Rosario espera por la Copa Davis en medio de un calor sofocante

Rosario nos recibió con los brazos abiertos, su río eterno y un calor agobiante. Una altísima temperatura que convierte al estadio construído en el Jockey Club del barrio de Fisherton en una olla ardiente, y que promete aumentar la temperatura el sábado, cuando comience a jugarse la serie ante Kazajistán, por los Qualifiers 2024. Un match que promete ser histórico, por esto de albergar una fase del célebre torneo en esta ciudad, incluso en la provincia de Santa Fe.

Crédito: Omar Rasjido / Prensa AAT

El equipo argentino se entrena desde el miércoles, y el clima es estupendo, con la suma de Federico Delbonis, que ha anunciado el retiro del tenis profesional, y que se ha sumado al seleccionado argentino de tenis, en una suerte de cierre de etapa, para uno de los Campeones allá por 2016.

“Estaba en casa y pensé: ‘¿qué pasa si voy a Rosario? ¿Sumaría?’. Me picó el bichito, pensé que este era uno de los lugares donde debía decir adiós, porque la Copa Davis marcó un punto importante en mi carrera. A Guille (Coria) le pareció genial la idea y acá estoy, contento y súper agradecido”, señaló Delbonis.

“Vine a decir adios en el lugar n el que fui feliz”, resumió.

Crédito: Omar Rasjido/Prensa AAT

Ayer hablaron los jugadores argentinos, y dejaron buenas sensaciones de cara al juego. “Me siento muy bien”, dijo Tomás Etcheverry, quien agregó: “Volver al polvo de ladrillo siempre es bueno porque es nuestra superficie favorita. Claro que siempre cuesta el cambio de superficie y más con estas temperaturas. Pero el equipo está bien”.

“Tenemos un equipo muy bueno, eso es positivo para el capitán; todos queremos jugar, pero hay que aceptar que cada uno quiere lo mejor para Argentina. Estamos todos muy preparados para jugar la serie, en un nivel muy parejo. Eso está buenísimo porque sabemos que el que entre va a hacer un gran partido”, agregó.

En estas horas se sortea el orden de juego, y se define el equipo nacional. Kazajistán espera, pero la ilusión de la Argentina viaja un poco más lejos.

Hernán O’Donnell

(Enviado Especial a Rosario, Santa Fe, Argentina)