Otro paso al Mundial

Un  clima fenomenal, que se vivió desde muy temprano. La gente llegó al Estadio Mario Alberto Kempes envuelta en alegría y esperanza.

Un clima de fe, de entusiasmo, de enorme satisfacción por ver al jugador más adorado:Leo Messi

Es que no se hablaba  más que de èl en los momentos previos al partido. Y luego, también.

Argentina empezó a toda marcha. De entrada, un golazo de Di María. Enseguida, una oportunidad de Lavezzi. Parecía la noche ideal. Pero llegó el penal de Fabbro, la igualdad de Paraguay y alguna duda.

Sin embargo, la Argentina se acomodó rápido. Se mostró un poco más Leo, Di María rotó por derecha, Lavezzi picaba y Gonzalo Higuaín mostró por qué es un goleador de raza, de esos que no abundan en el planeta: Una entrada franca por derecha y el remate cruzado, bien esquinado, a la ratonera.

 El cierre por 2 a 1 daba una atmósfera de tranquilidad. La Argentina tenía todo servido para redondear una buena actuación.

Y cumplió. En el segundo tiempo se soltó, tuvo más posesión de la pelota y tranquilidad para manejarla.

Una jugada monumental de Leo Messi que dio en el palo, una oportunidad de Higuaín y el golazo de Lionel para redondear el 3 a 1 fueron las marcas que dejó el conjunto de Sabella.

La noche de Córdoba, de luna luminosa y multitud felíz se cerró entre ovaciones y reconocimientos. El equipo de todos había dado otro paso rumbo al Mundial.

 

Hernán O’Donnell

(Enviado Especial a Ciudad de Córdoba, Pcia de Córdoba)