Lewis Hamilton alcanzó un récord y va por otro, en un día lleno de emociones

El triunfo de Lewis Hamilton en el Gran Premio de Eifel 2020 significó algo más que una simple victoria para el piloto inglés. Fue una prueba más de su excelsa conducción, de su momento dominante en la categoría y de su camino inexorable hacia otro título mundial. Pero también fue alcanzar el récord de triunfos que ostentaba Michael Schumacher, con 91, y un paso más al récord que también posee el piloto alemán con 7 títulos ecuménicos.

Fue una carrera con muchas emociones desde el inicio; la partida rápida de Valteri Bottas, la agresividad de Ricciardo, la posición expectante de Lewis; en el giro número 9 Daniel Ricciardo pasó de modo impecable a Charles Leclerc y en la vuelta siguiente Sebastian Vettel entró a boxes.

Hamilton pasó a Bottas en la vuelta 13, también con una maniobra clara y limpia, y en el giro siguiente Kimi Raikkonen tocó a Russell, lo que le provocó su despiste y la rotura de su cubierta trasera izquierda.

Pero los problemas continuarían. En la vuelta 17 Daniel Kvyat pasó de largo en una curva y rompió el alerón delantero. Más tarde pararía Esteban Ocon, con lo cual las dificultades técnicas eran para todos. Valtteri Bottas abandonó y Max Verstappen se ubicó segundo, mientras que Ricciardo quedó en la tercera ubicación. Más atrás se alternaban en la lucha Sergio Pérez, Carlos Sainz, Lando Norris, Charles Leclerc.

Hasta que el Mc Laren de Lando Norris dice basta y se queda cuando restan 14 vueltas para el final; el ingreso del safety car generó una renovación y varios pilotos aprovecharon para cambiar neumáticos; así, el final tuvo una nueva expectativa. Pero nada inquietó a Hamilton, que conservó su lugar en tanto detrás peleaban Verstappen, Ricciardo, “Checo” Pérez, Sainz y Gasly que se acomodaba en la sexta posición. Más atrás, Leclerc quedaba séptimo, octavo Hulkenberg, noveno Romain Grosjean y en el décimo lugar, para sumar, Antonio Giovinazzi.

No tuvo problemas Hamilton para regalarle a Mercedes una victoria en Alemania. Para seguir firme en la punta hasta el final. Para afirmarse en el campeonato; para recibir de Mick Schumacher piloto de Fórmula 2 e hijo del célebre Michael, un casco de su padre como legado por haber alcanzado su récord de triunfos en la Fórmula 1. Una hermosa sorpresa que dejó sin palabras al inglés: “No se que decir…Recuerdo jugar a ser Michael en las carreras; crecí con una admiración por él, y ahora alcanzar su récord me llevará tiempo acostumbrarme. Gracias a mi equipo pude hacerlo”.

Un hermoso y emotivo cierre de una carrera complicada, pero que dejó una señal clara del presente y el futuro de la Fórmula 1, en manos de Lewis Hamilton.

Hernán O’Donnell

Las estrellas de Francia y Portugal se apagaron en la noche de París

A los 90+2′ Cristiano Ronaldo tuvo la oportunidad más nítida del partido, cuando recibió una habilitación de Trincao y sacó un disparo fuerte, seco, potente, con el sello de él; con esfuerzo rechazó Hugo Lloris. Era la jugada que más nos sacudió en una noche oscura, sin brillo, con las estrellas apagadas.

Uno podía suponer que un partido que reuniría al Campeón del Mundo y al Campeón de la Nations League, iba a deparar en un juego de alto vuelo y cargado de emociones. Sin embargo, todo lo que hubo para destacar se ofreció con cuentagotas. Una constelación de estrellas que no brillaron.

Francia se apoyó en las salidas permanentes de sus laterales, Benjamín Pavard y Lucas Hernández, la posición de Kanté, la velocidad de Pogba y la tremenda dinámica de Rabiot. pero le costó enganchar el juego con los delanteros, más allá de la búsqueda de Griezmann por ser el hilo conductor, el sacrificio para pivotear de Olivier Giroud y las insinuaciones de Mbappé.

Portugal también se basó en las proyecciones de sus buenos laterales; Semedo y Raphael Guerreiro se mandaron al ataque cuantas veces pudieron, pero les costaba progresar con Bruno Fernandes y Carvalho. Joao Félix se mostraba de modo constante, en tanto Cristiano tuvo más intermitencias. Y el partido no progresaba.

