Fue un tropezón, que no sea caída

La derrota de Los Pumas ante los All Blacks por 17-35 en Vélez Sársfield, fue un golpe a la ilusión, quizás demasiado elevada, de creer que esa tarde noche el golpe tan esperado se iba a dar. Que el triunfo tan soñado podía tomar forma. Pero no, no hubo chances. Nueva Zelanda jugó un partido brillante, con una vocación ofensiva determinante, con sus conocidos atributos, y una vehemencia en lo físico que por momentos rozó la incorrección, pero cuyo principal sosten fueron las habilidades y  destrezas de sus jugadores, puestas al servicio de la estrategia del equipo.

El partido arrancó con la postura del visitante en formación ofensiva. Atacó siempre, obtuvo pelotas de formaciones fijas adversarias (scrum y line fueron dos argumentos demoledores) y combinó con velocidad y apoyo en cada ataque. Así llegaron los primeros tries, que marcaron el rumbo del partido. Si bien Los Pumas abrieron el maracdor con un penal de Nicolás Sánchez a los 5 minutos, enseguida llegaron las visitas de All Blacks al in goal local. Entonces, el wing Rieko Ioane apoyó dos veces, y la tercera conquista fue de Naholo. Todos convertidos por Barret, lo que le dió una ventaja de 3-21 a Nueva Zelanda.

Los Pumas crecieron en el segundo tiempo. Con mucha decisión fueron en busca del campo visitante; llegó un try de Tuipulotu covertido por Barret, que estiró la cifra a 3-28, pero Tomás Cubelli ingresó con mucha detreminación y logró un try convertido por Sánchez que achicó a 10-28. El Try de Bofelli que convirtió el tucumano Sánchez puso un marcador más aceptable: 17-28. Decoroso y aceptable, más allá de que el equipo no funcionaba en algunos aspectos, y All Blacks era una amenaza constante.

Cuando entró Mo’unga se encendió una corriente en el estadio propia del medio apertura de Crusaders, figura del último campeón del Super Rugby. Le dio al equipo aceleración en los 20 minutos finales, movilidad y una sensación de que podía hacer daño. A los 72′ el try de Lienert-Brown, y el gol de Mo’unga estiró el marcador al 17-35 final.

Con el punto bonus, Nueva Zelanda se aseguró el primer puesto y celebró una nueva conquista de The Rugby Championship. Es el mejor equipo de la región, es el mejor equipo del mundo.

Pasó por Buenos Aires y mostró todas sus credenciales. Un rugby potente, dinámico y arrollador. Cuando tiene que apelar a algún recurso en el límite o fuera de él, lo hace. porque para ellos la competitividad está primero. Y sueltan un montón de factores que los hacen, por ahora, inalcanzables.

Los Pumas buscaron su partido. No encontraron los caminos, pero el clásico orgullo de nuestro seleccionado lo llevó a apretar el marcador en un momento del segundo tiempo. Después, se volvió a ampliar. Quedan las ganas, la voluntad y la inteligencia de convertir esta derrota en una nueva enseñanza y que este tropezón no se convierta en una caída al crecimiento del equipo.

 

Hernán O’Donnell 

Boxeadores y políticos

Cuando retratamos la vida de Alexis Argüello, nos centramos en su gloriosa historia deportiva y su trágico final. En el medio, algunas razones que desembocaron en la tragedia y, de modo tangencial, su vínculo con la política. Es que no es un detalle menor que ocupara el cargo que ostentaba. Más allá de todo lo que se teje sobre su muerte, Alexis Argüello había alcanzado la alcaldía de Managua, Ciudad capital de Nicaragua, un cargo relevante, importante y que abre paso a la reflexión de este número de Ring Side: Los boxeadores y su vínculo con la política. En tiempos electorales, es bueno repasar cuantos hombres pasaron del ring a los escritorios de los diputados, gobernadores, alcaldes, y otros cargos.

“Me gustaría disputar un último combate el año próximo, antes de retirarme del boxeo, para luego dedicarme a la política. Si soy electo senador estaré concentrado sólo en el trabajo y en la familia”. Así de claro y directo se manifestó Manny Pacquiao, el ídolo filipino quien siempre mostró sus inquietudes políticas. En 2007 se postuló para representar al primer distrito de Cotabato del Sur; fue derrotado por Marlene Antonino Custodio. En 2010 se recuperó y logró un lugar como congresista. Fue electo diputado por la provincia de Sarangani.  Entre ese año y 2013, asistió a 98 sesiones sobre un total de 168; presentó varios proyectos de ley que no superaron las comisiones legislativas pertinentes, pero tuvo una participación activa. No tanto a partir de 2013, donde su actividad política disminuyó.

