una chance más. Que si uno erra el primero, siempre el rival debe patear y allí hay otra oportunidad. Que siempre se tiene la primera chance para marcar diferencias. es sutil, pero una pequeña difrencia, mínima si se quier, pero que España la pudo aprovechar.

Porque Sergio Busquets estrelló el primer remate en el palo derecho de Sommer, que se había arrojado al otro lado. Y, sin embargo, España no pareció abatida, más allá de que Gavranovic marcó el suyo y puso el 0-1 para Suiza en los penales.

Convirtió Dani Olmo con un remate tremendo al ángulo y el encuentro quedó 1 a 1 en la segunda serie porque Unai Simon le atajó el remate a Schar. Debía aprovechar Rodri, para adelantar a su selección, pero volvieron a aparecer las manos de Sommer y ahora era Suiza el que tenía la chance. Pero Schar no fue eficaz, volvió a atajar Unai Simon y llegamos a la cuarta serie con el marcador ¡1-1! en los penales.

Pateó el cuarto de España Gerard Moreno y esta vez fue gol; 2-1. El turno de Rubén Vargas y la presión de convertir para no dejar a España Match-Point en la quinta serie. Y Vargas le entró muy abajo y fuerte y el disparo salió arriba del travesaño español.

Ahí estaba la ventaja de patear primero; pudo remontar dos veces los penales errados y quedaba en la quinta serie con dos oportunidades. La de convertir primero, y si no podía, la de evitar el hipotético quinto remate de Suiza.

Pero fue Mikel Oyarzábal el encargado y con toda la categoría del mundo marcó el 3 a 1 y desató el festejo loco de España que llegó a las semifinales con mucho sufrimiento, pero con una dosis necesaria de justicia.

Hernán O’Donnell