Argentina se levantó y empezó a andar

Fue una noche paradójica, de reencuentros y divorcios. Fue una jornada donde la Argentina se reencontró con su fútbol y sus estrellas, y la aparición de algunos destellos que invitan a la ilusión. Y también la noche en que los futbolistas anunciaron la interrupción del diálogo con la prensa.

Claro que lo más importante es el juego. Y la Argentina se fue con una alegría tremenda, una victoria de esas que se necesitan como el agua en el desierto; un triunfo que encamina al equipo en el sendero rumbo a a la Copa del Mundo de la FIFA-Rusia 2018.

img_0890

La tardecita de San Juan de a poco se llenó de gente; el calor sofocante del mediodía, la temperatura que subía en la Plaza San Martín, la gente que le daba color a un encuentro que se resolvió rápido. Porque apenas tuvo una chance, Leo Messi marcó la difrencia: Un golazo de tiro libre que, según lo reconoció José Pekerman en la conferencia posterior, fue como un mazazo, que aumentó con el gol de Lucas Pratto.

Entonces, así lo admitieron los colombianos, el partido se les fue muy arriba. Y no tuvo reacción, más allá de que habían arrancado bien los visitantes. Falcao estuvo cerca del primer gol, pero no pudo concretar. Y la Argentina aprovechó al máximo cada oportunidad.

img_0904

En el segundo tiempo, el equipo de Bauza controló, armó dos líneas de cuatro y en otra jugada iluminada de Leo Messi, bien conectado con Enzo Pérez, derivó en un centro a Di María para el tercer tanto.

3-0 y se cerró con fuegos artificiales la noche de San juan. La noche de las paradojas; la del reencuentro con el fútbol y la victoria, y la del divorcio con la prensa. Para el pueblo futbolero, una brisa de aire fresco para aguardar por el año nuevo.

img_0887

 

Hernán O’Donnell

(Enviado Especial a Ciudad de San Juan, Provincia de San Juan)

Otro paso atrás de la Selección

El seleccionado nacional entró en una escalera descendente, en un tobogán largo y que, a pesar de las palabras de algunos jugadores (“tocamos fondo”), aún puede ser más profundo y preocupante. El equipo argentino está mal, lleva cuatro partidos sin ganar y dos derrotas consecutivas. luego de vencer a Uruguay por 1 a 0 en Mendoza en el debut de la era del entrenador Edgardo Bauza, la Argentina ingresó en un declive en el rendimiento que lo llevó a obtener magros resultados: Empate 2 a 2 ante Venezuela, igualdad en 2 tantos frente a Perú, derrota contra Paraguay 0-1 en Córdoba y esta pálida actuación en Belo Horizonte, donde la goleada por 3-0 de Brasil pudo haber sido más amplia.

arg-vs-bra-iv

Tras unos correctos veinte minutos iniciales, en un encuentro que presumía ser equilibrado, el golazo de Philipe Coutinho a los 24 minutos pareció sentenciar el juego. Faltaba muchísimo aún, y sin embargo, la imagen de una Argentina vencida, caída, golpeada en lo anímico se percibió apenas sacó del medio: en dos pases perdió la pelota y a partir de allí se vio un equipo superado por el rival y las circunstancias que rodean su mal presente.

La selección no tuvo respuestas futbolísticas ante el dominio del rival, tampoco mostró rebeldía ni personalidad para pelear el partido. Y aquí uno rescata algunos nombres, que más allá de la actuación técnica, y la crítica feroz de las voces de las redes sociales, al menos mostraron un poco de entusiasmo y ganas de revertir la situación. Se escucha y se lee mucho. Se escribe mucho para criticar a Mascherano, por ejemplo. Pero en medio de la pobre actuación global del equipo, el volante central muestra temperamento y esfuerzo. Caracter para “pelear” el partido aunque sea. También Sergio Agüero ingresó con ganas e intentó torcer el destino. No decimos que hayan jugado bien. Afirmamos que mostraron voluntad y esfuerzo, características importantes y necesarias cuando el rendimiento futbolístico decae.

arg-vs-bra-iii

También hubo esfuerzo por parte de Higuaín, de Biglia, de Enzo pérez en el tiempo que le tocó jugar. Pero no alcanzó, y es posible que no le alcance a ningún equipo del mundo si no hay un funcionamiento colectivo que eleve al equipo. Correr y meter es destacable. La rebeldía futbolística es necesaria, tal como la tuvieron varios jugadores. Contagia. Pero no es la base ni el fundamento principal para ganar un partido.

La Argentina fue un híbrido, que no supo atacar ni contraatacar. Y no mostró seguridad defensiva. El gol (golazo) de Neymar que cerró el primer tiempo mostró como en dos pases Brasil podía sortear a una defensa poblada con 4, 5 o 6 jugadores. Gabriel Jesús aprovechó un error en el medio campo, avanzó ante Otamendi, Funes Mori, el retroceso de Biglia y a espaldas de Zabaleta, le puso una asistencia fenomenal a Neymar que definió con total serenidad ante la salida de Sergio Romero.