Los cambios tampoco produjeron distinciones. A los 60′ D. Jota reemplazó a Bernardo Silva en la visita; a los 73′ A. Martial ingresó en la posición de Olivier Giroud en el equipo de Didier Deschamps. Más tarde, Portugal volvió a modificar su estructura: iban 79′ cuando Renato Sanches entró en reemplazo de Bruno Fernandes. A los 83′ K. Coman entró por Kylian Mbappe en el local y sobre el cierre, Portugal hizo tres cambios: ya se jugaban los 87′ cuando Joao Moutinho entró por W. Carvalho, Joao Cancelo reemplazó a Raphael Guerreiro y Trincao ingresó en lugar de Joao Felix.

Nada influenció demasiado en el desarrollo. El partido tuvo un trato prolijo del balón, un espíritu ofensivo de los dos equipos, y algunas jugadas interesantes.

Pero careció de emociones fuertes, no hubo jugadas emocionantes, se falló en la última puntada, las defensas superaron a los ataques, se diluyeron los estiletazos, no abundaron las situaciones de gol y el 0 a 0 fue el sello distintivo del partido.

Ambos se cuidaban más de lo que arriesgaban. Como preocupados por lo que dejaban atrás más que por lo que podían ver adelante. Y lucieron más firmes las defensas que punzantes los ataques. Faltaron ideas, imaginación y espíritu de aventura. Muy cerrados en sus libretos, se ahogaron en penas. Y nada pudo torcer el destino de dos equipos preparados para generar mucho más.

Las estrellas que esperábamos encontrar en el Stade de France se oscurecieron en la noche de París.

Hernán O’Donnell

Alemania construyó la victoria en una hora plena de fútbol

La primera imagen es cautivante, alegre, estremecedora. Ver un estadio con público, con mucho público, decorado con personas que asistieron al Estadio Olímpico de Kiev para darle un marco que no debemos olvidar ni dejar en el pasado. El fútbol, el deporte, es con gente en las tribunas. Con hinchas. La pandemia que ha modificado tantas costumbres no debería cambiarnos para siempre. A la larga, esta imagen será la que volverá y otra vez tendremos el espectáculo completo, como debe ser. Con seres humanos que alienten y participen, no con cantos grabados, cartones pintados en las gradas y coros virtuales.

El choque deportivo entre Ucrania y Alemania nos trajo esa imagen que nos recordó quienes éramos. Quienes somos.

Y en el juego, Alemania. Un dominio pleno, demostrado desde el comienzo del encuentro. Neuer al arco, Un esquema con tres zagueros, Ginter, Süle y Rüdiger, una línea de cuatro por delante con dos laterales, Klostermann y Halstenberg, más adelantados de como lo suelen hacer en RB Leipzig, que en general juegan en la zaga, y dos medios Kimmich y Kroos que se conectaban con Goretzka y Draxler, los generadores de juego. Arriba, como punta de lanza, Serge Gnabry.

Ucrania intentó neutralizar y salir rápido de contra, pero le costó mucho, porque la visita lo ahogaba en cuanto podía hacerse del balón. Alemania era más desde el inicio, y así fue que a los 19′ abrió el marcador. Desbordó por derecha Rüdiger, llegó al fondo, puso el centro rasante al medio, Gnabry metió un taco exacto y Ginter convirtió sin mayores dificultades. El partido quedaba 0-1 de manera justa.

No cambió el desarrollo de la película. El control de las acciones era de los jugadores de blanco. El local pretendía salir con la conexión entre Ruslan Malinovskiy y Roman Yaremchuk, quienes elaboraron alguna maniobra interesante. Pero sin mayor peligro. Un tiro de Yaremchuk pasó cerca, en la posibilidad más clara. después, todas las ocasiones fueron del equipo de Low.

A los 30′ Kimmich sacó un tiro desde afuera con mucha precisión, pero el vuelo de Georgi Bushchan desvió el balón al corner. A los 34′ un centro de la derecha fue conectado de cabeza por Gnabry, pero otra vez apareció Georgi Bushchan para volar y sacar una pelota “imposible” al corner. Y a los 42′ Halstenberg abrió el pase para Toni Kroos quien remató muy cerca del arco local.

Alemania cerraba el primer tiempo con un dominio marcado sobre el conjunto dueño de casa.

En el comienzo del segundo tiempo un error de Buschchan, el primero y único de una enorme actuación del arquero local, le permitió a Alemania estirar la ventaja. Iban 48′ cuando llegó el centro de la derecha, el arquero parecía que atrapaba el balón pero se le escapó y en el aire encontró justo la cabeza de Goretzka, quien la empujó al arco y amplió el marcador a 0-2 para la visita. Era un duro golpe para un equipo que quería remontar un partido que ahora se le hacía más largo.

