El gol de Tomassini puso justicia en una tarde caliente

Se jugaba el último minuto de descuento; en rigor de verdad, solo faltaban cuarenta segundos para que se cumplieran los cinco minutos agregados. Y Brian Miranda condujo con paciencia, se metió por el pasillo del volante interno izquierdo, abrió a la banda izquierda para El “Pony” Oyola, este sacó el centro pasado y Gabriel Tomassini metió el cabezazo que marcó el 2 a 2 final cuando iban 90+4′ de juego. Explotó Tristán Suárez en un alocado festejo y se cerró así el partido con un empate 2 a 2 ante Barracas Central en una tarde en la que los fallos controvertidos del árbitro Carlos Córdoba y los jueces de línea fueron protagonistas, en tanto el juego se hizo caliente con el correr de los minutos.

Tristán Suárez y Barracas Central igualaron en dos tantos, en un partido que además tuvo emociones, momentos de buen fútbol, otros de juego enredado y una sensación de que el empate agónico puso un marco de justicia pues el juego fue equilibrado y si bien Tristán Suárez dejó una mejor imagen y la impresión de que pudo llevarse algo más, la igualdad, al cabo, se acerca a lo que fue el encuentro.

El equipo de Aníbal Biggeri salió con la intención de jugar, manejar el balón y atropellar a Barracas. Una línea de cuatro renovada, con Francisco Martínez por derecha, de gran partido, Tomassini y Bruno Duarte como zagueros centrales y Nicolás Pantaleone por el lateral izquierdo. Dos medio centros, Marcos Brítez Ojeda y Saúl Nelle; Enzo Arreguín por el costado derecho y Ezequiel Merillo por la raya izquierda. Miranda, como enlace y organizador, y Lucas Delgado de centro atacante. A los 7′ tuvo una chance con un remate potente de Merillo que Monllor, el arquero visitante, desvió al corner. Y de ese tiro de esquina vino el cabezazo de Merillo que se introdujo en la valla visitante, aunque Córdoba no lo convalidó por una falta previa que no pudimos detectar. Ahí se produjo el primer foco de conflicto. Suárez protestó de modo enérgico. Enseguida tuvo otra chance, a los 9′, con un centro de Arreguín y el cabezazo de Marcos Brítez Ojeda

Barracas tuvo una llegada a los 11′ con un disparo de Germán Estigarribia que Rodrigo Lugo, el arquero local, sacó al corner. Luego lo tuvo Suárez, a los 17′, con un desborde de Arreguín por derecha, el centro atrás y el tiro de Miranda que Mariano Monllor sacó al corner. A esa altura, el partido ya era de alto vuelo.

El “Guapo” propuso un esquema ordenado; línea de cuatro, Arce como medio centro, IvánTapia para manejar el balón, Buter como referencia de ataque y Valenzuela suelto para desequilibrar con su tremenda habilidad. Así llegó una jugada inmediata, donde se fue por izquierda, sorteó dos marcas y dentro del área le cometieron penal. Lo ejecutó Ivan Tapiá y lo tradujo en gol, para poner el 0-1 para Barracas Central a los 22′ de juego.

Suárez no se desordenó. Insistió con su propuesta y por una mano en el área tuvo también un penal a favor, a los 31′, que Brian Miranda convirtió y el encuentro quedó 1-1. Pero la alegría duró poco.

Fernando Valenzuela, el mejor de la visita, volvió a ser derribado en el área, y él mismo se encargó de patera el penal para poner el 1-2 a los 34′ de juego.

Respondió Tristán Suárez a los 36′ con un disparo de Arreguín, pero estaba muy oblicuo en su posición para rematar al arco y el balón salió desviado. Algunos fallos desfavorables provocaron las protestas del local y en el entretiempo fue expulsado el director técnico Aníbal Biggeri.

El complemento fue menos lucido y más luchado. Suárez buscó atacar para llegar a la igualdad, pero Barracas opuso resistencia y la amenaza permanente con la velocidad y habilidad de Valenzuela. A los 58′ Ezequiel Merillo probó desde afuera y el balón pasó cerca. Enseguida se abrieron las ventanas de los cambios. A los 59′ Franco Quiroga entró por Saúl Nelle y Juan Román Pucheta ingresó en lugar de Marcos Brítez Ojeda. Desde el palco de prensa, Biggeri buscó arriesgar, mientras el equipo intentaba progresar por el sector izquierdo. En la visita, a los 59′ también, cambiaron delantero por delantero: Mauro Albertengo reemplazó a Leonel Buter.

El juego se hizo más parejo. Y Suárez tuvo una buena contra a los 66′ con una escapada de Pucheta, pero Monllor le tapó el disparo y el rebote le pegó al delantero y se fue afuera. A los 75′ el “Pony” Oyola reemplazó a Enzo Arreguín. Se ubicó en el costado izquierdo, mientras Merillo pasó al derecho. En la visita, a los 76′ Facundo Stábile, rápido para el contragolpe, reemplazó a Juan Vazquez. El “Guapo” apostaba al contra ataque.

A sea altura, todo era lucha y fricción. Biggeri pedía calma y juego. Que arriesgaran si era necesario, pero que no renunciaran a la búsqueda ofensiva. Y puso a José Barreto en lugar del defensor Bruno Duarte. El equipo se paró con línea de tres, Martínez, Tomassini y Pantaleone, Franco Quiroga por delante de ellos como volante central, Merillo más cerrado a su derecha, Miranda a su izquierda y arriba Barreto, Pucheta, Delgado y Oyola.

Barracas metió dos variantes a los 84′. Luciano Romero entró por Germán Estigarribia y Daniel Martínez ingresó en lugar de Carlos Arce. Y trató de aguantar, aunque Suárez se venía con el resto que le quedaba, con mucho empuje y coraje. La cancha era un hervidero y los roces le dieron paso a las discusiones, como las que tuvieron varios jugadores locales con el banco de la visita.

Hasta que llegó esa jugada final. El ataque sereno de Miranda, a pesar de las circunstancias y la enorme presión reinante, la apertura para Oyola, el centro y el cabezazo salvador de Tomassini para marcar el 2-2 a los 90+4′.