2 a 0 y cierre del partido, aunque restaban 45 minutos. La imagen de la Argentina ya estaba, a esa altura, por el piso. Se podía imaginar un milagro. Eso, un milagro. Una reacción de las individualidades, las ganas que mostró Agüero y que se encendiera Leo Messi, que esta claro no es del estilo rebelde de Maradona, sino el genio que finaliza las maniobras de un equipo, o el artista que deslumbra en una orquesta afilada. Se podía esperar que Hugaín desbordara a dos centrales macizos como Miranda y Marquinhos y a pura potencia convirtiera; o que se ilumine Di María y zurcara su banda como un rayo para penetrar una defensa, que está visto desde que llegó Tité está muy bien trabajada.

Se podía soñar con eso, con que los jugadores se iluminaran y revirtieran lo que equipo por equipo era un dominio total del local. Y soñar eso era aguardar por algo parecido a un milagro…

No sucedió. Al contrario, se mantuvo la tesitura y Brasil llegó al tercero con un centro cruzado de izquierda a derecha, que de allí  volvió al centro, y Paulinho sentenció con un fuerte remate.

arg-vs-bra-ii

Allí se terminó la última esperanza. 58 minutos de juego y todo concluído. Porque lo que vino después fue casi un suplicio: Argentina desdibujada, apenas con la voluntad de ir para adelante, con un juego muy simple y previsible casi no inquietó a un equipo que trabaja muy bien en defensa. Sólo un tiro libre de Messi, que llegó tras una intersante manionbra combinada en tre Leo y El “Kun” Agüero. Mientras, Brasil llegaba de contraataque con mucha facilidad y desperdició varias posibilidades para aumentar el marcador.

Tendrá que trabajar mucho el entrenador. Hablar claro con los jugadores. Proponerles un estilo definido, invitarlos a comprometerse con su idea de juego y si alguno no está convencido, plantear su desacuerdo, proponer una alternativa o bajarse del barco. Todo tiene que ser clarito. La Argentina necesita de la unión y el compromiso de todos. Es la hora de jugarselá. Pasan las fechas y el equipo cada vez da un paso más atrás. No se puede seguir así, porque, aunque duela, la selección aún no tocó fondo. Se puede estar peor, aunque quede mal decirlo. Todavía los resultados de los otros partidos acompañan y no se está tan lejos de la zona de clasificación. Pero hay que reaccionar ya mismo. Porque aún quedan fechas por jugar y todo depende de la Argentina. Todavía es así. Despierte Argentina, que ya se empieza a hacer tarde…

10411891_696553807091940_883732579819870454_n

 

Hernán O’Donnell

Llegó la hora del Superclásico de las Américas

Cuando empezamos a hablar de este partido, hace diez días más o menos, parecía que estaba muy lejos, que las urgencias de las Ligas locales, las Copas continentales de clubes y los temas varios que rodean al deporte, eran más importantes o por lo menos más inmediatos.

Y desde esta página señalábamos lo cerca que estaba el partido. Que parecía haber mucho tiempo y no lo era tanto; tal vez porque el tiempo pasa muy rápido, o porque no había demasiados días para trabajar con el equipo, o porque este juego tiene un valor incalculable en cuánto a los puntos y el futuro de las eliminatorias para la Copa del Mundo de la FIFA-Rusia 2018.

Brasil y Argentina están listos. En unas horas más saltarán al Estadio Mineirao de Belo Horizonte para dirimir una edición más del Superclásico de las Américas.

arg-vs-bra-i

Un partido con una historia tremenda. Con enfrentamientos históricos, con partidos de leyenda. Con el recordado 0-3 a favor de Argentina en la Copa de las Naciones de 1964, la noche que expulsaron a Pelé y Roberto Telch convirtió dos goles.

Con el triunfo de Brasil en el Mundial de la FIFA-Alemania 1974 por 2 a 1; con el choque en el Mundial siguiente, Argentina 1978, en un frío y duro choque en Rosario, con un apagado 0 a 0; y el siguiente Mundial, el de España 1982 y la victoria de Brasil por 3 a 1, en un equipo que brillaban Falcao, Toninho Cerezo, Sócrates, Zico, Serginho…

La épica de Argentina en Turín, en la Copa del Mundo de la FIFA-Italia 1990, el peloteo al que lo sometió Brasil en el primer tiempo y la genial aparición de Maradona para que Claudio Caniggia marque un golazo que aún hoy se grita y se recuerda.