Alemania mantuvo el control durante quince minutos y recién ahí Ucrania pudo salir. A través de Viktor Tsygankov tuvo una chance, con un remate que Neuer atrapó con una mano y una notable reacción, cuando se jugaban los 60′. Alemania volvió a tener una chance a los 65′ con un remate arriba de Ginter, pero otra vez el arquero local acertó con su vuelo y mandó el balón al corner. Después, los cambios para darle más ideas al equipo de Schevchenko. A los 68′ Marlos, de buen partido, entró por A. Yarmolenko, en tanto que O. Zubkov reemplazó a V. Tsygankov.

Ucrania ya tenía un poco más de confianza, en tanto Alemania levantó el pie del acelerador. Así, a los 72′ Yaremchuk sacó un remate fuerte que se fue un poco alto, pero era un aviso del local; y a los 76′ llegó el penal que Malinovskiy convirtió con categoría para poner el 1-2 y abrir la emoción al cuarto de hora final del partido.

Antes de reanudar, Shaparenko entró por Kovalenko. Y en ese final, también Low movió el banco de Alemania para despertar a su equipo. A los 79′ Timo Werner entró por Draxler y enseguida, a los 81′ armó una buena jugada donde habilitó a Serge Gnabry y el remate de este, con olor a gol, fue tapado de modo brillante por Georgi Bushchan.

Shevchenko iba a apelar a una última variante para intentar torcer el destino de Ucrania: a los 83′ E. Makarenko reemplazó a S. Sydorchuk; la visita también iba a tener modificaciones: a los 89′ Emre Can ingresó en lugar de L. Klostermann y más tarde, a los 90+2′ Kay Havertz entró en en reemplazo de S. Gnabry; y Ucrania iba a tener una última chance a los 90+2′ con un remate de Shaparenko que se abrió y se fue desviado.

No hubo tiempo para más. Alemania se abrazó a una victoria que construyó en el primer tiempo y supo conservar al final, cuando el local se animó y arriesgó para llevarse algo.

Hernán O’Donnell

San Lorenzo empieza a ver el horizonte

En una mañana soleada, con un sábado de sol primaveral, San Lorenzo empezó a ver el horizonte. Un poco más tarde de las 10.40 se midió y venció a Talleres de Córdoba, en el segundo amistoso de pretemporada.

El Ciclón se mostró decidido y a los 2′ del primer tiempo tuvo dos tiros de esquina consecutivos. A los 9′ hubo un tiro libre para el equipo de Mariano Soso, y el remate de Matías Palacios rozó el palo derecho. El Ciclón ya mostraba ventaja sobre su oponente, con muchas llegadas al área rival. Otra oportunidad llegó a los 13′, con un centro de Peruzzi que Franco Di Santo no llegó a conectar. A Talleres le costaba acomodarse y el local dominaba las acciones.

El dominio era claro y el gol llegó como consecuencia de ellos. A los 19′ combinaron por derecha Peruzzi, Peralta Bauer y Menossi, quien habilitó a Matias Palacios, para que ingresar por el medio y venciera a Caranta con un remate fuerte. San Lorenzo se puso 1 a 0 y era justo.

Lo mejor del equipo de Soso, en ese lapso, fueron las combinaciones de Peruzzi, Menossi, Peralta Bauer y Matías Palacios, en tanto por izquierda se apoyaba en el buen tranco de Juan Ramírez.

El equipo del “Cacique” Medina tuvo su primera chance a los 22′ cuando el delantero Valoyes le ganó la posición al “Flaco” Donatti, pero su disparo cruzó todo el arco.

San Lorenzo a lo largo de todo el primer tiempo mostró un mejor desempeño que el equipo rival. Y cerró ese período de cuarenta minutos, con un tiro de Peralta Bauer que pegó en el poste izquierdo de Caranta, recorrió la línea y el zaguero de Talleres Pérez la sacó de cabeza; del rebote, Juan Ramírez remató al arco, mientras era empujado desde atrás, en una falta dentro del área que el árbitro no advirtió.

En el segundo tiempo San Lorenzo mantuvo la posesión de la pelota. El equipo se afirmó en la seguridad de Federico Gattoni, quien se destacó como para ser considerado titular.

Para Talleres fue complicado llegar al área; no encontraba espacios, a pesar del buen desempeño de Soñora; y San Lorenzo también mermó su rendimiento, porque a pesar de tener el balón, careció de profundidad en la segunda etapa. El Ciclón se apoyó más en la dinámica y buen pie de Ramírez; así llegó al fondo tras una buena pared con Pittón y su centro fue sacado al corner por Tenaglia; a los 16′ Schott fue amonestado por una falta contra Ramirez cuando este se iba en velocidad, en una jugada que pudo ser de expulsión.

