Arsenal y Huracán se dividieron momentos y no pudieron sacarse ventajas

Fue intenso, entretenido, con más lucha que juego, pero con varias situaciones y el ímpetu de los dos por buscar el partido. Arsenal y Huracán tuvieron sus momentos en el juego, pero no pudieron quebrarse y dejaron un empate que sirve para el futuro, en un encuentro interesante. Arsenal fue algo más en el primer tiempo, Huracán dominó el segundo y el empate no se alejó de la justicia.

El equipo que conduce Leonardo Carol Madelón se alinéo con Alejandro Medina en la valla; línea de cuatro con Julián Navas, Ignacio Gariglio, Gustavo canto y Leonardo Marchi. En el medio, William Machado, Dardo Miloc, Mauro Pittón y Kruspzky; adelante, Alexander Díaz y Sebastián Lomónaco. El “Globo” lo hizo con Lucas Chaves en el arco; Ismael Quilez, Fernando Tobio, Lucas Merolla y Guillermo Benítez. Federico Fattori de volante central; más adelnate, Santiago Hezze, Farnco Cristaldo y Benjamín Garré; y en el ataque, Cóccaro y Rodrigo Cabral.

Se presentó mejor el local en el inicio. Con la movilidad de Alexander Díaz generó varias llegadas; la primera, a los 6′, producto de una buena jugada del juvenil surgido en San Lorenzo, que terminó con un disparo de Lomónaco que atarpó Lucas Cháves. A los 10′, un tiro libre de Marchi se metí en el ángulo superior derecho del arco visitante, pero Cháves la pudo atrapar.

Huracán tuvo un momento con algunas llegadas. A los 14′ Quilez lanzó un centro de la derecha y el cabezazo de cóccaro se fue alto. A los 17′ Garré aprovechó una falla en la defensa local para cortar un pase profundo, entró en diagonal y sacó un buen tiro que pegó en el palo derecho de Medina. Y a los 18′ Cabral sacó un centro que Garré conectó y se fue arriba del travesaño.

Pasado ese lapso, Arsenal volvió a tener el control del juego. A los 23′ Lomónaco encabezó un gran contragolpe y Tobio tapó su remate, que llevaba mucho peligro. Con la dinámica de Pittón y la entrega de Díaz en ataque, Arsenal manejó el primer tiempo, aunque Huracán iba a tener una última chance, a los 40′, con un remate de Cristaldo que tapó muy bien Alejandro Medina.

El conjunto de Parque Patricios arrancó con mayor decisión el segundo tiempo, y a los pocos segundos de juego, Quilez sacó un buen tiro, apenas elevado. Sin embargo, iba a ser el local el que abriera el marcador, tras una contra que encabezó Lomónaco, quien abrió a la izquierda, por allí combinaron Facundo Kruspzky Alexander Díaz, Marchi sacó el centro, Lomónaco se la bajó a Mauro Pittón, y este entró por derecha para sacar untiro cruzado y poner el 1-0 a favor de Arsenal cuando iban 50′ de juego.

Diego Dabove, entrenador del equipo visitante, hizo una variante a los 56′; Lucas Carrizo reemplazó a Guillermo Benítez.

Pudo aumentar el local, a los 57′, cuando un pelotazo al vacío, de Medina al pique de Díaz, fue cortado por Cháves de cabeza al borde de su área; el balón le quedó a Pittó, quien sacó un tiro recto y Cháves volvió a controlar.

Entonces llegó la igualdad de Huracán. Garré combinó con Cabral, el centro llegó al corazón del área, y Cristaldo definió con precisión: 1-1 a los 58′.

A los 62′ Madelón hizo el primer cambio en Arsenal: Lucas Brochero entró por William Machado; luego, a los 67′, llegó la segunda variante en el equipo de Sarandí; Lucas Cano reemplazó a Alexander Díaz. El equipo de Dabove empezó a tener mayor protagonismo. A los 71′ Cabral metió un doble enganche por la banda izquierda, y sacó un potente remate que atajó Medina. A los 76′ vino el segundo cambio en el “Globito”; Maicol Cabrera entró en lugar de Cabral, mientras que el local hizo su tercera variante: Alejo Antilef ingresó por Dardo Miloc.

A los 80′ Hezze sacó un tiro abierto que pasó muy cerca, en otra oportunidad para la visita. Y a los 88′ Garré tuvo un gran tiro, que Medina desvió al corner.

La última fue para el local. A los 89′ Lucas Cano recibió solo en un buen contragolpe, y su tiro fue desviado por Cháves al corner.

Fu lo último de un partido entretenido, intenso, valioso. Los dos quisieron ganarlo. Arsenal fue un poco más en el primer tiempo, Huracán dominó en el segundo. El empate no estuvo tan mal.

Hernán O’Donnell

Platense y Talleres fueron intensos, pero no pudieron quebrar el cero

Fue un partido interesante, más allá del resultado en blanco. Fue intenso, disputado, con varias llegadas a los arcos, situaciones de peligro, y dos equipos que siempre pensaron en ganar el partido. Platense y Talleres desafiaron al frío de la noche de invierno en Vicente López, y nos dejaron una buena sensación, a pesar de que la máxima emoción del gol se negó a dar el presente.

El equipo de Omar De Felippe se presentó con Marcos Ledesma en la valla; Morgantini, González, gastón Suso y Ayrton Costa, en el fondo. Ignacio Schor, Carlos Villalba, Federico Gino y Alexis Sabella en el medio; Mauro Zárate y Jorge Benítez en el ataque. Con mucha subida de los extremos Schor y Sabella, el equipo se hacía ofensivo, porque también se desenganchaba Gino, y solo quedaba Villalba como contención.

El equipo cordobés formó con Alan Aguerre en el arco; Julio Buffarini, Matías Catalán, Rafael Pérez y Enzo Díaz. Rodrigo Villagra y Alan Franco en la contención; Francisco Pizzini, Rodrigo Garro y Diego Valoyes más adelnate, y Michael Santos como punta de lanza.

El “Calamar” tuvo las primeras llegadas. A los 8′ Schor abrió al medio para Carlos Villalba, este jugó a la izquierda para la corrida de Alexis Sabella, quien sacó un remate cruzado y desviado. Volvió a probar Sabella de media distancia, a los 11′, y su tiro salió afuera.

Luego llegó el momento de la visita; A los 14′ Garro remató alto. A los 15′ Diego Valoyes sacó un disparo tremendo que se estrelló en el travesaño. Y a los 16′ Buffarini cruzó un buen pelotazo, que Santos no pudo conectar.

Luego, cuando iban 23′ de juego, se fue lesionado Michael Santos, y lo reemplazó Matías Godoy. Talleres cerró un poco mejor el primer tiempo, con un tiro libre de Garro, a los 29′, que pasó muy cerca del palo izquierdo de Ledesma, y a los 36′ el mismo Garro sacó un buen tiro que pasó desviado.

