Argentina hizo lío en Italia

Un partido homenaje a Francisco, el Papa que llegó desde el sur para conmover al mundo. Dos seleccionados con una historia enorme: Italia, 4 veces campeón del mundo (1934, 1938, 1982, 2006); Argentina, 2 títulos (1978, 1986) y un repetido enfrentamiento en las últimas Copas del Mundo.

Argentina, un poco más atrevida, con la gran tarea de Gonzalo Higuaín, cuyo gol no sólo fue bello por la definición, sino que nació en una presión del delantero del Nápoli que contagió, con un gesto, a todos sus compañeros.

Además, una contra que nació en los pies de Palacio, continuó con Higuaín, el “Pipita” le metió un pase perfecto a Di María y, ya en el área, el centro para Palacio, que había corrido de área a área…Y su remate que se va por arriba del travesaño, con el arco vacío. El recuerdo inmediato de una situación similar que le tocó a Jorge Valdano en la semifinal de México 1986, ante Bélgica. Tras correr toda la cancha, Valdano desvió su remate, tras un pase muy bueno de Maradona. Y Diego lo aplaudió: “Cuando corrés de esa manera, de arco a arco, tenés derecho a errarte los goles, Jorge…”, dicen que le dijo al oído.

PAPA Arg vs ItaliaEn el arranque del segundo tiempo, una gran maniobra de Higuaín habilitó a Banega para que el ex hombre de Boca señalara el segundo gol. Argentina había sido un poco más en el primer tiempo, y a poco de nacer el segundo aumentaba el marcador. 2 a 0, y una esperanza abierta.

Italia se mostraba confundida, sin presencia ni profundidad en ataque, sólo el ímpetu de Daniel Osvaldo y el despliegue de De Rossi. Era poco ante el conjunto que comandaba Gonzalo Higuaín, bien secundado por Mascherano, Biglia y la firmeza de Fernández.

Argentina seguía y seguía: lo tuvo Palacio otra vez, lo mismo Higuaín, pero Buffón evitó el tercero. Se replegó un poquito la albiceleste, pero cuando salía de contragolpe, aceleraba y provocaba mucha zozobra en la defensa italiana. Encima, el Sr. Sabella proponía el ingreso de Ezequiel Lavezzi, para darle más velocidad y vértigo a los contragolpes, aunque salía la figura de la cancha, “Pipita” Higuaín…

Con más vergüenza que fútbol, Italia iba al atque. Así forzó un par de corners. Y empezó a empujar. Tuvo Damiantti un tiro libre que pegó en el travesaño. Mientras, el partido caía en un pozo: el desgaste físico, el caracter de amistoso, los cambios continuos de jugadores, todo confluía para terminar como terminan, en general estos amistosos: con seis cambios por cada bando, terminan en la cancha dos equipos muy distintos a los que comenzaron. Hasta que Insigne, a los 29 del segundo tiempo, achicó el marcador, con un verdadero golazo. Y el partido que renacía. Argentina pasaba del dominio y la tranquilidad, al sufrimiento final. Y desperdiciaba algunas situaciones; Di María hizo una gran jugada, pero pecó de individualista y perdió la chance.

Argentina pasó del placer a la angustia. Había jugado un gran partido, dominio y superioridad marcadas durante 75 minutos. Pero el descuento italiano lo llevó a sufrir. Porque la victoria ya no estaba tan asegurada; porque la tranquilidad le dio paso a la angustia. Y aguantó hasta la última bola: un corner para Italia y el empate que rondó el arco argentino.

En algún momento, Francisco dijo: “Salgan a la calle y hagan lio…” Y la selección argentina lo hizo, vaya que lo hizo en el Olímpico de Roma. Y eso que no jugó “Lio” Messi…

 

Hernán O’Donnell

 

Italia y Argentina, o la historia viva del fútbol

Es uno de esos partidos bravos, difíciles, con mucha historia detrás. La Argentina se enfrenta a Italia en el Olímpico de Roma, y está todo dicho.

