Hamilton no afloja y Renault volvió a la palestra

Una carrera impecable del inglés Lewis Hamilton. Una más. Y un camino hacia la Gloria que parece estará rodeado de rosas, porque su marcha es imparable, porque domina de punta a punta y porque hace en cada una de ellas un esfuerzo tremendo a la par de una exhibición de conducción que va más allá del dominio de Mercedes, que en Bélgica volvió a hacer el 1-2 con la segunda ubicación de Valteri Bottas, que dicho sea de paso, finalizó a casi 10″ de su compañero de equipo. Toda una demostración de Lewis en el Gran premio de Spa-Francorchamps.

En tercer lugar llegó Max Verstappen, el tercero en discordia de cada competencia, el segundo en las posibilidades de alcanzar el título. Muy buena carrera de Max, pero, tal como lo reconoció en la nota posterior a la carrera que le realizó la TV oficial, siempre vio de lejos a los Mercedes, no sintió que aparecieran oportunidades y al final optó, como todos, por conservar el auto y la posición.

Pero todos los aplausos se los lleva el siempre amable Daniel Ricciardo quien llevó a Renault al cuarto lugar, realizó un gran fin de semana de clasificación y coronó el domingo con el récord de vuelta al final de la competencia para llevarse un punto más y todos los aplausos virtuales de quienes siguieron la carrera alrededor de todo el mundo.

Y por si fuera poco, para Renault la carrera fue soñada, porque Esteban Ocon llegó en el quinto lugar tras realizar también una gran carrera y logró superar, cuando faltaba una vuelta, al Red Bull de Alexander Albon, en una persecución final que tuvo su premio en el ocaso del Gran Premio.

Albon finalizó sexto y apretado, porque Lando Norris también se le acercó mucho. De hecho, pareció que en un momento podía acercarse y superar a Ocon, pero el Renault fue más veloz.

Pierre Gasly fue para el gran público el piloto del día. Terminó octavo, pero tuvo una gran tarea. Se acercó a Ricciardo, logró ponerse quinto al promediar la carrera, pero cuando tuvo que detenerse a cambiar neumáticos perdió posiciones que le costó recuperar.

Fue un Gran Premio constante, con una largada prolija donde Hamilton tomó la punta, lo siguió Bottas y Verstappen debió esforzarse para conservar el tercer lugar en tanto Ricciardo lo acosó con un muy buen comienzo de carrera.

No resultó para Ferrari, que tuvo un mal fin de semana; fue mala su performance en la qualy dos, no pudo tener una mejoría en el inicio de la competencia, ni tampoco le funcionó el trabajo de boxes, con detenciones prolongadas que perjudicaron a Charles Leclerc y Sebastian Vettel.

No hubo cambios en las primeras posiciones; las emociones quedaron reservadas a la zona media, donde Renault fue el gran protagonista, y donde brillaron sus pilotos Ricciardo y Ocon, en tanto Albon y Norris también animaron el espectáculo.

Pero poco le importó a Mercedes, y menos al gran Lewis Hamilton, que elaboró otra magnífica conducción para llevarse el GP de Bélgica de punta a punta y seguir en su camino hacia la Gloria.


Hernán O’Donnell