Hervía el “Gigante de Arroyito” momentos antes de iniciarse el partido. Hervía y vibraba con la multitud que se acercó a alentar a Rosario Central, y los más de dos mil que acompañaron a Peñarol. Era el momento de olvidar por un rato estos tiempos de preocupación y temor, para que la ciudad vibrara con el comienzo de la Copa CONMEBOL Libertadores. Y se armó un gran partido, con dos equipos que propusieron.
El “Canalla” formó con Jorge Broun; Damián Martínez, Facundo Mallo, Carlos Quintana y Agustín Sandez; Kevin Ortíz y Jonathan Gómez; Tomás O’Connor, Ignacio Malcorra, y Jaminton Campaz; Ariel Cervera.
El equipo de Diego Aguirre comenzó con Guillermo De Amores; Camilo Mayada, Javier Méndez, Guzmán Rodríguez, Maximiliano Olivera; Damián García y Gastón Ramírez; Javier Cabrera, Leonardo Fernández y Eduardo Darias, Maximiliano Silvera.
Ninguno se guardó nada y ambos salieron a atacar. Por eso la lucha se dirimía en el centro del campo y les costaba llegar con profundidad. Central tuvo varias oportunidades, pero todas con remates de media y larga distancia. A los 15′ Campaz tiró desde el costado izquierdo, y controló bien el arquero visitante.
Luego, a los 24′, Sandez robó un balón en tres cuartos, se adelantó y sacó un remate de lejos, que se fue alto. Y a los 27′ Ignacio Malcorra ejecutó un disparo de media distancia, cruzado y fuerte, que se fue apenas desviado.
El equipo uruguayo recién contó con una posibilidad clara a los 30′, cuando Gastón Ramírez cabeceó muy cerca un balón que llegaba desde un tiro de esquina de la derecha.
Y cuando el primer tiempo parecía concluir con el marcador cerrado, llegó el grito inicial. Ya se jugaba el descuento, cuando se ejecutó un corner de la izquierda, cabeceó Mallo, el balón dio en el travesaño, y Carlos Quintana con una espectacular tijera venció la valla visitante para poner el 1-0 a favor de Rosario Central.
El segundo tiempo iba a ser diferente. Tomó otro protagonismo Peñarol, y de a poco se hizo dueño de las acciones. A los 60′ Maximiliano Silvera recibió un centro de la izquierda, y desde buena posición elevó el remate.
A los 61′, Diego Aguirre abrió la primera ventana de variantes de la visita, para realizar tres modificaciones: Lucas Hernández entró por Maximiliano Olivera, Nahuel Acosta reemplazó a Eduardo Darias, y Franco González entró en lugar de Gastón Ramírez.
Central hizo sus primeros dos cambios a los 67′. Lucas Martínez Dupuy ingresó por Ariel Cervera, en tanto Franco Ibarra reemplazó a Jonathan Gómez.
Pero era más la visita, y volvió a llegar con un pelotazo largo para la entrada de Silvera, este dominó el balón y tocó bien por encima de la salida de “Fatura” Broun, pero Carlos Quintana, con un cabezazo salvador envió el balón al corner, cuando iban 73′.
A los 77′ probó Javier Cabrera, de lejos y bombeado, pero su remate se fue apenas alto.
El cuarto cambio del equipo de Montevideo se hizo a los 78′. Matheus Babi reemplazó a Javier Cabrera; a jugar con doble “nueve”. Y tuvo incidencia, porque a los 79′ Babi cabeceó bien un centro que controló Broun.
Miguel Ángel Russo hizo su tercer cambio a los 79′. Juan Cruz Komar remplazó a Tomás O’Connor. A jugar con tres centrales, para enfrentar el doble “nueve” que proponía la visita. Y a los 84′ tuvo que hacer el cuarto cambio por el agotamiento físico de Damián Martínez; en su reemplazo ingresó Emanuel Coronel.
Peñarol insistió hasta el final, y a los 90′ Martín Gianoli, que es defensor, ingresó por el centrodelantero Maximiliano Silvera. Claro que Gianoli ingresó en la posición de delantero centro, para ejecutar cabezazos. De hecho, enseguida le quedó uno, que salió desviado.
Rosario Central se aferró a la victoria. Luego de un buen primer tiempo, se cerró en el segundo, soportó el asedio de Peñarol en el complemento, y logró tres puntos vitales, para darle aire al barrilete de su ilusión…
Hernán O’Donnell