Los choques por la Copa América; los partidos de la Copa Confederaciones…

arg-vs-bra-ii

Todo eso hace al partido de esta noche. Las estrellas que brillaron a lo largo de la historia: Pelé, Maradona, Carlos Alberto, Mario Kempes, Zagallo, Daniel Passarella, Tostao, Osvaldo Ardiles, Clodoaldo, Ubaldo Fillol, Gilmar, Jorge Burruchaga, Ronaldo, Jorge Valdano, Romario, Oscar Ruggeri, Nilton Santos, Leopoldo Luque, Garrincha, Riquelme, Ronaldinho, Batistuta, Neymar, Messi y una larga lista de jugadores inolvidables, que le dieron lustre y gloria a dos camisetas inmensas que esta noche se enfrentarán una vez más, por la Gloria del Fútbol…

wp_20150124_025

 

Hernán O’Donnell

Sergio Agüero da la cara

“Los primeros días fueron muy duros, complicados. Contra el Everton no jugué, no estaba bien de la cabeza. Después me recuperé, puse mis pensamientos en otra cosa, cambié el foco, y pude revertirlo.”

“Ahora hay que pensar en positivo y sumar. Brasil siempre es Brasil; más allá de la formación que presenten y el planteo que hagan. Es un rival siempre difícil. Contamos con tres días para estudiarlos, ver los videos y preparar el encuentro.”

“Me llevo muy bien con Guardiola, me da mucha confianza y me ayuda para crecer como jugador. El está todos los días conmigo, así que me ve siempre. Es muy bueno que el DT  te lleve la confianza bien alto.”

“Es un partido, el de Brasil, que nos da una gran oportunidad para demostrar que podemos estar bien arriba. Es una chance para sumar los tres puntos, y nada menos que ante Brasil.”

“Nosotros tenemos que pensar en lo nuestro; más allá de los puntos que le dieron a Chile, que fue medio raro, pero debemos pensar en lo nuestro. Y tenemos que buscar los 6 puntos en esta serie.”

“Escuché el apoyo de Bauza y me pone contento que el entrenador confíe en mí. Tengo que dar lo mejor para poder seguir en la selección. Mi ilusión y mis ganas están”.

sergio-aguero-i

Sergio Agüero llegó a Brasil y no se escondió. No buscó refugio en el silencio y no se escabulló del asedio de los periodistas. Enfrentó a las cámaras y los micrófonos, y respondió a todas las preguntas. Habló de su momento, de las últimas actuaciones de la selección, de su rendimiento, de los puntos perdidos, de lo que se escapó ante Perú y Paraguay. De los choques que vienen. De Brasil y toda la importancia del Superclásico de las Américas.

Remera blanca, gorrita, mochila liviana en las espaldas y el equipaje de mano de cada viajero de primera clase. La ausencia del mate, un olvido que se repitió entre sus compañeros más cercanos.

Y dejó una luz de esperanza. porque en medio de la autocrítica, de los reproches, del bajón del seleccionado, una buena actitud es empezar por reconocer las falencias. Por no esconderse ni desv iar la atención. Ni buscar responsabilidades en otro lado.

sergio-aguero-iii

El “Kun” entiende el momento que vive el seleccionado. y sabe que hay que luchar y meter para recuperarse. Por eso vale detenerse en una de sus primeras frases, porque encarnan el pensamiento del equipo, el diagnóstico y la tarea a cumplir para encontrar soluciones: “No estamos bien, y tenemos que salir rápido de esa posición en la tabla. Hay que subir lo más pronto posible. Por eso no firmo nada. hay que buscar los 6 puntos en esta ventana. Debemos crecer y progresar lo más rápido posible.”

Así está la Argentina. Mal y preocupada. Pero consciente. Y con la decisión de salir rápido del fondo de la tabla.

estadio-supicci

 

Hernán O’Donnell

 

Brasil, y todo lo que envuelve el Superclásico de las Américas

Está a la vuelta de la esquina; falta muy poco. Aunque aún deban jugarse partidos de Liga en Europa y Sudamérica, aunque haya encuentros por las Copas (Sudamericana y Champions), aunque todavía el ritmo local mantenga encendida la pasión de la gente, el Superclásico de las Américas está acá nomás. A la vuelta de la esquina. para nosotros, en la cuenta regresiva. Para Tité, el Dt de Brasil, también.

VLUU L200 / Samsung L200

Por eso ya trabaja. Ya tiene la mente puesta en la Argentina. La lista de convocados fue anunciada con buena anticipación: Sumó a Rodrigo Caio, zaguero de Sao Paulo. “Es un jugador versátil, que puede actuar como zaguero y como mediocampista. Lo llamo porque se adapta a muchas posiciones”, dijo Tité.