El final fue el festejo grande de Tristán Suárez, el abrazo de todos sus jugadores y la resignación de Barracas Central, que vio en la agonía como se le esfumaban dos puntos por el empate, pero el que no quedaba muy lejos de la justicia.

Hernán O’Donnell

Argentina cierra la triple fecha ante Bolivia

Parece lejano todo el escándalo de la suspensión del partido frente a Brasil en Sao Paulo, cuando la Argentina ya debe salir a la cancha para medirse ante Bolivia. Una pena, porque el equipo había jugado muy bien en Caracas frente a Venezuela y el impulso parecía mantenerse en esos primeros minutos jugados en el Arena Corinthians. Pero no hubo continuidad en el juego y el equipo de Lionel Scaloni deberá aguardar el fallo de la FIFA mientras los abogados de la AFA plantean el descargo.

Crédito: AFA Media

A propósito del entrenador, como es norma en esta clase de partidos, habló con la prensa en la conferencia habitual del día previo al encuentro: “La sensación que nos quedó es la de todo el mundo, que esperaba un espectáculo de gran nivel y nos quedamos sin nada”, apuntó Scaloni, “En ningún momento pensamos que podía pasar lo que ocurrió en Brasil. Fue todo raro, muy extraño. Habíamos tomado todos los recaudos necesarios, pero no nos enroscamos con lo que sucedió. Solo pensamos en jugar al fútbol. Somos un grupo muy fuerte y debemos seguir de esa manera”.

Y agregó: “No cambió la planificación prevista, debemos jugar con Bolivia e intentar ganar. Hoy me mantiene ocupado este partido, después veremos que sucede con el encuentro frente a Brasil”.

Con respecto a la presencia del público, señaló: “Es una gran alegría que la gente pueda venir a ver a la Selección. Será con aforo limitado, pero ya es un avance increíble que puedan disfrutar de los jugadores; siempre sentí que el hincha es incondicional a la Selección. Eso no creo que haya cambiado. Sí es cierto que haber ganado un título motiva más, es algo especial”.

Crédito: AFA Media

“Puedo confirmar que Juan (Musso) va a ser el arquero. Para las demás posiciones me voy a tomar el entrenamiento de la tarde para definir el equipo”, señaló a modo de adelanto de la alineación. “Conocemos a la selección de Bolivia, tiene jugadores de buen pie de mitad de cancha hacia adelante. Intenta jugar un buen fútbol, es un rival difícil. No damos nada por descontado”.

Y por último, dejó un mensaje optimista de cara al futuro. “Somos una Selección competitiva, un adversario difícil para cualquiera. Podemos complicarle las cosas a los mejores equipos de Europa. Si nos toca estar en el Mundial, vamos a ser muy competitivos”.

Allí está el entrenador, Lionel Scaloni, en la búsqueda del nuevo examen, mientras los ecos del choque inconcluso con Brasil entran un compás de espera.

Hernán O’Donnell

Atlanta y Gimnasia de Mendoza dividieron puntos y ocasiones

Domingo a la mañana, templado, con buen sol y una temperatura agradable. Un día y horario inusual para la historia del ascenso argentino, pero en los últimos tiempos se ha variado y ampliado tanto el calendario de partidos que cualquier día de la semana parece el habitual. Claro que con un café y las facturas matutinas, todo se hizo muy agradable. Y el Estadio “Don León Kolbowski”, en pleno corazón de Buenos Aires, con sus refacciones y acondicionamientos, ponían un marco espléndido para aguardar el partido.

El arranque fue estimulante. Porque el conjunto mendocino salió a proponer y Atlanta, en cuanto obtuvo el balón, lastimó.
Agustín Bolivar tomó el balón en su campo, avanzó y lanzó un pelotazo largo y preciso a la derecha para Facundo Taborda, quien ganó en velocidad, desbordó y tiró el centro para la entrada de Fabricio Pedrozo, que a los 2’ de juego puso el 1-0 para Atlanta. Una jugada rápida y precisa que abrió un primer tiempo de alto vuelo.

Enseguida el local hizo una maniobra similar, cuando Bolívar habilitó a Carrasco, el lateral se proyectó hacia el medio, abrió a la derecha para Taborda y el centro de Facundo fue interceptado al corner.

Tras el gol inicial, se vio lo mejor del equipo de Walter Erviti. Se acomodó bien al partido, con la presencia fundamental de Agustín Bolívar en la mitad de la cancha, para cortar, distribuir, ordenar y pasar al ataque cuando veía la oportunidad. Bien secundado por Gabriel Ramírez a su derecha, Daniel Saggiomo a la izquierda y Facundo Taborda con sus incesantes piques sobre la banda derecha.

Recién hacia los veinte minutos del primer tiempo se acomodó el equipo mendocino. Los volantes comenzaron a tomar la pelota; Marcos Gelabert, Iván Ramírez y Cristian Llama comenzaron a mostrarse, moverse, y generar volumen de fútbol. Había pasado el sofocón inicial y el equipo de Diego Pozo se metió en el partido. A los 33′ probó Santiago López desde afuera, pero el balón salió desviado. Luego, Pozo varió en la zona de volantes y volcó a Llama a la derecha, soltó a gelabert por delante de Iván Ramírez y Santiago López se corrió a la banda izquierda. El equipo buscaba alternativas y de a poco se acomodó al partido.

Atlanta respondió con un buen contra golpe a los 37′, Gabriel Ramírez habilitó a Taborda y otra vez el centro fue cortado, esta vez por Sebastián Giovini, el arquero de Gimnasia y Esgrima de Mendoza.

A los 42′ Fabricio Pedrozo ejecutó un tiro libre que salió muy cerca del arco visitante. A los 43′ Facundo Taborda metió un soberbio remate dentro del área que Giovini rechazó al corner con un puñetazo. Atlanta redondeó así un muy buen primer tiempo, aunque las cosas iban a variar en el complemento.

