Real Madrid y otro capítulo de su romance eterno con la Copa

Fue un triunfo claro para el Real Madrid, que siempre que juega la Champions League, o la vieja Copa de Campeones, siente que está en el patio de su casa, que juega su torneo favorito, el que domina desde su nacimiento y en el que todos sus competidores, todos, saben de antemano que es un candidato natural. Sea quien sea su plantilla, su equipo titular y su director técnico. Real Madird es sinónimo de la “Orejona”. El que más veces la conquistó, el que mejor la interpretó a lo largo de la historia. El que tiene un romance que parece eterno.

Le bastaron un par de jugadas para sacar la ventaja en el primer tiempo. Era un encuentro equilibrado, sin preponderancia de uno u otro equipo, pero en un para de fogonazos, Real Madrid metió dos puñaladas y le complicó toda la serie al Liverpool.

A los 27′ Toni Kroos recibió un pase corto de la defensa, envió un balón largo y profundo, Vinicius recibió en zona de definición, la paró con el pecho, entró al área y doblegó a la salida del arquero visitante, Alisson Becker. 1 a 0 para el local.

Enseguida aumentó el conjunto Madridista; de un pase largo a la izquierda, Alexander Arnold quiso pasarla al medio y su cabezazo encontró a Asensio solo y libre en medio del área. Entonces, no tuvo más que recibir, encarar al arquero brasileño y resolver por encima para marcar el 2 a 0 a a favor del Real Madrid.

Sin esperar a la finalización de la primera etapa, Jürgen Klopp decidió reemplazar a Keita por Thiago Alcántara a los 41′ de la primera parte.

En el complemento, la visita salió con mayor decisión. Fue a buscar con sus líneas más adelantadas y a los 51′ logró achicar el marcador. Una jugada que comenzó Wijnaldum, la siguió Diogo Jota quien entró al área, limpió el camino y habilitó a Salah, para que el egipcio definiera ante Courtois. El encuentro quedaba 2-1 para el local.

Se despertó el Madrid con ese cachetazo. Liverpool creció en confianza. y el encuentro se hizo de ida y vuelta; a los 62′ una buena maniobra de la visita terminó con un centro de Mané, quien bien pudo haber pateado al arco, y el cierre de Mendy salvó el peligro. A los 63′ se fue solo Asensio y Alexander-Arnold cortó justo cuando el pánico rondaba el arco visitante. Y a los 64′ vino la sentencia del encuentro. Lateral para el Madrid, el balón para Modric y el croata habilitó a Vinicius quien definió con un remate preciso para dejar el marcador 3 a 1 para el local.

Y el sacudón llegó más alto, porque a los 65′ Asensio no pudo girar en un contragolpe muy peligroso que hubiera ampliado aún más el resultado.

A los 69′ Federico Valverde entró en lugar de Asensio, para cuidar el resultado. A los 70′ lo tuvo Benzema con un buen remate, pero controló Alisson.

Liverpool apostó al final con dos modificaciones. Iban 80′ cuando entraron Roberto Firmino en lugar de Kabak y Shaquiri por Diogo Jota. En Madrid, a los 84′ Rodrygo ingresó en reemplazo de Vinicius.

El partido no tuvo más alteraciones. Controló el Madrid el ataque inglés y cerró el partido con un resultado que lo lleva al desquite con tranquilidad y encierra otro capítulo de su romance eterno con la Copa.

Hernán O’Donnell