Y definió otros 23 nombres. Los arqueros: Alisson (Roma/ITA), Alex Muralha (Flamengo) Weverton (Atlético Paranaense). Los defensores centrales: Gil (Shandong Luneng/CHI), Marquinhos (Paris Saint-Germain/FRA)), Miranda (Atlético de Madri/ESP), Thiago Silva (París Saint-Germain/Fra), Rodrigo Caio (Sao Paulo). Los laterales: Daniel Alves (Juventus/ITA), Fagner (Corinthians) Filipe Luís (Atlético de Madrid/ESP), Marcelo (Real Madrid/ESP). Los volantes: Casemiro (Real Madrid/ESP), Fernandinho (Manchester City/ING), Giuliano (Zenit San Petersburgo/RUS), Lucas Lima (Santos), Paulinho (Guangzhou Evergrande/CHN), Philippe Coutinho (Liverpool/ING), Renato Augusto (Beijing Guoan/CHN) (China), Willian (Chelsea/ING). Y los atacantes: Douglas Costa (Bayern Múnich), Roberto Firmino (Liverpool/ING), Gabriel Jesús (Palmeiras), Neymar (Barcelona/ESP).

Un equipo que se ha revitalizado. Sin deslumbrar como aquel brasil del ’70, pero con una dinámica y velocidad en el contragolpe que lo hacen temible.

VLUU L200 / Samsung L200

Un equipo que ha recuperado la confianza y la fe en sí mismo, a apartir de los resultados de los últimos encuentros.

El domingo 6 de noviembre comenzará la concentración en el Hotel Ouro Minas de Belo Horizonte. Allí se alojarán y el lunes 7 a las 17 hs realizarán el primer entrenamiento. Luego lo harán el martes 8 y miércoles 9 sin contacto con la prensa, en el estadio Mineirao, sede del partido ante Argentina.

Ya se vendieron 52.000 entradas para ver a Brasil. Ya está el clima encendido. “Todo lo que envuelve a un Brasil-Argentina, es diferente”, señaló el coach brasileño. “No por la clasificación, sino todo lo que envuelve un partido así, un clásico”, agregó Tité.

“Tenemos una responsabilidad muy grande con Brasil y lograr la clasificación, más allá de este partido. Messi y Neymar son dos de los tres mejores jugadores del mundo. Ronaldo y Messi son más parecidos. Neymar es un jugador en ascenso y evolución. Hoy, para mí, el mejor del mundo es Messi. Hoy. Y en mi opinión”, afirmó Tité ante la prensa brasileña cuando anunció a los convocados.

¿Se habla diferente a los jugadores ante un rival que cuenta con jugador como Messi? “Se habla diferente, No. Se cambia la estrategia, sí. No se habla diferente. Se traza una estrategia distinta ante un jugador como Messi. Al igual que se traza una estrategia difrente cuando se enfrenta a Uruguay y juega Luis Suarez, o cuando se juega ante Chile y está Arturo Vidal. Estrategia diferente, el discurso igual”, respondió Tité.

“Como mecanismo de juego, La Argentina se basa mucho y se potencializa en Messi. Después, hay muchos detalles en su juego. La idea de detenerlo es colectiva. No puedo mandar a un jugador a hacer sólo una marcación, y que cargue con toda la responsabilidad. Después hay muchas cosas, pelota parada y demás para ocuparnos, pero el trabajo es colectivo”, y mucho más no puede agregar Tité, porque sería descubrir sus herramientas al adversario.

Brasil prepara sus armas. Con confianza, pero con el conocimiento íntimo que enfrente estará nada menos que Leo Messi…El Superclásico está muy cerca y el clima se enciende. Un partidazo nos espera, o eso creemos.

wp_20150124_025

 

Hernán O’Donnell

Cada convocatoria, una discusión interminable

Sucede desde hace tiempo. Tal vez, desde que la selección argentina se puso los pantalones largos, ideó un proyecto y lo ejecutó con paciencia y sabiduría. Hablamos desde los días en que “El Flaco” César Menotti asumió la conducción del seleccionado y le dio un programa serio de desarrollo. Allí, la gente se hizo más “hincha” del equipo argentino. Se identificó más y se involucró con su tarea. Siguió al equipo. Y también surgieron las polémicas; por los que estaban y por los que no estaban. Hasta entonces, hubo momentos llenos de sobresaltos y hasta se evitaba, en algunos casos, ir al combinado nacional.

En aquellos días, la controversia giraba por si se incluía jugadores de Boca o no; por ejemplo, se reclamaba a Vicente Pernía, a Roberto Mouzo, a Ernesto Mastrángelo…y se criticaban a futbolistas que hicieron un largo camino en aquel ciclo: Jorge Carrascosa, Osvaldo Ardiles, Jorge Olguín. También se pidió a los gritos, a pocos meses de la Copa del Mundo de la FIFA-Argentina 1978 la convocatoria de Norberto Alonso y Ubaldo Fillol, que fueron citados.

