La noche invernal enfrió las buenas intenciones de Atlanta y Aldosivi

Empezó entretenido, con dos equipos muy dispuestos, con vocación ofensiva y buen trato de pelota. Redondearon un aceptable primer tiempo, pero con el correr de los minutos, el frío de la noche de fin de invierno de Buenos Aires se impuso sobre las intenciones de Atlanta y Aldosivi, el partido cayó en un pozo, y no pudieron quebrar la igualdad con el marcador en blanco.

El equipo local formó con Nicolás Sumavil; Valentín Gelos, Tomás Fernández, Fernando González y Marcos Pinto; Alejo Dramisino, Kevin Duarte y Juan Galeano; Diego Becker, Lucas Ríos y Federico Bisanz.

El conjunto de Mar del Plata comenzó con Luis Ingolotti; Rufino Lucero, Stéfano Callegari, Ariel González e Ian Escobar; Facundo Pereyra, Gustavo Turraca y Eamnuel Maciel; Elías Brítez; Elías Torres y Facundo Curuchet.

Aldosivi salió a presionar bien alto. En las salidas de arco, que Atlanta suele comenzar con el juego asociado desde adentro del área, Curuchet y Torres presionaban a los dos zagueros que se ubicaban a los costados de Sumavil. El lateral Escobar subía hasta la posición de Gelos, los volantes tomaban hombre y atrás quedaban Lucero, Callegari y González, mano a mano con los tres hombres de punta del local, Becker, Ríos y Federico Bisanz. Así lo sostuvo en cada saque de arco de Atlanta, hasta que el local optó por salir con el pelotazo largo de Sumavil.

Sin embargo, el “Bohemio” también atacaba. Llegó a los 9′, con un centro de Dramisino y el remate de Juan Galeano que contuvo el arquero Ingolotti. A los 16′ un centro pasado de Pinto no pudo ser conectado por Dramisino, y a los 20′ Bisanz cabeceó desviado, desde una buena posición, tras recibir un centro de la derecha.

Luego fue el momento de Aldosivi; a los 20′ un remate cruzado de Brítez pasó muy cerca, y a los 22′ desbordó Facundo Curuchet por izquierda, remató desde un ángulo cerrado, y Sumavil sacó al corner.

El cierre fue de una llegada por lado; a los 41′ un corner de Becker, cerrado, fue rematado por Tomás Fernández, y el balón salió junto al palo. Y Facundo Pereyra lanzó un buen disparo, a los 44′, que fue bien tapado por el arquero local.

Los dos equipos hicieron un cambio para empezar el segundo tiempo. Nicolás Mazzola entró por Federico Bisanz, en Atlanta. El ingresado se ubicó en su posición de centro delantero, y Lucas Ríos pasó a la banda izquierda. Y en el equipo del puerto marplatense, Matías Morello reemplazó a Elías Brítez.

A los 46′ hubo un buen tiro de Morello, mientras que Mazzola ejecutó por arriba, cuando iban 56′ de juego. A los 57′ un remate de Galeno pasó cerca; respondió Curuchet, con un enganche por izquierda y un disparo cruzado que Sumavil sacó con un vuelo, cuando iban 59′.

Después, el partido se empezó a enfriar, hasta caer en la oscuridad de la noche. Mientras, llegaron las variantes. A los 61′ fue el segundo cambio en el “Bohemio”, Juan Krilanovich ingresó por Alejo Dramisino. Claudio Riaño entró en lugar de Turraca, a los 62′, en el equipo marplatense. Y el “Tiburón” cambió su fisonomía. Mantuvo la línea de cuatro, adelante puso dos volantes, Morello y Maciel; tres media punta, Torres, Facundo Pereyra y Curuchet, y de punta de lanza, Claudio Riaño.

Atlanta se había adelantado un poco más en el campo y tuvo una chance, a los 64′, con un tiro de Becker, que salió cerca.

A los 70′ llegaron el tercer y cuarto cambio del local; Franco Vedoya entró por Lucas Ríos, y Kevin Pavia ingresó por Diego Becker.

Una buena maniobra de Mazzola finalizó con un tiro de Vedoya que atrapó el arquero visitante, a los 74′ de juego. y ya no hubo mucho más.

Cuando iban 76′ vino la tercera variante en la visita. Maximiliano Elsener entró por Elías Torres. Y a los 79′ llegaron las dos últimas modificaciones en el “Tiburón”. Manuel Guanini reemplazó a Stéfano Callegari, y Brian Guerra ingresó en lugar de Facundo Curuchet.

En el local, Mauro Bogado entró por Kevin Duarte, a los 86′.

Pero el partido se había apagado en el cuarto de hora final. Ya no hubo más llegadas, ni emociones; el viento helado le ganó al ingenio, y los pelotazos se impusieron a la creación, mientras que las defensas se cerraron para no perder lo poco que se llevaban. Atlanta y Aldosivi se repartieron los puntos. El frío polar de una noche de fines de invierno, fue el telón que puso fin a una obra que se quedó en las buenas intenciones.

Hernán O’Donnell