Platense cambió en el segundo tiempo y armó un dibujo más ofensivo. Solo Villalba delante de la línea de cuatro, y bien volcados al ataque Schor, Gino, Sabella, mientras que el “Conejo” Benítez y Mauro Zárate se dividían el ataque.

Avisó talleres a los 53′ con un tiro de Matías Godoy que atrapó bien Ledesma y a los 59′ llegó la posibilidad más clara del partido: penal para Platense por mano de Rafael Pérez. Lo ejecutó Zárate, tras la revisión del VAR, y Alana Aguerre desvió el tiro, cuando ya iban 62′ de juego.

Omar de Felippe decidió los dos primeros cambios en el local cuando iban 65′; Vicente Taborda entró en lugar de Alexis Sabella, y Horacio Tijanovich ingresó por Federico Gino. Taborda fue al medio, como enlace, y Tijanovich a la banda izquierda.

Insitió el “Marrón”. A los 71′ Benítez disparó de cerca y el balón fue al corner tras dar en un defensor visitante. De ese tiro de esquina, a los 72′, llegó el impecable cabezazo de “Nacho” Schor, y Aguerre sacó el balón al corner, con un manotazo junto al travesaño.

Pedro Caixinha, entrenador de Talleres, abrió la segunda ventana de su equipo a los 74′ y realizó el segundo y tercer cambio. Ortegoza entró por Alan Franco, Gastón Benavídez reemplazó a Francisco Pizzini. Luego llegó el tercer cambio en el local; Rodrigo Contreras entró en lugar de Mauro Zárate, a los 77′ de juego.

Enseguida Ledesma le tapó un buen tiro a Valoyes, y a los 79′ Costas le pinchó la pelota a la entrada de Benítez, tras la salida de Aguerre, y el “Conejo” sacó un disparo que pasó muy cerca. a los 81′ llegó la cuarta variante en el “Marrón”; Juan Cruz Esquivel ingresó en lugar de Ignacio Schor.

En la visita se lesionó Rafael Pérez, y a los 84′ lo reemplazó Julián Malatini. Juan Cruz Esquivel armó una buena jugada a los 87′; Contreras tocó con Jorge Benítez, y el disparo del “Conejo” fue bien controlado por Alan Aguerre. El equipo cordobés tuvo la última chance a los 90+1′ con un tiro de Enzo Díaz que salió un poco alto.

Fue bueno el partido en Vicente López. Platense y Talleres se prodigaron por la victoria, fueron audaces, pero no pudieron romper la paridad, un poco por falta de imprecisión y mucho por la gran noche de los arqueros, Marcos Ledesma y Alan Aguerre.

Hernán O’Donnell

Argentinos venció a Estudiantes, trepa en la tabla, y Milito invita a soñar

Estaba sereno, feliz y satisfecho. Gabriel Milito llegó a la sala de prensa con la habitual disposición para hablar de fútbol. Con ganas, como le gusta. Con tiempo para analizar todos los temas, y con una didáctica clara, que ya es un sello distinguido en sus exposiciones. Habló del partido, del juego, de los futbolistas, y por primera vez se permitió abrir una esperanza concreta. “Podemos soñar, es bueno, porque estimula, pero sin perder de vista la realidad. Hay que tener el equilibrio justo. La realidad es que nosotros no podemos bajar un centímetro nuestra intensidad. Los rivales nos van a poner las cosas muy difíciles. Y nosotros debemos sobreponernos a lo que nos planteen. Siempre con humildad, con mucha humildad. Tenemos que soñar en grande, pero sin perder de vista nuestra realidad. Puede suceder o no, es la realidad. Nuestra arma es el juego colectivo y el esfuerzo de todos. Y sobre todo, la humildad. El fútbol me ha demostrado que con humildad se pueden conseguir cosas. Sin humildad, no”, sentenció.

Argentinos le ganó con mucha claridad a Estudiantes de La Plata. Con esquemas similares, tres centrales, dos carrileros, los mediocampistas con algunos matices distintos y un centrodelantero por equipo, el dilema era como se iba a resolver un partido que a priori parecía que iba a ser muy equilibrado, sobre todo por la disposición en el campo y las posibilidades de ambos de saber utilizar métodos de neutralización del rival. Pero eso no sucedió, Argentinos fue dominador total en el primer tiempo, en la mayor parte del segundo y al final hubo alguna sensación de peligro ante el ingreso de muchos jugadores de buen pie y vocación ofensiva del equipo de Ricardo Zielinsky.

El “Bicho” se alineó con Federico Lanzillotta; Kevin Mac Allister, Marco Di Césare y Lucas Villalba, Javier Cabrera, Federico Redondo, Franco Moyano, Andrés Roa y Luciano Sánchez; Thiago Nuss y Gabriel Ávalos. El “León” se acomodó con Mariano Andújar en la valla; Agustin Rogel, Jorge Morel y Nehuen Paz; Eros Mancuso, Manuel Castro, Jorge Rodríguez, Fernando Zuqui y Emmanuel Más; Pablo Piatti y Mauro Boselli.

Arrancó bien Estudiantes, con dominio de campo, pero en cuanto Argentinos lo golpeó, lo sacó del partido. Fue a los 9′, con un tiro libre a partir de una falta a Andrés Roa, quien enganchó de la izquierda hacia el medio y adelante. La ejecutó Lucas Villalba, el tiro dio en la berrera, el rebote le llegó a Cabrera, este lanzó el centro cabeceó Ávalos y Andújar rechazó con gran esfuerzo un terrible cabezazo. Le quedó otra vez a Ávalos, lanzó el centro y Thiago Nuss convirtió para poner el 1-0 a favor de Argentinos Juniors.

Ahí se acentuó el dominio local. A los 15′ vino un corner desde la izquierda y el disparo de Kevin Mac Allister se fue apenas arriba del travesaño. Estudiantes contó con una oportunidad muy clara a los 17′, tras una desinteligencia defensiva del local; quedó solo Pablo piatti para definir, pero su tiro cruzado se fue desviado.

Era más el local. Con el empuje de Villaba desde el fondo, el motor de Franco Moyano en el medio y la habilidad rápida de Roa, tenía el control territorial y el manejo de los tiempos. Cerró el primer período con un cabezazo de Redondo, a los 43′, que salió muy cerca.

Estudiantes comenzó el complemento con una variante. Mauro Méndez ingresó por Eros Mancuso. El ingresado se ubicó como delantero por izquierda y Manuel Castro ocupó el andarivel de Mancuso.

Pero mantenía el dominio el equipo de La Paternal, y a los 49′ Gabriel Ávalos desvió, por arriba, un tiro con olor a concreción. El “Pincha” lo tuvo a los 51′, con un cabezazo de Morel que dio en el travesaño y picó en la línea.