VLUU L200  / Samsung L200

Y así siguió la historia. En cada llamado, una polémica. Y los ausentes, siempre los mejores calificados. Le pasó después a Carlos Bilardo: tuvo pedidos hasta del Presidente de la Nación de aquellos años previo a la Copa del Mundo de la FIFA-Italia 1990, para convocar a Ramón Ángel Díaz. La historia es conocida; por sus diferencias con Maradona, el”Pelado” nunca fue llamado.

Y el reclamo por Riquelme a Bielsa, la decisión de Pekerman de no poner a Leo Messi en el partido crucial ante Alemania en el Mundial del 2006, la inclusión asombrosa de Ariel Garcé en la lista de Maradona para la Copa del Mundo de la FIFA-Sudáfrica 2010, la ausencia de Carlos Tévez durante muchos años…

Ahora será Mauro Icardi. Por que no está. Aunque tiene nivel indudable para ser llamado, está claro que en ese puesto el entrenador cuenta con Gonzalo Higuaín, Sergio Agüero, Paulo Dybala, Lucas Pratto y hasta Lucas Alario. Los tres primeros, por jerarquía, están, por lo menos, al nivel de Icardi. Después, valen los gustos del entrenador. Son los que definen quien sí y quien no.

La discusión será interminable. Que Lavezzi sí, que Lavezzi, no. Que jueguen los de “acá”; no mejor, los de “allá”…Desde que el público le tomó un interés mayor a la selección, la polémica se incorporó para quedarse. También con esto deberá convivir el “Patón” Bauza.

WP_20160608_005[1]

 

Hernán O’Donnell 

América vibra con un nuevo Superclásico

Faltan algunos días. Todavía hay tiempo para prepararse, para pensar el partido, para trazar los primeros esbozos y seguir con la mente en el fútbol doméstico, en la Copa Argentina y en la Copa Sudamericana. También para que los futbolistas continúen enfocados en sus clubes, en sus ligas, en la Champions, en la Europa League…

Pero es inevitable poner el radar y empezar a imaginar lo que promete ser un duelo vibrante, apasionante, una versión nueva del Superclásico de las Américas.

El jueves 10 de noviembre, en Belo Horizonte, Brasil y la Argentina volverán a verse las caras. Otra vez frente a frente. Una nueva versión de un viejo duelo que tiene una historia riquísima, llena de partidos memorables, de grandes encuentros, de goles inolvidables y figuras estelares.

VLUU L200 / Samsung L200

Brasil y la Argentina una vez más se encontrarán. En una instancia importante, en un partido oficial, por la Competición preliminar de la Copa del Mundo de la FIFA-Rusia 2018. Un partido que encierra los tres puntos en juego y el futuro de ambos en la clasificación. Está más cómodo Brasil, más tranquilo. Ha recuperado la confianza, ha crecido en lo futbolístico. La renovación de Tité dio sus frutos. Trajo nuevos aires y se encendieron las estrellas, con Neymar a la cabeza. Pasó de una zona complicada a meterse entre los primeros. El equipo es otro. Más veloz, más dinámico. Marca y juega. Se repliega con inteligencia y le mete mucha velocidad al contragolpe. Está fresco y bien de la cabeza; parece que ahuyentó los fantasmas que lo atormentaban desde el 2014.

Todo lo contrario le pasó a la Argentina de Edgardo Bauza. Luego de la trabajosa victoria frente a Uruguay, se enredó en sus dudas y perdió puntos muy importantes, que lo relegaron en la tabla de posiciones. El cuerpo técnico tenía pensado sumar más; digamos, casi la totalidad de los puntos, porque ante Venezuela, el más débil de la zona, la victoria era casi una obligación. Perú en Lima podía ser duro, pero también se creía que se debían lograr las tres unidades. Porque si a Perú se lo pone como un rival muy fuerte en condición de local, que queda para cuando haya que ir a Brasil, a Montevideo, a la altura de La Paz y de Quito…Y ante un Paraguay en reconstrucción que había caído como local ante Colombia, la lógica indicaba que había que ganar. Y se perdió. por eso, ahora el tiempo apremia. Hay que lograr los puntos que se perdieron en las últimas tres jornadas.

Esa es la primera aproximación. el local, tranquilo. El visitante, urgido. ¿Que pasará? Hay tiempo para la preparación y el análisis. pero no hay que desaprovecharlo. Hay que utilizarlo para llegar de la mejor manera. Esa es la razón por la cuál desde estas páginas ya empezamos a vivir el Superclásico de las Américas. Porque es un duelo único, fascinante, incomparable. Y se empieza a aproximar…

estadio-kempes

 

Hernán O’Donnell

 

Bauza, a la búsqueda del “Patón”

Luego de un comienzo con dudas, con dificultades, con muchos menos puntos de los imaginados, tras cuatro partidos llenos de sobresaltos y, de modo increíble, con muchos desequilibrios, entre las variadas críticas que recibió el entrenador, la más común y tal vez la que más haya generado coincidencia en la prensa es que Bauza no fue, hasta ahora, “El Patón”. Que no tuvo un estilo definido, que el seleccionado, salvo en el primer partido ante Uruguay, no fue un conjunto con su sello, que no fue un “equipo de Bauza”…que no fue él mismo.

