Brasil dominó a Venezuela, pero no pudo quebrar su resistencia

Desde el minuto inicial, Brasil se le fue encima a Venezuela. Con mucha dinámica y juego asociado, apenas comenzó el partido el local volcó el juego hacia el arco de Fariñez. Con la conducción de Philipe Coutinho, el desborde por las badas de Richarlison y Neres, el juego asociado de Roberto Firmino, las subidas constantes de Dani Alves y Luis Filipe, Brasil ahogó a Venezuela..

La “Vinotinto” fue ordenada en defensa. Se paró bien cerca de su área, se replegó con mucha contracción a la marca, se hizo fuerte en el medio con la capacidad del experto Tomás Rincón e intentó salir rápido de contra con la potencia de Rondón. Esos eran sus intentos. En el primer tiempo, la ¨manija” del partido la tuvo Brasil y sólo le faltó concretar. De hecho, en esa etapa marcó un gol no convalidado por el VAR, situación que se repetiría dos veces en el complemento.

La segunda etapa fue un calco de la primera. Sólo el paso del tiempo mermó un poco el empuje de Brasil y de a poco Venezuela se soltó en el campo. Claro que no pudo tener el control de las acciones, porque el balón pasaba más tiempo en los pies de los jugadores brasileños. Cuando tuvo alguna salida se encontró con la velocidad de Filipe Luis, Thiago Sila y la seguridad extrema de Alisson Becker, tal vez el mejor arquero del mundo en estos momentos.

Brasil mantuvo su libreto y sus ambiciones. Le dio forma a algunas variantes para poder desnivelar: Ingresó Everton para darle más dinámica al ataque, Fernandinho por Casemiro y Gabriel Jesús para tener mayor presencia en el área rival. Se la jugó por maniobras colectivas, jugadas individuales y creatividad a la hora de resolver.

Aún así, no pudo quebrar la defensa visitante, que se agrupaba en su área y retrocedía para achicar espacios. Dos tantos más no validados por el VAR aumentaron la impotencia de Brasil, que no pudo salir del 0 a 0 ni evitar los silbidos de su público, a pesar de que dominó el partido, creó muchas situaciones y mereció quedarse con los tres puntos.


Hernán O’Donnell