Segunda presentación de la Selección Colombia en Buenos Aires, otra vez en el Estadio de San Lorenzo de Almagro, conocido como “Nuevo Gasómetro”, con un poco menos de público que el sábado último, y con algunos cambios con respecto al equipo que igualó ante Senegal en 2 goles.

Ante Jordania, José Pekerman dispuso alinear otra formación y otra disposición táctica. Surgieron jugadores como Ospina, Balanta, James Rodríguez, Guarín…Y un esquema diferente: 3 zagueros (Zapata, Yepes, Balanta), cuatro volantes en línea, James e Ibarbo desdoblándose entre la línea media y la ofensiva , y Teo bien de punta.

A los 6 minutos avisó con un cabezazo de Yepes. Luego, una buena maniobra de James Rodríguez. Los conceptos eran los mismos: buen trato de balón, manejo prolijo y búsqueda de los espacios a partir de la triangulación en los pases.

A los 41 llegó la apertura del marcador: una insólita mano de un defensor de Jordania le permitió contar a Colombia con un penal, que James Rodríguez transformó en gol tras detener su marcha, engañar al arquero y colocar el remate bajo y cruzado, a la izquierda del portero. 1 a 0 y cierre del primer tiempo.

Ya en el complemento, Colombia buscó con los mismos argumentos. A los 53 minutos un remate fuerte de Zúñiga se estrelló en el travesaño. Colombia insistía y mantenía el control del juego, que no era demasiado intenso ni derrochaba lujos. Se sucedieron los cambios en el equipo de José. Bacca tuvo una oportunidad; Valdés se hizo patrón de la defensa. Aguilar equilibró el mediocampo. Llegó el penal de Cuadrado, tras otra mano de un hombre de Jordania y el partido quedaba 2 a 0 a los 81 minutos. Y Freddy Guarín cerr{o la cuenta con un golazo a los 88 minutos. 3 a 0 para cerrar la noche del Nuevo Gasómetro.

Colombia cerró con una sonrisa su preparación en Buenos Aires. Un empate y una victoria. Ahora, a Brasil. Llega la hora de la verdad.

Hernán O’Donnell

“Tuvimos dos desajustes defensivos en el primer tiempo, uno fue el cierre de Campagnaro y el otro de Demichelis, que además le generó la lesión. Ante rivales de mayor jerarquía, podemos sufrir”. El propio Alejandro Sabella reconoció, en la conferencia de prensa posterior al partido frente a Trinidad y Tobago, que el equipo aún padece los desacoples habituales y que estos pueden pagarse caros en una Copa del Mundo. La Argentina mostró su realidad, ante un adversario pequeño, que mostró una gran dosis de entusiasmo y que presentó varios jóvenes con futuro, pero que no tiene una mínima exigencia internacional. Y esa reailidad nacional ya no se puede esconder. Ni el propio entrenador la puede eludir.

Argentina fue un equipo ofensivo. Eso está claro. La propuesta fue la habitual. Pero careció de puntería y de claridad para la puntada final. En el primer tiempo generó muchas situaciones, la mayoría desperdiciadas por no estar finos a la hora de concretar. Y esto puede también traer alguna preocupación, pues costó vulnerar a una defensa que no es de las más sólidas del mundo.

Y en defensa, los desajustes ya conocidos. Un equipo que se brinda, pero que mostró algunas dudas en el retroceso, sobre todo los volantes, pues sólo Mascherano llega a auxiliar a los defensores. El resto se pierde en posiciones de ataque, más allá de la voluntad de Gago por colaborar, pero es innegable que el volante de Boca tiene mayor participación en las jugadas de ataque que en la disposición defensiva. Entonces, los defensores solos y el aporte de Mascherano, son escasos para contener los ataques o contraataques de los rivales.

En el primer tiempo, además, se sumó una duda de Romero en una salida, que despertó los murmullos del Monumental.

Es un tema a resolver, y no hay demasiado tiempo para cambiar o corregir cosas. Ojalá se logre el equilibrio, pero el equipo, en su anteúltima presentación previa a la Copa del Mundo, mostró debilidades defensivas que se pueden pagar muy caras con rivales de jerarquía como los que van a haber en el Mundial.

