Arsenal fue un canto al sacrificio y logró un valioso triunfo

En la previa, era un partido muy difícil. Complicado. Ante un rival que tiene buenos jugadores, un técnico con mucho tiempo de trabajo y un funcionario aceitado. Era una parada brava, y para la “cátedra”, Arsenal la tenía muy difícil ante Lanús. Es más, el equipo de Luis Zubeldía era el favorito, por antecedentes y por actualidad. Pero el fútbol es dinámico, impredecible y cambiante. Lo que hoy parece una cosa, mañana no lo es. Y Arsenal, con un esquema aplicado, concreto y perseverante, logró dominar el partido y vencer a Lanús en una de las grandes sorpresas de la fecha.

Israel Damonte hizo un planteo simple, pero efectivo y con una variante táctica muy interesante. Propuso un esquema que Arsenal había planteado en varias oportunidades; línea de cuatro, un volante por delante, tres hombres más avanzado y dos delanteros. Así, con el respaldo del arquero Alejandro Medina, por delante estuvieron Gastón Benavídez, Gustavo Goñi, Gastón Suso y Emiliano Papa. Como volante central, Dardo Miloc, de caracterías tias más vincualdas al juego y la distribución que al quite; delante de él, Leonel Picco, un “5” recuperador pero que muchas veces lo ponen adelantado. A su derecha, el zurdo Nicolás Castro. Y por izquierda, Facundo Kruspzky. Como delanteros, Nicolás Mazzola y Bruno Sepúlveda.

Las variantes le dieron resultado, porque Arsenal tomó el control del partido desde el inicio. Al minuto tuvo un corner a favor que Picco cabeceó apenas desviado. A los 6′ Sepúlveda sacó un remate que se fue alto. El equipo de Sarandí mostraba sus armas y atacaba a un Lanús que planteó un esquema con Lucas Acosta en la valla, cuatro defensores, Brian Aguirre, Guillermo Burdisso, Diego Braghieri y Alexandro Bernabei. El paraguayo Morel por delante, a su derecha o adelante, dependiera de las circunstancias, Tomás Belmonte, más abierto Angel González, a la izquierda Lautaro Acosta y dos delanteros: “Pepe” Sand y José López. El “Granate” trató de llegar con juego asociado, trianngulaciones por los costados y centros a la potencia de sus hombres de ataque.

A los 13′ tuvo una chance con un buen disparo de José López que detuvo muy bien Alejandro Medina. Y después hubo poco fútbol, bastante lucha y escasas llegadas a los arcos.

En el complemento se abrió enseguida el marcador y se desarrolló otro partido. Más vibrante y con mayor intensidad en el juego. Iban 48′ cuando se equivocó la defensa visitante; Guillermo Burdisso tocó hacia atrás para su arquero Lucas Acosta, pero la recepción fue defectuosa, con un rebote un poco largo, Nicolás Mazzola estaba muy atento, capturó el balón y cedió al medio para que Bruno Sepúlveda pusiera el 1-0 para Arsenal.

No se habían acomodado para el segundo tiempo y el local ya se ponía en ventaja. Y a los 58′ volvió a avisar con una buena jugada de Kruspzky, quien enganchó dentro del área y sacó un remate que se fue desviado.

Luis Zubeldía decidió meter mano en el equipo y realizó cuatro cambios juntos; a los 64′ Ignacio Malcorra ingresó por Lautaro Acosta; Pedro de la Vega reemplazó a José López. También Matías Esquivel ingresó en lugar de Tomás Belmonte y Morgantini entró en reemplazo de Brian Aguirre. Pero no se movió demasiado el desarrollo del juego. Lanús se adelantó un poco por la inercia de la búsqueda del resultado y Arsenal se atrasó unos metros para aprovechar mejor los espacios, pero no tuvieron gran influencia los cambios. De hecho, pronto surgió otra llegada local, con un remate de Kruspzky, a los 67′, que salió alto.

Pero era lógico que Lanús empezara a llegar hasta el área local. Por este del empuje, y de las obligaciones de buscar la paridad. A los 71′ tuvo una oportunidad con un doble cabezazo en el área rival, el último de Guillermo Burdisso, que se fue, de modo leve, por arriba del travesaño.

A los 72′ llegó la primera variante en el local, que no solo se refirió al cambio sino a un acomodamiento de posiciones. Julián Navas ingresó por Kruspzky, pero ocupó el lugar de Benavídez; este se adelantó por derecha, a la posición que había ocupado hasta entonces Nicolás Castro, quien se movió a la izquierda, donde había jugado Kruspzky, en definitiva, el lugar natural de “Nico” Castro.

Insistió Lanús, y a los 77′ “Pepe” Sand sacó un buen tiro, tras una media vuelta, que salió arriba del travesaño. Era un final electrizante y Arsenal se empezó a acomodar para jugar con inteligencia los minutos finales. A los 82′ Valentín Larralde ingresó en lugar de Bruno Sepúlveda. Quedó libre delante de la línea de volantes, mientras Mazzola se posicionó como centro delantero.

Zubeldía jugó su última carta a los 86′, con el ingreso de Agustín Rodríguez por Angel González. Pero no le encontraba solución a la imposibilidad de generar ataques profundos, mientras Arsenal volvía a avisar, con una jugada en la que Larralde combinó con “Nico” Castro, este cedió a Benavídez, el lateral enganchó en el área y sacó un gran tiro que controló muy bien Lucas Acosta.

Quedaba tiempo para la angustia final y los seis minutos adicionados. A los 90′ Juan Andrada reemplazó a Leonel Picco, en el tercer y último cambio del local. Y la visita tuvo una última oportunidad a los 90+4′ cuando “Pepo” de la Vega metió un gran cabezazo que Medina atrapó con un espectacular vuelo.

Fue el cierre y la locura. El grito eufórico y el abrazo apretado de los jugadores de Arsenal, titulares y suplentes, todos juntos, pues habían conquistado una victoria ante Lanús en la que pocos creía, pero que ellos construyeron a base de un esquema aplicado, una contracción al esfuerzo, y un sacrificio permanente durante todo el partido.

Hernán O’Donnell