Resbaló Inter y la Serie A se enciende en la lucha por la punta

Los últimos año tuvieron un único dominador. Un dueño absoluto, un monarca indestructible. Un equipo que monopolizó el campeonato, en algunos casos de punta a punta y con definición varias fechas antes de su finalización. La Serie A italiana se vio dominada por la Juventus en los últimos 8 años, que ganó los títulos en fila, sin despeinarse en algunos casos, con algún sobresalto, en otros. Pero nadie pudo hacerle demasiada sombra en ese tiempo. Esta década se vio en manos de la “Vecchia Signora”, y por primera vez parece que el Inter, otrora dueño de todas las ligas entre 2005 y 2010, en un lustro destacado, puede romper la hegemonía.

El equipo de Milano salió a buscar el partido, con enfásis y ganas. A sabiendas que la victoria lo dejaba solo en la punta y con una ventaja que le daría presión a la Juve. Se topó con un cuadro duro, combativo en la mitad y rápido para salir de contragolpe.

A partir de la contención de Matías Vecino y la pujanza de Brozovic, el local alimentaba a Martínez y Lukaku, pero los principales argumentos para abrir el score partieron de errores de la defensa de la Roma. No pudieron ser capitalizados; el más claro lo tuvo Brozovic tras una buena habilitación de Lukaku, pero el remate se fue arriba del travesaño.

Roma le opuso velocidad en la contra, con el manejo de Perotti por izquierda y la conducción de Pellegrini por el frente de ataque. Le faltó, en ese primer tiempo, un poco de profundidad y potencia en sus llegadas al área local. El marcador quedaba en 0 y todo abierto para el complemento.

Fue más intenso el segundo tiempo. Tuvo un ritmo más alto, como si los dos equipos se hubieran puesto de acuerdo para acelerar y buscar con más enjundia. Inter tuvo que hacer una variante obligada con la salida de Candreva y el ingreso de Lazaro. Roma se acercó más a partir de la dinámica de Zaniolo en el frente de ataque, que abría pasillos para que llegaran Pellegrini, Perotti y Diawara. Después, con el ingreso de Dzeko por el argentino Diego Perotti, el libreto cambió. Menos juego y más centros.

El local creció en intensidad a medida que los minutos pasaban. la búsqueda constante a sus dos puntas de lanza chocaba con una defensa sólida, sostenida por el esfuerzo de Mancini. Smalling también metía, por eso costaba producir situaciones. Y las que hubo, siempre encontró la mano salvadora de Mirante, quien cerró el arco visitante.

La deseperación también le ganó el cuerpo al equipo local; el murmullo de la gente, los gestos del DT Antonio Conte que veía que el partido se escurría, Godín que tomaba la lanza e impulsaba a sus compañeros. y nada. Nada aparecía para abrir el resultado.

Se le escaparon dos unidades claves al equipo de Milano; dos puntos que pueden ser duros si Juventus logra ganar en el Estadio Olímpico de Roma ante la Lazio. Habrá que esperar.

Para Internazionale, un viernes con sabor agridulce. Un empate que resultó lógico por la oposición de la Roma, y el primer puesto que quedó en peligro, pero recién van 15 fechas y todavía hay mucha cinta para que ruede en esta película.


Hernán O’Donnell