A los 57′ debió salir, con una moelstia, Lucas Villaba, y lo reemplazó Leonel González, quien cumplió un gran partido. Entró muy bien para reemplazar a quien era una de las figuras de la noche, y lo hizo con total sobriedad. De hecho, a los 61′ inició una gran jugada, combinó con Moyano, este abrió a Redondo, el pase fue a Roa y su tiro salió por arriba del travesaño.

Vinieron dos cambios más, uno en cada equipo, a los 64′ de juego. En la visita, la segunda variante fue la de Rolheiser por Pablo Piatti, y el segundo cambio en el local fue el ingreso de Nicolás Reniero por Thiago Nuss.

No mejoraba el “Pincharrata”, y a los 73′ llegaron la tercera y cuarta modificación. Leandro Díaz entró en lugar de Mauro Boselli, y Leonardo Heredia reemplazó a Zuqui. Enseguida llegaron la tercera, cuarta y quinta variante del conjunto local. Iban 78′ y Alan Rodríguez entró por Javier Cabrera, Mariano Bíttolo ingresó por Andrés Roa, mientras que Gastón Verón ingresó por Gabriel Ávalos. El último cambio de la noche fue a los 83′; Franco Zapiola remplazó a Emmanuel Más.

El “León” tuvo un par de oportunidades sobre el cierre del partido. A los 86′ fue la más clara, con un tiro de Rolheiser que desvió muy bien Lanzillotta, a los 88′ Heredia elevó mucho su remate y a los 90′ Morel abrió para Méndez, este sacó el centro y Díaz definió por arriba. El cierre, a los 90+1′, fue con la expulsión de Ricardo Zielinsky, entrenador de Estudiantes, por protestar.

Ganó muy bien Argentinos. Supo encontrar los espacios, generar peligro, convertir y dominar a su rival. Cuando el campeonato empieza su tramo de decisiones, Gabriel Milito invita a soñar.

Hernán O’Donnell

El empate de Arsenal y River fue frío como la noche de invierno

Se contagiaron del clima. Porque todo lo que prometían Arsenal y River, y nos hizo ir con mucha ilusión a Sarandí, terminó en un empate frío, discreto, apagado. Jugó un poco mejor Arsenal, supo neutralizar a su rival y tuvo las situaciones más claras. El equipo de Marcelo Gallardo no tuvo claridad, generó poco fútbol y contó con llegadas esporádicas. Pero el empate le quedó bien al resultado final.

El conjunto de Leonardo Carol Madelón se alineó con Alejandro Medina en la valla; Cristian Chimino, Ignacio Gariglio, Gustavo Canto y Damián Pérez; William Machado, Mauro Pittón, Dardo Miloc y Facundo Kruspzky; adelante, Lucas Cano y Sebastián Lomónaco.

River se presentó con Franco Armani de arquero; Andrés Herrera, Emanuel Mammana, Javier Pinola y Milton Casco; doble volante en el medio, De La Cruz y Enzo Pérez. Adelante, Pablo Solari, Juan Fernando Quintero y Agustín Palavecino; de centro delantero, Lucas Beltrán. La intención era que los media punta se juntaran con Beltrán y se formara un 4-2-4, pero le costó al “Millonario” hacerse fuerte en ataque.

A los 2′ probó Sebastián Lomónaco desde la izquierda, y lejos, y el balón salió apenas arriba del travesaño de Armani. Volvió a probar Lomónaco a los 3′, y su tiro se fue alto. Otra vez Lomónaco lanzó un centro, desde la derecha, y Mammana sacó al corner, cuando iban 15′. A los 22′ fue Kruspzky el que exigió a Armani. Arsenal era un equipo realista, sostenido en la solidaridad y la presión constante. River se apoyaba en el talento de Palavecino, pero no prosperaba en sus compañeros. De la Cruz estaba impreciso y Quintero discontinuo. Solo Pinola sostenía con prestancia la verticalidad del equipo.

Volvió a tener una chance el local, a los 25′, con un cabezazo preciso de Lucas Cano, tras un buen corner, que controló Armani. River tuvo su situación más clara, y casi la única del primer tiempo, a los 38′, cuando Javier Pinola metió un buen cabezazo que pasó cerca y el rebote lo controló Medina.

Marcelo Gallardo determinó dos modificaciones para comenzar el segundo tiempo. Borja entró por Quintero, y Simón reemplazó a Palavecino. Mejoró la visita. A los 50′ llegó con un remate franco de Simón que atrapó Alejandro Medina. Respondió el local con un disparo de Mauro Pittón que pasó por arriba del travesaño, a los 55′ de juego.

Cuando iban 62′, Madelón realizó la primera variante en Arsenal; Lucas Brochero ingresó por Lucas Cano. Kruspzky pasó más adelante, y Brochero se ubicó en la banda izquierda. El partido era más equilibrado, y River comenzó a tener mayor protagonismo que el que había tenido en el primer período. A los 67′ tuvo una chance muy clara; centro de Milton Casco desde la izquierda, y el cabezazo de Miguel Borja se fue muy cerca del palo izquierdo de Medina.

A los 69′ Marcelo Gallardo realizó otras dos modificaciones en su alineación; Bruno Zuculini entró por Enzo Pérez, en el tercer cambio, y Aliendro reemplazó a De la Cruz, en el cuarto cambio visitante. Madelón cambió a los 74′, y puso a Alexander Díaz en lugar de William Machado. Brochero pasó a la derecha, Kruspzky a la izquierda y Díaz acompañó a Lomónaco.

El local contó con una gran posibilidad a los 77′, tras un corner de la derecha, cabeceó Alexander Díaz y Rodrigo Aliendro desvió el balón de cabeza, sobre la línea.

Gallardo arriesgó más a los 87′, con el ingreso de José Paradela por Milton Casco. Quedó con tres hombres en el fondo River, y sobre salió Pinola para tapar todos los baches. Tuvo una chance a los 90+1′ con una llegada de Simón que atrapó Medina, y el local lo tuvo a los 90+2′, con un disparo de Sebastián Lomónaco que pasó muy cerca.

Creció el partido al final, hubo algunas llegadas, pero Arsenal y River tuvieron una noche fría, de pocas luces, y el empate les quedó bien.

Hernán O’Donnell

Argentinos empezó el camino de la reconstrucción con un triunfo convincente

Mucho se habló de los jugadores que se fueron de Argentinos Juniors; de figuras muy importantes, que al llegar a un tercio del torneo, se alejaron del plantel, por ventas muy importantes en lo económico, tanto para la institución como para los futbolistas. Casi inevitables, las transferencias hicieron impacto en el equipo porque las salidas fueron de piezas muy valiosas. Fausto vera, en primer lugar, un jugador fundamental en el esquema de Gabriel Milito, con un futuro muy grande por delante. Luego, Gabriel Carabajal, hábil, pensante, armador y de excelente remate. Algo parecido con Gabriel Florentín, de características muy valiosas. Y Matías Galarza, un joven también muy promisorio.

