Fue un mediodía ambiguo para Arsenal. El equipo hizo un partido muy bueno, parejo, de dominio sostenido a lo largo del tiempo de juego, y con muchas situaciones de gol creadas, incluso con dos penales que no pudo concretar. Le faltó eso, definirlo. Un poco por mala suerte, otro poco por imprecisión, en otras ocasiones surgió el arquero de San Martín de San Juan…lo cierto es que el conjunto de Sarandí se quedó con las manos vacías, en un partido que se las debió llevar llenas.
El equipo de Tobías Kohan formó con Tomás Sultani; Abel Amaya, Balthazar Bernardi, Alexis Sosa e Iván Cabrera; Nicolás Domingo; Alexis Segovia, Matteo Trombini, Matías Lucero y Valentín Serrano; Tomás Ortíz.
El conjunto sanjuanino comenzó con Matías Borgogno; Alejandro Molina, Rodrigo Cáseres, Julián Marchio y Agustín Sienra; Santiago López García y Franco Pelaitay; Aldo Fernández, Sebastián González y Maximiliano Casa; Nicolás Franco.
San Martín intentó pararse en el campo local, pero Arsenal se las arregló para impedir esa postura y generar llegadas en el inicio del juego. A los 9′ se escapó por izquierda Valentín Serrano, y sacó un fuerte tiro que pegó en el poste derecho del arquero visitante, y salió afuera.
La visita pudo generar una llegada bastante clara a los 22′. Recuperó un balón el “Pulpito” González, abrió a la derecha para el ingreso libre de Maxi Casa, y el remate de este se fue por arriba del travesaño. Y luego tuvo otra llegada con un disparo de Pellaitay que salió encima del arco local, cuando iban 25′ de juego.
Ese había sido el momento de San Martín. Después volvió a dominar el local, y a los 29′ armó una gran jugada colectiva, que terminó con la entrada libre de Valentín Serrano por la izquierda, pero su disparo salió desviado. A los 32′ probó Nicolás Domingo, pero la pelota salió afuera, y a los 39′ Alexis Segovia hizo una muy linda maniobra por la derecha, entró solo al área, y definió apenas afuera.
Para comenzar el segundo tiempo, Raúl Antuña, entrenador de San Martín, dispuso una modificación: Gino Olguín ingresó en lugar de Maximiliano Casa.
Pero el dominio de Arsenal se hizo más nítido en el segundo período. Casi monopolizó el balón, hizo jugar el partido en campo adversario y aumentó las llegadas al arco.
A los 51′ remató Lucero, pero controló Borgogno. A los 52′ fue Ortíz el que remató y la pelota pasó muy cerca. Otra vez Lucero probó de afuera, a los 55′, y de nuevo controló Borgogno.
Hasta que a los 56′ Tomás Ortíz entró al área, lo derribaron y el árbitro Barraza cobró el penal correspondiente. Se hizo cargo el mismo Tomás Ortíz, pero su tiro pegó en el palo derecho de Borgogno y se fue afuera. el encuentro siguió 0 a 0.
Antuña hizo la segunda y tercera variante en San Martín cuando iban 59′ de juego; Federico González entró por Nicolás Franco, y Gonzalo Lucero reemplazó a Aldo Fernández.
Pero no le satisfacía el juego de su equipo, y a los 65′ realizó la cuarta modificación. Jonathan Zacaría reemplazó a “Sebi” González.
Tobías Kohan buscó más profundidad en su equipo, y a los 69′ efectuó las dos primeras modificaciones. Dylan Cabral entró por Matteo Trombini, y Kevin Pavía ingresó en lugar de Iván Cabrera. Se retrasó Valentín Serrano, y Pavía fue más adelante en la banda izquierda.
El equipo del “Viaducto” sumaba más ocasiones, como la que generó a los 72′, con una buena aceleración que terminó con un remate de Ortíz que se fue afuera. y a los 74′,Borgogno sacó con una mano un tremendo disparo del delantero central local.
A los 77′ Antuña hizo el quinto cambio del elenco de San Juan; Lautaro Escalante entró por Santiago López. En tanto, a los 79′ Kohan hizo la tercera modificación del local. Juan Krilanovich reemplazó a Matías Lucero.
Arsenal empujaba, y a los 85′ encontró otra inmejorable posibilidad, por una mano del zaguero Cáseres sancionada con penal.
Lo volvió a ejecutar Tomás Ortíz, y como si fuera una tarde fatídica, volvió a fallar. Esta vez, la pelota que pegó en el travesaño, picó afuera, y salió de la zona de peligro, cuando ya iban 87′ del partido.
Se le acabaron ahí las fuerzas al local. Ya no tuvo más oportunidades, y el partido llegó a su rápido final. Arsenal hizo una muy buena producción, generó múltiples situaciones, y hasta dispuso de dos penales que no pudo facturar. Hizo todo para ganar, pero nunca supo que el arco adversario, en este mediodía gris de otoño, estaba clausurado.
Hernán O’Donnell