Porque al margen del carcater amistoso, de que le anteceda una visita al Papa, que al cabo se midan estos seleccionados en honor a Su Santidad, pues se enfrentan su país de nacimiento como el de su lugar de residencia, sabemos que Italia y Argentina representan a dos grandes del fútbol mundial. Y que hay una larga historia de enfrentamientos; incluso, en mucha oportunidades se midieron en la competición final de la FIFA, en las Copas del Mundo.

Roma espera por este gran partido
Roma espera por este gran partido

En el mundial de 1974 se midieron en Stuttgart. Igualaron 1 a 1 y el partido fue muy recordado, porque a partir de ese empate, la Argentina comenzó a recuperarse de la derrota ante Polonia, y luego pudo golear a Haití, mientras que los polacos vencieron a los italianos y así avanzó la blanquiceleste a la segunda ronda.

En aquel encuentro deslumbró un “gurrumín” de piernas chuecas, habilidad endemoniada y desenfado en la gambeta: René Orlando Housemann marcó el primer gol del partido, tras un gran pase de Carlos Babington, y encendió las esperanzas argentinas. Luego, un tanto en contra de Roberto Perfumo decretó la igualdad.

En el mundial siguiente, otra vez compartieron grupo. Argentina había vencido a Hungría y Francia. Italia había hecho lo propio con esos equipos: primero le ganó a Francia y luego a Hungría.

Se enfrentaron en River Plate, aunque ambos ya estaban clasificados, el resultado determinaría el orden entre el primero (que continuaría jugando en River en la segunda ronda) y el segundo (que se mudaría a Rosario).

Se impuso la visita con un tanto de Roberto Bettega…el resto, es historia conocida.

Roberto BettegaComo un capricho del destino, en el siguiente mundial se volvieron a cruzar. Era el tercer enfrentamiento consecutivo. Era por la segunda ronda del Mundial España 1982, y otra vez se impuso el seleccionado azzurro, esta vez por 2 a 1. A partir de esa victoria, los europeos se encaminaron al título mundial…

Pero esto no se detendría aquí. 1986, Mundial de México, y de nuevo les toca compartir grupo. Segunda fecha de la primera ronda, Diego Maradona comienza a mostrar que ese iba a ser “su” Mundial y señala un golazo. Luego Italia igualaría de penal. 1 a1, ahora es la Argentina la que pone rumbo al campeonato.

El quinto juego mundialista debe ser el más recordado por la mayoría de la gente. Semifinales en Nápoles, Maradona que logra poner a la gente a su favor, o por lo menos no sentirse tan visitantes como en el resto de Italia. El fervor de todo un país que sueña con el título de local. La dura prueba que le propone el equipo de Bilardo. La apertura del marcador para a Italia a los 14 minutos; todo parecía cuesta arriba, pero la desfachatez de Claudio Caniggia, autor de un golazo, y el orden táctico de todo el equipo logra la igualdad y deja una mejor imagen en el suplementario.

Diego celebra el gol de Caniggia...
Diego celebra el gol de Caniggia…

Y en los penales surge “El Vasco” Goycochea. Ya había atajado dos ante Yugoslavia en Florencia, por los cuartos de final; ahora, la noche napolitana lo vio vestirse de héroe, tras detener dos remates. Argentina era finalista, Italia se sumergía en una congoja exagerada tras su inesperada eliminación.

Cinco enfrentamientos mundialistas para dos grandes que fueron Campeones del Mundo y finalistas de la Copa en reiteradas oportunidades.

El bendito fútbol le permitió a este cronista ser testigo presencial tanto en el partido de River Plate por el mundial ’78 como aquella noche napolitana de julio de 1990 por la Copa del Mundo. Los otros, también los pudo disfrutar por televisión.

Y creamé que es un instante único, que, en la cancha o por TV, cada vez que se enfrentan italianos y argentinos, uno sabe que está por ver entre estos dos colosos, un capítulo más de la historia grande, viva, sublime del fútbol.