El partido perdió intensidad y careció de llegadas profundas; hubo una de Talleres tras una desinteligencia entre Donatti y Monetti en una salida, y el local se aproximó con algunos centros tras progresos por las bandas.

San Lorenzo mostró una cierta idea de juego, tuvo algunas figuras destacadas como Gattoni, Matías Palacios, más la prolijidad de Menossi, el segundo tiempo de Ramírez, y todo lo que insinúa Mariano Peralta Bauer. Para empezar, hay margen para la ilusión.

 Carolina O’Donnell

El Campeón de América entró en escena con una goleada convincente

El Campeón de América entró en escena. De una manera rotunda, decidida y contundente. Se adueñó del balón desde el silbato inicial y a los 40″ de juego Renan Lodi se fue por izquierda, lanzó un centro cerrado y Everton no pudo acertarle al arco; el balón se fue apenas desviado en la primera de las muchas ocasiones que iba a generar el local. A los 3′ llegó otro centro desde la izquierda al corazón del área, y el cabezazo de Marquinhos se fue muy cerca del palo izquierdo de Carlos Lampe, arquero de Bolivia.

Era un monólogo de Brasil, que tenía el control absoluto. Con Neymar como eje, Coutinho como socio y las trepadas de los laterales, Danilo y Renán Lodi para abrir a un Bolivia que se refugiaba en su campo.

El gol era cuestión de tiempo, y llegó a los 16′, tras un corner desde la derecha, el pase atrás para Danilo y el centro del lateral que cabeceó Marquinhos al arco para marcar el 1 a 0 para el equipo de Tité.

Siguió Brasil con su libreto. Un equipo que tenía siempre la pelota, la manejaba con criterio, dinámica y velocidad. Así, desbordaba a la visita por todos lados. Era un vendaval que se le hacía difícil al equipo de Césra Farías poder controlar.

La llegada del segundo tanto era lógica y esperable. Una pared por el sector izquierdo entre Renan Lodi y Neymar, la llegada al fondo del lateral brasileño del Atlético de Madrid y el centro rasante al área chica, que aprovechó Roberto Firmino y con un toque suave depositó el balón en la red, para dejar el partido 2 a 0 a los 30′ de juego.

Bolivia se animó en los últimos diez minutos del primer tiempo. Fue el momento en que el local se tomó un pequeño respiro y cedió en la presión sobre el área rival. Bajó un poco Menacho para juntarse con Miranda y Wayar, en tanto buscaba el resto del equipo acompañarlos en una presión más alta. pero fue sólo una intención, en tanto Brasil le cedió un poco la pelota. El cierre del primer período lo encontró, otra vez, al local con el control del partido.

Bolivia salió al segundo tiempo con un cambio: Cespedes por Saldías; pero nada se modificó, porque a los 48′ Firmino marcó el tercer gol y ya con el 3-0 el único interrogante era cuando se iba a detener la cuenta del local.

A los 58′ entró Rdrygo por Everton; a los 61′ J. Campos ingresó por C. Menacho y R. Cardozo reemplazó a C. Arabe en Bolivia; y a los 65′ Philippe Coutinho desbordó por derecha en una buena maniobra, sacó un centro que pegó en el defensor visitante Carrasco y se metió en su propia valla para dejar el marcador en 4 a 0.

Tité decidió dos cambios para renovar el equipo y repartir del desgaste de sus futbolistas: a los 70′ Richarlison entró en lugar de Roberto Firmino y Felipe Augusto ingresó en reemplazo de Thiago Silva.

A los 72′ llegó el quinto y el cierre de la cuenta del local. Centro desde la izquierda de Neymar y Philippe Coutinho metió un cabezazo formidable para marcar el 5-0.

Ya no era partido. Quedaban cambios para registrar. En Brasil, a los 76′ A. Telles entró por Renan Lodi y E. Ribeiro lo hizo por P. Coutinho. En Bolivia, a los 79′ F.G. Mejia entró por A. Bustamante y unos minutos más tarde, a los 83′ L. Zabala ingresó en lugar de D. Wayar.

Sobre el final, Carlos Lampe tuvo un vuelo y una atajada fenomenal de un tiro libre de Neymar. Iba al ángulo superior izquierdo del arquero boliviano, pero su reacción impidió el gol que tanto había buscado Neymar.

No hacía falta. Era solo por una cuestión personal. Brasil, el equipo, apareció en escena en todo su esplendor y asoma como el equipo dominante de una eliminatoria que dio su primer paso.