Pero siempre se mantuvo cerca, como una vocación muy fuerte para él. Ahora anunció que se postulará para senador, en las elecciones que se celebrarán el 9 de mayo de 2016. Es un hombre adorado por su gente, un ídolo popular que por esa condición siempre tiene posibilidades de ser electo y hasta hay quienes predicen que ser senador será un primer paso para luego llegar a la presidencia de la República de Filipinas.

Vitali Klitschko se involucró en la política de su país, Ucrania, en 2005. Pudo desarrollar ambas actividades; mientras fue miembro parlamentario alcanzó el título Mundial de Peso Pesado del Consejo Mundial de Boxeo y de la Organización Mundial de Boxeo. Pero lo asombroso del ucraniano es su integración al mundo siempre difícil de la política y el desarrollo que le dio al partido que creó y a su propia carrera. Mientras se debatía en los rings, fundó la Alianza Democrática Ucraniana para la Reforma (UDAR), y en 2014 logró vencer en las elecciones de Kiev y fue electo Alcalde de la ciudad. Su participación política es cada vez mayor, en un contexto donde las tensiones entre Ucrania y Rusia se mantienen, lo cual lo obliga a estar dedicado en la mayor parte del tiempo a esta actividad. Sin embargo, aún se hace un espacio para acompañar la carrera deportiva de su hermano Wladimir.

El mexicano Juan Manuel Márquez, Campeón Mundial de peso Pluma, Superpluma, Ligero y Superligero, es, y siempre será, muy recordado por el tremendo K.O. que le propinó a Manny Pacquiao el 8 de diciembre de 2012. Era el cuarto combate de la saga, y en el sexto round explotó con un terrible derechazo.

Algunos creen que tras los cuatro combates con Pacquiao sucedió el efecto contagio: Márquez manifestó su agrado por la política. En el tercer enfrentamiento lució el logo del PRI en su pantalón. Y manifestó su apoyo a Peña Nieto.

El propio entrenador, Ignacio “Nacho” Beristáin entiende que la política es su vida: “A Juan Manuel la política lo distrae; le quita tiempo. A mi, la política, cero. No me interesa para nada.” Y cree que ya es hora que se dedique a esta nueva actividad.

En la Argentina hubo varios casos de boxeadores (y boxeadoras!) que eligieron el camino de la política. Marcela Acuña es la pionera del boxeo femenino en nuestro país; la número uno; la que llenó, solita, el Luna Park; la Campeona Mundial de peso pluma y supergallo…En 2009 decidió incursionar en la política y fue electa concejal de Tres de Febrero por el Frente para la Victoria. Fue reelecta en 2013. Como un signo de estos tiempos (de la política, claro)  varió en los espacios de pertenencia: En junio de 2014 se unió al Frente Renovador de Sergio Massa y en octubre  de este año regresó a su partido de origen.

También Martín Coggi fue candidato a concejal de Brandsen por el partido vecinal. “Siempre fui peronista”, admitió el hijo de “Látigo”, quien sabe que el deporte a determinada edad se termina y debe prepararse para el futuro.

También hubo muchos pugilistas argentinos que supieron estar cerca de la política y sus actores. Desde el saludo de Gatica y Perón, hasta estos tiempos en que Víctor Ramírez suele tener el apoyo de Scioli.

Pero nada puede superar a Justin Pierre James Trudeau. El Primer ministro canadiense es un caso muy particular. Hijo de un ex Primer ministro, llegó a los 43 años al cargo, en representación del Partido Liberal.

Su vida agitada, emparentada con las excentricidades de sus padres, Pierre y Margaret, le valió una alta reputación. Pero esa fama está atada también a su pasión por el boxeo, deporte que practica dos ves por semana y hasta ha hecho combates a beneficio de entidades.

Y si de políticos amantes del boxeo se trata, habría que incluir a Juan Domingo Perón, Nelson Mandela, Tabaré Vazquez…Y una larga lista que une, de manera indisoluble al boxeo con la política. Porque las pasiones del hombre no tienen límites ni se circunscriben a una sola actividad.

 

Hernán O’Donnell

(Publicada en Revista Ring Side)

El nuevo Seleccionado empieza a caminar

El empate contra Colombia deja muchas cosas para analizar. Es cierto que el equipo recién se empieza a conocer, que muchos futbolistas son nuevos en la selección nacional, que otros tantos tienen pocos partidos y del largo ciclo y plantel anterior sólo estaba presente el arquero Sergio Romero. Pero el encuentro fue interesante, no tuvo por razones obvias la emoción ni la ansiedad que genera un partido por los puntos en un campeonato, pero tuvo un marco agradable, propuestas similares por parte de ambos y se armó un espectáculo entretenido.

