Francisco Cerúndolo no se desesperó y logró un triunfo contundente

Fue una victoria merecida, lógica, clara. Más allá del comienzo, un poco errático, con algunas fallas pero sobre todo con un rival que dejó lo mejor de sí en el inicio del partido. La clave fue que Francisco Cerúndolo no perdió la cabeza, no se entregó ni resignó el primer set, aún cuando parecía perdido, porque tras los primeros games, cuando Bagnis se adelantó 2-0, Francisco no se pudo acomodar al partido y muy pronto quedó 1-5 abajo.

Un poco por los nervios, un poco mérito del rival, lo cierto es que Cerúndolo no entraba en el partido y Bagnis lucía como dominador. Sin embargo, en el séptimo game, “Fran” se soltó. Ganó el primer punto del juego con una fórmula positiva, lo sacó al rival bien afuera de la cancha y con una derecha paralela se puso 0-15. Era una señal saludable. Enseguida quebró el saque de Bagnis y se fue al descanso 2-5, pero ya con otra perspectiva en el partido. Mantuvo el saque y achicó a 3-5 la diferencia, luego vino un game casi decisivo, porque Bagnis con su saque no pudo llevarse el set, aún cuando estuvo a un punto de hacerlo. Y Cerúndolo, que necesitó casi de seis break points, soportó la presión de estar al borde de perderlo, cometió algún error aislado y al final lo ganó con autoridad, lo que desembocó en un grito amplio y efusivo. Quedó 4-5 con su saque y enderezó el camino, hasta llevarse la manga por 7-5.

El segundo set fue más contundente. Muy pronto quedó 4-1. El siguiente fue un game apretado, pero Cerúndolo mantuvo el servicio y se adelantó 5-1. Bagnis no se entregó y defendió su saque: Cerúndolo quedó adelante 5-2 y la gran posibilidad de cerrar el juego.

Así lo hizo, con solvencia y seguridad. Sumó los cuatro puntos del juego y selló el partido con un rotundo 6-2 en el segundo set.

“Fue un partido muy difícil”, dijo ante las cámaras de la TV oficial. “No estaba mal, aunque él arrancó muy bien. Entonces pensé en jugar punto a punto, y a medida que ganaba me decía a mí mismo, ‘vamos por uno más’. Cuando pasé el 3-5, que había sido un poco largo, sentí que lo podía ganar”, dijo Francisco Cerúndolo.

Se fue envuelto por el calor de la gente, los aplausos generales y la alegría de la familia y los amigos, que sueñan y lo acompañan.

Hernán O’Donnell