Casi noventa minutos soporíferos, con un ritmo cansino, pocas llegadas, y un juego lento. Inter y Liverpool cerraban la tarde de Milano con una igualdad en blanco, pero llegó el manotazo de Bastoni a la camiseta de Florian Wirtz, el VAR que convocó al juez Felix Zwayer, este consideró suficiente la sujeción, y sancionó el penal que convirtio Szoloszbai a los 88′. para que el equipo inglés ganara por 0-1 y se llevara tres puntos muy valiosos en la UEFA Champions League.
Inter formó con Yann Sommer; Manuel Akanji, Francesco Acerbi y Alessandro Bastoni; Luis Henrique, Nicolò Barella, Hakan Çalhanoglu, Henrikh Mkhitaryan y Federico Dimarco; Lautaro Martínez y Marcus Thuram.
Liverpool alineó a Alisson Becker; Joe Gomez, Ibrahima Konaté, Virgil van Dijk y Andrew Robertson; Dominik Szoboszlai, Ryan Gravenberch, Alexis Mac Allister y Curtis Jones; Alexander Isak y Hugo Ekitike.
Los problemas para Inter comenzaron pronto, porque a los 11′ debió dejar el campo Hakan Çalhanoglu, y fue reemplazado por Zielinski. Luego tuvo un momento de sufrir los ataques de su rival, que contó con dos remates peligrosos. A los 17′ fue Jones, y a los 18′ Ekitike, y en ambos casos Sommer respondió con eficiencia.
Volvió a desbordar Ekitike, a los 28′, y otra vez Sommer desvió el centro. Cuando iban 30’Yann Biscek reemplazó al lesionado Francesco Acerbi, en la segunda modificación del local.
Luego marcó Konaté, pero el VAR advirtió una mano previa, y no convalidó el árbitro el tanto de Liverpool.
Inter levantó en el cierre del primer tiempo. Primero con una llegada a los 39′, a través de un tiro libre de Nicoló Barella, que pasó muy cerquita. Y a los 45+5′, tras un centro desde la izquierda, Lautaro Martínez metió un terrible cabezazo que desvió Alisson, de manera brillante.
En el segundo tiempo no levantó el nivel de juego. Continuó espeso, trabado, sin emociones. recién a los Thuram sacó un tiro combado y peligroso.
Liverpool metió mano en su banco de suplentes, y produjo dos cambios, a los 67′, que le dieron aire a su equipo. Florian Wirtz entró por Alexander Isak, y Conor Bradley reemplazó a Joe Gomez. Y fueron variantes positivas, porque Bradley se convirtió en un lateral ofensivo que generaba llegadas, y cumplía con creces las tareas defensivas, en tanto Wirtz pesó más que Isak en el ataque.
De hecho, una llegada clara de Bradley, a los 79′ fue sacada con oportunismo por Sommer.
Inter renovó su aire a los 81′ con los tres cambios que le quedaban. Carlos Augusto entró por Federico Dimarco; A. Bonny reemplazó a M. Thuram, y P. Sucic ingresó por H. Mkhitaryan.
Todo parecía sucumbir entre bostezos y aburrimiento, pero llegó el agarrón de Bastoni a Wirtz, el llamado del VAR, y el penal sancionado, que Szoboszlai convirtió para poner a Liverpool adelante por 0-1, para gritar un triunfo que le dio aire en una semana complicada.
Hernán O’Donnell