La Copa Mundial de Clubes de la FIFA tiene algunas particularidades; cosas muy previsibles y resultados sorpresivos. Porque entre las cuestiones esperables, siempre, o casi siempre, los equipos europeos se llevan el trofeo. Y cuando no se lo llevaron, jugaron la final. En cambio, entre las sorpresas, los equipos de Sudamérica, en algunos casos, han sufrido mucho para arribar a la final. y hasta en algunos casos se perdieron en el camino tras caer en la semifinal, como le sucedió a River en 2018 cuando perdió frente al Al-Ain.
Hoy comenzó la edición 2020, con el retraso lógico por la demora que produjo la pandemia en todos los calendarios del año último y se extenderá hasta el 11 de Febrero. En realidad, el torneo se inició el día 1º de este mes, pero el encuentro que debían jugar Al Duhail SC y Auckland City en el Estadio Áhmad bin Ali en la ciudad de Al Rayyan, muy cerca de Doha, la capital de Qatar, no se realizó pues el equipo neocelandés no viajó a causa de la pandemia y en los tribunales el resultado quedó determinao por 3-0 a favor del conjunto qatarí.

Los coreanos sorprendieron con un ritmo veloz y una actitud positiva. Fueron a buscar el partido. Tuvieron una posibilidad a los 18′ que fue cortada por el arquero argentino Nahuel Guzmán, y le pusieron color a los 23′ cuando abrieron el marcador a través del gol de cabeza de Ki-Hee que selló el 0-1 inicial.
Para Tigres el comienzo no fue claro. La intención era salir por derecha con Carlos Salcedo, por izquierda con Reyes y dominar el medio a partir del quite de Guido Pizarro y el traslado de Rafael Carioca para que el delantero francés Gignac encontrara los espacios para definir. Tuvo una chance André-Pierre Gignac en el primer período, pero fue intervenida por Hyun-Woo, el arquero asiático.
El conjunto de Corea del Sur propuso un 4-4-2 cerrado, con el talento de Bit-Garam como eje creativo y el acompañamiento en ataque de Ji-Hyun.

A Tigres el partido se le hizo largo, pero fue a buscarlo. Le costaba acomodarse, Ulsan se soltó e intentó manejar el balón, con amplitud de líneas, para que al equipo mexicano le costara presionar. Con la conducción de Bit-Garam, Ulsan se las arreglaba para complicar.
De a poco, empezó a arrimar el equipo americano. A los 36′ un remate de Gignac de tiro libre que se fue al corner desviado por el arquero, provocó la primera alerta. Y enseguida iba a llegar la igualdad. Llegó el tiro de esquina, un rebote y el cabezazo de Guido Pizarro que el arquero volvió a sacar al corner.

De ese tiro desde la esquina llegó el balón al área, el toque suave al medio y la aparición de Guignac para marcar el 1 a 1 a los 37′ de juego.

Tigres se tranquilizó; estaba otra vez en partido y ya la presión dejaba de ser una espada clavada en su espalda.
Y a los 45′ llegó la jugada decisiva. El centro de la izquierda de Tigres, la mano del zaguero Ki-Hee que interrumpió el cabezazo de guignac y el VAR que le advirtió al árbitro que concedió el penal que Guignac trasnformó en el 2 a 1 a los 45+4′ del primer período.

Carlos González entró por Meza al comenzar el segundo tiempo. Y con el correr de los minutos, las variantes jugaron su partido, en cuanto al freno, el corte de ritmo y la disminución de la dinámica.
Ulsan se adelantó y fue por el empate; a los 57′ llegó una definición exquisita de Bit-Garam que no fue convalidada por un off side muy pequeño: cuando partió el pase de la izquierda, estaba unos centímetros adelantado. Off side, al cabo. Pero su gesto técnico, al pararla de pecho, girar y meter una volea en el aire que dejó helado a Guzmán, fue toda una belleza.

A los 65′ R. Fulgencio ingresó en lugar de J. Aquino en Tigres y en Ulsan FC Kim Sung-Joon reemplazó a Kim In-Sung.
El encuentro se había hecho equilibrado, aunque los mexicanos sabían ya jugar con el reloj. Tuvo una chance Fulgencio a los 77′ pero no logró definir.
Ulsan fue por las últimas variantes para buscar algo que lo ayude a igualar el juego; a los 73′ L. Hinterseer había entrado por Kim Ji-Hyun y a los 79′ Y. Kang, delantero, fue por Shin Hyung-Min. El “Tuca” Ferretti también realizó variantes para cerrar el juego: a los 83′ Hugo Ayala entró en lugar de Jesús Dueñas y a los 90′ J. Sierra se ubicó en lugar de L. Quiñones.
Tuvo la última a los 90+4′ cuando Guignac probó al arco y la pelota se fue arriba. Tigres se abrazó al resultado y a la victoria. Sufrió, pero ganó y ya piensa en la semifinal con Palmeiras.

Hernán O’Donnell