Patrick Mahomes condujo a Kansas City Chiefs a la victoria, en una noche de Super Bowl inolvidable

La Final del Campeonato de Football Americano, desde hace cincuenta y siete ediciones conocida como Super Bowl, ha atravesado geografías, lugares y tiempo. Ya no es, para buena parte del mundo, aquel exótico juego que cautivaba a millones y millones de estadounidenses, con un concierto en el entretiempo que protagonizaba una banda o artista de primer nivel, y que para muchos era lo más atractivo de la jornada. Ya no es aquel deporte indescifrable, rodeado de una multitud rumiante, que dividía su participación entre gritos de aliento, exclamaciones vibrantes, y alto consumo de pochoclo y cerveza. Ya no es el show inentendible. Tampoco es “solo” la transmisión televisiva, sus niveles de audiencia inestimables, ni sus famosas piezas publicitarias creadas de manera especial para la ocasión, ni las fortunas en dólares pagadas por el segundo televisivo. Lo aleatorio quedó a un costado. El juego, el deporte, ganó el camino.

Crédito: @NFL

Para una enorme cantidad de de personas de la nueva generación, el Football Americano es un deporte rico, atractivo, lleno de matices e intrigas tácticas y estratégicas, que reúne diversas habilidades: fuerza, inteligencia, destrezas con el balón, velocidad y fina estrategia. Es una conjunción de muchos aportes colectivos, defensivos y ofensivos, y de participación individual. Para muchos, el juego perfecto. Además, sostenido por una organización impecable, de las más calificadas del mundo. La NFL, National Football League puede presumir de haber generado uno de los productos más apetecibles y valorables del planeta.

Ese juego condimentado con una alta dosis de show alrededor, un “packaging” moderno sostenido en estadios de última generación, y una atención al espectador de primer nivel, llegó hasta Glendale, Arizona, para llevar a cabo la gran super final el Domingo 12 de Febrero de 2023. El Super Bowl LVII, disputado en el State Farm Stadium, el Estadio de la Universidad de Phoenix, allí en Glendale, Arizona, contó con dos finalistas que llegaron de distinta manera y con diferentes herramientas. Philadelphia Eagles, con un récord de 14-3, fueron el equipo de mejor porcentaje en la temporada oficial, aunque las últimas dos caídas desdibujaron un poco su performance. Kansas City Chiefs, con el liderazgo de Patrick Mahomes, conquistó la Conferencia Americana con un partido muy cerrado y difícil ante Cincinnati Bengals, al que venció por un ajustado resultado de 23-20. Pero la conjunción de Mahomes con Travis Kelce, donde no solo pesa la destreza del Quater Back de los Chiefs, sino también la velocidad, la inteligencia y la capacidad de trazar un camino que burle a las defensas, por parte de Kelce. En la previa, la línea defensiva de Eagles, debía ser el sostén para el desarrollo de su equipo, algo que había funcionado en la temporada, sobre todo en el cuidado de su Quater Back, el joven Jalen Hurts, un jugador de mucha movilidad.

Crédito: @Chiefs

Pero todos los pronósticos, los análisis y las especulaciones, quedaron a un lado a la hora del kick-off. Como ocurre en todos los deportes.

El primer tiempo resultó espectacular. De principio a fin. Comenzó con un ritmo demoledor, donde Hurts marcó el rumbo de los Eagles para llegar al primer touchdown a los 5′ de juego, y con la conversión quedó adelante por 0-7. Entonces fue el turno de Mahomes, para marcar la estrategia de los Chiefs, y en tan sólo seis jugadas logró la igualdad con un touchdown de Kelcey, la conversión y el empate 7-7 al finalizar el primer cuarto.

El equipo de Philadelphia empezó otra vez el segundo cuarto con una gran intensidad, y la destreza de Jalen Hurts para colocar un larguísimo preciso pase a A.J. Brown, quien coronó el touchdown y los Eagles avanzaron a 7-14. Sólo un error de Hurts le permitió a Chiefs recuperar un balón perdido y Bolton tomó esa pelota para llegar al touchdown; con la patada de Butker, el partido quedó 14-14.

Sin embargo, era el momento de Hurts y cuando se empezaba a cerrar el primer tiempo, en una salida a 10 yardas encontró el pasillo justo para filtrarse y meter el tercer touchdown de su equipo, el segundo de su cuenta personal. Convirtió Jake Elliot, y los Eagles quedaron 14-21 adelante.

El primer tiempo se cerró con un field goal de Elliot que puso el score 14-24 para Philadelphia, y dos noticias que iban a impactar. El gran momento de Jalen Hurts en el partido, y la molestia en el tobillo derecho de Patrick Mahomes, que se acrecentaba y abría un interrogante importante para el complemento del partido, tras el show de Rihanna.

Crédito: @Eagles

Las luces se apagaron y le dieron paso al gran show del entretiempo. Rihanna arrancó el espectáculo. Y cuando terminó el recital, los Quaters Back de ambos equipos armaron un show increíble.

Primero fue Mahomes, con una jugada inteligente para la entrada limpia de Pacheco, y poner el partido, con la conversión de Butker, 21-24. El gol de campo de Jake Elliot amplió otra vez la diferencia para el equipo de Philadelphia. Así terminó el tercer cuarto, con un 21-24 para los Eagles.

El dominio de Kansas se profundizó en ese momento del cuarto parcial. La habilitación a Toney, su touchdown y la conversión significó pasar adelante por 28-27. Y otra genialidad de Mahomes habilitó a Skyy Moore para marcar un nuevo touchdown, la conversión correspondiente y Chiefs quedó arriba 35-27.

Y otra vez surgió Hurts, de una noche excepcional. Pase larguísimo, completo y el equipo quedó al borde del touch down. Lo logró Hurts, sumó dos puntos más en el intento, y el partido quedó igualado en el score de 35-35.

Faltaban unos cinco minutos, y el balón y la última oportunidad parecía quedar del lado de Chiefs. Andy Reid, entrenador de los Chiefs, acentuó su protagonismo en el partido. Ya había mostrado su influencia en las jugadas de los touchdown de Toney y de Skyy Moore, con una fina táctica que permitió a ambos llegar libres a la end zone, a la que accedieron casi con pasos de baile. Y al final comenzó a manejar el reloj, para definir el juego con un field goal.

Crédito: @Chiefs

Pudo llegar al touch down cuando restaban un minuto y cuarenta segundos. Optó por manejar el reloj, frenar el juego, quemar las tres oportunidades y rematar a los palos cuando restaban 8″ de juego. Butker convirtió el field goal, Kansas City avanzó a 38-35, y ya no tenía tiempos para pedir el equipo de Philadelphia.

Eran 8″ para intentar la hazaña. Una utopía que no se concretó, porque el pase largo que debía intentar Hurts no llegó a destino. Cayó muy pronto.

Fue la explosión para Kansas City Chiefs, que ganó el Campeonato tras una final espectacular, bien jugada, con dos mariscales iluminados y un resultado que se mantuvo en la incertidumbre hasta el final.

Ganó Patrick Mahomes el duelo individual, y abre ya una etapa de dominio en el concierto de las estrellas de la National Football League. Mientras, Kansas City Chiefs celebra, canta y baila, porque el Super Bowl LVII quqedó bajo su propiedad.

Hernán O’Donnell