Argentina terminó de repasar lo más importante en la noche de San Juan

Un gran acompañamiento de la gente, una enorme expectativa por ver a Leo Messi y la goleada previsible de la selección sobre Nicaragua son los datos que sobresalen a primera vista de la fría noche del invierno que se avecina en San Juan.

Pero lo más importante para el entrenador, Lionel Scaloni, y para el equipo, es que se haya aprendido la lección. El Técnico ya manifestó su gusto, su forma de juego preferida, y a ella deberá aferrarse el conjunto. Argentina debe ser un equipo directo, que recupere el balón en posiciones de ataque y que busque el arco con más voracidad que el gusto por la tenencia del balón. Le costó a La Argentina meter el pase vertical, encontrar los espacios, dejar el juego lateral para ser más profundo, para buscarse entre líneas. Incluso lo reconoció Scaloni en la conferencia de prensa posterior y hasta tuvo que recalcarlo en la charla del entretiempo.

Tal vez no encontró los espacios, o no pudo elegir el mejor camino. O como los boxeadores que necesitan de un para de rounds para estudiar al adversario, La Argentina necesitó varios minutos de tenencia y posesión hasta poder abrir a Nicaragua y poder herirlo en su arco. Precisó conocer al rival, no perdió la paciencia y en una ráfaga encontró el partido. Así también lo entendió Scaloni, que incluso dijo “allí se cerró todo. Todo lo que se había pensado, terminó en esos minutos.” Fueron los que iban de los 35′ a los 38′. Cuando Messi frotó la lámpara, aprovechó un pase de Lo Celso y se lució en el área. Limpió a tres jugadores y marcó el primer gol con un tiro seco. Enseguida capturó un remate de Agüero que había rebotado el arquero y marcó el 2 a 0.

El partido se resolvió como quería el DT. Y a partir de allí, las pruebas para empezar a definiri el equipo que se va a medir con Colombia en el debut de la Copa América 2019.

Algunos cambios trajeron imágenes que habrá que seguir de cerca: el olfato goleador de Lautaro Martínez, la dinámica constante de Roberto Pereyra, la firmeza de Juan Foyth que parece un veterano a pesar de su juventud, el criterio de manejo de Paredes y Guido Rodríguez, la capacidad de Lo Celso…

Habrá que ver como se ensambla todo. Si Lo Celso puede ser el socio que Messi necesita para la creación, para el primer pase vertical. Si Dybala encuentra su lugar en el equipo, o queda como una importantísima pieza de recambio en momentos álgidos que el equipo necesite. Habrá que ver si Foyth se gana el lugar o Pezzella es el titular una vez recuperado al cien por ciento de su lesión. O si Tagliafico es el lateral izquierdo que todos suponemos comenzará en el elenco o ese puesto es de Acuña.

Y el tema del arquero, nada menos, que ahora todo parece llevarnos a pensar que será el lugar de Franco Armani.

Pero esas cosas están por verse, por decidirse. Por analizarse, evaluarse y resolverse en estos días que quedan, en estos días que nos separan de ese gran sueño que está por comenzar, y que a pesar de que se han perdido finales en 2007, 2015 y 2016, la Copa América es aún adorable y seductora para la Argentina futbolera.


Hernán O’Donnell

(Enviado Especial a Ciudad de San Juan, Provincia de San Juan)