En el segundo tiempo mejoró el conjunto visitante. Volvió Cristian Llama a su banda izquierda, López a la derecha y Juncos se asoció más al juego. A los 46′ Gabriel Ramírez tuvo un buen disparo para Atlanta que Giovini controló, y a los 52′ Diego Pozo realizó dos modificaciones en su conjunto. Andrada reemplazó a Ramón Lentini, y Nicolás Romano ingresó en lugar de Oscar Garrido. Y se adelantó en el campo la visita, a medida que Atlanta resignaba posiciones. A los 55′ Cristian Llama ejecutó un corner desde la izquierda y el cabezazo de de Juncos se fue apenas alto.
Walter Erviti entendió que debía variar a su equipo y a los 61′ realizó dos cambios: Alejo Dramisino entró en lugar de Facundo Taborda y Santiago Solari reemplazó al ex San Lorenzo, Fabricio Pedrozo. Y apenas ingresó, Solari tuvo una oportunidad con un tiro libre que salió arriba del travesaño.

Sin embargo, Gimnasia se mostraba mejor que en el primer período y a los 67′ llegó a la igualdad, cuando Llama ejecutó rápido un tiro libre con un pase por arriba de la barrera para la entradad del lateral Lucas Carrizo, este sacó el centro al área y Meritello llegó para convertir el 1 a 1.

Erviti movió el banco y a los 71′ Juan Bisanz entró por Gabriel Ramírez. Y del otro lado, a los 73′ Franco González reemplazó a Cristian Llama, y Tadeo Marchiori ingresó en lugar de Marcos Gelabert. A los 78′ cerró la ventana de variantes con el ingreso de Fernando Cortéz por Juncos.

Atlanta se había quedado sin nafta. El gran primer tiempo quedó deslucido con un complemento en el que el equipo se retrasó y no pudo sostener el resultado ni el dominio del partido. Tuvo una llegada a los 81′ con un tiro cruzado de ignacio Colombini, pero fue Gimnasia de Mendoza el que pudo facturar al final, con una llegada de Cortéz a los 85′ que no pudo concretar, otra del propio Cortez a los 87′ que dobló las manos de Nicolás Sumavil y Gabriel Carrasco salvó sobre la línea y otra posibilidad a los 90+1′ que Sumavil sacó al corner con una brillante reacción.

Fue un final en el que el equipo mendocino acumuló posibilidades y sembró preocupación en Villa Crespo, pero ese coqueteo con la victoria no hubiera sido justo que se concretara, porque Atlanta fue el dueño del primer tiempo y Gimnasia de Mendoza mejoró en el complemento, alcanzó el equilibrio y la balanza terminó en un justo punto medio.

Hernán O’Donnell

La lluvia y el viento se llevaron el fútbol de Vicente López

Apenas comenzó el partido, a las 18 hs de la tarde de un sábado de fin de invierno, pero invierno al fin, se desató un aguacero fuerte y frío en Vicente López, con lo cual todo lo que pensaban desarrollar Platense y San Lorenzo, estuvo gobernado por el imperio del agua caída. El partido se hizo resbaloso, impreciso, débil. Careció de llegadas en el primer tiempo, con más estudio y precauciones que maniobras elaboradas. Platense con su clásico 4-4-2, San Lorenzo con el nuevo esquema de tres centrales, Herrera y Fernández Mercau por los laterales, dos volantes centrales, Ortigoza y Rosané, un hombre suelto, Ezequiel Cerutti y dos delanteros, Franco Di Santo y “Uvita” Fernández.

A los 15′ probó Nicolás Bertolo desde afuera, en la primera llegada del local y del partido. A los 17′ Matías Tissera sacó un disparo largo que Sebastián Torrico desvió al corner. El Ciclón tuvo su primera llegada clara con una escapada de “Uvita” Fernández y un tiro cercano, a los 24′. Y al final tuvo otra chance con un disparo del lateral Fernández Mercau que controló el arquero local, Ojeda.

Fue un primer tiempo tranquilo, con pocas oportunidades, mucha lucha en la mitad de la cancha y pocas ideas futbolísticas. La lluvia y el viento habían barrido con las propuestas.

En el complemento paró la tormenta y el fútbol cobró algo de vuelo. Más por intensidad y dramatismo que por acciones elaboradas. Platense arrancó mejor y en dos oportunidades salvó Torrico a los 48′ de juego.

Iban 59′ y llegó la primera variante del partido; Alexis Sabella reemplazó a Cerutti, en San Lorenzo. Y a los 60′ abrió el marcador, tras una buena corrida de “Uvita” Fernández, ganó la posición en el área, sacó un remate fuerte que pegó en el travesaño y Franco Di Santo estuvo atento al rebote para marcar el 0-1 para San Lorenzo de Almagro.

Leonardo Madelón, el Director Técnico visitante, decidió arriesgar, y a los 64′ puso a un hombre de ataque por el costado derecho, Facundo Curuchet, en reemplazo de un volante de marca, Iván Gómez. El equipo se paró con la línea de cuatro defensores, Lamberti como volante central, Curuchet, Baldassarra y Bertolo adelante y dos delanteros: Mansilla y Tissera. Y encontró su recompensa, a los 67′ con un disparo lejano y fuerte de Mansilla que Torrico no pudo retener y Platense logró la igualdad. 1 a 1.

Paolo Montero intentó reacomodar las piezas, y a los 69′ el colombiano Gordillo entró por Néstor Ortigoza mientras que Jalil Elías reemplazó a Andrés Herrera. Un rato más tarde, a los 79′ Hausch ingresó en lugar de Rosané. No hubo más profundidad en el partido, aunque el Ciclón tuvo un tiro de esquina, a los 82′, que pasó muy cerca del travesaño de Ojeda. Madelón también intentó reacomodar el esquema y a los 83′ Tomás Sandoval entró por Matías Tissera y Gastón Gerzel reemplazó a Nicolás Bertolo.

Quedó apenas el tiempo extra para la expulsión de Nicolás “Uvita” Fernández, a los 90+1′ por exceso verbal y la conformidad de ambos por la igualdad, en una noche que la lluvia se llevó el fútbol y solo por momentos apareció la emoción del ataque.

