Tiene un antecedente valioso, muy valioso. Corresponde a la Competición Preliminar de la Copa del Mundo FIFA-Brasil 2014: venció a México en el Estadio Azteca, por 2 a 1, en una noche de viernes de septiembre de 2013 que pronto se la conoció como el “Aztecazo”.
Esa victoria fue la síntesis del crecimiento de un equipo que comenzó los años anteriores. Honduras arrancó con fe su camino al Mundial. La consolidación de Luis Fernando Suárez, al frente del equipo desde marzo de 2011, inició un proceso de crecimiento sostenido. Además, el técnico también trabajó con las juveniles, y logró la clasificación a cuartos de final de los Juegos Olímpicos de Londres 2012. Con ese conocimiento de las bases, formó un equipo que creció con la competencia.
Honduras realizó una muy buena campaña de clasificación: eliminó a Canadá y complicó a México, que debió jugar el repechaje para llegar a la Copa en Brasil.
Y ahora quiere un poco más. El entrenador ya ha declarado que pretende llegar a los octavos de final; que su sueño es la clasificación en el grupo. Dice que ése es su primer objetivo. Y después verá como sigue.
El plantel hará una preparación en mayo en Estados Unidos, donde jugará una serie de amistosos ante Turquía, Isarel e Inglaterra. Luego, bajarán a Porto Alegre, para establecer allí su concentración en la cita mundialista.
La victoria amistoas frente a Venezuela encendió la ilusión; aquella noche del “Aztecazo” tuvo continuidad. Honduras tiene una parada brava, y quiere dar la sorpresa.
Hernán O’Donnell