 

Hernán O’Donnell

 

Otro torneo relámpago en marcha

Tiene intensidad, es cierto. Expectativa, también. Pasión, le sobra. Pero estos torneos cortos del fútbol argentino (que ya llevan más de 20 años, y habían amagado terminarse en la última temporada) no son más que torneos “relámpagos”, fugaces, donde un equipo puede salir campeón con 47 puntos (el record de aquel San Lorenzo de Manuel Pellegrini) como con ¡36! como le ocurrió a Newell´s hace poco menos de diez años…

VLUU L200  / Samsung L200Lo cierto es que el mundo del fútbol, leasé Europa, Brasil, etc vio con ojos de asombro esta realidad de campeonatos de 19 fechas; hasta que se acostumbró, pero no quita que haya perdido cierto prestigio: para las grandes potencias de este deporte un torneo de una sóla rueda es eso; apenas una ronda. Y si bien se valora la calidad, y los enormes futbolistas que surgen, el certamen aparece algo devaluado.

Mientras, la pelota no se detiene. Y al torneo “Relámpago” hay que buscarle días y horarios, pues entre elecciones y partidos de eliminatorias, Copas Sudamericana y Argentina, las jornadas escacean…es más, mientras nos proponemos analizar un poquito la primera fecha, ya se juega la segunda, y Argentinos Juniors, que había caído en Mendoza ya se recuperó y derrotó a Colón de Santa Fe…

El fútbol no para, y los candidatos se acumulan: Boca, River, San Lorenzo, Racing, Vélez, ¡Lanús!…Hay de todo y para todos los gustos, aunque el equipo granate parezca el más consolidado.

VLUU L200  / Samsung L200Lo mejor será disfrutarlo: Han aparecido jugadores que entusiasman: Angel Correa, Vietto, Centurión, Tito Villalba, Gio Simeone, El “Droopy” de La Paternal…Y algunos consagrados: Teo Gutiérrez, Mauro Zárate, “Cata” Díaz, “El Loco” Abreu, Trezeguet, “Nacho” Piatti, ¡Juan Sebastián Verón!

Hay fútbol, promete del bueno y podemos, tal vez, celebrarlo. Que sea en paz, sin violencia, con el corazón en el juego y la ilusión de ser, a través de este deporte, un poquito mejores.

VLUU L200  / Samsung L200

 

Hernán O’Donnell

París vibra con el Tour de France

Es la última etapa. El último dia de competencia tras 3 semanas extenuantes.

ParIs aguarda por su dia de fiesta. El Tour de France llega al arco del triunfo. En los Campos Eliseos se vivirá la parte culminante de una competencia que mantuvo en vilo a toda Europa por más de tres semanas. Y un muchacho colombiano puede dar la gran sorpresa…

Desde lo mAs alto del arco del triunfo
Desde lo mAs alto del arco del triunfo

La multitud se acerca a los Campos Eliseos; la gente desafía el calor y de a poco llena las calles de París. Miles de turistas han llegado, el grupo de Noruega es el más colorido y ruidoso. Sus banderas flamean en los jardines del Louvre, la cerveza acompaña su alegría y calma las altas temperaturas. Hay ingleses por doquier; el orgullo de ganar una competencia deportiva siempre es celebrado por los británicos; y Christopher Froome les asegura el éxito con la malla amarilla asegurada…

París fue una fiesta...
París fue una fiesta…

Queda el sprint final y la alta velocidad desarrollada por super hombres, que cargan con la eterna sospecha de ayudas extras, pero que a toda velocidad y esfuerzo han recorrido todo Francia. El tour festeja sus 100 ediciones, desde los bares aclaman el paso de los héroes…

VLUU L200  / Samsung L200El colombiano Quintana, con su humildad y simpatía, conquistó toda Europa: “Todavía no me lo creo, no tengo palabras. He soñado mucho tiempo con esto, pero no pensé que lo lograría tan pronto. Tan solo tengo 23 años, el tiempo pasa rápido y hoy soy realmente feliz. Lo que he conseguido es el resultado de mucho trabajo y es gracias al don que me ha dado Dios. También es fruto del trabajo de todo un equipo. Hace menos de un año que pienso en poder participar en la batalla de la general en el Tour. Nunca imaginé hacer alto tan grande cuando era más joven. Abordaba el día y día y no hace mucho tiempo que pienso en todo esto”, señaló.

