La Superliga busca salir del laberinto

Hay fútbol, aunque no se note. Hay fútbol y hay un campeonato en marcha, aunque todo parezca reducirse a los conflictos deportivos y reglamentarios de la final de la Copa Libertadores de América.

Hay un campeonato que vive, aunque el fin de año lo encuentre lleno de asteriscos y con muchos encuentros pendientes. Pero, mientras tanto, se juega. Y cuando se juega hay fútbol para disfrutar y gozar…

Hay un torneo que presenta un puntero firme, sólido y decidido. El Racing de Eduardo Coudet marcha a paso firme, tiene una intención clara de juego, una vocación ofensiva muy sostenida y  una dinámica y velocidad que lo convierten en un equipo vertiginoso, difícil de contener para los adversarios. Le pasó a Talleres de Córdoba en la última fecha. El embate de la Academia en los primeros minutos se hizo duro de controlar y  el local lo pagó muy caro, antes de poder esbozar una reacción. Y la recuperación que mostró al final no le alcanzó para llegar a forzar un partido más euqilibrado.

Hay sorpresas que ya no lo son tanto: Atlético Tucumán muestra un equipo sólido y combativo, que además mostró (su gente, sus dirigentes) que pueden organizar un clásico de local de manera impecable y saber aceptar la derrota a manos de su tradicional adversario. Es un dolor deportivo, pero no excede ningún otro límite.

Hay un equipo que contradice a su nombre. Defensa y Justicia juega al ataque, busca siempre el desequilibrio y sale a ganara en cualquier cancha. Hay un equipo, Huracán, que dejó a un costado su tradición de buen fútbol y se puso el overol para sumar puntos y pelear arriba. Hay otro conjunto que supo esperar a los jóvenes, tenerle paciencia al DT, tolerar el rezongo de los hinchas y ver la siembra en este torneo: Vélez es un equipo rápido, jóven y peligroso, que ya se metió en la lucha de arriba.

Hay dos equipos que quieren animarse. Uno ya se empezó a acostumbrar a pelear arriba, a jugar por los puntos, a disputar copas internacionales y a ser un dolor de cabeza para los grandes: Godoy Cruz. El otro se anima de a poco, pero ya se lo considera como un rival de riesgo. Aldosivi.

Hay un torneo que tiene a Boca y a River en otro tema, pero que cuando se metan, van a hacer ruido.

Hay un torneo que tiene mucho para mostrar y para seguir, pero que los conflictos de la Copa nos han hecho dejar a un lado. es hora de que volvamos a vivir la Superliga, nuestro torneo.

 

Hernán O’Donnell