Hay dudas con los arqueros, los zagueros pueden afirmarse en Fernández, Demichelis, Garay y Basanta, y el rendimiento de Rojo, ante la máxima cita, es toda una incógnita.

Es probable que, una vez superada la primera fase, Sabella se incline por jugar con una línea de cinco defensores, tres volantes y dos delanteros. Un esquema menos audaz, más cauteloso, pero más equilibrado de acuerdo a su gusto futbolístico.

La Argentina convirtió en el filo del primer tiempo y eso le dio tranquilidad. Arrancó más serena la segunda etapa y amplió su ventaja a 3 goles, al aprovechar que el visitante salió a buscar un poco más el partido y ofreció espacios apetecibles para la contra.

Pero esto queda en la anécdota. La realidad es que Argentina mostró dos caras, las ya conocidas, y veremos cual es la que logra imponer cuando llegue la Copa del Mundo.

Hernán O’Donnell

No quiso explicar mucho ni profundizar en sus decisiones. Se reservó todos los argumentos. Prefirió preservar la intimidad y no expuso su pensamiento. Alejandro Sabella habló a minutos de una de las últimas presentaciones de la selección de cara a la Copa del Mundo FIFA-Brasil 2014, pero no explicó los motivos de su decisión por la confección de la lista final.

“Tuve dudas hasta el final. Después uno siempre trata de respetar el grupo. Creo que lo fudamental es tener un buen grupo. Con un buen grupo hay más posibilidades de tener éxito”, señaló el DT.

“No hablamos solamente de jugadores de fútbol sino de seres humanos que tienen la ilusión de jugar la competencia más importante representando a su país. Miré y analicé muchas cosas, no puedo decir una”.

El  técnico sabe que la decisión no fue fácil, que la preparación incluye ese sabor amargo de tener que dejar a algún futbolista afuera del plantel. Pasa en todos los equipos.

“A los jugadores (que no van al Mundial) les dije que estaba profundamente apenado y les dí unas gracias enormes”, afirmó.

Luego, le dio paso al análisis del plantel definitivo y a los nombres que quedaron en el corte final: “Algunos no hacen fútbol formal desde hace un tiempo. Para estos dos amistosos trataremos de plasmar lo que trabajamos esta semana. Lo importante es que vayan tomando ritmo de juego y conocimiento mutuo entre ellos”.

“Enzo Pérez y Ricardo Álvarez son versátiles, tienen buena contra y juegan en muchas posiciones del medio campo”.

“La idea en estos amistosos es que los jugadores vayan tomando ritmo de juego y se vayan armando las sociedades del medio y adelante, acoplar la línea defensiva y tener una estructura lo más sólida posible para no sufrir”.

Sabella sabe que ya llega el momento. “Mi sensación primera es la responsabilidad. Estar en todos los detalles, tratar de cometer la menor cantidad de errores posibles, intentar ayudar a los jugadores. Nunca fui de metas largas sino de corto plazo. Ahora estoy pensando en preparar todo para el partido de mañana”, explicó el entrenador del seleccionado nacional.

Argentina juega, en poco tiempo ante Trinidad y Tobago en Buenos Aires, y ante Eslovenia en La Plata. Pero la mente, el corazón y el alma del pueblo futbolero, ya empezó a viajar a Brasil…

Hernán O’Donnell.

La parte “futbolera” de Estados Unidos, esa porción de público, jugadores, periodistas y dirigentes que abrazó al “soccer” y lo tiene como principal deporte, está sacudida por la decisión del entrenador del seleccionado nacional, el ex delantero alemán campeón del mundo, Juergen Klinsmann, de excluir del equipo que jugará el Mundial a su máxima estrellla, Landon Donovan.

En un segundo plano queda la preparación, los partidos amistosos y el crecimiento del conjunto. Aún no se discute sobre sus rivales, los poderosísimos conjuntos de Alemania, Portugal y la sombra en que se convirtió Ghana en los últimos tiempos.

No; hoy sólo se habla de la ausencia de uno de los mejores jugadores de la historia de la Liga de Estados Unidos, un futbolista que se ha destacado en los mundiales de 2002, 2006 y 2010. Pero que no tendrá su chance de cerrar su carrera con el cuarto Mundial.