Pero no se desesperó el entrenador y con mucha paciencia empezó a rearmar el rompecabezas. Incorporó a Alan Rodríguez, de Boston River de Uruguay, como antes lo había hecho con Leonel González, proveniente de Godoy Cruz de Mendoza. Superó el empate ante Banfield, la derrota con San Lorenzo, la caída en Córdoba frente a Talleres, y en la vuelta a La Paternal, contra Unión se reencontró con la victoria, tras una convincente actuación.

Milito no modificó el esquema. El arquero fue Federico Lanzillotta; tres centrales, Kevin Mac Allister, Miguél Torrén y Lucas Villalba. En el medio Javier Cabrera, Federico Redondo, Franco Moyano, Andrés Roa y Luciano Sánchez; adelante, Thiago Nuss y Gabriel Ávalos.

Unión se presentó con un definido 1-4-1-4-1; Santiago Mele al arco; Francisco Gerometta, Franco Calderón, Diego Polenta y Lucas Esquivel; Juan Carlos Portillo de volante tapón. Adelante, Imanol Machuca, Juan Ignacio Nardoni, Mauro Luna Diale y Bryan Castillo, y adelante Junior Marabel.

El “Bicho” avisó a los 3′ con un tiro de Redondo que tapó Mele, abajo junto a su palo derecho. A los 6′ fue el centro de Javier Cabrera, el cabezazo de Mac Allister y Mele volvió a controlar. A los 8′ el centro fue de Villalba, desde la izquierda, y el cabezazo de Nuss se fue por arriba del travesaño. Era mucho más el local, a partir del trabajo de Franco Moyano, eje en la mitad de la cancha, y el empuje desde el fondo de Lucas Villalba. Volvió a tener una oportunidad a los 22′, tras un corner de la derecha y el cabezazo de Torrén, cruzado, que se fue afuera. Más tarde, cuando iban 25′, un pelotazo largo del fondo fue bien bajado por Gabriel Ávalos, Nuss le ganó en el pique a Polenta, y su disparo se fue desviado.

Y a los 36′ abrió el marcador. Un pelotazo largo de Lucas Villalba, Ávalos la bajó de cabeza a la izquierda, se la llevó Andrés Roa, llegó al fondo y lanzó el c entro al corazón del área, para la entrada clara de Gabriel Ávalos y su cabezazo puso el 1-0 a favor de Argentinos Juniors, tras la confirmación del VAR.

Era todo del local. El conjunto de Santa Fe no lograba hacer pie en el partido, y siguió Argentinos con su dominio sostenido. A los 39′ tuvo tiro libre de la derecha, por el medio entró Villalba y su disparo salió apenas alto. A los 45+2′ Thiago Nuss llegó a la puerta del área y remató por arriba. recién al final del primer tiempo tuvo Unión su primera llegada del partido; iban 45+7′ cuando Marabel metió el cabezazo que Lanzillotta contuvo abajo.

Gustavo Munúa, entrenador del equipo de Santa Fe, dispuso dos modificaciones para comenzar el segundo período. Federico Vera entró en lugar de Gerometta, y Enzo Roldán ingresó por Juan Carlos Portillo. Pero no mejoraba Unión, y a los 59′ Munúa resolvió hacer dos variantes más: Kevin Zenón entró por Machuca, y Jonatan Alvez reemplazó a Mauro Luna Diale.

Tuvo una llegada la visita, a los 61′, pero Marabel desperdició la oportunidad al definir con el barzo una jugada factible de convertir.

El manejo y el control continuaban en poder del local, más allá de cierta levantada de Unión. A los 65′ Federico Redondo se metió del centro a la derecha, sacó un disparo cruzado y no llegó Roa a definir. Después lo tuvo Unión, con una entrada franca de Marabel, a los 70′, Lanzillotta tapó en dos tiempos; primero con el pie y luego, tras ese rebote, con un salto al aire.

A los 75′ Gabriel Milito dispuso el primer cambio en el local, con el debut del uruguayo Alan Rodríguez que ingresó por Andrés Roa. Más tarde, a los 81′, Gastón Verón ingresó por Nuss, y Nicolás Reniero entró en lugar de Federico Redondo. Enseguida lo tuvo Verón, quien aprovechó un cabezazo hacia atrás de Calderón que quedó corto y sacó un disparo que atrapó Mele, cuando iban 84′ de juego.

Munúa se jugó la última carta a los 86′, con el quinto cambio: Mariano Peralta Bauer ingresó en lugar de Nardoni. En ese minuto Argentinos aumentó el marcador; un pelotazo largo, Gabriel Ávalos le ganó la disputa a Vera, se fue por izquierda y metió un remate fuerte y cruzado que significó el 2-0 para Argentinos Juniors, a los 86′ de juego.

Partido definido, aunque quedaban algunos minutos. A los 89′ Milito hizo el cuarto y quinto cambio de su equipo: Gonzalo Lugo entró por Gabriel Ávalos, y Mariano Bíttolo reemplazó a Javier Cabrera. Sobre el cierre tuvo Unión otra chance, a los 90+3′, con una entrada de Vera por derecha, el remate al primer palo y Lanzillotta, que había sufrido un golpe en el primer tiempo tras un choque casual con su compañero Kevin Mac Allister, y pareció estar sentido durante el resto del partido, sacó el tiro con un vuelo fenomenal.

Fue el cierre para la noche del reencuentro de Argentinos Juniors, que se reencontró con la victoria y empezó a diseñar el nuevo equipo, tras la salida de varias figuras.

Hernán O’Donnell

Platense reaccionó a tiempo y se llevó una victoria muy celebrada

Todo parecía oscuro para el “Calamar” cuando terminó el primer tiempo ante Banfield. Porque el equipo no había aparecido, porque incluso se había visto superado, su rival manejaba la pelota, y con la gente fastidiosa porque no surgían respuestas. Sin embargo, todo cambió en el complemento y Platense remontó el marcador hasta conseguir el triunfo y darle a su gente una gran alegría, que celebró con mucho entusiasmo.

Apenas se habían acomodado en el campo de juego y la visita ya ganaba. porque Maximiliano Cuadra definió con mucha categoría una maniobra que venía desde la derecha, y con un remate en comba venció la estirada de Marcos Ledesma, para poner el 0-1 a favor de Banfield, cuando iban solo 2′ de juego.

Platense debió pelear contra ese gol desde el inicio. Con Ledesma en la valla; Morgantini, Pignani, Gastón Suso y Juan Infante; Carlos Villalba y un poco más adelante Federico Gino; Ignacio Schor, Mauro Zárate y Alexis Sabella; y de centro delantero, Jorge Benítez. Cuando el balón lo tomaba la visita, se replegaba en un 4-4-2; con Schor, Villalba, Gino y Sabella, y más adelante, Zárate y el “Conejo” Benítez.

