Barcelona se enredó en sus dudas y comprometió su futuro en La Liga

Había jugado un primer tiempo interesante, con dominio del juego, control territorial y una ventaja apreciable de 0-2 en el primer tiempo. Sin embargo, tras un inicio de complemento donde pudo aumentar y llegar al tercer gol, porque De Jong tuvo una buena situación a los 55′ y su remate, por arriba del travesaño, se fue con olor a gol. pero allí se derrumbó Barcelona, perdió consistencia y sufrió los ataques de Levante, un equipo que intenta jugar bien, que le gusta administrar la pelota y que tiene espíritu ofensivo. Incluso, si en algo se parece a Barcelona, y así lo demostró el segundo tiempo, tan cambiante, es su endeblez defensiva.

Barcelona había sacado una diferencia a través del gol de Messi a los 24′, tras recibir un rebote de un centro de la izquierda y sacar una volea con el sello de su calidad, para poner el 0-1 en el partido; ahí, el equipo de Koeman cedió un poco de terreno y el Levante aprovechó para ir por el empate, pero en un rápido contragolpe de Dembelé, este llegó al fondo, cruzó el balón al medio y Pedri apareció libre para señalar el 0-2 a los 33′ de juego.

Con una tranquilidad ficticia se fue al descanso el equipo catalán. Porque se comprobó, tal como le sucedió en los últimos partidos, que su espíritu no estaba firme y se desdibujó en el complemento, así como le ocurrió ante Granada y Atlético de Madrid.

Y pasó lo que contábamos en el principio de esta crónica con un segundo tiempo cambiante y sorprendente. Sergi Roberto ingresó por Araujo, lesionado, en un anticipo de varias modificaciones de nombres y de estructura del conjunto de Koeman.

Luego de esa oportunidad de De Jong para aumentar el marcador, llegó el aluvión local.

A los 56′ descontó Melero, con un cabezazo certero, tras recibir un centro desde la derecha, que dejó a Ter Stegen sin reacción y el partido se achicó a 1-2.

Enseguida, una salida fallida de la visita fue aprovechada por Levante. Messi quiso jugar hacia atrás, el balón lo capturó el medio local, el pase le llegó a Morales y este sacó un remate fuerte y cruzado que se metió en el ángulo superior izquierdo de Ter Stegen y el encuentro quedó 2 a 2 a los 59′.

Levante se había metido en el partido y Paco López decidió dos variantes para refrescar la estrucutura: a los 60′ D. Gomez entró por Bardhi, en tanto que M. Malsa ingresó en lugar de O. Duarte. Y fue el propio Malsa, que a los 61′ tuvo un disparo peligroso que salvó Ter Stegen.

El encuentro se había complicado para Barcelona, que, sin embargo, encontró otra oportunidad para torcerlo a su favor. Iban 63′ cuando Lionel Messi encaró por el medio, habilitó a Antoine Griezmann, este abrió a la derecha y Dembelé sacó un remate fuerte que se transformó en el 2-3 para la visita.

Ronald Koeman intentó reamrar la zaga y plantear un partido más sólido, al compás de un contragolpe que, al cabo, nunca salió. Pero pensó que con el ingreso de Óscar Mingueza  por Pedri a los 73′, el equipo podría obtener una organización defensiva más eficiente. No sucedió.

En el local, a los 74′, Coke reemplazó a Jorge Miramón, y Sergio léon entró en lugar de Roger Martí. En la visita, 80′ M. Braithwaite reemplazó a Antoine Griezmann y a los 81′ Serginho Dest ingresó en lugar de O. Dembele.

De esas variantes, Levante tuvo mejor resultado, pues a los 82′ llegó al empate, tras una maniobra por izquierda, el centro de Toño al medio y la aparición de Sergio Léon para marcar el definitivo 3 a 3.

Koeman fue por una última alternativa y a los 84′ Riqui Puig entró por un Sergi Roberto que no llegó a completar cuarenta y cinco minutos, pues había entrado en el inicio del complemento. Y el Barca, fue. Con más imprecisiones que juego asociado, con más impulso que ideas, con más obligaciones que convicciones. Solo el joven Puig puso claridad a cada ataque, pero no tuvo compañía, apenas la jerarquía enorme de Messi para encontrar siempre una buena ubicación, pero sin socios para que entre ambos pudieran llegar a desnivelar.