Hernán O’Donnell

Argentina encontró rápido el camino para una victoria complicada

La apertura del marcador temprana le dio cierta tranquilidad a la Argentina. Había salido como siempre, al ataque. Intentaba imponer condiciones desde el inicio, con la dinámica de sus hombres por las bandas, Ocampos y Acuña, en tanto De Paul enlazaba con Messi y Lautaro Martínez. Enfrente, un equipo con el sello de Gustavo Alfaro. Táctico, obediente, concentrado. Una línea de cuatro con Gruezo por delante de ellos, otros cuatro medios ordenados de derecha a izquierda con Ibarra, Franco, caicedo y Mena y Enner Valencia arriba, como punta de lanza.

Pero muy pronto llegó la posibilidad para Argentina. Ya había tenido a los 5′ una llegada por un pase filtrado y preciso de Leandor Paredes a Messi, y a los 10′ llegó el penal que Estupiñán le cometió a Ocampos con una barrida temeraria, porque si bien fue a la pelota y la ganó, con su cuerpo tocó la pierna izquierda del delantero de Sevilla, que cayó derribado. Lo ejecutó Lionel Messi a los 12′, con un buen remate a la izquierda de Alexander Domínguez, y el local se puso 1 a 0.

Ecuador siguió igual, con un planteo intenso en la mitad de la cancha, la zona que Alfaro había definido como el “lugar donde hay que hacer una lectura exacta pues allí se resuelven los partidos”, y con una intensidad importante de sus futbolistas, logró controlar a la escuadra de Scaloni.

Argentina tuvo otra llegada a los 30′, con una jugada colectiva destacada que empezó por Tagliafico en la izquierda y terminó con un centro de Ocampos desde la derecha que Arreaga sacó al corner.

Y al final Ecuador tuvo su primera llegada, pero muy peligrosa. Tras una subida de Estupiñán, hubo una infracción de De Paul. Iban 45+2′ y el tiro libre lo ejecutó Ferigra y el balón pasó por delante de Armani, sin que Valencia y Caicedo lo pudieran conectar.

La visita salió en el segundo tiempo con una variante; Preciado por Freriga. Así decidió Alfaro apostar a la subida de los laterales, con el ingresado y Estupiñán como abanderados. Y Ecuador empezó a emparejar las acciones, sobre todo porque Argentina mermó una presión constante que había ejercido en el primer período.

De a poco el local decayó en su potencia. Y en la mitad de la cancha, el conjutno visitante le propuso un combate permanente, donde le ubicaba mucha gente y siempre dispuesta a pelear y raspar. Por momentos, pareció que le costaba a De Paul, Paredes y Acuña batallar en inferioridad numérica. Aún así, la Argentina siempre insinuaba un poco más. Había tenido una chance clara a los 47′ cuando Martínez habilitó de cabeza a Ocampos y el remate del delantero fue desviado al corner por Domínguez.

Después, la catarata de cambios que deforman los partidos. A los 63′ Gonzalo Plata entró por Renato Ibarra; a los 65′ Eduardo Salvio ingresó por Marcos Acuña. Ecuador tuvo una chance con una llegada de Estupiñán y el remate al medio que atajó Armani. y siguieron las modificaciones: iban 75′ y Lucas Alario entró por Lautaro Martínez, en tanto a los 77′ Romario Ibarra entró por Caicedo.

Pero el juego ya era una lucha en la media cancha, una batalla donde el roce prevalecía y el juego no fluía. Argentina intentaba construir, pero no podía salir del enredo y corte propuesto por la visita, que siempre amenazaba por las bandas.

A los 83′ Lionel Scaloni acomodó las últimas piezas y resolvió que Juan Foyth ingresara por Gonzalo Montiel y Nicolás Domínguez reemplazara a Lucas Ocampos. Nombre por nombre, posición por posición y a pelear el tramo final. Gustavo Alfaro también hizo una última variante: a los 86′ Michael Estrada entró en lugar de Angel Mena. Poco tiempo quedaba y sin embargo, a los 90+3′ Rodrigo De Paul sacó un remate fuerte, desde afuera del área, que se fue muy cerca.

Y así se cerró el debut de Argentina en la Competición Preliminar de la Copa Mundial de la FIFA-Qatar 2022. Con una victoria sufrida, trabajada, luchada y merecida. Para empezar, tres puntos que traen el aire necesario.

Hernán O’Donnell

Paraguay y Perú están listos para abrir el fuego

El Mundial ya se juega; con el comienzo de la Competición Preliminar de la Copa Mundial de la FIFA-Qatar 2022 en Sudamérica, los amantes de este deporte, esa enorme legión de adoradores de la pelota, ya empiezan a palpitar cada uno de los partidos, a realizar pronósticos, a arriesgar resultados y a vivir cada uno de los partidos.

