Fue un clásico. Con todo lo que eso conlleva, sobre todo en esta parte del mundo, donde jugar ante un rival histórico implica, primero no perder. Después, si se puede y solo si se puede, ganar.
Pero para intentar ganar, hay que tomar todos los recaudos posibles, medir cada jugada y no dar pasos en falso. Perú y Chile protagonizaron una edición más del Clásico del Pacífico, y no pudieron sacarse ventajas. Hubo un momento para Chile, el inicial. Luego se animó más Perú, tuvo algo más de protagonismo en el segundo tiempo, y el empate cayó de maduro.
El conjunto que dirige Jorge Fossati formó con Pedro Gallese; Miguel Araujo, Carlos Zambrano, Alexander Callens; Andy Polo, Sergio Peña, Wilder Cartagena, Luis Advíncula; Edison Flores, Piero Quispe y Gianluca Lapadula.
El equipo de Ricardo Alberto Gareca comenzó con Claudio Bravo; Mauricio Isla, Paulo Díaz, Igor Lichnovsky, Gabriel Suazo; Marcelino Núñez, Erick Pulgar; Victor Dávila, Alexis Sánchez, Diego Valdes; Eduardo Vargas.
Chile fue más punzante en el inicio, y a los 15′ tuvo una situación clara con un centro de la izquierda y el disparo de Alexis Sánchez que se fue por arriba del travesaño. Perú contestó con un tiro de Edison Flores, a los 20′, que pasó cerca.
Volvió a tener una oportunidad Chile, a través de un tiro de Alexis Sánchez que salió un poco elevado, cuando iban 28′ de juego.
Perú tuvo una baja importante a los 34′ cuando se lesionó Luis Advíncula, quien debió ser reemplazado por Marcos López. Y cerró bien el primer tiempo con un cabezazo de Araujo, a los 42′, que controló muy bien Claudio Bravo.
El “Tigre” Gareca dispuso una modificación para comenzar el segundo tiempo. Darío Osorio ingresó por Diego Valdés, también con una molestia.
Lapadula tuvo una buena posibilidad, a los 57′, y fue el aviso del crecimiento de Perú.
Entonces Gareca entendió que debía hacer más variantes en su equipo, y a los 64′ decidió la segunda y tercera modificación: Marcos Bolados entró por Víctor Dávila, y Ben Brereton lo hizo por Eduardo Vargas.
En Perú, el segundo y tercer cambio llegaron a los 71′; Paolo Guerrero reemplazó a Edison Flores, y Joao Grimaldo entró por Piero Quispe.
Y volvió a llegar, a los 79′, con un corner, el cabezazo, y el intento de Paolo Guerrero ante el leve rebote que dio Claudio Bravo.
A los 83′ Fossati hizo el cuarto y quinto cambios permitidos en Perú: Luis Abram entró en lugar de Alexander Callens, y Oliver Sonne reemplazó a Andy Polo. En Chile, Rodrigo Echeverría ingresó por Marcelino Núñez, a los 84′.
La última fue para la “Roja”: un cabezazo de Brereton Díaz, a los 85′, que salió apenas alto.
Fue el final, porque se mantuvo la cautela y el cuidado. Perú y Chile cumplieron con la premisa de no perder el clásico. Dos ciclos nuevos que recién van por los primeros pasos. Jorge Fossati reemplaza a Gareca, en Perú, tras un ciclo de ocho años muy buenos. Y le empezó a dar su forma al equipo, con tres centarles, dos carrileros, la innovación de poner a Advíncula por izquierda, el final d jugar con dos “nueves”, por si había que terminar el partido con centros…
Ricardo Gareca también arranca su primera competición oficial en Chile, con una decisión fuerte, la de prescindir de dos históricos como Gary Medel y Arturo Vidal.
Sumaron un punto, no cedieron ante el rival histórico, mantienen viva la ilusión de la clasificación. Para empezar, no está mal.

Hernán O’Donnell