El orden de Arsenal, las ganas de Central, y un empate lógico en una tarde tormentosa

La inmensa lluvia caída dos horas antes del inicio del juego, le puso un signo de interrogación a lo que podía ser el partido entre Arsenal y Rosario Central, por la primera fecha de la Zona “2” de la Copa de la Liga Profesional de Fútbol. Un interrogante por como se desarrollaría el juego, como se adaptarían los futbolistas, como sería la propuesta inaugural de Leonardo Carol Madelón en su debut como entrenador del conjunto de Sarandí, que sugeriría el renovado Central de Cristian Alberto González. Todo se develaría en un escenario no habitual para un viernes de Febrero.

Y resultó muy lindo el partido. Central intentó tomar la iniciativa, con una línea de cuatro clásica en defensa, con Damián Martínez, Almada, Báez y Lautaro Blanco; tres volantes, Walter Montoya, Tanlogo, Infantino en la zona media, con Vecchio suelto, por momentos de enlace, en otros más volcado al costado izquierdo. Y dos delanteros, Lucas Gamba y Marco Ruben. Así, a los 5′ avisó con un remate lejano de Montoya, que se fue apenas alto.

Sin embargo, el local iba a abrir el marcador. Iban 10′ de juego y Brochero se lanzó por derecha, sacó un centro pasado, Ibáñez cabeceó hacia adentro y Sebastián Lomónaco con otro cabezazo dentro del área puso el 1 a 0 para Arsenal.

El equipo de Madelón sacaba ventaja en función del orden y la prolijidad de su juego. Axel Werner en el arco, Chimino, Gariglio, Goñi y Lucas Suárez en defensa, Dardo Miloc como volante central, adelante de él el dúctil Lionel Picco, a sus costado derecho Brochero, Antilef e Ibáñez por izquierda. Y como centro atacante, Lomónaco. Por momentos era un 4-1-4-1, por momentos, 4-1-3-2, Arsenal se mostraba versátil y ordenado.

Volvió a llegar Arsenal a los 20′, con un pase de Chimino a Lomónaco y el remate que contuvo el arquero Gaspar Servio. A los 28′ tuvo una posibilidad Central con una llegada de Ruben, pero Werner supo controlar. Y enseguida llegó el empate. Central empujaba, obligado por las circunstancias y a los 32′ un tiro libre ejecutado con mucha clase por Vecchio, fue conectado de cabeza por Marco Ruben para poner la igualdad en el marcador: 1-1.

El final del primer tiempo trajo nuevas emociones. Lo tuvo la visita, a los 43′ con un remate de Ruben de emboquillada y al ángulo, que se fue apenas alto. Y respondió el local un tiro libre que cabeceó Lucas Suárez, y Servio cortó la posibilidad.

En el complemento, el desarrollo fue similar. Arsenal tuvo una llegada a los 62′ con un tiro libre que Goñi conectó apurado y Servio supo controlar. El encuentro se hizo parejo, dividido y con dominios alternados. Además, llegaron los cambios y toda la dinámica que se modifica con las variantes.

A los 68′ Leonardo Madelón determinó las dos primeras variantes de su equipo; Alexander Díaz ingresó por Sebastián Lomónaco y Facundo Kruspzky reemplazó a Antilef. Respondió central con una modificación; a los 73′ Buonanotte remplazó a Gino Infantino.

Central tuvo una oportunidad a los 75′, de hecho Marco Ruben conquistó la valla local, pero la jugada no fue convalidada por off side de Gamba.

El juego se hizo cortado a partir de las variantes; a los 84′ el uruguayo Machado entró por Picco y el colombiano Edwin Torres ingresó en lugar de Brochero, en el conjunto de Sarandí. En el equipo rosarino Milton Caraglio ocupó el lugar de Lucas Gamba, y Kevin Ortíz ingresó en reemplazo de Mateo Tanlongo.

Central tuvo la última a los 90+1′ con un disparo de Báez que pasó cerca. Y no hubo tiempo para mucho más. Entre el orden del local y el juego más aventurado de la visita, Arsenal y Central firmaron el empate en la tarde lluviosa de Sarandí.

Hernán O’Donnell

Schwartzman tuvo un rival difícil pero supo abrirse paso

“Fue increíble, porque jugué muy bien la mayoría de los puntos, pero al momento de la definición, la tiraba a cualquier lado”, así, sin palabras complicadas ni análisis estrafalarios, Diego Schwartzman trazó una síntesis de lo duro que fue el triunfo de anoche, en el cierre de una jornada de jueves muy larga y calurosa, en la que se definieron los jugadores que accedieron a los cuartos de final del ATP 250 Argentina Open 2022.

Debió definir los dos sets en el tie braek, ante el duro español Jaume Munar, para cerrar con un 7-6 (7-2) y 7-6 (7-4), en casi dos horas y media de juego. Nada fácil, porque el rival fue constante, duro y certero.

“Jugué contra un rival muy inteligente a la hora de leer los momentos del partido, sin embargo creo que en los momentos decisivos, en los puntos clave, ahí jugué mejor”, señaló más relajado en la conferencia de prensa posterior al extenuante partido.

Y era cierto, porque en el primer set no pudo cerrarlo. Munar se había mostrado sólido y capaz de devolver todo lo que Schwartzman le tiraba, pero falló a la hora de definirlo y en el tie break el local fue más consistente, más seguro y obtuvo una amplia ventaja.

“Hubo momentos en que yo sentía que terminaba el punto, y sin embargo me traía una más. Pero en los decisivos, creo que estuve bien. Saqué adelante momentos complicados y estoy feliz”, resumió ese momento el “Peque”.

En el segundo set, la tónica fue similar, aunque esta vez fue el “Peque” quien tuvo una ventaja porque contó con la posibilidad de cerrarlo antes de llegar al desempate. Estuvo adelante 5-4 y contó con dos match points, primero en un 30-40, y luego con una ventaja. Pero fueron esos puntos en los que el español devolvió todo, le entraron todas las bolas y al final resolvía algo impensado para el local, a pesar de que este había jugado muy bien los puntos.

“En el tie break del segundo jugué, creo, los mejores seis puntos seguidos de mi vida, si no lo fueron, pega en el palo. Después erré algunas definiciones, pero estaba muy bien de la cabeza y con una devolución lo pude terminar”, analizó Schwartzman.

Ahora viene un partido difícil, ante Francisco Cerúndolo. “El torneo tiene grandes partidos y creo que la gente lo disfruta. Yo también. Va a ser muy complicado, voy a tener que jugar con mucha inteligencia”, respondió.

Ahora es Cerúndolo, que viene de una larga y exitosa semana de triunfos desde la qualy, para meter un semifinalista argentino en el torneo. Otro encuentro que promete ser vibrante.

Hernán O’Donnell