El conjunto de Claudio Vivas se aline{o con Facundo Cambeses en el arco. Línea de cuatro con Emanuel Coronel, Gregorio Tanco, Dylan Gissi y Luciano Abecasis. Dos medios, Nicolás Domingo y Alejandro Cabrera. Un enlace, Jesús Dátolo. Tres hombres de punta: Agustín Urzi, Ramiro Enrique y Maximiliano Cuadra. Un esquema novedoso y con mucha movilidad en sus mediocampistas. Con buen trato y manejo del balón, Banfield se las arregló para tener el comando del partido en el comienzo. El local probó con una chilena de Zárate, a los 5′, que se fue por arriba. pero le costaba llegar.

Recién a los 28′ volvió a tener una oportunidad el “Marrón”, con un tiro lejano de Alexis Sabella que se fue un poco alto. Y a los 38′ volvió a insistir el volante surgido en San Lorenzo, pero otra vez el tiro salió desviado.

Se fue preocupado el “Calamar” al descanso, porque el “Taladro” le había manejado la pelota. Tan disgustado estaba que se excedió en las prtestas al árbitro, y Ruiz Díaz, que estaba en la lista de los suplentes, se fue expulsado en el entretiempo, camino al vestuario, por sus reclamos al juez. Pero reaccionó en el segundo tiempo.

Ya a los 46′ llegó con un buen tiro de Benítez, que tapó Cambeses. A los 53′ Federico Gino recibió de Benítez, y sacó un buen tiro que el arquero visitante sacó al corner. Y a los 56′ llegó el tiro de esquina, la infracción de Emanuel Coronel y el penal para el local.

Lo ejecutó Mauro Zárate, a los 57′, y puso el partido 1-1. Ahí cambió el juego. Nació un partido diferente. Platense se agrandó y Banfield se metió en un inexplicable tobogán. Todo lo que había hecho se derrumbó como un castillo de arena, mientras que el “Marrón” creció hasta hacerse amo y señor del juego.

A los 61′ Omar De Felippe, el técnico local, hizo su primera variante: Horacio Tijanovich reemplazó a Alexis Sabella. Más profundidad por la banda izquierda.

Después, a los 64′, vino el corner desde la izquierda ejecutado por Mauro Zárate, el rebote y la perfecta definición de Jorge Benítez para dar vuelta el resultado y poner a Platense adelante por 2-1.

Claudio Vivas, el entrenador del “Taladro”, decidió hacer tres cambios en su primera ventana; J. Cruz entró en lugar de Nicolás Domingo, Matías González reemplazó a Agustín Urzi, y Nicolás Bertolo ingresó por Jesús Dátolo. Qudedaron González, Cabrera y Bertolo en mitad de cancha, Cruz, Enrique y Cuadra en ataque.

Entonces también cambió el sistema De Felippe; a los 74′ realizó su segundo y tercer cambio, en su segunda ventana de posibilidades. Rodrigo Contreras ingresó por el “Conejo” Benítez, y Juan Cruz Esquivel reemplazó a Ignacio Schor. El equipo se paró con la misma línea de cuatro, Villalba por delante como volante tapón, adelante Horacio Tijanovich, Federico Gino, Mauro Zárate y Esquivel; y Contreras de centro atacante. 4-1-4-1.

Pero el dueño del partido ya era el conjunto local. A los 77′ Zárate pudo aumentar a través de un tiro libre que se fue alto. A los 78′ desbordó Contreras por izquierda, sacó el centro y no llegó Tijanovich a conectar.

Vicente Taborda entró por Muaro Zárate a los 82′, en el cuarto y último cambio local, mientras que Perales reemplazó a Ramiro Enrique en el equipo visitante.

Todo era color marrón. Banfield ya no tenía energías ni claridad. El manejo del primer tiempo se le había diluído. Y el local pudo aumentar a los 90+1′, cuando Taborda no llegó a conectar el balón, en una entrada clara al área. Cerró la noche con un golazo, que nació en una salida clara de Pignani, el pelotazo a Contreras, este la bajó con un toque sutil a Esquivel, se fue por la banda y habilitó a Contreras, quien marchó solo hacia la salida de Cambeses y puso el 3-1 para Platense cuando iban 90+4′ del partido.

Así cerró su noche alegre el “Calamar”. Porque supo reaccionar a tiempo, revirtió un desarrollo desfavorable y dio vuelta el resultado con inteligencia, actitud y mucho espíritu.

Hernán O’Donnell

Real Madrid se apoyó en su oficio y sumó una Copa más a su vitrina

Helsinki se llenó de fútbol. Con la ya tradicional UEFA Super Cup, la Supercopa de la UEFA, la que se dirime entre los campeones de la UEFA Champions League y de la UEFA Europa League, que va por sus bodas de oro y que esta vez encontró al Real Madrid y al Eintracht Frankfurt, dos equipos que sostienen una propuesta atractiva, al margen de los antecedentes inmediatos, porque Madrid está en el inicio de la temporada y Frankfurt viene de caer por 1-6 en su casa ante el Bayern Munich, en la primera fecha de la Bundesliga.

El conjunto de Carlo Ancellotti se alistó con su esquema tradicional; Courtois en el arco; Carvajal, Militao, Alaba y Mendy al fondo; Toni Kroos, Casemiro y Luka Modric; Federico Valverde, Benzema y Vinicius. El conjunto alemán se presentó con Trapp en la valla; Touré, Tuta y N’Dicka; Knauff, Rode, Sow y Lenz; Lindstrom y Kamada; y el colombiano Rafael Santos Borré de centro delantero.

Crédito: @realmadrid

Salieron a estudiarse; Madrid un poco más adelantado, Eintracht, a la expectativa. Así estuvieron en los primeros diez minutos, el clásico round de estudio. A los 13′ el equipo del austríaco Oliver Glasner llegó por primera vez, a través de una entrada de Kamada, quien se fue solo hacia el arco español y Courtois interrumpió su tiro con una gran atajada. Contestó el Madrid con una gran jugada colectiva, a los 16′, con la proyección de Federico Valverde por derecha, el centro para Benzemá, el francés abrió para Vinicius Jr., y salvó Tuta sobre la línea, cuando Trapp ya parecía vencido.

Era equilibrado el juego, hasta que a los 36′ llegó la apertura del marcador. Corner desde la derecha para el equipo Madrileño, Benzemá la bajó de cabeza, Casemiro la volvió a cabecear hacia atrás, y Alaba, ya solo frente al arco convirtió el primer gol del partido, para poner el 1-0 a favor de Real Madrid.

Allí pareció que el partido tomaba un rumbo casi definitivo, porque apareció todo el oficio del Madrid para manejar, el balón, los tiempos y el espacio de juego. Pudo aumentar a los 40′, con un remate de Benzemá que se fue muy cerca del palo derecho de Trapp. Y también contó con la pequeña cuota de respeto que siempre le tienen los árbitros, asistentes, y ahora el VAR, de todo el mundo, porque no ven aquellas cosas, a veces chiquitas, a veces más grande, que siempre lo benefician. En este caso, una infracción clara, y sin pelota, de Carvajal a Lenz, que nadie de los que imparten justicia fue capaz de ver, a pesar de la claridad con que se cometió. Una jugada de posible expulsión que fue inadvertida, cuando iban 44′ de juego.