En Asunción se miden Paraguay y Perú. Un duelo con entrenadores argentinos; Eduardo Berizzo en el local, Ricardo Alberto Gareca en el banco peruano. Dos técnicos que priorizan el buen juego y que siempre tienen en mente la intención de ir por los tres puntos.

“Estamos enfocados en ir a ganar el partido, después veremos como se da el desarrollo del mismo. Lo ideal sería ganar el 100 % de los puntos de esta doble fecha, pero hay que ver como serán cada uno de los dos encuentros”, señaló Gareca en la conferencia de prensa previa al match.

“Aún no hemos definido el sistema. Vamos a tomarnos el tiempo necesario para definir quienes serán los muchachos que jueguen; muchos de ellos llegaron el martes, a 48 horas del partido. Hay que darles descanso y ver como llegan al partido”, aseguró el entrenador. “Vamos a empezar la eliminatoria con una selección difícil como es la paraguaya, así que será un partido muy duro que habrá que trabajarlo muy bien. Entiendo que vamos a llegar bien al partido, ojalá podamos plasmarlo en el campo de juego. Tenemos que estar bien parados en la cancha y jugar con mucha decisión”, resumió Gareca.

“En lo personal, estoy bien. Por supuesto que hace mucho no veo a mi familia, recién el otro día pude ver a mi hija. A mi esposa hace rato que no la veo, y esas cosas son difíciles. Pero estoy bien, comprometido, enfocado, se que son cosas pasajeras y hay que hacer el esfuerzo. A la gente le digo que estamos bien, con mucha confianza. Que sepan que esto (la pandemia) no ha acabado, y que hagan fuerza desde sus hogares, nosotros lo vamos a sentir. Por supuesto me hubiera gustado contar con ellos en la tribuna, como siempre, pero ahora nos van a apoyar desde otro lugar. Siempre están con nosotros, son increíbles en ese aspecto. Nosotros, en el campo de juego, vamos a dar todo. Es importante en este momento mantener la calma y que nos den su aliento desde sus hogares”, dijo el DT argentino.

Sobre el poco tiempo de trabajo, Gareca respondió: “El poco tiempo de trabajo es una realidad para todos; también para Paraguay y para el resto de los equipos de Sudamérica. Es un tema para todos, y no hay más remedio que salir al ruedo y afrontar lo que venga”.

Eduardo Berizzo, el entrenador del seleccionado local, afirmó: “Es el mayor desafío que enfrento como entrenador. La esperanza de todo un país de clasificar a un Mundial después de 12 años, es el mayor desafío que vivo como entrenador. Nada se compara con esto. La importancia de volver a un Mundial para la gente, para todo un país, esa ilusión, lo hace incomparable a cualquier cosa que pueda vivir como entrenador de un club”.

El capitán Gustavo Gomez también habló de la responsabilidad: “Estar en la selección es un orgullo muy grande; y tener la cinta de capitán que alguna vez tuvieron jugadores como Carlos Gamarra, José Luis Chilavert, Justo Villar o Paulo Da Silva, también es un orgullo, pero a la vez una gran responsabilidad que tomo con mucha confianza. Ya tengo una edad importante, me siento maduro”.

Para Berizzo, la clave será “desarrollar el plan de juego; poder poseer el balón y utilizarlo bien, que el partido tenga el ritmo y la dinámica que queremos, y aprovechar, en ataque, todo lo que generemos. El partido va a requerir de mucha precisión, tener paciencia y usar el balón con criterio. Estamos preparados para eso”.

En la conferencia de prensa, el zaguero Gomez también se refirió a la ausencia del público. “Nuestra gente siempre se hizo sentir en el Defensores del Chaco; pero ya sabemos como son las cosas. Hay que afrontar al rival y tenemos mucha confianza para sacar un buen resultado aquí en casa”.

Sobre el rival, Berizzo respondió: “Creo que todos vivimos las mismas circunstancias que trajo la pandemia. Y todos encontramos las maneras para poder adaptarnos. Perú es un equipo que empezó un proceso hace ya mucho tiempo con Ricardo (Gareca) al frente, tiene un estilo. Intentaremos adueñarnos del partido, presionar para que no jueguen cómodos, y utilizar la pelota como arma de ataque. Nos enfrentamos con un rival difícil, que fue Mundialista en la última ocasión, pero todas nuestras energías están puestas en desarrollar nuestro plan de partido”.