La alegría de Quintana
La alegría de Quintana

Y también el ganador celebró en los Champs Elyseès; ante una multitud feliz por la jornada vivida.

Christopher Froome, el ganador del 100 Tour de France
Christopher Froome, el ganador del 100 Tour de France

Las luces se apagan, el Arco del Triunfo dispone de sus últimas luces. El Tour de France número 100 ha llegado a su fin. Las calles cortadas, la seguridad que obliga a desviarse muchas cuadras para llegar al hotel…La gente que comienza a recorrer las calles iluminadas de París cuando se aproxima la medianoche de un caluroso domingo de verano francés…Y a caminar, a caminar rumbo a los hogares, los hoteles, las estaciones de subte, de tren…París vivió, por centésima vez, su fiesta, la fiesta del ciclismo, del deporte, de Europa toda…

 

Hernán O’Donnell

(Enviado Especial a París, Francia)

Buenos Aires Olímpica

Para muchos, la noticia pasó casi inadvertida. pero lo cierto es que el sueño de tener una ciudad argentina olímpica, empezó a tomar forma: Buenos Aires albergará los Juegos Olímpicos de la Juventud en 2018.

Es un Juego Olímpico. No la categoría máxima y tradicional como son los Juegos de verano, que se celebran, en la era moderna, desde 1896. Tampoco como los juegos de invierno. Pero es una cita altísima, bastante nueva, con pocas ediciones celebradas. Son los Juegos Olímpicos de la Juventud. En ellos compiten atletas de 14 a 18 años; se celebran cada cuatro años, y también, como los de mayores, tienen una versión de verano y otra invernal.

La primera edición se realizó en 2010 en Singapur; la segunda en 2014 será en Nankín, China y la ya comentada de 2018 en Buenos Aires, Argentina.

La alegría de los dirigentes deportivosEl abrazo de Claudio Morresi, Secretario de Deportes de la Nación y Francisco Irarrazaval, Secretario de Deportes de la Ciudad de Buenos Aires, es todo un símbolo. Quizás, lo que la mayoría de los argentinos queremos ver: dos hombres de propuestas políticas distintas que puedan trabajar en común y fundirse en un abrazo tras haber logrado el objetivo. Quizás sin darse cuenta, dieron un ejemplo de grandeza.

Felicitaciones para ambos. Y para aquellos que trabajaron para que Buenos Aires tenga esta hermosa oportunidad. Como Gerardo Werthein, artífice del crecimiento olímpico argentino; Mario Moccia, incansable y constante en su tarea; Agustín Pichot, un líder que vuelca todos sus recursos humanos en lograr el objetivo, tal como lo hizo con The Rugby Championship; los dirigentes políticos, como Macri y los deportivos como los mencionados Morresi e Irarrazaval; y todos aquellos que que trabajaron en silencio.

Buenos Aires tiene un sueño olímpico hecho realidad. Sepamos aprovechar esta oportunidad y demonos la chance de hacer las cosas bien.

 

Hernán O’Donnell

 

 

La alegría brasileña

Habrá que decir que las protestas habituales en la Copa Confederaciones se produjeron hasta el dia final. Que los manifestantes señalaron su desacuerdo con las erogaciones para la organización del torneo. Que preferían que ese dinero se invirtiera en salud, educación y seguridad. Que hasta la Presidente Dilma Rousseff optó por no concurrir al encuentro final, para evitar malos momentos; que la efervescencia política creció, tal como creció una parte importante de la población que demanda más calidad de vida y mejores condiciones para trabajar y desarrollarse. Un pueblo que no se conforma con lo conseguido, sino que quiere aún progresar.