Hernán O’Donnell

San Martín dio el golpe en el Bajo Belgrano

El partido tuvo un comienzo frenético. Fueron quince minutos de una intensidad considerable. San Martín de Burzaco salió decidido, con una postura clara y ambiciosa. A su clásico esquema de 5-3-2 le agregó una dosis importante de audacia, porque los laterales se posicionaron bien en ataque a la hora de tener la pelota. Y cuando la perdía se ubicaban en la hilera de los tres zagueros. Esa plasticidad le permitió dominar el territorio y en el cuarto de hora inicial generó mucho peligro.

A partir de las trepadas de Aranda y Goicoechea, San Martín se hizo ancho. Con el manejo de Ocampo y Acevedo, el visitante trianguló y encontró pasillos para progresar.
Excursionistas fue ordenado para aguantar el ataque y en cuanto pudo, avisó. A los 5’ Miguel López aprovechó un balón que flotaba en el area y sacó un remate que se fue alto.
Respondió San Martín con una buena jugada colectiva a los 7’, y el remate final que salió desviado.
Se acomodó mejor el equipo de Burzaco y tuvo la iniciativa en ese cuarto de hora. Excursionistas empezó a equilibrar cuando Matías Morales se hizo del balón y encontró diálogo con Lopez; Roldán era un bastión en la recuperación pero el equipo no encontraba salida, porque no aparecía Müller por derecha y por izquierda Julian Canosa tenía más preocupaciones en defender que en atacar.

Por eso el primer tiempo fue muy complicado, aunque luego de ese cuarto de hora inicial bajó el ritmo y la intensidad.
Recién sobre el final hubo un par de ocasiones, la más clara para el local con un pique de Faust en el que quedó cara a cara con Scurnik, pero el arquero visitante ganó el duelo. Lo mejor iba a llegar en el complemento.


El “Verde” salió a apretar más arriba, a ahogar el inicio de las maniobras de San Martín. Y cuando empezaba a acomodarse en el rol de protagonista, llegó un golpe muy duro: iban 48′ y Aranda encabezó un ataque por derecha, combinó con Acevedo, este cedió al medio, Plante no pudo rematar con firmeza y el rebote le quedó al lateral-volante Aranda para llegar abajo del arco local y abrir el marcador para poner el 0-1 a favor de San Martín.

Sintió el golpe Excursionistas. Se afirmó en su idea el equipo de Burzaco. Y a los 57′ realizó una buena jugada combinada que Slimmens finalizó con un tiro muy alto. Benavente ingresó por Robles, pero la línea de cinco defensores se mantuvo en San Martín. Se proyectaban Aranda y Goicoechea por derecha e izquierda, pero lo hacían de forma escalonada y alternada.

El local intentó modificar el trámite y a los 62′ González King reemplazó al capitán, Patricio Roldán, de buen partido. De a pcoo, Excursio encontró su juego. Con la movilidad permanente de Morales, la conducción de Miguel López y el peso de Galeano en ataque. No aparecía Iván “Colorado” Müller, y Faust estaba ahogado en la marca de los tres centrales, pero a los 72′ hubo un agarrón muy claro sobre el centro delantero local en una jugada que pareció penal por agarrón de Benavente y el árbitro no observó.

Excursionistas intentaba con buenas asociaciones, buscaba apretar al rival, pero su trabajo llegaba hasta los tres cuartos de cancha. Ahí le costaba encontrar los espacios, no hallaba profundidad, los cinco defensores, sobre todo los tres centrales, se cerraban muy bien en el área y además Barboza, el volante central, también se agrupaba junto a ellos, amén de los interiores, Acevedo y Ocampo. Se le hacía muy difícil al local hallar espacios en la zona de ataque, y cuando probaba con remates desde larga distancia, siempre aparecía una pierna rival para desviar el balón.

A los 73′ llegaron dos variantes en el equipo visitante; salieron Ocampo y Slimmens, y en sus lugares entraron Coria y Ledesma. En el local, a los 75′ Juan Segundo reemplazó a Rodrigo Faust, en el segundo cambio y segunda ventana disponible.

El “Verde” apretaba y a los 76′ tuvo una llegada; Matías Morales recibió por el centro un pase de Montemarani que se había proyectado por derecha y sacó un disparo que se fue un poco alto. Quedó acalambrado luego de ese remate Morales, y de tanto correr, y a los 78′ fue reemplazado por Nahuel Arias. El equipo se re acomodó: tres hombres en defensa, Monasterio, Molina y Canosa, quien se retrasó. Montemarani un poco de lateral derecho por salida, y hacia el medio para ayudar al “Pato” González King como un doble cinco. Por delante Müller, Arias, López y Galeano, y más adelante Juan Segundo.

A los 83′ llegó el último cambio visitante: Anriquez entró en lugar de Plante. Y se iba a convertir en héroe, porque si bien Exursio llegó con un disparo de López a los 85′ que Müller no pudo conectar, a los 89′ Anríquez selló el resultado: un balón recuperado en defensa, el pelotazo largo, Anríquez entró por el medio y cuando le salía el arquero Gallardo, la picó de emboquillada para sellar el 0-2 a favor de San Martín de Burzaco.

Excursionistas sintió el golpe y a los 90+1′ la visita pudo aumentar, porque Coria se fue por izquierda, lanzó un pelotazo cruzado a la derecha, Aranda la devolvió al medio y Acevedo remató al arco. El palo izquierdo de Gallardo salvó la caída de la valla. A los 90+3′ Nahuel Arias tomó el balón en el medio de la cancha, elaboró una gran jugada vertical, dejó dos hombres en el camino y abrió a la derecha para la entrada libre de Müller, pero el remate del “Colo” se fue alto.

Era el tiro del final, que tampoco pudo entrar. Excursionistas se perdió en su laberinto. Puso voluntad y algunas ideas, pero sucumbió ante un rival ordenado, prolijo y expeditivo, que supo sacar provecho de sus momentos en el juego y se llevó la alegría para Burzaco.

Hernán O’Donnell

Fue un monólogo de Argentina y el triunfo su lógica consecuencia

Tuvo varios momentos clave, pero el partido no se explica sólo por esos famosos “detalles” del fútbol, cada vez más recurridos a ellos cuando hay que explicar encuentros equilibrados. Esta vez, la Argentina recitó un monólogo de fútbol, desde el primer minuto de juego hasta el último instante. El equipo de Scaloni tuvo un partido sin fisuras y se llevó el triunfo por una lógica decantación.