La Argentina arrancó bien, con criterio y con ganas de ir al ataque. Se movieron bien los volantes, Lo Celso para armar las salidas, Palacios para mostrarse siempre y acompañar y más adelante estuvieron muy activos Gonzalo Martínez y Mauro Icardi. Con el respaldo de Rodrigo Battaglia, de muy buena labor general y el adelantamiento de la línea de cuatro, la selección pudo dominar a Colombia y generar algunas acciones de riesgo. Un remate de media distancia de Palacios y una aparición clara de Icardi fueron las posibilidades más claras de la selección.

Después cedió terreno y perdió el control del balón. A partir de la media hora de juego empezó a crecer la Selección Colombia. Bien parada en la cancha, creció a partir del manejo de Wilmar Barrios, la conducción de Juan Fernando Quintero y la movilidad permanente de Cuadrado, conductor y ejecutor de cada ataque. Se sumaba entonces Radamel Falcao y Colombia cerró la etapa con una mejor impresión.

En el complemento, el equipo de Scaloni retomó el control. Ya el partido era más equilibrado, pero algunas variantes le dieron más profundidad al equipo. El ingreso de Franco Cervi fue importante: siempre se mostró activo y como alternativa de ataque; luego, a los 53′ ingresó Paulo Dybala, que de manera rápida se transformó en conductor del equipo. Tuvo momentos de lucimiento personal y fue muy activo en el juego. Colombia mantuvo su estrategia, trató de manejar el ritmo e imponer su juego. Un buen pase de Quintero dejó a Carlos Bacca sólo ante Armani y la buena respuesta del arquero privó a Colombia de abrir el marcador.

En los minutos finales, salieron Cuadrado, Quintero y Falcao, pero no se resintió su funcionamiento. Benedetti y Bacca tuvieron una buena participación.

Argentina mostró cosas interesantes. El juego asociado, la búsqueda del compañero, el compromiso de todos, la idea de jugar en bloque sin excesos individuales, la presencia de Battaglia, la firmeza de los centrales Pezzella y Funes Mori, la voluntad de Bustos, las ganas de Simeone en los pocos minutos que jugó, la velocidad de Pavón, la habilidad de Martínez, la conducción de Dybala…Todo junto, formó un equipo. El aporte de cada uno, fue la suma que este equipo necesita. Está muy claro, por lo menos es nuestro pensamiento, que varias de las figuras ausentes (Messi, desde ya, Agüero, Higuaín, Di María, Otamendi) todavía tienen mucho para darle a la selección. Pero este nuevo plantel mostró algunos pasos, y tanto en Los Ángeles como en New Jersey demostró que empieza a caminar.

 

Hernán O’Donnell

 

El Seleccionado presentó sus nuevas caras

Fue un partido agradable, un rendimiento positivo y una victoria lógica y previsible. La Argentina de Scaloni (¿Por cuanto tiempo estará?) hizo su debut en Los Angeles, California, Estados Unidos de América ante Guatemala. El rival no parecía de mayor riesgo, casi sin antecedentes en los últimos meses, con poco rodaje y una historia que no se acerca a la de mayor gloria no sólo en el Mundo sino en Centroamérica. En su región, Guatemala está por debajo de Costa Rica, Honduras, El Salvador e incluso Panamá. Por eso era más un partido para ver las fuerzas propias que la oposición que pudiera brindar el adversario.

El equipo argentino tuvo unos buenos 45 minutos iniciales. Costó abrir el marcador, pero se vieron acciones y propuestas que llevaban a pensar que indefectiblemente el gol caería. Rápido por los costados, Pavón y Martínez supieron abrir el espacio, con dinámica en la mitad a partir de los desplazamientos de Lo Celso y firme en la zaga de Pezzella y Funes Mori.

Llegó el penal a los 30′, con el tiro cruzado del “Pity” Martínez se abrió el marcador y a partir de ahí se encontraron los espacios en la ofensiva.

Lo Celso convirtió un golazo: le cayó un despegue del centro del área, tras un corner ejecutado desde la derecha y metió un bombazo que se coló por debajo del arquero guatemalteco. Un remate seco y potente decretaba el 2 a 0.

Y sobre el final del primer tiempo, Giovanni Simeone apareció por izquierda, gambeteó al arquero, se abrió un poco más y remató a la red desde un ángulo cerrado.

El primer tiempo se cerraba con un 3 a 0 contundente. Parecía que la cifra se podía ampliar en el complemento. Pero, de modo  misterioso, esto no ocurrió.