En ese clima, Brasil conquistó la Copa Confederaciones 2013. El ensayo general previo a la Copa del Mundo, el “pequeño mundial”, el certamen que reúne a los ganadores de cada continente.

Y lo hizo de manera categórica ante el campeón mundial vigente, España.

Apenas dos minutos de juego, y Fred celebraba...
Apenas dos minutos de juego, y Fred celebraba…

Le bastaron dos minutos de iniciado el partido para abrir el marcador; una pelota que boyaba en el área chica, la arremetida del centrodelantero Fred, el rebote, y desde el piso, el derechazo del delantero para derrotar a Casillas…1 a 0 e inicio de una tarde feliz.

A partir de allí creció el “Scratch”. Brasil se hizo dueño de la pelota y las mejores acciones: Luis Gustavo era un pulpo para recuperar balones, Paulinho y Oscar le daban sentido al juego, la potencia de Hulk hacía temblar a la defensa roja, y, por supuesto, la habilidad desequilibrante de Neymar provocaba sustos en cada intervención.

España lucía desconcertada. Se apoyaba en la movilidad de Iniesta, pero el resto del conjunto no acompañaba. Perdido Torres, confundido Pedro, desconocido Xavi, sólo los reflejos de Casillas impedían que Brasil aumentara el marcador.

Sin embargo, cuando se cerraba la primera parte tuvo una chance clara, que David Luiz salvó sobre la línea de gol; era el empate. Y en la siguiente acción, Neymar, con un fuerte y preciso remate marcó el 2 a 0. Terminaba el primer tiempo y parecía cosa juzgada.

Para colmo, otra vez al inicio del segundo tiempo, Fred clavó un golazo. 3 a 0. Todo dicho. La visita desperdició una inmejorable oportunidad: Sergio Ramos desvió un penal cuando quedaban 30 minutos por jugarse y la historia aún podía modificarse.

Brasil se sintió cómodo en la cancha y con el resultado. Se tiró unos metros más atrás y lanzó contragolpes como misiles. Así, contó con varias chances para aumentar el marcador. Así, se fue expulsado Piqué por una violenta falta a Neymar cuando este se iba derecho a señalar el cuarto gol. Así, armó un festival de fútbol, lleno de lujos.

Es cierto que España tuvo algunas chances claras; dos de ellas desviadas de modo magnífico por Julio César, en las manos del arquero también se sostuvo el resultado.

Brasil Campeón Copa Confederaciones 2013
Brasil Campeón Copa Confederaciones 2013

Claro que entre la solidez de Thiago Silva y David Luiz, las proyecciones de Dani Alves y Marcelo, el sacrificio de Luiz Gustavo, la potencia de Hulk, los goles de Fred, la habilidad de Neymar se construyó un gran equipo. Que cuenta con la seguridad de Julio César, la colaboración de Paulinho y Hernanes, la dinámica de Oscar, la marca de Lucas, la capacidad de Jadson o Bernard…y la enorme sabiduría de “Felipao”…Un estratega fenomenal, un DT de gran experiencia y sagacidad. Luis Felipe Scolari fue convocado para reemplazar a Mano Menezes y llevar a Brasil a conquistar el Título del Mundo en su tierra. Para borrar de un plumazo los viejos fantasmas que aún se agitan por aquella “tragedia deportiva” que fue el “Maracanazo” de 1950. Y atención, que por lo visto en estos días, el trabajo de Scolari amenaza con terminar con aquel mito derrotista y devolverle la sonrisa al pueblo futbolero de Brasil.

 

Hernán O’Donnell

 

Entre protestas, Brasil y España a la final

Esta Copa Confederaciones FIFA – Brasil 2013, será recordada como el torneo donde las manifestaciones sociales tuvieron un protagonismo y repercusión mayores a la de los partidos. El clima efervescente por cuestiones políticas y económicas superó a la pasión deportiva.