A los 5′ tuvo su primera llegada al arco rival, con un disparo de emboquillada de Lionel Messi, que se fue muy cerca del travesaño. A los 12′ realizó una gran maniobra de contragolpe. Arrancó Messi en su campo, pasó el balón rápido a Guido Rodríguez, este abrió a la izquierda para la proyección del “Huevo” Acuña quien cambió de frente y Messi volvió a recibir la pelota. Se acomodó, remató y la pelota pegó en un defensor. Le quedó a Rodrigo De Paul, cuyo disparo reventó el travesaño de Faríñez, el arquero local.

Argentina era mucho más. Con Emiliano Martínez en el arco, una clásica línea de cuatro con Molina, Pezzella, Otamendi y Marcos Acuña; cuatro volantes, Di María, De Paul, Guido Rodríguez y Lo Celso; y adelante Messi y Lautaro Martínez, aunque Messi flotaba por toda la cancha, Lo Celso tenía juego interior y Acuña ocupaba la zona ofensiva de la franja izquierda. Venezuela se replegaba y aguantaba, en tanto apostaba a la habilidad de Soteldo para encarar los contra ataques.

A los 13′ remató Di María y salvó Fariñez. A los 20′ Messi encaró un rápido contragolpe, Angel Di María se fue por derecha y su habilitación a Lautaro Martínez se fue muy larga. Y cuando iban 24′ lo tuvo otra vez Lautaro Martínez.

Era más la Argentina y merecía abrir el marcador. Venezuela era sólo voluntad y retroceso en defensa. A los 24′ 4′ L.A. Martinez ingresó por el lesionado M. Velazquez, pero a los 31′ fue expulsado por una violenta falta a Messi que el VAR corrigió en la primera sanción (había sido amonestado). Venezuela debía volver a rearmar la defensa y a los 34′ realizó su segunda variante: Mikel Villanueva entró en reemplazó de Eric Ramírez.

A los 42′ otra vez Di María exigió al arquero local, pero su resistencia cayó al final del primer tiempo.

Iban 45+1′ cuando un delicioso pase de Lo Celso dejó a Martínez solo ante el arquero y Lautaro no dudó; toque suave y cruzado para poner el 0-1 para la Argentina.

Crédito: Prensa AFA

En el segundo tiempo se replegó un poco Argentina, cedió algunos espacios y aprovechó el terreno para amenazar en cada contra ataque. Venezuela había comenzado con Daniel Carrillo por Savarino, en una tercera modificación de su estructura. Le quedaba una sola ventana y dos variantes disponibles.

A los 61′ se vinieron “Los Correa” en el equipo de Scaloni. El “Tucu” Joaquín ingresó en lugar de Giovanni Lo Celso, en tanto “Angelito” reemplazó a su tocayo, Di María. En el local, a los 66′ llegaron los dos últimos cambios: R. Hernandez entró por A. Gonzalez y J.C. Hurtado ingresó en lugar de Josef Martinez.

En una ráfaga lleagron dos golazos de Argentina para liquidar el encuentro. A los 70′ lo hizo Joaquín Correa, tras una buena pared con Messi y un disparo desde afuera del área para poner el 0-2 para Argentina.

Y lo liquidó Angelito Correa a los 73′, con una jugada colectiva en que combinó con Joaquín Correa, este jugó con Messi, el pase para Lautaro, el remate de Martínez y Fariñez la pudo rechazar, pero Angelito estaba atento y tomó el rebote para señalar el 0-3 para la “Albiceleste”.

Crédito: Prensa AFA

Partido liquidado y más variantes para la Argentina. A los 74′ Alejandro “Papu” Gomez reemplazó a Lautaro Martínez y Exequiel Palacios ingresó por R. De Paul; un rato más tarde, a los 78′ Paulo Dybala entró en lugar de Guido Rodriguez.

Todo estaba concluído cuando llegó el penal que el VAR advirtió a Soteldo y el mismo jugador venezolano se hizo cargo de la ejecución. Se la picó a Emiliano Martínez y cerro el marcador en 1-3 a los 90+3′ de juego.

El resto, fue algo así como un “bis” del equipo argentino. Todo estaba terminado, el 1-3 fue celebrado y ahora Brasil será la próxima estación en el camino a la Copa del Mundo.

Hernán O’Donnell

Argentina retoma el camino al Mundial

Otra vez la Competición Preliminar de la Copa Mundial de la FIFA-Qatar 2022 se pone en marcha; otra vez el continente vibra al compás de los encuentros de los seleccionados de la región. otra vez la Selección Argentina despierta el interés genuino de sus hinchas y amantes, otra vez la albiceleste aparece en algún estadio del mundo. La Argentina vuelve después de haber conquistado la Copa América Brasil 2021, con el espíritu intacto, la voluntad renovada y la ilusión habitual.

El plantel ya está en Caracas, donde el Jueves 2 de Septiembre se enfrentará con Venezuela, el seleccionado local. Y, de a poco, llegaron todos los futbolistas a la capital venezolana para sumarse al equipo. Prescindieron de la negativa de los clubes de Europa que no querían ceder a los jugadores para esta fecha. Pero la FIFA se puso firme y los jugadores acompañaron. Y el equipo, a pleno, puso en marcha el trabajo.

El martes a la tarde ya estaban todos, y comenzaron las tareas. Primero realizaron ejercicios en el gimnasio y después, a las órdenes del Preparador Físico, Luis Martín, efectuaron movimientos de velocidad con pelota en diferentes circuitos.

Más tarde, realizaron ejercicios de fútbol con espacios reducidos divididos en tres equipos, bajo las órdenes del Director Técnico, Lionel Scaloni, mientras los arqueros Emiliano Martínez, Franco Armani, Juan Musso y Gerónimo Rulli, trabajaron con el entrenador de arqueros, Martín Tocalli. 