La decisión trajo una catarata de críticas. Se expone que Donovan es, para muchos, el mejor jugador de la historia de Estados Unidos. Además, es el goleador histórico del conjunto: Marcó 57 goles en 155 partidos disputados. Varios fanáticos se han preguntado si hay 23 jugadores mejores que Donovan…

Muchas voces se han levantado en contra de la decisión del entrenador. Son quienes sostienen que antepone un problema personal, una cuestión de mala relación singular por encima de los intereses deportivo. Lo cierto es que Klinsmann no tiene dudas. Cree que su criterio es el correcto y es tiempo de darles paso a figuras jóvenes.

“Me quedé con las ganas de jugar en Brasil y, como pueden imaginar, estoy muy decepcionado con la decisión que ha sido anunciada”, declaró Donovan apenas conoció la noticia. “De todas maneras, apoyaré a mis amigos y compañeros este verano, y sigo comprometido con ayudar a desarrollar el fútbol en los próximos años”, agregó el delantero, sorprendido por su ausencia en el Mundial.

En tanto, Estados Unidos continúa con su preparación. El equipo venció a Turquía por 2 a 1, con goles de Fabian Johnson y Clint Dempsey. El partido, disputado en un Red Bull Arena repleto con 25,000 espectadores, empezó con un ritmo vertiginoso y el equipo visitante comenzó mejor parado.

Fueron varias las llegadas de Turquía en los primeros minutos, la más clara una entrada franca de Selcuk Inan ante el portero Tim Howard a los 19 minutos tras un centro desde la derecha que el mediocampista no logró conectar con precisión.

Sin embargo, el local logró recomponerse y se puso en ventaja: Johnson marcó a los 26 minutos, Dempsey amplió a los 52 tras un error defensivo turco y Selcuk Inan descontó de penal a los 90, para sellar el 2-1 final. Estados Unidos ganó, tal como había vencido a Azerbayjan por 2 a 0, pero sabe Klinsmann, y lo comenta el país, que la sombra de Landon Donovan, su máxima estrella, estará presente en el equipo hasta que su participación en el Mundial diga si fue un error o no haber prescindido de semejante futbolista.

Hernán O’Donnell

Falta muy poco para que  Alejandro Sabella, entrenador del equipo nacional de fútbol entregue la lista definitiva de los 23 jugadores que actuarán en la Copa del Mundo FIFA-Brasil 2014.

En horas, se develará el misterio. Pero se intuyen quienes van a estar, quienes son los elegidos, o por lo menos, el debate pasa por dos o tres nombres. El resto está confirmado.

Algunos hablaron hace pocas horas. Y dejaron sus sensaciones, cuando falta muy poco para la hora señalada. Pablo Zabaleta es uno de los indiscutidos, por historia y por presente. “El tiempo de trabajo del que disponemos ahora es mucho más amplio que para algún partido de Eliminatorias o algún amistoso. Nos dá la posibilidad de estar más tiempo juntos y trabajar pensando en el Mundial”.

Y agregó el ex defensor de San Lorenzo de Almagro: “Cada partido con la Selección es importante para jugar al 100%. Los próximos dos amistosos son importantes para tener buena confianza y sensaciones. Para sentirnos bien y demostrarle al entrenador que todos tenemos muchísima predisposición”.

El equipo tiene fe y confianza. Pero en las declaraciones se destaca la humildad habitual de esta camada de profesionales. Así lo entiende Martín Demichelis, quien sueña con estar en el plantel.

“Tengo algunos años, más experiencia, y no siento temor de quedar afuera. Me tocó esa situación en 2006 (Alemania), luego jugar el Mundial de 2010 (Sudáfrica) y eso me juega a favor para disfrutar cada entrenamiento y cada día con la Selección”, afirmó el defensor de Manchester City.

Y agregó: “Estoy muy feliz, disfrutando, con mucha energía. Es obvio que me gustaría quedar pero ya me siento un privilegiado por estar acá y voy a respetar la decisión del técnico, que seguramente no es fácil”.

Ya se viven las horas definitivas. En minutos, Sabella anuncia la lista. El sueño de todos es estar. Pero hay una lista más grande de locos soñadores; muchos han visto la epopeya de 1978. Otros, la conquista demoledora de 1986. Y todos, imaginan un Maracanazo que sacuda la historia…

Hernán O’Donnell