Mientras el planeta futbolero posaba sus ojos en Brasil para observar el ensayo general de la Copa del Mundo FIFA – Brasil 2014, lo que recibía eran marchas de protesta de un pueblo (futbolero como pocos en el mundo) que reclamaba mayores inversiones en educación, seguridad y salud. Y entre esas imágenes se desarrollaron los encuentros…

Las semifinales eran previsibles; y además, resultaron atractivas, ya que reunían dos clásicos continentales: Brasil – Uruguay por un lado; España – Italia, en representación de la vieja Europa…

El primero tenía el antecedente tan lejano y tan presente como lo estará cada vez que se midan estos colosos en cualquier escenario: El mítico Maracanazo de 1950. Aquella final en Río de Janeiro que Uruguay logró ganar tras estar abajo 1-0 y revertirla para triunfar 1-2 y coronarse Campeón del Mundo, amén de inaugurar una eterna leyenda…

Un intenso Brasil - Uruguay...
Un intenso Brasil – Uruguay…

Otra vez los duendes de la leyenda se asomaron por tierras brasileñas. Aquel legado de Ghiggia, Obdulio Varela y tantos héroes de aquella final tomó forma en el carácter charrúa: Uruguay controló a Brasil, empujó y tuvo una chance muy clara en el penal que Forlán no pudo convertir. La atajada de Julio César le dio un envión a Brasil que se fue al descanso con un gol de Fred cuando se cerraba el primer tiempo.

En el amancecer del segundo, el empate de Cavani. Y a partir de ahí, un partido intenso, luchado, muy físico, con el crecimiento sostenido del local a partir del despliegue de Paulinho, las subidas de Marcelo y Dani Alves, la fuerza de Hulk y la habilidad de Neymar.

Uruguay era garra, fuerza y contragolpes muy veloces con Cavani a la cabeza. Si bien Brasil dominaba, parecía que estaba para cualquiera. Sobre el final, un corner cerrado de Neymar, la duda del arquero Muslera, la aparición de Paulinho y el cabezazo para decretar el 2 a 1…Brasil finalista.

España tuvo que sudar mucho para superar a Italia. En rigor, los “Azurri” fueron mejores en el primer tiempo. Luego, el toque permanente del equipo de Del Bosque comenzó a torcer el rumbo.

Pero no alcanzó para abrir el marcador. Ni en el tiempo regular ni en el alargue. Un tiro de Italia en el palo cuando empezaba la prórroga, un disparo de España que desvió Buffón y luego dio en el poste sobre el final fueron las acciones más claras…

España celebró en los penales
España celebró en los penales

Cuando llegó la tanda de penales, se vio la jerarquía de estos conjuntos. Apenas uno sólo fallado entre 14 remates. Lo de los jugadores españoles al momento de patear los penales,  fue sublime. Siempre ejecutaron en segundo término, y al llegar al quinto debían convertir para no perder. Lo mismo sucedió en el sexto. Y en el séptimo, convertir para ganar. La manera extraordinaria en que patearon Mata, Sergio Busquets y Jesús Navas esos remates, habla de la inmensa calidad de estos futbolistas. Tal como antes lo habían hecho Xavi, Iniesta, Piqué y Sergio Ramos.

Todos lo ejecutaron con maestría. Igual que los italianos Antonio Candreva, Alberto Aquilani, Daniele De Rossi, Sebastian Giovinco, Andrea Pirlo y Riccardo Montolivo. Sólo Leonardo Bonucci tuvo la mala suerte de fallar.

Un inmenso duelo que quedó para España.

Ahora, la gran final. Brasil – España, el duelo que el mundo espera. Un partido que promete mucho, en una Copa donde las voces trascienden este hermoso juego de la pelota…

 

Hernán O’Donnell

Newell’s Old Boys, campeón sin tiempo

Fuera de horario, sin jugar, a la espera del resultado del complemento de un partido que se había suspendido 10 días atrás, con el equipo en una provincia distinta a la de su localía (Chaco), y a la espera de un partido por otro torneo (Copa Argentina) ante un rival de otra división, (Talleres de Córdoba, ascendido al Nacional B)…

Con todos esos pequeños detalles, Newell’s Old Boys se consagró Campeón del Torneo Final 2013 del fútbol argentino.