Y esto tal vez sea lo más importante y lo que pueda transformarse en una base, en un punto de partida. Que Bauza sea Edgardo, que el equipo juegue como él quiere, que tenga su identidad, que se olvide de los demás, del que dirán, y se plasme en el campo un conjunto que represente sus ideas.

IMG_0540

“Tengo una idea de tener un plantel con jugadores acá y trabajar; para juntarnos, entrenar y transmitirles la idea futbolística. Verlos de cerca y trabajar tres días con ellos. Sin interferir en la semana de los equipos. Hay muchos jugadores que estamos siguiendo”, dijo Bauza en una entrevista con la cadena Fox, lo que ya marca un punto de recuperación. Quiere tener una base, formar jugadores para luego poder sumar al plantel que afronta las eliminatorias. Es un paso adelante para que la selección empiece a tener su sello.

Confía a pleno en el plantel que elige y que tiene una trayectoria muy importante, con tres finales alcanzadas. Para Bauza, jugar en la selección era un orgullo. Dice que observa que les pasa lo mismo a estos muchachos, tan cuestionados en ese punto. Para el DT, no hay dudas: sienten el mismo amor y orgullo que sentía él.

img_0679

Sabe que la situación es complicada, pero lo alienta el optimismo que lo caracteriza: “Siempre la remé, y ahora será lo mismo. Y sueño con ganar la Copa del mundo en Rusia…”

Se empezó a buscar a él mismo. Ya definió un cambio de esquema y es posible que se vea un equipo más parecido a los que uno ha conocido. “Necesitamos tiempo. En san Lorenzo no arranqué bien, pero con tiempo se consiguió armar el equipo. Precisamos tiempo de trabajo, par poder llegar al futbolista, transmitirles el mensaje. El equilibrio es necesario. Se rompe con errores, y en este nivel se paga caro. Si cometo un error, enfrente también hay un rival de jerarquía que lo aprovecha. Hay que trabajar y buscar soluciones”.

“No me molesta la crítica; al contrario, como responsable mayor, la acepto. Asumo la responsabilidad; ya tenemos muchas batallas encima…y la crítica también ayuda a fortalecernos”.

Pero si hay algo que lo empieza a distinguir es su personalidad; si recupera su firmeza, su postura, si diluye la fascinación por los jugadores, si toma decisiones de fondo, recupera a Bauza. Y cuando dijo “Agüero será el primer convocado; tal vez no juegue, pero lo quiero en el grupo, para que esté con nosotros, que esté con los compañeros, decirle lo que pienso cara a cara. es un jugador para rescatar”, estamos otra vez ante el DT que conocemos, el que banca sus jugadores, les da confianza, los respalda y los valora. Si le agrega su sello futbolístico y vuelca su personalidad, empezará a ser el Bauza de siempre y comenzará el duro camino de la reconstrucción.

DSC01331

 

Hernán O’Donnell

 

Una tarde de cielo marrón…

Hay que ver esas lágrimas que caen por las mejillas de los cincuentones; hay que sentir ese palpitar fuerte de los que pisan los 40; hay que apretujarse y saltar, y cantar, y gritar, como lo hacen los jóvenes y adolescentes de “la 16”; hay que tomarse un avión y venirse desde Francia como lo hizo Lisandro Arbizu para vivir este domingo que puede ser de gloria; hay que compartir una tarde soleada de inmenso calor rodeado de grandes, chicos, adolescentes, jugadoras de hockey y alentar y aplaudir, y vivir la tarde soñada tanto tiempo; hay que emocionarse como Alejandro Galli, que agita los brazos y mira conmovido a la tribuna mientras el partido se juega en el otro lateral y falta muy poco para que termine…

Hay que entender la historia de un club enorme, que supera de largo modo el siglo de vida, que se arraigó en un barrio de Buenos Aires y supo cobijar a generaciones y generaciones de deportistas y soñadores; que fue puntal enorme en el desarrollo de muchísimos deportes en la Argentina: Fútbol, Rugby, Natación, Tenis, Cricket…Un club que salió tres veces campeón de la Liga de Fútbol, que luego se quedó con el rugby ya que adoptó la decisión de no profesionalizarse; un club que generó nadadoras como Jeanette Campbell, Medalla de Plata en los Juegos Olímpicos de Berlín 1936; que tuvo grandes tenistas, conjuntos de hockey sobre césped que regaron de esfuerzo los campos naturales y hoy lo hacen el sintético; equipos de rugby que fueron históricos, grandes campeones que en la década de los ’60 alumbraron con grandes conquistas, que en 1968 cerraron la puerta por melancolía…Hay que entender todo esto para poder ver, sentir y disfrutar la mágica tarde del sábado 15 de octubre de 2016…Vamos, subamos a la vieja tribuna del Atlético de San Isidro, apretemosnó, agarremos fuerte la bandera y vamos a vivir una jornada que promete ser memorable…