En el segundo tiempo Madrid se agazapó y esperó el momento de dar el golpe final; a los 54′ Vinicius sacó un fuerte tiro que desvió Trapp, tras un rebote. Allí vinieron dos variantes en el equipo alemán. Iban 57′ cuando Mario Gotze ingresó por S. Rode, y R. Kolo Muani reemplazó a J. Lindstrom; pero le costaba tener profundidad, y a los 60′ Casemiro estrelló un remate en el travesaño.

Frankfurt tuvo su chance a los 63′, con una entrada libre de Knauff que controló bien Courtois. Y a los 64′ se resolvió el partido; centro de Vinicius desde la izquierda, y Benzemá sacó un disparo fortísimo que venció toda la resistencia alemana y puso el partido 2-0 para el Real Madrid.

Entonces Carlo Ancellotti, el director técnico del equipo español, decidió hacer una variante: a los 66′ Rodrygo ingresò en lugar de Luka Modric; Glasner se la jugó a los 69′ con el ingreso de lucas Alario por Touré. A jugar con más delanteros y solo dos defensores. Más tarde, a los 75′ E. Camavinga reemplazó al uruguayo Federico Valverde.

Crédito: @realmadrid

El partido se jugó bajo el control del equipo “Merengue”. Se le hizo difícil a Frankfurt entrar y los últimos cambios madridistas le cerraron todos los caminos. Se jugaban 84′ cuando D. Ceballos entró en lugar de Vinicius, A. Tchouameni reemplazó a Toni Kroos, y A. Rudiger ingresó por Dani Carvajal.

Real Madrid celebró una nueva victoria. Con oficio, categoría, el peso de sus individualidades y de su camiseta, hizo valer la historia y le sumó una Copa más a su nutridísima vitrina.

Hernán O’Donnell

Atlético Goianiense no tuvo inconvenientes para superar a Nacional y llegar a las semifinales

Con la ventaja conseguida en el Gran Parque Central de Montevideo, Atlético Goianiense salió a jugar el desquite con mucha tranquilidad, pero también muy despierto, para sorprender a Nacional y propinarle un golpe duro apenas comenzó el partido desquite en el Estadio do Governo do Estado de Goiás, más conocido como “Estadio Serra Dourada”, en el corazón de Goiania. Iban 4′ cuando el local sacó ráido un lateral desde la derecha, Luiz Fernando tomó el rebote tras un intento de un compañero, y de media vuelta sacó un disparo preciso que venció a Rochet, y puso el 1-0 a favor de Atlético Goianiense.

El equipo de Pablo Repetto sintió el golpe. Y fue, con más actitud que claridad, con mucha vergüenza deportiva. Goianiense esperaba. Sostenido en Renán, su arquero, de muy buen primer tiempo; línea de fondo con Hayner, Wanderson, Klaus y Arthur Henrique. Doble pivot en el medio: Baralhas y Edson, más adelante Leo Pereira, Jorginho y Luiz Fernando, y el argentino Diego Churín como centro delantero.

El conjunto uruguayo salió con Rochet al arco; en el fondo, José Luis Rodríguez, Leo Coelho, Marichal y Camilo Cándido; Alfonso Trezza, Felipe Carballo, Yonatan Rodríguez y Diego Zabala, en una segunda línea de cuatro; adelante, de media punta, Franco Fagundez, y el “Puma” Gigliotti de atacante central.

Tuvo una oportunidad el “Bolso” a los 23′ con un tiro libre de la derecha, Marichal remató, el rebote lo tomó Fagúndez y el balón volvió a ser sacado por la defensa. Buscaba con la trepada de los laterales, sobre todo Cándido, pero le costaba entrar a Nacional. Y el final del primer tiempo le dio un golpe muy fuerte.

Porque a la ilusión de la buena maniobra, a los 40′, cuando Fagúndez abrió a la banda izquierda para el pique de Camilo Cándido, el centro y Gigliotti que no pudo llegar, esa esperanza que se abrigaba con una disposición del equipo en campo contrario, los brasileños la sacudieron de un tremendo contragolpe, cuando recuperaron el balón sobre Rodríguez, se fueron en velocidad, Churin abrió hacia la derecha para la entrada rápida de Baralhas, y este definió sobre la slaida de Rochet para colocar el encuentro 2-0 para Atlético Goianiense, a los 45′ de juego.

Entonces, se cerró el primer tiempo. Con un marcador que se ampliaba a partir de la victoria del equipo brasileño en tierras uruguayas.

Pablo Repetto dispuso tres modificaciones para comenzar el segundo tiempo. Alex Castro entró por Alfonso Trezza; Luis Suárez ingresó en lugar de Emmanuel Gigliotti, y Brian Ocampo reemplazó a Diego Zabala. En el local, Jefferson ingresó por Arthur Henrique, en el lateral izquierdo.

A los 47′ un centro de Castro a Luis Suárez, fue cortado por Renán, en otra intervención acertada del arquero. Y contestó el local, a los 49′ con una buena proyección que Rochet pudo interrumpi con una salida veloz.

El partido estaba definido con el final del primer tiempo, pero por si hiciera falta, el local volvió a pegar, y a los 52′ Luiz Fernando definió, con una ejecución perfecta, una maniobra colectiva de derecha a izquierda para poner el 3-0 a favor de Atlético Goianiense.

Fue demoledor para Nacional. Porque el local mostraba mucha facilidad para llegar con pocos toques a su arco, y porque los intentos desesperados se ahogaban en el embudo que proponía la escuadra brasileña.

Jorginho, el Director Técnico local, hizo dos modificaciones a los 61′; W. Rato ingresó por el volante Jorginho, y Airton entró en lugar del delantero argentino Diego Churin, mientras que Pablo Repetto, el entrenador visitante puso, a los 65′, a Diego Rodríguez por el lesionado Felipe Carballo.

El encuentro se hizo entretenido, porque se abrieron muchos espacios y los dos equipos buscaron sin especualción. Nacional, para llegar al tanto del honor. Goianiense, porque la contra le sentaba cómoda.

Suárez remató franco, a los 68′, y Renán atrapó con seguridad, en una oportunidad para la visita. A los 69′ Coelho fue el que intentó de lejos y otra vez Renán contuvo el disparo. El encuentro estaba resuelto, la clasificación del local no corría peligro. A los 78′ salió Coelho e ingresó Laborda, en el “Bolsilludo”, mientras que el el equipo local Marlon Freitas reemplazó a Edson Fernando, y Michel Custodio ingresó por Wanderson, a los 79′ de juego.

Fagúndez probó de lejos, a los 82′, y Renán desvió el balón con un vuelo tremendo. Eso tenía el partido; se había hecho abierto, con muchos espacios, y con dos equipos que jugaban más por amor al juego que por una clasificación que ya estaba definida.