Y Barcelona dejó dos puntos fundamentales, que pueden ser determinantes en un cierre de Liga electrizante y apasionante, pero que empieza perfilar un dueño y a alejarse de Cataluña.

Hernán O’Donnell

Central Córdoba fue a buscarlo, pero Arsenal lo supo contrarrestar

El equipo de Gustavo Coleoni salió a jugar como lo hace siempre. Al ataque, a la búsqueda del arco contrario, a respetar la pelota y a través del juego asociado intentar generar situaciones ante el arco rival. ya es un sello distintivo de los equipos del “Sapito”. por eso no sorprendió que Central Córdoba saliera a jugar en la mañana del domingo (tempranito para los horarios tradicionales del fútbol) en el Estadio “Julio Humberto Grondona”, como si estuviera en Santiago del Estero.

A los 2′ tuvo un remate de Lattanzio que salió afuera; a los 3′ llegó un desborde de la izquierda de Bay, el centro al área chica y el “tacazo” de Pablo Argañaraz pasó al lado del palo derecho de Nicolás Navarro. De movida, aviasaba la visita.

Arsenal se paró con una línea de cuatro donde Jonathan Bottinelli asumía la voz del liderazgo; tres volantes, Rogoski, Picco y Antileff, un enlace, Brian Farioli y dos delanteros: Nicolás Miracco y Bruno Sepúlveda. Un esquema clásico que a los 10′ le permitió una sonrisa, con el gol de Julian Navas que puso el 1 a 0.

Pero reaccionó la visita y enseguida llegó a la igualdad. Pelotazo largo y cruzado de Jonathan Bay, el balón que parecía perderse por la derecha, la llegada franca y justa de Leonardo Sequeira y el centro al medio del arco donde MIlton Giménez la empujó para marcar el 1 a 1 a los 11′ de juego.

Era lo más justo hasta el momento. y el dominio de Central se sostuvo en tanto creció la figura de Nicolás Navarro, el arquero local. A los 15′ remató Giménez y Navarro sacó al corner. Del tiro de esquina cabeceó Sequeira y rechazó Navarro; el rebote lo tomó Dixon Rentería, pateó al arco y otra vez apareció el arquero de Arsenal. A los 19′ Sequeira le ganó en velocidad a Ulises Abreliano y sacó un tiro cruzado que pasó cerca del palo derecho. A los 24′ fue Cristian Vega quien remató de lejos y desvió Navarro. A los 28′ Central armó una gran jugada colectiva que terminó con otro disparo de Vega, que esta vez se fue afuera. Y hubo más: a los 36′ se armó un contraataque que encabezó Giménez, habilitó a Lattanzio, este de cabeza la metió adentro para Sequeira y el tiro del puntero derecho se fue afuera.

Recién tuvo una oportunidad Arsenal a los 39′, con un cabezazo de Julián Navas que Mehring controló abajo.

Sergio Rondina se fue muy preocupado al terminar el primer tiempo y decidió comenzar el segundo con una variante: Facundo Kruspzky ingresó por Maximiliano Rogoski. y fue otro Arsenal. Más metido, más fuerte, más comprometido. Jugó con más orgullo el segundo tiempo.

Claro que los de Coleoni mantenían su línea de juego y a los 57′ Milton Giménez se metió por derecha, habilitó a leo Sequeira y cerró justo Gariglio al corner.

Y como en todos los segundos tiempos de todos los partidos, se abrió el show de los cambios: a los 69′ Lucas Brochero entró por Carlos Lattanzio y Hernán López mUñoz reemplazó a Pablo Argañaraz en Central Córdoba. En Arsenal, a los 75′ Matías Belloso entró por Bruno Sepúlveda y Alan Ruiz ingresó en lugar de Brian Farioli.