img_0702

Belgrano Athletic salió decidido a ganar el partido. Sabía que enfrente había un rival durísimo, un equipo sólido, serio y ganador; que sólo había perdido un partido en el año y que en el Top 14 había llegado a la final invicto. Un equipo, Hindú Club, que no regala nada, juega todos los partidos con la mayor seriedad y no se lo puede dar nunca por perdido. Hasta el último segundo mantiene la presión y la concentración para ganar un encuentro; lo prueba la semifinal el sábado anterior, frente a Newman.

Pero la gente del “Marrón” sentía que era su tarde. Que esta vez no se iba a escapar. Un aura de mágico optimismo rodeaba el ambiente y el público lo entendió desde que se logró el pase a la final. La semana se vivió con una mezcla de mesura y ansiedad, pero todos sabían que el club estaba ante las puertas de la gloria. Y se la esperó y acunó durante todos esos días, matizados entre los entrenamientos y los preparativos para el gran día. Por eso, por 80 minutos, Belgrano se mudó de barrio. Coparon San Isidro, metieron gente en la general hasta convertirla en un racimo asfixiante de cantos, bombos, banderas y apretujones. Se desparramaron por el sector opuesto, llenaron las plateas y desbordaron cada una de las tribunas. Y el equipo respondió. Desde la entrada en calor se veía la fiereza y la concentración de un equipo que transmitía mucha confianza.

img_0707

Desde el inicio empujó a Hindú contra su in goal; lo maniató con los forwards, empujó y tuvo buena defensa cuando evitó un try en un contragolpe que hubiera cambiado la historia del partido. No pudo aprovechar dos penales desde el centro (uno pegó en el palo), pero fue determinante su vocación, su tackle a destajo y el sacrificio de los forwards, donde una vez más se lució Francisco Gorrisen.

Los dos tries de Ferronato convertidos por Lopez Isnardi, y el descuento de Díaz Bonilla de penal cerraron un 14-3 para Belgrano que presagiaba un buen augurio. Pero Hindú nunca se rinde y salió más decidido en el segundo tiempo. Así llegó al try de Faraone que lo acercó: 14-10 para el que hacía de local. Y reaccionó Belgrano. Con un penal importantísimo de Lopez Isnardi se puso 17-10; el try de Arizaga a los 26 minutos trajo la tranquilidad: 22-10 y una diferencia grande para empezar a dejar correr la ilusión…

Y los minutos finales! Ese penal que aumentaba a 25-10!! La defensa heróica, la sangre de los forwards, ¡el temperamento de Tomás Filipuzzi!, la serenidad de Tomás Rosati, ¡lo que contagia el “Oso”!!, el ingreso del benjamín “Juanchi” Lando, el símbolo “Panchito” Cubelli y los abrazos de todos en el banco de suplentes que festejaban esas últimas imágenes de un partido que, ya sin presiones, podía durar mucho más; esos momentos difíciles de ver con nitidez, pues se nublaban los ojos y la vida se paseaba como un carrousel melancólico; porque quedaban sepultados 48 años de angustias y frustraciones, porque se metían en el cuerpo y alma de toda la familia marrón los momentos vividos, el descenso del ’82, el regreso en 1983, el surgimiento de figuras increíbles como Lisandro Arbizu o Tomás Cubelli, firmes en la tribuna para alentar a su club…

Esos minutos finales deberían quedar para siempre. Para la eternidad. Una final ganada con autoridad, sin sufrimiento, con ese último tramo que uno pedía que se detuviera allí como una foto, que no se terminara nunca, que el tiempo se congelara en ese instante, porque la victoria lucía asegurada, porque nada podía impedirla y porque invitaban al goce por un título tan esquivo, un final que permitía emocionarse y festejar, gritar y reir, cantar y llorar, y mirar al cielo, que dicen que es celeste, pero para nosotros, tal vez porque tenemos la vista inundada de emoción, hoy se tiñó de marrón…

hernan-en-vina-del-mar-chile-1024x229

 

Hernán O’Donnell

 

La noche de Córdoba llenó de preguntas al seleccionado

Estaba todo preparado para tener una noche de fiesta y alegría. Hasta el clima acompañaba como un anuncio de buen augurio; cálido durante el día, un sol radiante y una brisa fresca que asomó al caer la tarde para dejar paso a un anochecer ideal para jugar al fútbol. Un estadio hermoso, deslumbrante, casi lleno, con una ocupación que orillaba el 90% de su totalidad y una multitud conformada por familias y grupos de amigos, el público clásico de la selección nacional.