Paraguay y Perú están listos para jugar. Un partidazo para empezar a vivir las eliminatorias en Sudamérica, nuestra casa grande.

Hernán O’Donnell

Con la selección de Ecuador, Gustavo Alfaro prepara su regreso a La Bombonera

El enorme morbo que se ha generado a partir de la llegada de Gustavo Alfaro a la selección de Ecuador y el regreso a la Bombonera para enfrentar a la Selección Argentina en su debut en la Competición Preliminar de la Copa Mundial de la FIFA-Qatar 2022, ha dominado la escena y parece el condimento principal del choque entre argentinos y ecuatorianos. Por momentos, se habla más de Alfaro y su vuelta a la cancha de Boca tras su salida después de quedar eliminado por River en semifinales de la Copa CONMEBOL Libertadores, que del partido en sí.

Sin embargo, el entrenador parece alejado de esas controversias y se muestra enfocado en partido y la nueva aventura de dirigir a un seleccionado e intentar llegar a un Mundial. “Me hubiese gustado mucho jugar este partido con el público presente; guardo el mejor recuerdo del hincha de Boca, quien siempre me trató con mucho cariño y respeto”, apuntó Gustavo Alfaro.

Ecuador tuvo una primera dificultad en su semana de trabajo; debió desafectar al arquero Johan Padilla por Coronavirus; así comenzaron los entrenamientos, con un problema. “Se que Johan está dolido por esta situación, pero le dije que tiene que ponerse bien, estar fuerte, ha tenido situaciones adversas a lo largo de toda su vida y las ha superado, y la vida a veces nos pone a prueba y no nos dice ni por qué ni cuando, así que hay que afrontarlo”, señaló el DT de Ecuador.

Sobre el adversario del jueves, indicó: “Me preocupa el buen pie de Argentina, el buen juego interno que tiene, su capacidad de asociar jugadores, la generación de juego que tiene. Si bien tiene poco tiempo de trabajo, es un equipo que viene con un proceso largo de ensamblado, la idea global la tiene. Nosotros partimos de lo individual a lo colectivo. La idea es que con el tiempo sea al revés, que el plan colectivo contenga a las individualidades”, dijo Alfaro.

Con respecto al partido, opinó: “Para mí, el planteo de los partidos está en la mitad de la cancha. Y ahí es donde hay que tratar de tener una lectura exacta, más allá de la disposición que uno pueda llegar a tener, más allá de jugar con un contención y dos internos, o con dos volantes centrales, o con extremos…yo digo que el tema pasa por como uno equilibra la cancha, porque Argentina puede jugar con un volante posicional como Paredes y De Paul que es más vertical, con dos extremos por afuera. O puede armar un triángulo, con un punta central y dos extremos por afuera lo pueden hacer bien”, analizó el entrenador rafaelino.

Los medios ecuatorianos se hicieron eco de algunas críticas de Alex Aguinaga, una de las grandes figuras que tuvo el seleccionado en su historia. “La Federación está en una crisis. La Selección de Ecuador no existe, es una realidad; más desaparecidos no podemos estar”, señaló en declaraciones a TyC Sports, que hicieron mucho ruido en su país. Y agregó: “Va a haber mucha diferencia entre ambas selecciones. Creo que a veces compramos ilusiones porque estamos ávidos de algo diferente”.

Pero al margen de cualquier controversia, “El Tri” viajó a Buenos Aires con algunas novedades. No contará, al final, con su mejor figura, Christian Noboa, pues no pudo hacer la combinación de vuelos desde Rusia a Buenos Aires a tiempo, y estará el jueves en Ecuador para aguardar el partido siguiente ante Uruguay.

Así está el rival de Argentina; con un nuevo entrenador, una nueva etapa, algunas dudas, algunos interrogantes, pero con mucha ilusión que siempre se genera cuando se emprende un nuevo camino.

Hernán O’Donnell

Uruguay empieza su camino y se prepara para recibir a Chile

El lunes comenzaron a llegar los futbolistas convocados de Europa. Lo hicieron a lo largo del día, la mayoría arribó en horas de la tarde, pero las llegadas se prolongaron hasta altas horas de la noche, como la de Luis Suárez, quien arribó a Buenos Aires a las 21.30 y luego viajó hacia Montevideo, en tanto los futbolistas que venían del Norte del continente como Jonathan Rodríguez, Diego Rossi, quien se incorporó a último momento por la lesión de Christian Stuani, y Brian Rodríguez. Por eso la primera práctica no se asemejó a un entrenamiento completo, sino apenas a una serie de trabajos físicos con 5 futbolistas, que en verdad fueron cuatro, porque mientras Martín Campagna hizo tareas en el arco junto al entrenador de porteros, Celso Otero, los jugadores Martin Cáceres, Damián Suárez, Agustín Oliveros y Mauro Arambarri hicieron ejercicios físicos y trotes regenerativos junto al Preparador Físico, Jorge Rey.