En el segundo tiempo, Argentina (también Guatemala) metió muchos cambioos. como suele suceder en estos partidos, las variantes desdibujan al equipo. Es bueno para ver la mayor cantidad de futbolistas, pero el funcionamiento colectivo comienza a mermar. Cada modificación conlleva un tiempo de adaptación, tanto del que ingresa como del resto de los compañeros al jugador que se suma. Y, suele pasar, el equipo baja el volumen, aunque si es muy valioso para que se empiecen a sumar más jugadores, sumen minutos, sientan la camiseta y aprovechen algunas posibilidades individuales. Lo bueno de Argentina, es que estos muchachos privilegiaron el juego colectivo que el lucimiento personal; se buscó más tocar y asociarse que  la maniobra individual.

Por eso valen los ingresos de Santiago Ascacíbar, el “Monito” Vargas, Walter Kanemann, el “Mudo” Vazquez, Franco Cervi…todos pudieron hacer su aporte y mostrarse con una camiseta que requiere talento, pero sobre todo, personalidad.

No pudo aumentar la Argentina en el complemento, pero mostró una buena imagen colectiva. Ganó con claridad, dio el primer paso, comenzó el nuevo camino. No es poco, en estos tiempos tan convulsionados para el equipo nacional.

 

Hernán O’Donnell

Los Ángeles del Seleccionado

La Argentina empezó el nuevo rumbo. Ya está en Los Ángeles, la hermosa ciudad que vibra en el corazón de California, en los Estados Unidos de América. Famosa por sus estudios cinematográficos, su vida cultural y los barrios elegantes donde viven los ricos y famosos.

Hasta allí llegó el seleccionado de Lionel Scaloni. El seleccionado nacional. Más allá de los nombres y los hombres que la integran, muchos de ellos jóvenes y muchos de ellos sin experiencia en el equipo argentino. Pero con la ilusión intacta y las ganas de demostrar que pueden ser futbolistas que nos representen en el elenco nacional.

En horas se enfrentará a Guatemala; la idea del técnico es jugar con un 4-3-3, pero más allá del dibujo inicial, lo que le interesa es la movilidad y la dinámica del conjunto: un equipo que pase muy rápido de defensa a ataque, vertical, con transiciones veloces, y con llegada directa a posiciones de ataque.

Ha ensayado con varios equipos, pero hay algo que se sostiene, y es el estilo de juego. Para Scaloni, el funcionamiento es prioridad.

Hay otros temas que ocupan la agenda del equipo. Los jóvenes que llegaron, como el caso de Exequiel Palacios, de sólo 19 años, pero con un futuro más que promisorio, es el mejor ejemplo. Hasta ahora, estuvo siempre en el equipo titular en cada uno de los  ensayos y todo indica que será titular el viernes.

O el caso de Walter Kanemann, de grandes actuaciones en Gremio durante la Copa Libertadores de América 2017 que ganó con su equipo, segundo título de este torneo en su haber ya que había sido campeón con San Lorenzo en 2014.

“La verdad es que me tomó un poco de sorpresa porque me enteré por internet, cuando regresaba con mis compañeros del entrenamiento de Gremio”, señaló el defensor. “Fue emocionante; me encuentra en una etapa muy buena, en un club que me abrió las puertas y me dio mucho para que yo viva esta situación”.

Y agregó: “Es cumplir un sueño; cualquier chico sueña con la selección. Ahora tenemos que intentar captar la idea del técnico, abocarnos a lo nuestro, encontrar un buen funcionamiento, ser un equipo sólido en lo mental y hacer un buen partido”, dijo Kanemann.

Así está la selección. Como lo cuenta Kanemann. Con unas ganas bárbaras, con un montón de caras nuevas, con un aire fresco y muchas ganas de empezar a sumarse. Porque está claro que muchos futbolistas volverán al equipo. Con Lionel Messi en primer lugar, varios de los jugadores de experiencia, valía y jerarquía estarán en el equipo dentro de un tiempito. Cuando se juegué la Copa América Brasil 2019, por ejemplo.

Mientras es el tiempo de disfrutar, ver y valorar a estos ángeles del seleccionado, que en la ciudad de las estrellas de cine y los barrios de ensueño, quieren ponerse la camiseta albiceleste, honrar su historia y no dejarla por mucho tiempo.

 

Hernán O’Donnell

Nace una estrella: Gervonta Davis

Venía cargado de buenos antecedentes y auspiciosas perspectivas, pero el público argentino amante del boxeo lo “descubrió” la otra noche, la del pasado sábado 21 de abril cuando, en un Barclays Center desbordante de gente y expectativa, en el corazón de Brooklyn, New York. Un estadio relativamente nuevo, pero que ya está instalado en el mundo del boxeo, en una ciudad que respira este deporte en todos sus rincones.