img_0679

Sin embargo, el equipo de Bauza no supo estar a la altura de las circunstancias. Como si sufriera un bloque psicológico tras las tres finales perdidas y los duros cuestionamientos, (en algunos casos de los medios, los menos, pero sí muchos en las redes sociales que tienen gran repercusión aunque los autores de los mensajes son más anónimos que firmantes responsables), esas duras críticas que se sumaron entre cada episodio (frustración en Brasil 2014, decepción en Chile 2015, reproches en USA 2016) derivaron en un plantel en estado de alerta y confusión. Hipersensible a cualquier opinión, agazapado para devolver cualquier frase, herido por las críticas de los hinchas, los jugadores se debaten en un momento donde están en el ojo de la tormenta y no encuentran los resultados para alcanzar la pazy emprender el camino hacia la búsqueda de un nuevo objetivo.

Así está la Argentina hoy. Herida por las finales perdidas, sensibilizada por las críticas desmedidas y confundida en su juego. No encuentra los caminos de la recuperación y se hunde en su crisis, enredada en sus broncas y sus fantasmas.

img_0682

Ante el conjunto guaraní la selección sumó una actuación decepcionante. Parecía no tener plan de juego, y si lo tenía, quedó deshecho apenas se empezó a mover la pelota. Paraguay salió a golpearlo, tuvo un ataque a su favor y en la primera contra acertó Derlis González. El 0-1 llenó de estupor a un público que había acudido en masa para ver, a falta de Messi, a su ídolo local, Paulo Dybala, pero el entrenador, en una decisión difícil de comprender, prefirió dejarlo en el banco. se privó de contar con uno de los futbolistas más capaces de generar juego, privó a la gente de ver a su estrella favorita y privó al equipo de contar con un aliento más grande e incondicional a partir del inicio del juego. Porque con Dybala en el campo desde el inicio, el aliento y el entusiasmo hubieran sido mayores  desde el arranque del partido; al dejarlo afuera, el pedido de su ingreso se transformó en un grito de guerra que comenzó tras el gol de Paraguay y creció hasta el estruendo ensordecedor después del penal que Villar le atajó a Sergio Agüero. Por qué no jugó desde el comienzo Dybala es la primera pregunta, que en realidad surgió desde la confirmación del equipo la noche anterior.

img_0685

La Argentina nunca supo jugar el partido. Se vio ahogada por Paraguay y su acumulación de volantes; no tenía reacción cuando la dinámica de los mellizos Romero le imprimía toque y velocidad a las contras y se vio muy lenta y previsible en ataque. Si había plan o plan B, es una duda que también deja la noche cordobesa. La respuesta del equipo fue sumar gente en ataque para tyener mayor presencia en el área rival y acertar un pleno.

Una tercera duda fue planteada por muchos en algunos puntos particulares. ¿Por qué ejecutó Agüero el penal si había errado dos en un partido reciente con el Manchester City? ¿No hay otro jugador capacitado para ejecutarlo? ¿No deberían estar todos los futbolistas aptos para hacerlo?

La actuación de Romero fue intermitente. Clave para desviar un remate con olor segundo gol, pero un interrogante es su posición en el gol de González. Tal vez haya descuidado un poco el primer poste, aunque hay que decir que no tiene mayor responsabilidad en el gol, pues era un mano a mano complicado de evitar.

A Bauza se lo vió muy abatido en la conferencia de prensa posterior al juego. En sus primeras respuestas lucía quebrado, con el tono bajo y la voz desanimada. Con el correr de los minutos se recuperó un poco y al final intentó mostrar un mensaje de fuerza y optimismo para el futuro. ¿Podrá encaminar el recorrido hacia el objetivo?

Los jugadores se fueron muy rápido de la cancha. Apenas sonó el silbato del juez se dirigieron hacia el tunel, sin esperarse entre ellos, sin hacer la clásica ronda final y juntarse para irse todos juntos. Nada de eso, terminó el partido y se dieron vuelta desde cada lugar para irse al vestuario. Es comprensible, quien alguna vez haya jugado a un deporte colectivo y sufrió una derrota dura e inesperada, la bronca hace que uno se vaya rápido, mascullando rabia y decepción por una noche decepcionante. ¿Serán estos mismos los hombres de la recuperación? Está claro que Leo Messi se reintegrará al conjunto y se pondrá una vez más el traje de salvador, pero hay que seguir de cerca el clima interno del plantel.

La noche de Córdoba presagiaba un momento de alegría y de recuperación. Fue todo lo contrario; una actuación para el olvido que llenó de dudas y preguntas al pueblo futbolero. ¿Tendrán, el DT y los jugadores, las respuestas necesarias para la recuperación?

estadio-kempes

 

Hernán O’Donnell

(Enviado Especial a Ciudad de Córdoba, Provincia de Córdoba)