Todos se dirigieron al Complejo “Celeste”, la casa del fútbol uruguayo y su seleccionado. Algunos dejaron declaraciones en el aeropuerto, como el arquero Martín Silva, quien habló de su ilusión por el inicio de las eliminatorias y esta forma atípica de jugar sin público en los estadios: “Es la nueva normalidad y hay que adaptarse”, señaló el golero de Libertad de Paraguay.

“Chile será un rival difícil. Tiene un gran potencial, tiene jugadores que están en una buena edad. No quiero arriesgar mucho en la opinión, porque todo luego hay que ver como se desarrolla, pero hay complicaciones por la pandemia”, dijo el entrenador Oscar Tabárez en la conferencia de prensa previa al inicio de la semana de trabajo.

“Hay una gran incertidumbre con lo que va a pasar; no sabemos con qué nos vamos a encontrar. Será un eliminatoria difícil, sin la presencia del público, y eso lo quiero ver. La gente siempre juega su papel, es una parte importante. Tenemos un equipo que tiene su historia, su perfil. Así que vamos con el pensamiento positivo, pero también preparadaos para afrontar cualquier cosa que pase en el campo”, amplió el entrenador.

El entrenador aclaró que la ausencia de Edison Cavani es circunstancial. “No hubiera estado con la cabeza en el trabajo mientras tenía que definir en que club iba a jugar. Lo hablamos con Edi y lo entendió, esto es circunstancial. Pensamos que podía correr riesgos de lesionarse, por esto de estar sin actividad y Edi es un jugador que da todo y entrega todo. Podría ser contraproducente. Lo necesitamos en su totalidad metido en esto; no podíamos arriesgar al futbolista”.

La formación se va a definir el miércoles. Hay muchos futbolistas que llegan sobre la hora del partido frente a Chile, y con muchas horas de vuelo encima. El Maestro Tabárez tiene pensado empezar a trabajar la parte táctica y estratégica el mismo martes, pero la definición de los titulares quedará resuelta luego del último entrenamiento en el día previo al encuentro oficial. Será cuestión de esperar por unas horas, pero la “Celeste” ya se puso en marcha.

Hernán O’Donnell

Los Pumas viajan a un desafío enorme

El sábado habló Tomas Cubelli, medio scrum y referente del plantel, y el domingo lo hicieron los entrenadores, con Mario ledesma, Head Coach, a la cabeza. Los Pumas partieron a Oceanía, para jugar el Rugby Championship en Australia, una situación que se dará por primera vez en la historia de este torneo, pues se jugarán la totalidad de los partidos en una sola nación. Una suerte de pequeño Mundial.

“Es una alegría inmensa, parecida a la primera vez que te ponés la camiseta de Los Pumas, incluso con más ilusión. Cuando uno tiene una nueva oportunidad de preparar el bolso para representar al país es muy lindo y sobre todo si es en el Rugby Championship. Este año todo fue muy raro. En ese sentido, la excitación es mayor”, comentó el medio scrum en una rueda de prensa virtual.

Con respecto a este formato nuevo, donde todo se desarrollará en Australia, comentó: “Jugar en un solo país es una gran diferencia, es una situación atípica. Quizás el mejor parado es Australia, porque va a jugar en su país, pero creo que para todos es una situación distinta y vamos a estar en las mismas condiciones, de alguna manera”.

También habló de como llegaba el equipo a Oceanía, aunque aún queda un mes más de preparación y adaptación al cambio de horarios, clima y demás factores: “Me sorprendió para bien la calidad de las destrezas y de los entrenamientos, se ve que con los planes que trabajamos en la cuarentena el equipo se lo tomó muy en serio y llegamos bien preparados. Tenemos un mes más para estar bien aceitados en todas las facetas de juego”, agregó el ex jugador de Belgrano Athletic.

La lista final está compuesta por 45 jugadores; 32 son los que viajaron desde Uruguay el domingo 4 de octubre, mientras que los otros 13 son aquellos que participan en el rugby europeo y que se incorporarán al plantel el lunes 19 de octubre. Los Pumas harán su debut el sábado 7 de noviembre, ante Sudáfrica, en el Suncorp Stadium de Brisbane.

Una aventura hermosa, un desafío grande para Los Pumas en un año atípico, diferente, extraño.

 Hernán O’Donnell