Gervonta Davis liquidó a un bravo y valiente Jesús Cuellar, quien se le plantó de entrada e intentó una pelea de corta distancia, quizás lo que más le gusta a Davis, para poder boxear, mostrar su repertorio y pegar con justeza. Un golpe al hígado derribó al argentino en el segundo round, y en el tercero una andanada de golpes de Davis acabaron con un Cuellar que no pudo resistir: cayó dos veces, en la segunda el árbitro decretó el KOT.

Lo había superado con amplitud y los argentinos asistimos a la confirmación de una nueva estrella en ascenso del boxeo mundial. Un hombre que boxeó y golpeó para arrasar a un gran batallador como es Jesús Cuellar. Lo vimos ese sábado por la noche, pero… ¿Quién es Gervonta Davis?

Nació en Baltimore, Maryland, el 7 de noviembre de 1994. Apenas había pasado los 5 años cuando se metió en el gimnasio “Uptown Boxing Gym”, mientras comenzaba sus estudios en el Harbor Digital School. Había quedado involucrado en una reyerta callejera y, a pesar de su muy corta edad, sus tíos consideraron que lo mejor era que ingresara al gimnasio a practicar deporte. Sus padres estaban muy lejos, ausentes, con problemas de adicciones que lo alejaban de Gervonta y sus hermanos. Esa ausencia paterna derivó en un pequeño Gervonta lejos del calor de un hogar, muy cerca de los problemas de la calle y con un desfile incesante por distintos hogares de crianza que lo cobijaron.

Las calles de Baltimore eran un peligro constante que aún hoy recuerda con mucho dolor: “Las personas que conocí en esos años están muertas o en la cárcel”, aseveró en un reportaje. “En realidad, Balitmore es peor de lo que han visto en la serie The Wire”, confesó alguna vez.

Recibió, enseguida, el apodo de “Tank”, que para algunos es “Tanque” y para otros tiene que ver con el tamaño de su cabeza. Pronto, algunos vieron en él un pugilista del estilo de Mike Tyson, pero de un tamaño más pequeño en lo físico, y zurdo.

En 2012 ganó el Torneo Nacional Amateur Golden Gloves, y al año siguiente hizo su debut profesional. Su carrera amateur fue extensa y exitosa, donde obtuvo 206 victorias y 15 derrotas. Pero había llegado el tiempo de hacerse profesional.

Fue el 22 de febrero de 2013 y venció a Desi Williams por KO1, en una presentación que sería un anticipo de una carrera jalonada por victorias categóricas y rápidas. Los nocauts se sumarían en cadena, en un desfile a lo largo y a lo ancho del país: El “Tanque” se presentaría en Baltimore, Washington, Pittsburgh, Atlantic City, Orlando, Paradise (Nevada), Hollywood (Florida)…Un camino variado y siempre con el knock out como compañero de ruta.

El 14 de enero de 2017 ganaría su primera corona mundial. En el Barclays Center iba a vencer al portorriqueño José Pedraza por KOT7 para sacarle el Título Super Pluma de la Federación Internacional de Boxeo (FIB). Una durísima derecha en el rostro de Pedraza acabó el pelito, un golpe furibundo que entró limpio en la mandíbula del boricua y lo envío a la lona. Una estrella se consagraba bajo los cielos de New York. Con el padrinazgo del célebre Floyd Mayweather, aparecía un nuevo niño mimado, un héroe de mirada limpia y puños de acero. Claro que el estilo de Davis se distancia del que lucía el gran Floyd. Este era un artista del ring, de piernas muy veloces y movimientos laterales que desarmaban a cada adversario. Davis prefiere un boxeo más directo y agresivo, que liquide a los rivales.

Luego fue el momento de mostrarse al mundo; la primera defensa, ante Liam Walsh en Londres, de visitante y poniendo en riesgo la flamante corona: KOT3 fue el resultado de otra victoria contundente.

Después llegaría el tiempo del costarricense Francisco Fonseca, a quien batió por KO8 en el fabuloso estadio T Mobile Arena en Paradise, Nevada, como choque de semi-fpndo en la muy promocionada y difundida velada de “Money” Mayweather y Connor Mc Gregor.

En esa magnificada noche, Davis llegó con la frustración de no haber podido dar el peso (llegó con 132 libras cuando el límite era 130) y dejó el título antes de combatir. “Pido disculpas a mis fanáticos y seguidores”, escribió Davis en Twitter. “Pero voy a  reparar esto”.

