Inter dominó de principio a fin y continúa en lo más alto

Fue una victoria clara de Inter sobre Salernitana. Amplia, contundente, brillante. El equipo de Milano fue a Salerno con la decisión tomada: salir a ganar, no demorar los caminos, monopolizar el balón y dirigirse al arco de Fiorillo de modo directo.

Así abrió el marcador cuando el partido asomaba. Un pelotazo largo en forma de centro de Calhanglu buscó la cabeza de Dzeko, pero Fiorillo, el arquero local, salió rápido y despejó la pelota al corner. El tiro de esquina lo ejecutó Calhanoglu y Perisic se anticipó a todos, a los 10′ de juego, para meter un cabezazo que se coló en el ángulo superior izquierdo del arco local y puso el marcador 0-1 a favor de Internazionale.

A partir de allí se iba a encadenar una serie de llegadas interminable de Inter, que presagiaron la goleada que al final se concretó. Porque a los 12′ Alexis Sánchez, de gran partido, puso un pase filtrado y abierto para la entrada de Dumfries, el lateral que jugó casi como un extremo a lo largo de la noche italiana, y sacó un tiro cruzado que Fiorillo desvió al corner con la puntita de los dedos.

A los 13′ desbordó Iván Perisic por la banda izquierda y sacó un centro que Dzeko cabeceó desviado. Recién a los 29′ iba a llegar el equipo local; Joel Obi apareció solo por la banda izquierda y su disparo fue bien rechazado por Handanovic al corner.

Pero era la noche del Inter, y a los 32′ amplió el marcador. Pelotazo largo y profundo de Dzeko para la entrada libre de Dumfries y el remate de este pegó en el travesaño, cruzó la raya y salió otra vez hacia el campo de juego, pero la tecncología no dudó en convalidar el gol, y el Inter quedó adelante por 0-2.

El dominio de la visita se sostenía en su posicionamiento. Bien adelantado en el campo, con la salida de Dumfries por derecha, Perisic por izquierda, el trabajo de Barella en el medio del campo, la conducción de Calhanoglu, la creatividad de Alexis Sánchez y la potencia de Dzeko, todo era demasiado para Salernitana, que se apoyaba en la jerarquía y experiencia de Franck Ribery, pero no tenía mucho más para sostenerse.

En el complemento se mantuvo el mismo libreto. A los 48′ el Inter armó una hermosa jugada colectiva que terminó con un disparo de D’Ambrosio que salió apenas desviado. Y enseguida llegó la jugada del partido. Alexis Sánchez recibió en su campo, de espaldas al arco rival, giró sobre si mismo y metió un pelotazo profundo y preciso para Calhanoglu. Este la curzó de derecha a izquierda para Dzeko, mientras picaba para recibir la devolución; tras volver a contactarse con la pelota, Calhanoglu advirtió la entrada veloz de Sánchez y lo asistió con un pase magistral. El chileno, ya dentro del área, concretó con un potente remate cruzado. Iban 51′ de juego y con el golazo de la noche Internazionale se adelantaba por 0-3.

El partido se resolvía, aún cuando restaban cuarenta minutos de juego. Las ventanas de los cambios jugaron su parte; a los 55′ la visita abrió la primera con tres modificaciones: Arturo Vidal ingresó por Nicolo Barella; F. Dimarco reemplazó a A. Bastoni, y Lautaro Martínez entró en lugar de Alexis Sanchez.

Salernitana estaba golpeado y el entrenador decidió dos variantes a los 60′: el bosnio M. Djuric entró por Simy, y A. Schiavone reemplazó a G. Kastanos. Poco se podía hacer mientras se acomodaban los nuevos en la cancha y a los 70′ llegaron más modificaciones. C. Gondo entró por el francés F. Ribery, y P. Jaroszynski ingresó en lugar de L. Ranieri en Salernitana, mientras que en la visita, Gaglairdini ingresó por Brozovic.

El encuentro estaba resuelto, pero hubo lugar para más emociones. Iban 76′ cuando Arutro Vidal quiso habilitar a Roberto Gagliardini, este entró al área, se la cortó Bogdan y el balón le quedó a Lautaro Martínez, quien sin dudar y con una tremenda repentización, sacó un remate de primera que se transformó en el 0-4 para Internazionale.

Un minuto después, a los 77′, Kolarov entró por IVán Perisic en la visita. Y a los 79′ Zortea reemplazó a Gyomber en el local. Le quedó una chance al equipo de Stéfano Colantuono, cuando a los 81′ Cedric Gondo habilitó Djuric y el cabezazo de este salió afuera.

Pero estaba visto que los rebotes de la noche también iban a favorecer a la escuadra de Milano, porque a los 86′ Arturo Vidal quiso asistir a Lautaro Martínez, el balón rebotó en Bogdan y le quedó servido a Gaglairdini, quien marcó el 0-5 a favor del Inter.

Una noche redonda que terminó con ese tanto. Internazionale ganó en forma clara, amplia y contundente. Y sigue su camino triunfal sin fisuras.

Hernán O’Donnell