Pero quedaba algo más por ver; cuando iban 90′ y solo faltaba jugar tres minutos de adicional, Luiz Fernando le dio un golpe al “Torito” Rodríguez que le valió la expulsión por parte del árbitro argentino Darío Herrera. Incomprensible la inmadurez del futbolista brasileño, que se ganó una roja y la exclusión de la semifinal en un partido que estaba terminado. Insólito.

Nacional se fue de la Copa CONMEBOL Sudamericana con una actuación digna, sin brillo pero sin caer en la tentación del golpe y la violencia. Se resignó a su suerte, aceptó la superioridad del adversario y luchó con armas nobles. Atlético Goianiense fue muy superior en los dos encuentros y empieza darle forma al sueño de llegar a Córdoba para disputar la gran final.

Hernán O’Donnell

Atlanta y Chacarita dividieron honores y el barrio terminó en paz

El cásico entre Atlanta y Chacarita es uno de los más añejos, atrayentes y tradicionales del fútbol porteño. Ambos clubes representan un pedazo grande de Buenos Aires, y han mantenido una rivalidad que parece eterna y ha sobrevivido a miles de problemas que ambas instituciones supieron enfrentar y sobrellevar con esfuerzo, dignidad, y el acompañamiento de su gente. Nada detuvo a “Bohemios” y “Funebreros”, que desde aquellos comienzos compartidos en dos manzanas del centro geográfico de Buenos Aires, allí donde la calle Humboldt se cruza con Murillo y Padilla, más alla Darwin, para el otro lado las vías del ferrocarril y la Avenida Dorrego, se entreveraron en duelos para el recuerdo. Porque si bien los orígenes de Atlanta fueron en Parque Chacabuco, muy pronto se afincó en Villa Crespo, y allí en la expansión que abarca el barrio de la Chacarita encontró a su clásico rival.

Han capeado temporales y salieron adelante. El hoy es el de siempre; a puro esfuerzo, a puro corazón. Con el sentimiento impostergable, y la ilusión puesta en el horizonte de la Primera División, la llamada Liga Profesional en estos tiempos modernos. La 28va fecha del Campeonato de Primera Nacional “Malvinas Argentinas” 2022, los encontró otra vez frente a frente. Con una distancia en la tabla, “Chaca” un poco más cerca de los puestos de clasificación, el “Bohemio” con la intención de recomponer su imagen. Y así salieron a jugar.

Con mucha decisión, con ganas, con vocación ofensiva. Fueron unos quince minutos frenéticos, veloces, valorables. Atlanta un poco más adelantado, Chacarita con elaboración rápida para llegar directo al arco de Rago. Luego, se diluyó el juego, prevaleció la cautela y bajaron las emociones.

El local se alineó con “Pancho” Rago en la valla. Línea de fondo con Matías Molina, Alan Pérez, Rodrigo Colombo y Franco Perinciolo. En el medio, Alejo Dramisino, Federico Marín y Evelio Cardozo; en el ataque, Juan Bisanz, Matías Donato y Nicolás Medina.

Chacarita formó con Federico Losas al arco; Tobías Fernández, Alejandro Manchot, Abel Masuero y Lautaro Formica en el fondo; Ricardo Blanco, Hernán Fredes, un poco más retrasado Luciano Perdomo, y Juan Cruz González. Y adelante, Leandro Godoy e Ignacio Russo.

A los 6′ probó Blanco y respondió Rago; a los 7′ contestó Atlanta, con un tiro de Matías Molina que salió desviado. A los 9′ Chacarita avisó con un tremendo remate de Russo que Rago controló abajo junto a su palo derecho, y a los 10′ un centro de Juan Bisanz no pudo ser conectado por Nicolás Medina. Era un festival de ataques y llegadas, que volvió a tener al local cerca con un tiro de Matías Molina que se desvió y lo pudo controlar Losas, a los 16′ de juego.

Hasta allí, impecable. Pero la intensidad empezó a bajar. Y el partido se hizo más luchado en el medio. A los 26′ el “Bohemio” tuvo una buena oportunidad, cuando el balón, tras un tiro libre, le quedó a Donato y su remate, al medio, fue tapado por Losas. Atlanta intentaba por las bandas, con el tándem Molina, Dramisino y Medina por derecha, o cuando Evelio Cardozo se juntaba por izquierda con Juan Bisanz. El “Funebrero” se sostenía en la enorme categoría de Hernán Fredes, atento para recuperar, hacer relevos y generar acciones de ataque, con buenos pases y claridad para jugar, hasta ser la figura de la cancha.

El primer tiempo se cerró con un disparo de González, de Chacarita, que se fue por arriba del travesaño.

Para el segundo tiempo, la visita anunció una variante: Nicolás Chaves reemplazó a Lautaro Formica. El encuentro mantuvo la tensión de todo clásico, pero el nivel de juego no fue el mismo que al inicio. A los 49′ Blanco sacó un buen remate que se fue alto. El “Bohemio”, a los 54′, tuvo una linda posibilidad con un tiro libre de Evelio Cardozo que pegó en el travesaño.

Cuando iban 59′ el local abrió la primera ventana de cambios con tres modificaciones. Juan Galeno reemplazó a Evelio Cardozo; Julián Marcioni ingresó en lugar de Nicolás Medina, y salió lesionado Alan Pérez, quien fue reemplazado por Martín García.

Cuando iban 66′ llegó la apertura del marcador. Corner desde la izquierda para la visita, Blanco lo ejecutó al corazón del área y Abel Masuero sacó un tremendo remate, de abajo hacia arriba, que se metió en el ángulo superior izquierdo de “Pancho” Rago, picó un metro y medio adentro, y luego salió pero nadie dudó de la legalidad del tanto que puso el 0-1 para Chacarita Juniors.

Se adelantó Atlanta, y buscó con coraje equilibrar el juego. A los 69′ llegó el segundo cambio de “Chaca”: Facundo Parra entró por Godoy, mientras que Giganti, el entrenador local, dispuso la cuarta modificación en su equipo, y Gonzalo Klusener ingresó en lugar de Matías Donato.

El “Tricolor” armó dos líneas de cuatro, con Fernández, Manchot, Masuero y Cháves al fondo y por delante Blanco, Perdomo, Fredes y González, y adelante , Parra y Russo.

El “Bohemio” se acomodó con Matías Molina, Colombo, García y Franco Perinciolo; Dramisino, Marín y Juan Galeano; Julián Marcioni, Gonzalo Klusener y Juan Bisanz. Y a mepujar con toda la energía.

Pablo Centrone, entrenador de la visita, determinó dos variantes sobre los 79′ de juego; Federico Rosso ingresó por el lesionado Abel Masuero, y Saúl Nelle entró en lugar de Hernán Fredes, ya cansado por el desgaste del partido. Así, la visita hacía el tercer y cuarto cambio en su segunda ventana permitida.