De todas formas se iba a imponer en una pelea que  iba a resultar más atractiva que el propio combate de fondo; la contienda Davis-Fonseca, al cabo, iba a estar en el centro de las polémicas por su definición. Davis había sido superior a lo largo de las 7 vueltas, pero un golpe que rodeó la nuca de Fonseca, que muchos vieron fuera de los límites legales, acabaron con el pleito. Davis había hecho una buena pelea, e incluso en el cuarto asalto se puso en varias oportunidades las manos detrás de la espalda, dejando su cuerpo y rostro totalmente descubiertos, en una demostración de seguridad y confianza, que Fonseca tomó como una abierta provocación y le alteró su tranquilidad. Y el trabajo de Davis terminó por acabar con su resistencia.

De esa pelea se han dicho muchas cosas. Tanto de la preparación de Davis como la resolución que tuvo el enfrentamiento. Lo cierto es que entre todo lo que ha trascendido, se dijo que el “Tanque” no llegó a dar el peso por un problema que surgió en la preparación; cuando faltaba un mes para la pelea, en el Uptown Gym Davis se enredó en una pelea con su hermano y cuando los guardaespaldas los fueron a separar, Davis golpeó a Anthony Wheeler, un amigo de su infancia, quien cayó noqueado. The Baltimore Sun relató ese incidente, que concluyó con su amigo en el hospital, con un cuadro de conmoción cerebral, una orden de detención que fue resuelta con una fianza de U$ 100.000 y un dolor de cabeza que influyó en forma profunda en su ritmo de entrenamientos.

Así llegó a su última función. La más vista por el público argentino, la que le dio la puerta de entrada a usted, querido lector de Ring Side, que tal vez haya puesto los ojos en él, pero que si no lo había hecho, en esta última presentación en el Barclays center de Brooklyn, New York, pudo ver a un boxeador ascendente y de gran futuro en toda su dimensión.

La velocidad, el juego de piernas, la justeza de sus golpes, el ataque incesante fueron todas las variantes que mostró en una noche lúcida. Jesus Cuellar fue bravo y valiente para buscar el combate, pero el repertorio ofensivo de Davis lo hicieron muy superior.

Hoy la vida le ríe y canta. Ha ganado el Super Título superpluma de la Asociación Mundial de Boxeo; está clasificado como el cuarto mejor boxeador activo, libra por libra, empiezan a aparecer grandes ofertas, sueña con ser una de las estrellas del ‘pay per view’, piensa en futuros rivales, y hasta dejó trascender que podría sumarse a las huestes de la UFC (Ultimate Fighting Championship)…

Mientras su manejador, Floyd Mayweather analiza si Jessie Vargas o Vasyl Lomachenko serán las próximas estaciones, el público del boxeo celebra la aparición de una nueva estrella en su firmamento. Una figura creciente, que deslumbra y atrae con un estilo de boxeo agresivo, potente, veloz. Un boxeador que promete grandes veladas y un futuro auspicioso.

“Sólo quiero mejorarme a mí mismo”, escribió hace muy poco en su cuenta de twitter. Así está Gervonta. Disfruta de los días felices, después de haber dejado atrás un pasado de dolor.

 

Hernán O’Donnell

(Publicada en Revista Ring Side)

Scaloni y la ilusión que despierta dirigir al Seleccionado Nacional

“Nosotros venimos a aportar lo nuestro, tenemos mucha ilusión, y digo tenemos porque incluyo a Pablo (Aimar) y a Martín (Tocalli, entrenador de arqueros) con quien pensamos muy parecido. Hay que ponerle el pecho a esta situación, lo tomamos como un desafío, y en estos partidos que nos toquen poder aportar la máxima cantidad de jugadores, para que el entrenador que venga tenga la opción de elegirlos, que él decida si estos jugadores le pueden servir; hasta ahora tuvimos dudas sobre si alguno de estos jugadores podían ponerse la camiseta, así que creemos que este es el momento de verlos”. Así con un objetivo claro y definido se presentó Lionel Scaloni, nuevo DT (interino o no, aún no está definido) del seleccionado nacional.