Crédito: AFA Media

El partido está a la vuelta de la esquina. Y no será el único, pues el día 5 jugará en San pablo ante Brasil y el 9 en Buenos Aires frente a Bolivia. Pero el primer partido es el primer paso de la serie y los escalones se suben de a uno. Por eso, toda la atención está puesta en el duelo ante Venezuela. El equipo realizó una segunda práctica con circuitos variados para trabajar la velocidad y coordinación. Luego, hubo un ejercicio específico con defensores y volantes defensivos por un lado y atacantes con hombres mixtos por otro. Los trabajos defensivos fueron controlados por Walter Samuel y Roberto Fabián Ayala, mientras que la coordinación ofensiva estuvo a cargo de Lionel Scaloni y Pablo Aimar.

Después, el plantel completo efectuó trabajos tácticos con la orientación de Lionel Scaloni.

Crédito: AFA Media

Hoy es un día especial, porque hablará el entrenador y porque se empezará a vislumbrar el equipo. Algunos trascendidos hablaron de una posible formación con alternativas, para preservar a jugadores de cara al encuentro con Brasil, que será el domingo 5 de septiembre. Pero son solo rumores.

Lo cierto es que la Argentina, el Campeón de América, está en Caracas. Y su nuevo camino tiene al Mundial como próximo objetivo.

Hernán O’Donnell

Arsenal y Defensa se repartieron los tiempos y el empate resultó lógico

Fue un empate justo, porque en el balance se dividieron el dominio, las situaciones y el control del partido. Fue un poco más Arsenal en el primer tiempo, y tuvo el dominio Defensa y Justicia en el complemento, con lo cual la igualdad resultó lógica y justificada. Aunque nos quedamos con las ganas de ver goles, el partido fue entretenido y la cálida tarde de Sarandí nos dejó lindas sensaciones.

No siempre el 0 a 0 es sinónimo de mal partido. Puede dejar muchas lecturas, enseñanzas, aspectos para analizar y también puede tener un contenido interesante, incluso con algunas situaciones frente a los arcos. Este fue el caso; no fue un encuentro para recordar, pero sí con muchos matices. Israel Damonte, entrenador de Arsenal, tomó nota de la caída ante Central en Rosario y cambió el sistema y los intérpretes. Dos líneas de cuatro, compactas y colaborativas, un media punta organizador, Alan Ruiz y un delantero, Nicolás Mazzola. El equipo lució concentrado y tuvo la iniciativa en el primer tiempo. Cuando el juego pasaba por Alan, el equipo tenía buen toque y volumen de fútbol; por momentos lo salteaban y se perdían en los pelotazos, pero el aporte de Alan, como conductor, fue más que interesante y productivo en el primer período.

A los 5′ llegó un corner de Brian Farioli desde la derecha y el cabezazo de Suso fue bien controlado por Ezequiel Unsaín, arquero de la visita. Fue su primera llegada. A los 10′ tuvo la segunda, con un centro de Alan Ruiz y el remate de Farioli, que salió muy cerca del palo izquierdo de Unsaín. Y a los 12′ volvió a avisar, con un remate del lateral gastón Benavídez que salió desviado.

Defensa no podía armarse. Si bien insinuaba su vocación ofensiva habitual, hasta ese momento no había llegado. Sebastián Beccacece dis puso una línea de cuatro, Kevin Gutiérrez como volante central, Hachen a la derecha, Rotondi por la izquierda y más adelante Pizzini, Walter Bou y por el centro del ataque, el ex San Lorenzo, Rodrigo Contreras. Cuando el equipo perdía el balón, se paraba con un 4-1-4-1, con Gutiérrez de volante central, por delante Pizzini, Hachen, Bou y Rotondi. En ese tiempo, Kevin Gutiérrez comenzó a hacerse eje del juego, y terminó como una de las mejores figuras del equipo.

A los 14′ Gutiérrez abrió a la izquierda para Bou, este lanzó el centro y Hachen remató alto. Fue la primera llegada de Defensa. Pero el control era de Arsenal y a los 23′ Farioli metió un pelotazo largo para Benavídez, quien se esforzó en el pique, llegó al fondo y tiró un centro que cabeceó Mazzola, apenas afuera.

El equipo de Florencio Varela tuvo una oportunidad a los 30′, otra vez con un disparo de Gabriel Hachen, alto y fuerte.

En el complemento, cambió el libreto. Se adelantó Defensa, se adueñó del balón y fue al ataque. Casi siempre a través de las subidas de Adonis Frías, dúctil para la conducción desde el fondo. El zaguero llevaba el balón y empujaba a su equipo, que atacaba con muchos hombres. Avisó a los 47′ con un remate cruzado de Walter Bou.

Arsenal se replegó y apostó al contragolpe. Llegó a los 51′ con una proyección de Emiliano Papa, el centro posterior y el manotazo de Unsaín que sacó el balón al corner. Respondió Defensa con un disparo de Contreras que controló Medina, a los 53′ y a los 55′ llegó una magnífica posibilidad para la visita, tras una buena pared entre Bou y Hachen, el pase fue para Contreras y su remate dio en el palo izquierdo de Alejandro Medina. El equipo de Varela estaba un poco mejor y Beccacece fue por las variantes. Iban 64′ cuando llegaron los dos primeros cambios. Lucas Barrios entró por Rodrigo Contreras y Brian Rivero reemplazó a Gabriel Hachen. Nombre por nombre y posición por posición.

Respondió Damonte con una modificación, a los 72′. Salió Nicolás Mazzola y su lugar en el campo lo ocupó Bruno Sepúlveda, quien despejó de cabeza un corner en su primera intervención y a partir de allí sería muy útil en el juego aéreo.

A los 74′ Miguel Merentiel reemplazó a Pizzini en el equipo de Varela, en tanto a los 75′ Leonel Picco ingresó en lugar de Emiliano Méndez y Matías Belloso reemplazó a Alan Ruiz, quien había bajado un poco el rendimiento y había perdido algunas pelotas.

Defensa volvió a avisar a los 77′ cuando ejecutó rápido un tiro de esquina desde la izquierda de su ataque y Lucas Barrios desvió el disparo. Arsenal mejoró con los cambios. Picco entró bien en la recuperación y la distribución y a los 79′ tuvo una linda chance con un centro desde la derecha y el cabezazo de Sepúlveda fue controlado por Unsaín. A los 83′ Julián Navas reemplazó a Brian Farioli, en la última ventana de cambios del local.