Lanús no pudo con Estudiantes, el pincha mantuvo el 2 a 0 original y la fiesta se trasladó al Parque Independencia, donde muchos simpatizantes comenzaron los festejos. La tarde rosarina celebró un resultado en La Plata mientras el equipo estaba en Resistencia…

El Parque Independencia celebró el resultado de La Plata...
El Parque Independencia celebró el resultado de La Plata…

Pero Newell’s es un merecido campeón más allá de todas estas cricunstancias. Es un equipo que ganó con justicia el campeonato; que mostró solidez y equilibrio, que reunió a jugadores con experiencia y jóvenes con hambre, a un técnico muy capacitado y un plantel de jerarquía.

En el club aguardaban noticias de más de 300 kilómetros
En el club aguardaban noticias de más de 300 kilómetros

Así, podemos desmenuzar algunas claves del campeón. El técnico, está dicho. pero vale agregar que es un hombre serio, preparado, trabajador y que tiene una clara vocación ofensiva. Cada partido Newell’s sale a ganar, sin especulaciones, sin trampas, con la intención permanente de buscar el arco contrario. Así consiguió la mayoría de sus triunfos. El ejemplo más claro es el partido ante Racing; parecía definido con el 2 a 0 favor, la Academia se lo empató, y el conjunto rosarino siempre buscó la victoria, que llegó al final. Una noche de resultados cambiantes nunca lo dejó conforme con el empate.

La base del equipo tiene una enorme jerarquía. Guzmán es un buen arquero. Vergini, cada vez más afirmado. Heinze, de enorme experiencia internacional. Igual que Maximiliano Rodríguez, un jugador que aún puede ser de selección. Pablo Pérez es pura dinámica; Víctor Figueroa, puro fútbol. Villalba se muestra como un 5 de enorme crecimiento. Tonso refleja calidad; Bernardi y Mateo transmiten marca, experiencia y sacrificio.

Ignacio Scocco es un delantero temible. Hábil, potente y con un tremendo poder de gol, es el mejor atacante del fútbol argentino. Urruti también es un gran punta. Entre todos, con el aporte de Cruzado, Cáceres, Casco, y muchos más, conformaron un gran equipo.

Ganaron y gustaron. En algunos partidos, golearon. Y fueron, más allá del tiempo, muy dignos campeones.

 

Hernán O’Donnell

Pasan los años, y la pelota sigue sin doblar

Una situación clara a los dos minutos, el desborde de Rodrigo Palacio al arquero Domínguez, la infracción, el penal y la conversión del “Kun” Agüero. Todo eso en el amanecer del partido. La Argentina conseguía, como casi nunca, ponerse en ventaja en la altura. 1 a 0 y tratar de dormir el partido. Parecía que, esta vez, “la pelota iba a doblar…”

Ecuador vs Argentina

El problema es que es muy difícil “planchar” un partido durante los 90 minutos. Es casi imposible en el llano, mucho más en la altitud de Quito. Y se hizo uesta arriba. Porque la selección iba, pero no volvía. Sólo Di María, pero a Agüero y a Palacio no les era tan sencillo. Mascherano tenía menos ritmo del habitual y por las bandas sufrían Peruzzi y Rojo. Llegó la igualdad de Ecuador tras un centro y la pérdida de la marca de Federico Fernández, apareció Castillo libre y a partir de ahí fue aguantar hasta el final de la primera parte.

Messi IIIComo siempre, el ingreso de Messi era la esperanza Argentina. A partir de Leo se podía imaginar otro desarrollo. La magia del rosarino siempre aparece y puede generar situaciones, peligro, opciones casi de la nada misma. Argentina se veía apurada, presionada, iban 15 minutos del segundo tiempo y Ecuadro había acumulado 4 corners casi consecutivos.

Entre Ayoví, Valencia y Caicedo se las arreglaban para desbordar a la Argentina y someterla a puro centros. El equipo de Sabella buscab con rápidos contragolpes, por medio de Di María, Palacio y Leo, que ingresó a los 15 por Sergio Agüero.