El nuevo entrenador se presentó por primera vez ante la prensa y en una conferencia realizada en el predio de Ezeiza contestó todas las preguntas; la nuestra, la de Universo Deportivo estaba referida al estilo de juego, el perfil que le quiere dar al equipo, su gusto futbolístico, la línea de juego que quiere para el equipo y respondió: “No tengo predilección por un sistema, de hecho en el torneo de L’Alcudia hemos jugado con línea de tres, cuatro o cinco. Lo importante es ocupar todos los espacios de la cancha, no es lo mismo el ancho con 3 que con 4 o 5, pero el partido te lleva a eso. Creo que el fútbol va a ser cada vez más vertical, por eso queremos robar y llegar rápido al arco de enfrente, porque podes encontrar al rival desacomodado. Nuestra idea es hacer daño lo más rápido posible. ¿Que técnicos me marcaron? No podría nombrar a uno, tuve tantos que no puedo decir sólo algunos, de todos tomé cosas y aprendí algo. Y no sólo de los que tuve, también de los que he ido a visitar. Cada maestro con su librito y uno ve que adopta o no; yo como defensor sabía cuando estaba mal acomodado y me podían hacer daño. Me gusta el fútbol vertical y directo, eso vamos a buscar”.

“Vamos a ver jugadores y darles la posibilidad de que se pongan la camiseta celeste y blanca, que es la más importante, más que cualquier otro club”, agregó después.

“Hablé con Messi y a partir de esa charla, él no está en esta convocatoria. Veremos que pasa en el futuro, tengo una buena relación con él y fuimos muy claros. Ahora no está, pero veremos en el futuro. Todo en muy buenos términos”

“Puede haber otros jugadores en la próxima lista; si bien esta es larga, también están los chicos del sparring y hay jugadores que me gustaría ver. Estamos convencidos que necesitamos probar. Es obvio que el resultado cuenta, y todos queremos ganar. pero también es un tiempo para ver que chicos pueden ponerse la camiseta y no sacarselás más. Con la señal que nos den estos jugadores en esta gira, veremos si vamos a ver otros jugadores para la segunda convocatoria”.

Está tranquilo, sereno. Habla pausado y no modifica el tono de voz. Luce ilusionado y con muchas ganas, pero expresa una gran calma. “Queremos que en estos seis partidos quede un grupo de jugadores que demuestren que están para ponerse la camiseta. Este es el momento, no hay nada en juego. Nos planteamos ver jugadores”, resumió para mostrar el camino y una forma de empezar: con el armado del plantel.

Allí va Scaloni, su cuerpo técnico, y millones de argentinos que sueña, sufren y se alegran con la camiseta celeste y blanca de nuestro seleccionado. Con una nueva ilusión en marcha.

Hernán O’Donnell

Scaloni, y una lista con renovación y regresos

Con un poco más de tiempo para el análisis, con la mirada más fría y ya muchos comentarios hechos, la lista de Lionel Scaloni con los convocados para jugar los partidos amistosos en Estados Unidos ante Gautemala y Colombia, tiene varios jugadores nuevos, pero una mayoría de hombres que han actuado ya en la selección argentina. Incluso, hay 9 que estuvieron en la última Copa del Mundo de la FIFA-Rusia 2018. Hablamos de Franco Armani, Gabriel Mercado, Marcos Acuña, Nicolás Tagliafico, Eduardo Salvio, Maximiliano Meza, Giovanni Lo Celso, Cristian Paván y Paulo Dybala.

Después hay muchos nombres que tienen experiencia en el equipo nacional: Ni hablar de Sergio Romero, o el propio Gerónimo Rulli. En el caso de Chiquito no hace falta agregar que volvió un histórico. germán Pezzella y Funes Mori conocen lo que es ponerse la celeste y blanca.

Igual que Paredes, Angel Correa, Mauro Icardi, y el propio Lautaro Martínez, que ya estuvo en la preparación previa al mundial.

Pero hay sangre nueva en Walter Kanemann, Alan Franco, Leonel Di Plácido, Santiago Ascacíbar, Gonzalo Martínez, Exequiel Palacios (un acierto su convocatoria, un futuro enorme), Franco Cervi, Giovanni Simeone.

No está Leo Messi, pero su ausencia parece, como todos los actos de Messi en la selección, consensuada. Es decir, que todo lo habla y lo consensúa con el DT de turno.  Este caso no parece ser la excepción, por lo tanto, en el diálogo que han tenido, se presume que esta falta es temporaria y en algún momento regresará al plantel.

El martes hablará el DT y se sabrán más cosas. Por ahora, la lista tiene una ventana de aire nuevo y muchos hombres, necesarios claro está, que saben lo que es ponerse la camiseta del seleccionado nacional. Algo valorable y destacable, porque la reconstrucción se hará sobre cimientos existentes. Y la Argentina cuenta con bases para sostener y construir el nuevo camino.

 

Hernán O’Donnell 

 

Gonzalo Quesada y el desafío de los Jaguares

Tiene el tono moderado, tranquilo, sereno. No alza demasiado la voz, pero transmite mucha capacidad, conocimientos y experiencia. Se formó en Hindú Club, debutó en Primera División en 1992 y siguió allí hasta 1999. Luego se fue a vivir la experiencia del rugby profesional en Francia, donde actuó en Narbonne (1999-2002), Beziers (2002-2004), Stade Francais (2004-2005), Pau (2005-2006) y Toulon (2006-2007). Entonces decidió retornar a Hindú, y allí se retiró.

