Llegó el momento. Es la hora de jugar. En Mar del Plata ya se han dicho todas las palabras, se han vertido todos los comentarios, los análisis previos y los pronósticos más variados ya se han volcado a la mesa.
El sorteo dijo que Charly Brlocq debe abrir la serie ante Andreas Seppi. Que luego jugará Juan Mónaco ante Fabio Fognini. El sábado el dobles y el domingo se cruzan los 1, Berlocq y Fognini, para cerrar Mónaco ante Seppi.
Todos dijeron más o menos lo mismo. Que la serie es “muy pareja”, que “los partidos serán muy duros y cerrados”, que es “lo mismo jugar en primer o segundo turno…”.
La serie empieza a tomar color, con las ilusiones repartidas y equilibradas.
Mar del Plata comienza a sacudir su arena natural para envolverse de polvo de ladrillo. El escenario, el Patinódromo “aggiornado” quedó en muy buenas condiciones. Un court rodeado por tribunas muy cercanas, que le dan un aspecto cerrado. Una suerte de “Bombonera”, ideal para hacer sentir la localía.
Por eso, por el deporte, por lo que proponen, por el equilibrio la caballerosidad, se vienen 3 dias a puro tenis. Para gozar, para disfrutar, para empezar a soñar otra vez.
Hernán O´Donnell
(Enviado Especial a Mar del Plata, Provincia de Buenos Aires)