Sin embargo, poco pudo hacer “La Pulga”. Apenas un tiro al arco, un pase a Di María y alguna clarificación en la mitad de cancha. En tanto, se sucedían los desbordes de Ecuadro, los centros a la “multitud” dentro del área de Romero y los repetidos corners.

La expulsión de Mascherano terminó de definir la postura Argentina: ya había ingresado Lucas Biglia, y se le agregó Rodrigo Braña. Aguantar hasta el final fue la consigna.

Argentina logró un punto importante, que suma. Pero comprobó, una vez más, que en la altura, la pelota aún no dobla…

 

Hernán O’Donnell

 

Un punto que suma

El gran desafío era jugar sin Leo Messi, tener un partido bravo, serio, por los puntos ante un rival calificado como Colombia y poder afrontarlo sin el as de espadas.

¿Como respondería el equipo? ¿Como se “plantaría”? ¿Como jugaría, cual sería su fortaleza anímica?

Todas esas preguntas encontraron una rápida respuesta, a partir de la convicción que tuvo el conjunto para afrontar este duro examen. la Argentina salió decidida, con un Angel Di María con las luces encendidas, veloz y picante. Un Lucas Biglia que se disfrazó de “Gago” y la potencia de Gonzalo Higuaín para preocupar en cada intervención. Argentina tuvo 20 minutos muy buenos, de dominio territorial, con intensidad en el juego y firmeza en la defensa, sostenida en la gran labor de Federico Fernández.

Argentina igualó ante Colombia
Argentina igualó ante Colombia

Después llegaron las expulsiones, injustas y apresuradas de Zapata e Higuaín. Tal como analizó luego del partido Alejandro Sabella, allí cambió el desarrollo y la Argentina perdió un hombre que preocupaba en ataque, lo cual generó una pérdida en la línea de juego. Colombia sufrió menos, se acomodó mejor a esa coyuntura. Enseguida se lesionó James Rodríguez e ingresó Cuadrado que tuvo una gran actuación.

Le costó al elenco nacional. Perdió profundidad en sus avances, y mientras Agüero chocaba con Mario Yepes, Di María cambiaba de banda y se diluía en el juego, mientras Walter Montillo se preocupaba más por las trepadas de Zúñiga que por crear en ataque.

Y con el comienzo del segundo tiempo se profundizaron las intenciones: ingresó Luis Perea para rearmar la línea de cuatro, se solidificó el visitante en defensa y a los 11 minutos el técnico de la albiceleste echó mano a la carta ganadora: Messi, por Montillo, a la cancha.

No pudieron quebrar el cero...
No pudieron quebrar el cero…

Se levantó la gente, se encendieron los cantos y creció el entusiasmo. Messi provoca con dos amagues, un giro, un pique, que la gente enseguida sienta que algo bueno está por pasar. Sucede en el Monumental y en Barcelona.

Tuvo varias aproximaciones la Argentina, pero chocó contra la buena noche de Ospina. Un tiro de lejos de Mascherano fue una posibilidad, pero que también revela la falta de oportunidades por generación de juego. Colombia colocó a Mejía para “seguir de cerca a Messi”, según declaró el entrenador José Pekerman, y declaró todo su plan. No tuvo más porque la noche de Jackson Martínez y Radamel Falcao fue opaca.

Le queda a la Argentina la tranquilidad de haber jugado un buen partido, de haber respondido en el aspecto físico, futbolístico y anímico sin la presencia de su máxima estrella. Tuvo muchas virtudes, y cosas para rescatar. Hizo un buen partido cuando los ojos los tenía más encima que nunca. Y además, enfrente estaba Colombia, un rival siempre complicado para el seleccionado nacional.

Por todo lo que se habló, por lo que significó jugar más de un tiempo sin Messi, por el adversario, y todas las situaciones que presentó el partido, el punto suma, no tenga ninguna duda.

 

Hernán O’Donnell