La Copa Davis arde en el calor de Rosario

La muchedumbre que el sábado de sol y calor se acercó en buen número al Jockey Club del barrio de Fisherton, envuelta en ilusión, esperanza y optimismo, se encontró muy rápido que iba a tener una jornada más dura de la imaginada. Porque a las altas temperaturas se sumó una actuación con algunos sobresaltos de nuestros jugadores, lo que confirma una vez más que la Copa Davis es un torneo diferente a cualquier otro, que se ponen en juego otros factores, distintos a los de cualquier torneo del circuito de ATP, y que los rankings de los tenistas poco peso tienen a la hora de jugar, y las distancias se acortan, mientras que los duendes en forma de sorpresa siempre están a tiro de participar. Por eso el resultado sorprendió a muchos que no están al corriente de estas normas que rigen a la célebre “ensaladera”.

Por eso el entusiasmo chocó contra los fantasmas de la Davis. Y el sol derritió los gritos, que fueron fuertes en el comienzo, hasta apagarse, a la búsqueda de un domingo de revancha.

Porque la igualdad está basada en la victoria de Francisco Cérundolo sobre Dmitry Popko por 7-5 y 6-2, y la caída de Tomás Etcheverry, que no tuvo un buen partido, y fue derrotado por Timofey Skatov por 6-4 y 7-5.

El triunfo de Cerúndolo fue de menor a mayor. Tuvo un comienzo errático, en el que le costó mucho hacer valer su servicio. El kazajo lo quebró en el segundo game para adelantarse por 0-2; allí Fran logró un quiebre importante y se acercó al 1-2, pero lo volvió a quebrar el visitante y se adelantó por 1-3.

Allí sobrevino una reacción dele local, para quebrar al rival, achicar así a 2-3, y luego mantener, por primera vez en el partido, su servicio, y llegar a la igualdad en 3 games por lado.

El séptimo game fue muy importante, porque Cerúndolo tuvo tres chances de quiebre, pero no logró concretarlas, y perdió el juego. Dmitry opko quedaba adelante, por 4-3.

Sobrevinieron dos juegos rápidos, con el saque conservado. Sacó Fran, 4-4. Conservó la visita, 5-4. Cerúndolo define el juego siguiente con un ace, y pone la igualdad en 5 juegos por bando.

Crédito: Omar Rasjido /Prensa AAT

En la zona de fuego, Cerúndolo hizo pesar su jerarquía. Logró un rápido 15-40, y luego le quebró el saque al visitante, para ponerse 6-5, con su saque. Y tuvo un game duro, porque de una ventaja de 40-15, en un momento quedó en ventaja el kazajo, tras una doble falta del local. Pero se recuperó Cerúndolo y se llevó el game y el set, por 7-5.

En el comienzo del segundo set se vivieron las mismas zozobras que en el inicio del primero. Cerúndolo quiebra el saque del rival, y se pone 1-0. Pero no aprovecha su saque, que cede tras estar 40-15 adelante, y el set queda 1-1.

Volvió a quebrar el local, para ponerse 2-1. Y ahí apareció el juego de Cerúndolo: 3-1 con su servicio, lo quiebra con amplitud en el siguiente game, y se va a descansar con 4-1 a favor.

Sacó Cerúndolo el game siguiente y en un abrir y cerrar de ojos estaba 40-0 adelante; cede un punto, pero luego se lleva el game y queda 5-1.

Popko no se entregó y defendió su saque; ahora estaban 5-2. Pero estaba ya firme el local, y cuando se puso 40-30 arriba, aprovechó ese primer match point para ganar el punto, el juego, el set y el partido, en 1 hora y 37 minutos. Fue 7-5 y 6-2 para Cerúndolo.

Crédito: Omar Rasjido / Prensa AAT

El partido de Timofey Skatov y Tomás Etcheverry tuvo un desarrollo muy parejo en el primer set, donde comenzó con su saque el visitante y tras ponerse 1-0, cada uno defendió su servicio hasta llegar a la igualdad en 4 a 4.

Ahí hubo una luz de diferencia para el kazajo. Ganó su saque, tras ponerse 40-0, luego 40-15, y cerrar para estar 5-4. Etcheverry entró en un bajón que continuó con su servicio, en el que estuvo muy pronto 0-40 abajo. Luchó y peleó para ganar dos puntos, pero no pudo consolidarlo en el 30-40 y cedió su saque, para dejarle el set al rival, por 6-4.

El segundo set fue una fotocopia, porque Skatov abrió con su saque, y mientras cada uno defendió el suyo, cuando quedó 6-5 arriba, aceleró para quebrar por segunda vez al argentino y lograr la manga por 7-5.

Timofey Skatov celebró con alegría el 6-4 y 7-5 sobre Etcheverry, porque puso la serie en juego. Pero la Argentina tiene muchas cartas para ofrecer, y un público esperanzado que vive esta primera vez de la Davis en Rosario como una verdadera fiesta, a la que quiere darle el grito final.

Hernán O’Donnell

(Enviado Especial a Rosario, Santa Fe, Argentina)