Avanza la semana y las candidatas se perfilan en el Argentina Open

Pasó un miércoles intenso, con muchos partidos y el perfil que empieza definirse en el Argentina Open WTA 125 K. En la tradicional belleza que encierra el Buenos Aires Lawn Tennis Club, con los bosques de Palermo y el lago de Regatas alrededor, con el público tradicional de tenis, que arrastra décadas y décadas de ver lo mejor de este deporte en este escenario, cuna de grandes alegrías y olvidables tristezas, que hemos caminado desde hace más de cuarenta años, cuando en 1980 fuimos con la ilusión adolescente a ver a la Argentina ante Estados Unidos por la final americana, en un marzo de calor intenso y tribunas atiborradas para ver a Vilas, Clecr, Mc Enroe…en ese mismo Estadio, las chicas viven su momento en una semana hermosa, que avanza y resuelve sus favoritas.

Irina Bara, recién llegada de Rumania y con una expectativa importante, logró el primer gran triunfo del miércoles ante la local Martina Capurro Taborda por 6-3 y 6-1. Fue sólida con el servicio, sobre todo con el primero que le permitió tener dominio del partido y también supo ser agresiva en la recepción del saque de la joven argentina. Se sintió cómoda y así lo expresó tras el juego, en el mismo court, aún con las secuelas del largo viaje de Europa.

Luego llegó el turno del partido del día; la brasileña Beatríz Haddad Maia frente a la ascendente chilena Daniela Seguel. Comenzó la trasandina con su saque y se adelantó por 1 a 0, pero allí se vino un vendaval de tenis de la brasileña que ganó tres juegos seguidos sin ceder ni un punto, para adelantarse por 3-1. Quebró en el quinto game y se hizo fuerte con su saque: 5-1. Seguel sirvió y achicó a 5-2, y Haddad Maia mantuvo su servicio para cerrar la primera manga por 6-2.

Era más agresiva, más intensa y muy ofensiva, con un juego de ataque y cercanía a la red que la hizo dominar con autoridad ese primer set.

Mejoró Seguel en el segundo set y lo hizo más peleado. Mantuvieron ambas su saque hasta igualar 3-3 y en el séptimo game, la brasileña logró quebrar y esa fue la diferencia. Porque con el 4-3 conseguido, sacó y se puso 5-3, luego Seguel ganó con su saque (5-4) y la brasileña mantuvo el suyo para cerrar por 6-4.

Fue, al cabo, 6-2 y 6-4 para Beatríz Haddad Maia, y avanzó a los cuartos de final a jugarse el viernes.

El último partido del miércoles en el court central lo jugaron la húngara Anna Bondar y la número uno de juniors, Victoria Jiménez Kasintseva, de Andorra. Comenzó con el saque Jiménez y se quebraron de manera mutua en los primeros cuatro games: 2-2. Luego supieron conservar el servicio en los cuatro siguientes, 4-4. Quebró Bondar, para ponerse 5-4 y luego mantuvo para ganar el primer set por 6-4.

En el segundo set cada uno conservó el saque hasta el 3-2 de la andorrense. Allí logró quebrar y se adelantó por 4-2, con la posibilidad de forzar un tercer set. Pero afloró la experiencia de la húngara y quebró el saque de Jiménez, luego mantuvo el suyo y el set quedó igualado en 4. Luego, 5-5. Allí volvió a obtener un quiebre Bondar, para adelantarse por 6-5 y con su servicio cerró la manga 7-5.

El partido fue para Anna Bondar por 6-4 y 7-5. Y el miércoles se llenó de sol, ante un público que empezó a acercarse al Buenos Aires y a revivir los viejos noviembres, cuando el Abierto de la República invitaba a disfrutar de buenos partidos en un escenario entrañable.

Hernán O’Donnell