Al final, el equipo de Florencio Varela volvió a tener dos oportunidades, en la confirmación de que había sido superior en el complemento: a los 90+2′ Merentiel pateó desde la izquierda y el balón, bajo y en la ratonera, fue atajado por Alejandro Medina. Y a los 90+4′ Brian Rivero cambió de frente con un pase largo a Carlos Rotondi, este gambeteó por izquierda, lanzó el centro, Lucas Barrios cabeceó y el balón pegó en el travesaño. El rebote le quedó a Merentiel, y su tiro se fue muy alto. Y allí Fernando Espinoza pitó el final.

Fue un empate justo, porque Arsenal fue protagonista en el primer tiempo y Defensa y Justicia cambió el rumbo en el complemento.

Hernán O’Donnell

Tristán Suárez creció en el complemento, ganó e ilusiona a la ciudad

Tristán Suárez resolvió el partido en el segundo tiempo. Porque encontró los espacios, halló su juego, pudo apropiarse del balón y edificó un triunfo ante Gimnasia Y Esgrima de Jujuy muy complicado, muy difícil y muy valioso. Fue un encuentro complejo, porque la final del primer tiempo el balance nos dejó una mejor imagen del visitante, pero el equipo que conduce Aníbal Biggeri supo acomodarse al partido y al final lo ganó con justicia.

Arrancó mejor el equipo de “Cacho” Sialle. Tuvo más orden en el inicio y lució más ambicioso. A los 4′ llegó a partir de una combinación de Gonzalo Lencina y Mauricio Sperduti, este sacó un buen remate y Ezequiel Bacher, el arquero local, desvió la pelota con una mano. Gimnasia era más franco. Con la firmeza de la línea de cuatro, se ubicó Emmanuel García por delante, como clásico volante central. Luego, otra línea de cuatro, más ofensiva, con Sperduti, Lucas Pérez Godoy, Jorge Juárez y Leandro González, y más arriba, de centro atacante, Gonzalo Lencina.

El “Tambero” tuvo su esquema habitual; línea de cuatro, con la fortaleza del capitán Tomassini y Bruno Duarte, las subidas de Francisco Martínez, Marcos Brítez Ojeda y Saúl Nelle para la contención, por las bandas el hábil Enzo Arreguín y el veloz “Pony” Oyola, Brian Miranda como organizador y Lucas “Chelo” Delgado como delantero centro. Recién llegó el local a los 15′ con un tiro de lejos de Miranda que se fue abierto.

Luego, el juego se hizo un poco más equilibrado, con un dominio leve del “Lobo” jujeño. Hasta que apareció Braian Oyola por izquierda y comenzó a dar aviso de la tarde feliz que iba a tener. A los 36′ el “Pony” sacó un centro para Arreguín que se cerró y se fue al arco, pero el portero visitante, Fernando Otarola desvió la pelota con un manotazo eficaz. Volvió a probar Oyola, esta vez a los 38′ y con un tiro de larga distancia, que pasó muy cerca del palo derecho de Otarola.

Pero decíamos que Gimnasia había dejado una mejor imagen en el primer tiempo y lo confirmó en el cierre. Primero con un disparo de volea de Sperduti, a los 43′, que se fue arriba del travesaño de Bacher, y luego a los 45+1′ Antunes sacó un centro de la derecha, cabeceó Lencia y la pelota pasó al lado del palo derecho de Bacher, que en la salida pareció golpear al delantero visitante.

En el segundo tiempo, Gimnasia salió a apretar más arriba. Biggeri tomó nota y le pidió al equipo salir del fondo, contrarrestar esa táctica con recuperación rápida y ataque inmediato. A los 56′ probó Lucas Delgado, desde lejos, y el balón salió desviado. A los 60′ Oyola recibió una buena asistencia de Miranda y sacó un remate cruzado que se fue muy cerca. Dos llegadas claras del local, que enseguida abrió el marcador.

Iban 64′ de juego cuando llegó un tiro libre de Miranda desde la izquierda y Mariano Bettini recibió un golpe, que el árbitro Gastón Suárez no dudó en sancionar con la pena máxima. El “Pony” Oyola se hizo cargo y ejecutó el penal para poner el 1-0 para Suárez, a los 66′ de juego.

Se fue expulsado el entrenador visitante, Arnaldo Sialle, pero antes dispuso un cambio: Facundo Suárez, ex delantero de Almagro, ingresó por Pérez Godoy. Pero el encuentro, a partir de allí, ya había tomado un destino favorable al local.

A los 75′ Enzo Arreguín se abrió por derecha y sacó un remate bajo, que salió al lado del palo izquierdo de Otarola. Y a los 76′, Aníbal Biggeri empezó a acomodar al equipo. Entró Franco “Willy” Quiroga por el amonestado Saúl Nelle, y Fabián Garay reemplazó a Lucas Delgado. En el “Lobo”, Iván Ortigoza ingresó por Mauricio Sperduti y Lautaro Belleggia ocupó el lugar de Jorge Juárez, a los 77′ de juego.

El juego era de Tristán Suárez; a los 79′ hubo un ejemplo de esto cuando tocaron con precisión Bettini y Quiroga, luego Bettini corto para Brítez Ojeda, este en diagonal para Quiroga, Willy para Miranda, la devolución y el centro de Quiroga que cortó Otarola. Dominaba y mandaba Suárez.

Gimnasia no se dio por vencido, y a los 81′ tuvo una oportunidad cuando Belleggia dispuso de un tiro libre y su remate se fue apenas alto. Mientras, seguían los cambios. A los 83′ Matías Muñoz entró por Brian Miranda. Un volante de marca y de recuperación en lugar de un creativo. El equipo jujeño fue por las últimas ilusiones; a los 84′ Santiago Rosa reemplazó a García y el colombiano Anthony Otero ingresó por Leandro González. Pero no iba a resultar, porque llegaría el golpe de gracia del local.

A los 87′ Enzo Arreguín se fue por derecha, pasó con un túnel la marca de Cosaro y sacó un centro preciso para Oyola, quien puso el 2-0 para Suárez con un remate potente. Locura y alegría para el “Lechero”.

