Hertha se quedó con el clásico de Berlín y sueña con llegar a la Europa League

El clásico de Berlín se jugó distinto a como son los partidos habituales de la Bundesliga. Pierna fuerte, dientes apretados, marca pegajosa, más roces de los comunes y unas cuantas infracciones, más vinculadas a los clásicos de Sudamérica o los países latinos. Un derby que tuvo más similitud con esos clásicos aunque no haya una rivalidad marcada entre los hinchas de los dos equipos, donde el local fue más en el primer tiempo, a partir de la firmeza de Boyata, la salida de Lukebakio y la peligrosidad del brasileño Cunha. Hertha fue el protagonista de los 45′ iniciales, tuvo más la pelota y siempre se mostró más incisivo.

Unión apostó a ceder la pelota, marcar con intensidad y buscar el contragolpe por intermedio de Bulter, su hombre más inquieto.

Las llegadas más claras fueron para el local; la primera tras una salida del arco de Jarstein, un pelotazo largo que Cunha capturó a toda velocidad y cuando entró al área sacó un fuerte remate que tapó Gikiewicz con las piernas. La otra fue muy parecida, tras una buena jugada colectiva y otra vez el arquero visitante tapó, esta vez con las manos, el remate del delantero local.

Se fue el primer tiempo con un cerrado 0 a 0 y la expectativa de un complemento superior.

En el segundo tiempo salió Unión con un poco más de decisión; con una propuesta un poco más ambiciosa, se adelantó en el campo y en los primeros minutos se mostró más ofensivo. Sin embargo, en la primera llegada el local lo sacudió. Fue a los 50′, un centro desde la izquierda e Ibisevic marcó, de cabeza, el 1 a 0. Y eso no sería todo. Salió Unión del medio, lanzó un pelotazo vertical que cortó la defensa local, metió la contra rápida Lukebakio quien se fue en velocidad con todo el campo a favor, gambeteó la salida apurada del arquero Gikiewicz y señaló el 2 a 0 a los 51′.

En poco más de un minuto, el local metía dos golpes fuertes, de esos que significan un knock out.

Y por si fuera poco, enseguida llegó el tercer tanto del local, tras una buena jugada por izquierda, el centro al área, el rebote que le queda a Cunha y a los 60′ marcó con un remate fuerte desde afuera del área el 3 a 0 para Hertha Berlín. Lo que había insinuado Unión había quedado en el olvido. A falta de media hora, el local resolvió el clásico.

Después, la lluvia de cambios. Que no alcanzan para modificar mucho; sólo para regular las cargas, darle más aire o piernas a los equipos, pero si no aparece un jugador desequilibrante, o un cambio posicional que rompa de modo drástico el juego, las variantes de a poco desvirtúan la idea original y terminan los partidos como los amistosos de verano, donde se acumulan modificaciones, se pierde el hilo de los equipos y mientras más jugadores ingresan más les cuesta meterse en el partido y darle una fisonomía a su equipo; 5 cambios producidos en un lapso de quince o veinte minutos es más lo que descomponen a un equipo que lo que lo pueden mejorar.

A los 77′ llegó otro golazo, desde un corner de la izquierda y el cabezazo franco de Boyata, de gran actuación sobre todo en el primer tiempo, quien convirtió el 4 a 0 y liquidó el clásico.

El visitante se desdibujó, como le suele suceder a un equipo que sufre varios goles seguidos, pierde la pelota y tiene que correr tras el balón; el vencedor se ordenó, controló el juego y mediante pases y la inteligente ocupación de espacios se hizo dueño del libreto. El fútbol tiene mucho de anímico, y un equipo muchas veces se refleja a través de su estado de ánimo.

Hertha Berlín supo construir la victoria a partir de su contundencia, la firmeza de Boyata, la dinámica de Lukebakio y la habilidad de Cunha. Fue más en el partido y ya sueña con ganarse un lugar en la Europa League.


Hernán O’Donnell

Vasyl Lomachenko y Teófimo López podrían tener un Septiembre a plena acción

La expectativa mundial por la vuelta de la actividad deportiva es gigante. Como si se sufriera una suerte de abstinencia mundial, el público está ávido de fútbol, básquetbol, automovilismo, boxeo…y todas las disciplinas que a usted se le ocurran. La gente, principal sostén de cualquier actividad económica en tanto sea un consumidor, desea ver deportes porque es parte de su cultura, de su identidad, de su entretenimiento. Y las promesas de grandes espectáculos alimentan la esperanza y la ilusión hacia un mundo mejor después del horror de la pandemia.

En el boxeo hay un hombre consagrado que domina la categoría Ligero y que está considerado uno de los mejores hoy por hoy libra por libra. Vasyl Lomachenko. Fue Campeón Mundial Pluma, luego Superpluma y hoy posee los cinturones Ligero de la Asociación Mundial de boxeo (AMB), Consejo Mundial de Boxeo (CMB) y Organización Mundial de Boxeo (OMB). Tuvo un largo recorrido amateur y luego caminó el profesionalismo a pasos agigantados: en su tercer combate se consagró Campeón Mundial de peso Pluma de la Organización Mundial de Boxeo (OMB), Ahí empezó una cadena de éxitos que incluyen rivales como Guillermo Rigondeuax, Jorge Linares, José Pedraza, Luke Campbell…ahora espera por un rival temible y en ascenso: Teófimo López.

El joven nacido en Brooklyn, de origen hondureño, fue presentado en estas páginas. Teófimo López es uno de los prospectos más interesantes del boxeo de la actualidad. Creció al compás de sus fuertes declaraciones, algunas actuaciones histriónicas y un poder de fuego de sus puños.

El 14 de Diciembre de 2019 abrazó el título mundial de la Federación Internacional de Boxeo tras vencer al ghanés Richard Commey por KOT 2 en el Madison Square Garden. Fue la noche que lo consagró de manera contundente; la que lo metió de lleno en la galería del momento. Tiene el apoyo de su padre, quien cree que no muchos boxeadores se animan a a enfrentar a su primogénito. Y cree que a Lomachenko le ganará sin inconvenientes.

¿Se podrá hacer la pelea este año? “Ninguno de los dos pugilistas quiere hacer una pelea intermedia”, dijo el promotor Bob Arum a la página espn.com, “así que vamos a planificar la contienda para septiembre, aunque no sabemos si se hará con o sin público asistente”, agregó Arum.

Los allegados a los dos boxeadores quieren eso: ir a la pelea derecho, sin riesgos de combates interinos y con todo el tiempo de preparación para enfocarse en ese combate tan especial. Así lo volvió a remarcar Teófimo Sr., el padre del pugilista: “No necesitamos preámbulos. Estamos enfocados en pelear contra Vasyl Lomachenko. Eso es lo que queremos”, dijo el papá de Teófimo.

El ucraniano no se quedó atrás: “López es un buen boxeador, de los mejores. Es joven, tiene hambre, tiene un gran poder. Pero quiero esta pelea, porque él tiene algo que es mío: El título de la FIB”, respondió en un reportaje con Crystina Poncher, de Top Rank.

Concretar una pelea de estas características siempre es difícil. Poder acordar todos los aspectos, las bolsas de dinero, el lugar, la ciudad, el estadio, los jueces, la fecha exacta…en épocas de pandemia y crisis económica puede resultar un poco más complejo.

Pero el gran público, principal sostén del negocio, los que contagian con su pasión y su aporte a cada espectáculo, está expectante e ilusionado. y espera novedades para el mundo que viene.


Hernán O’Donnell