Pero enseguida llegaría un error de Rosso, quien tomó de la camiseta a Martín García, y el árbitro Nicolás Ramírez, de grandes condiciones, buen presente y auspicioso futuro, sancionó el correspondiente penal, que Juan Galeano se encargó de convertir para poner el partido 1-1 a los 81′ de juego.

A ambos entrenadores les quedaba un cambio y una última ventana. Centrone la utilizó a los 85′ con el ingreso de Enzo Hoyos por Blanco; Mauricio Giganti, el director técnico del equipo de Villa Crespo, dispuso que Daniel Saggiomo reemplace a Alejo Dramisino, a los 86′ de juego.

El final fue del local. Empujado por su gente, que colmó el Estadio “Don León Kolbowski”, fue con ganas y fútbol, pero Chacarita se cerró bien atrás, supo jugar con el reloj, y aguantar. Fue un poco más Atlanta en el balance final, pero el hecho tener el resultado en desventaja y llegar al empate al final, le dejó un buen sabor, para un empate de lunes por la noche que dejó al barrio en paz.

Hernán O’Donnell

Arsenal fue eficaz, y dejó sin invicto a Atlético Tucumán

Arsenal fue ordenado como siempre y eficaz como el partido lo requería. Fue inteligente, calmo y equilibrado. Por eso logró la victoria. Perdió Atlético Tucumán y se quedó sin invicto, aunque conserva la punta en la tabla de posiciones. No jugó un mal partido, pero tuvo errores puntuales y debió resignar la imbatibilidad en Sarandí.

Una tarde preciosa en el Sur del conurbano. El local, con su esquema habitual. Alejandro Medina en el arco. Chimino, Gonzalo Goñi, Gustavo Canto y Damián Pérez en la línea de fondo. Cuatro volantes; Dardo Miloc un poco más atrasado, como volante central. Un poquito más adelantados, Julián Navas, Mauro Pittón y Facundo Kruspzky. Adelante, Lucas Cano y Sebastián Lomónaco. Atlético Tucumán presentó un dibujo parecido. Carlos Lampe en la valla; Martín Garay, Bruno Bianchi, Manuel Capasso y Matías Orihuela en la línea de cuatro. Guillermo acosta como volante medio; por delante, Renzo Tesuri, Ramiro Carrera y Joaquín Pereyra. Augusto Lotti adelante y como punta de lanza, Ramiro Ruiz Rodríguez.

Salió con ímpetu el conjunto tucumano. Con buen trato de balón y búsqueda de juego asociado. Así hizoz una buena maniobra a los 5′, que terminó con un remate alto de Ramiro Carrera. Respondió el local, a los 12′, con una llegada clara. Chimino combinó con Lomónaco, Pittón tiró el pase cruzado y Facundo Kruspzky no pudo definir cuando entraba solo frente al arco.

Volvió a disparar Carrera, a los 18′, y el tiro se fue muy cerca, al lado de la base del poste derecho de Medina. Contestó Arsenal, a los 20′, con una combinación por derecha entre Navas, lomónaco, y el centro pasado al que ningún compañero llegó.

Después fue el momento del “Decano”. A los 24′ con un tiro de Ramiro Carrera, desde un ángulo cerrado, que se fue afuera. Después probó Lotti, pero su tiro se fue alto, cuando iban 32′ del partido. Y entonces reaccionó el equipo del “Viaducto”.

A los 39′ Julián Navas cabeceó apenas alto un centro que recibió de la derecha; enseguida quiso salir de abajo la visita. Presionó bien el local sobre el pase de Orihuela, Mauro Pittón capturó el balón muy cerca del área, tocó para Lomónaco y este sacó un remate cruzado que venció la mano derecha de Lampe y se metió junto a su palo derecho, para poner el 1-0 a favor de Arsenal.

Fue con todo Atlético al ataque en los minutos que faltaban para cerrar el primer período. A los 45+1′ llegó al empate. Centro de la derecha, la cabeceó primero Bruno Bianchi, le llegó a Orihuela, quien metió el segundo cabezazo, que dice la ley del fútbol que siempre es gol. Y no fue la excepción, el balón, combado, se metió junto al palo izquierdo de Medina y el partido quedó 1 a 1.

Cuando más decidido salió el visitante a jugar el segundo tiempo, el local encontró su premio. Tiro de esquina desde la derecha, y esta vez hubo ¡tres! cabezazos en el área. primero Goñi, de pique al suelo, luego Kruspzky volvió a meterla en el medio de cabeza, y otra vez Gonzalo Goñi cabeceó, esta vez al arco, para poner el 2-1 para Arsenal, a los 50′ de juego.

Se fue lesionado Goñi, a los 59′ y lo reemplazó Gariglio, en la primera variante del local. A los 66′, Lucas Pusineri, entrenador del equipo visitante, determinó sus primeras dos modificaciones: Cristian menéndez entró por Ruiz Rodríguez, y Mateo Coronel ingresó en lugar de Renzo Tesuri.

Pero todo se complicaría aún mas para el equipo de Tucumán, porque a los 67′ se fue expulsado Bruno Bianchi por segunda amarilla, tras tomar de la camiseta a un rival. Pusineri no hizo cambios; lo bajó a Guillermo Acosta a acompañar a Manuel Capasso, de muy buen partido, con mucha firmeza en la marca y seguridad en el juego aéreo, mientras que Carrera se retrasó unos metros.

Leonardo Carol Madelón decidió una segunda variante en la segunda ventana disponible de su equipo; Brian Rivero ingresó por Dardo Miloc, cuando iban 71′. Un rato más tarde, usó la tercera y última ventana para realizar la tercera y cuarta modificación. Machado entró por Julián Navas, y Alexander Díaz ingresó en lugar de lucas Cano, cuando ya iban 79′ de juego.

Atlético empujaba con más espíritu que ideas, pero chocaba con el orden defensivo de Arsenal, que amenzaba de contragolpe, como lo hizo Chimino, a los 81′, con un gran disparo que se fue alto.

A los 83′ Lucas Pusineri decidió el tercer y cuarto cambio de su equipo. Enrique Borja entró por Augusto Lotti, y Eugenio Isnaldo reemplazó a Orihuela.

Jugado por todo el visitante, el local supo interpretar bien su rol. Se agrupó del medio hacia atrás, cerró los espacios, le dio valor al hombre de más, y liquidó de contragolpe, a los 90′, con una recuperación en la mitad de la cancha, el remate posterior de Kruspzky, el rechazo corto de Lampe, y Alexander Díaz aprovechó para convertir el 3-1 final.

Tuvo Atlético Tucumán un tiro libre de Carrera, a los 90+4′, fuerte y bien dirigido, que pasó cerca del palo izquierdo de Medina. Fue el cierre de un equipo que dejó todo pero no pudo conservar el invicto, porque chocó con un Arsenal inteligente, equilibrado y eficaz que supo ganarse los tres puntos.

Hernán O’Donnell