En 2008 comenzó su carrera del otro lado de la línea de cal: fue entrenador de pateadores y asistente de Marc Lievremont en el seleccionado de Francia, con el que logró el subcampeonato de la World Cup Nueva Zelanda 2011.

Estuvo en Racing Metro entre 2011 y 2013. Siguió como Head coach en Stade Francais de 2013 a 2017, y ganó el Top 14 de la temporada 2014/15 y luego logró la Challenge Cup. Su último club fue Biarritz.

Ahora, Jaguares.

“Sentí que este era el momento de regresar y hacer mi aporte al rugby argentino y a la UAR. Es un rol muy prestigioso estar a la cabeza de Jaguares”, declaró. “Hay mucho de lo afectivo y emocional en esta decisión de integrarme a Jaguares. Es una gran aventura humana que quiero vivir a fondo y tengo muchas ganas de atravesar“.

Hay que destacar lo bueno que hizo Raúl Pérez y luego Mario Ledesma en esta última temporada. Hay buenos recursos y la UAR seguirá aportando para que el equipo siga creciendo”.

Destacó el desafío de encontrar nuevas alternativas al puesto de medio apertura, posición que conoce de modo profundo; que hay alternativas, y que la salida de Nico Sánchez lo invita al desafío de encontrar las respuestas.

Está contento, tranquilo y entusiasmado. Colaborará, es posible, con el staff de Ledesma de cara al rugby Championship, pero tendrá tiempo para preparar a la franquicia que volverá al Super Rugby en enero del año que viene.

Con su andar sereno, su notable experiencia y todas las ganas del mundo, Gonzalo Quesada vuelve a ser parte del rugby argentino.

 

Hernán O’Donnell

El ciclo de Lionel Scaloni ya comenzó

No se sabe cuanto durará, ni hasta donde llegará. Aún no está claro en sus formas, ni definido su programa. El equipo máximo que nos representa está en un nuevo camino, que comenzó casi sin que nos diéramos cuenta, pero todavía no se saben muchas cosas, y para todo lo que uno aspira lo que debe ser la selección, al cabo la parte más valiosa de nuestro fútbol, la que más debe ser cuidada, atendida y protegida, bueno, para esa área se ha aplicado una solución transitoria que empezó en silencio y se verá como continuará el camino hacia el futuro.

Y sin que retumbara en los medios, sin que despertara grandes polémicas, en medio de las grandes controversias que desataron la salida de Jorge Sampaoli, su ruptura con el cuerpo técnico que lo acompañó en la Copa del Mundo de la FIFA-Rusia 2018, la llegada (o la continuidad) de Scaloni dentro de la AFA, acompañado por Pablo Aimar no tuvo grandes cuestionamientos. Se lo designó para acompañar al sub 20 en el torneo de España y, de paso, dirigir a la mayor en los compromisos internacionales contraídos para lo que resta de 2018.

Así comenzó su ciclo en el seleccionado. Y hete aquí que las cosas le fueron bien en el comienzo: En Valencia, el equipo obtuvo el COTIF L’Alcúdia 2018 ante Rusia. La final fue emotiva;  abrió el marcador Rusia, con un tanto de Igor Diveev, a los 11′ y enseguida llegó el empate de Facundo Colidio.

Así se cerraron los 80′ reglamentarios, lo que dio paso al suplementario: dos tiempos de 10′ cada uno. Ya en el segundo tiempo, a los 92′, Alan Marinelli convirtió el gol del triunfo. Argentina derrotó a Rusia por 2 a 1 y se llevó el Título.

Ahora le toca un desafío más grande. Con mayor trascendencia. Junto a Aimar y Martín Tocalli, entrenador de arqueros, tendrán a su cargo al seleccionado mayor para los partidos de este año. Los inmediatos son el viernes 7 de septiembre a las 20 hs (hora local) frente a Guatemala, en el Estadio Los Ángeles Memorial Coliseum, en Los Angeles, California, y el martes 11 de septiembre, también a las 20 hs frente a Colombia, en el Estadio Met Life Stadium, en East Rutherford, Nueva Jersey.

Así comenzó el ciclo de Lionel Scaloni. En silencio, casi sin darnos cuenta, con un título que vale para reconfortar el alma y un camino que presenta desafíos enormes, exámenes duros que demarcarán su futuro.

Hernán O’Donnell