Para cerrar la tarde, a los 88′ salieron los dos extremos, las dos figuras de Suárez: Enzo Arreguín y Braian Oyola. Y los reemplazaron Ezequiel Merillo y José Barreto.

El “Lobo” jujeño tuvo una última chance a los 90+5′ con un disparo de Otero de tiro libre, que salió apenas arriba del travesaño. Fue la última. Tristán Suárez ya se había adueñado del partido, luego de un primer tiempo complejo, pero en el que supo entender el partido, acomodarse, y ganarlo, para darle una ilusión a la ciudad.

Hernán O’Donnell

Talleres fue oportuno y se subió a la alto de la tabla

El fútbol es tan imprevisible, tan difícil de anticipar, tan extraño y tan fantástico, que cada partido encierra una historia nueva, y aquello que presuponemos o que prevemos, queda en el olvido cuando comienza a rodar la pelota. O se pierde en el mar de los pronósticos y le da paso a la pura realidad. Argentinos Juniors y Talleres de Córdoba era, a priori, uno de los mejores partidos de la fecha. Uno de los más esperados y de los más atractivos. Con dos conjuntos que juegan bien, tienen personalidad, y contaban con el estímulo de subirse a la cima de la tabla de posiciones. Sin embargo, el partido que protagonizaron no fue el esperado. Sobre todo el primer tiempo, que no estuvo bien jugado, careció de emociones y tuvo una llamativa ausencia de situaciones frente a los arcos. Se disputó mucho en la mitad de la cancha, sí. Pero fue enredado, trabado y con pocos ataques.

Talleres intentó jugar en el campo rival. Por eso puso a la línea de defensores muy cerca de la mitad de la cancha, con Tenaglia como sostén principal. Villagra y Francis Mac Allister para patrullar el medio campo y adelante intentaba con Auzqui, Santos, Héctor Fértoli más la movilidad de Mateo retegui, en posición de centro delantero.

Tuvo su primera oportunidad a los 8′ con un cabezazo de Tenaglia que se fue arriba, tras recibir de un tiro de esquina de la derecha. Y no hubo más aproximaciones a los arcos.

Argentinos presentó su clásico esquema de línea de tres, dos laterales volantes, Cabrera y Villalba, en el medio Florentín, Franco Moyano y Carabajal, y en el ataque, Gabriel Hauche y Nicolás Reniero. Intentó jugar a la espalda de Rafel Pérez y Enzo Díaz, pero le costó prosperar. Y en el juego del reparto, Talleres asomó mejor parado en ese primer tiempo. Así logró la apertura del marcador, cuando iban 29′ y tras una jugada por derecha, Fértoli sacó un centro cruzado a la izquierda y a espaldas de toda la defensa local apareció Enzo Díaz para señalar, de cabeza, el 0-1.

El “Bicho” de La Paternal recién tuvo su primera llegada al arco adversario a los 43′ cuando Villalba recibió por la banda izquierda, en zona de ataque, cedió adentro para Carabajal y este sacó un remate que se fue arriba del travesaño.

El partido mejoró en el complemento. Un poco porque Argentinos Juniors le agregó mayor velocidad a su juego, otro poco porque Talleres se acomodó para explotar de contragolpe. Creció en volumen de juego, en intensidad y en emociones.

A los 46′ llegó el local; tiro libre de Carabajal, cabezazo de Reniero y el arquero visitante, Herrera, controló abajo. A los 50′ lanzó un centro desde la izquierda Villalba y reniero la peinó de cabeza, pero su intento fue desviado. Y enseguida llegó el segundo gol visitante.

Franco Moyano perdió un balón en mitad de cancha ante Michael Santos, este cedió a Mateo Retegui, el ex hombre de Estudiantes avanzó en diagonal hacia el centro, cedió a la derecha para Santos, y el uruguayo remató bajo, para derrotar a Chaves y poner el encuentro 0-2 a favor de Talleres de Córdoba a los 54′ de juego.

Gabriel Milito intentó volcar el juego hacia el campo visitante y puso a Ovando en lugar de Quintana, a los 55′; un hombre de ataque por un defensor. Villalba pasaría al lugar de Quintana.

El “Cacique” Medina, en tanto, acomodó a su equipo para explotar el contragolpe mientras sostenía la batalla del medio campo; por eso a los 68′ decidió que Méndez ingresara por el amonestado Mac Allister y Martino lo hiciera por Héctor Fértoli.

El juego tomó un libreto previsible: Argentinos al ataque y Talleres de contra golpe. Milito optó por dos variantes más, a los 71′ de juego: Coronel por Hauche y Jonathan Gómez en lugar de Franco Moyano. Asumía riesgos, sacaba jugadores de marca y recuperación y sumaba futbolistas de características ofensivas. En la visita, Enzo Díaz debió dejarle su lugar a García, a los 77′, por una lesión que le impidió continuar el partido. Siguieron los cambios, y a los 79′ Elías Gómez reemplazó a Carabajal.

A los 82′ llegó el descuento de Argentinos Juniors y el partido alcanzó el climax de emoción. Desbordó por izquierda Elías Gómez, lanzó un centro pasado, Nicolás Reniero la metió de cabeza al corazón del área y Coronel la tocó atrás para la llegada de Jonathan Gómez, quien sacó un tremendo remate que se metió junto al palo izquierdo de Herrera y puso el 1-2 de la ilusión.

El Director Técnico de Talleres actuó rápido y realizó las dos últimas modificaciones de su equipo; Juan Cruz Komar entró por el lesionado Malatini y José Romero ingresó en lugar del uruguayo Santos.

Y Talleres pudo aumentar el marcador, porque a los 88′ Chaves se apuró en una salida desde el arco le cedió el balón a Florentín quien recibió incómodo, le robó la pelota Juan Méndez y sacó un tiro de emboquillada que pasó arriba del travesaño y pudo definir el partido.

Argentinos tuvo una ilusión a los 90+4′ pero el intento se fue muy arriba del arco visitante. No hubo tiempo para más. No fue el partido que esperábamos, pero en el complemento los dos se prodigaron por la victoria. Talleres fue más oportuno, tuvo más convicción y se llevó los tres puntos de La Paternal, para subirse a lo más alto de la tabla.

Hernán O’Donnell