Y la visita que sumaba otra chance, con el remate de López Muñoz que, tras pegar en un defensor, dió en el palo izquierdo del arco de Navarro y se fue al corner, a los 76′. A los 79′, otras dos variantes en el visitante: Sebastián Ribas entró en lugar de Juan Galeano y Francisco “Panchito” Cerro reemplazó a Leonardo Sequeira. En Arsenal, se fue agotado Julián Navas, a los 83′, y su lugar lo ocupó Mateo Carabajal.

No hubo tiempo para más. Central Córdoba había salido decidido a llevarse todo, pero Arsenal se despertó de un primer tiempo dormido, supo acomodarse, encarar el partido con otro espíritu y equilibró fuerzas en el complemento para que todo quedar sellado en un empate en una atípica mañana de domingo.

Hernán O’Donnell

Platense despidió a Llop con todos los honores

Primero le entregaron una répilca de la Copa por el ascenso, una camiseta oficial y un montón de abrazos emocionados y aplausos cálidos de los asistentes al partido por la última fecha clasificatoria de la Copa de la Liga Profesional 2021 ante Rosario Central.

Juan Manuel Llop dejó de ser el Director Técnico de Platense y antes de empezar el partido recibió un montón de mimos que luego se traducirían en una actuación destacad del equipo y un triunfo con goleada incluida para que la despedida fuera lo mejor posible.

Platense y Juan Manuel Llop separaron sus caminos, después de mucho tiempo compartido y la gloria de haber regresado juntos a la Primera División luego de 22 años. Pero el “Calamar” no se quedó sólo en palabras de agradecimiento; también fue un equipo duro, compacto y agresivo que goleó a Central por 4 a 1 y ahora mira el futuro con aires renovados.

Una línea de cuatro defensores clásica fue la defensa local; Bochi por delante de ellos, acompañado por Mauro Bogado y Thiago Palacios, Baldassarra y Gastón Gerzel un poco más adelantados para que Jorge Pereyra Díaz trabaje como punta de lanza. Central lo recibió con dos líneas de cuatro y Marco Ruben y Lucas Gamba en el frente de ataque. pero salió con más actitud el equipo local, volcó el juego hacia “Fatura” Broun y a los 12′ logró abrir el marcador con un certero cabezazo de Pereyra Díaz, quien había recibido un centro muy preciso de Mauro Bogado.

Central quiso reaccionar y avisó con un remate de Lautaro Blanco desde afuera del área a los 14′. Sin embargo, el local iba a tener otra oportunidad con un disparo de Brian Lluy a los 22′ que detuvo Broun.

Sin embargo, central alcanzó el empate a los 25′ con un golazo de Lucas Gamba de “chilena”, tras un corner desde la derecha. El encuentro quedó entonces 1 a 1 y se emparejó. De hecho, hubo una acción de peligro para cada uno; a los 27′ Gerzel remató al arco, el balón pegó en Martínez y el balón se fue al corner. A los 40′ el propio Damián Martínez quiso disparar al arco local, su tiro se fue a un costado donde recibió Gamba y el remate de este fue sacado al corner por De Olivera.

En el segundo tiempo Platense comenzó con un cambio: Facundo Curuchet entró por Thiago Palacios. Y enseguida tuco su chance; iban 46′ cuando Bogado ejecutó bien un tiro libre y Curuchet la pellizcó pero la pelota salió desviada.

Salió decidido el local y a los 55′ logró desnivelar. Curuchet peleó un balón en la mitad de la cancha, le ganó en velocidad a Nicolás Ferreyra, la cruzó al medio, la abrieron para Baldassarra y este definió con un remate cruzado. Platense se adelantaba por 2-1.

Como en todos los partidos, llegó el momento de los cambios. A los 58′ Tissera entró por Pereyra Díaz en Platense, a los 60′ Marinelli entró por Villagra en Rosario Central, a los 63′ Gastón Avila se ubicó en lugar de Nicolás Ferreira en la “Academia”. En se mar de modificaciones, Lucas Gamba tuvo una oportunidad cuando le quedó un balón en la puerta del área pero su tiro lo controló el arquero local De Olivera. Respondió el “Calamar”: a los 67′ Bogado largó un pelotazo largo para el pique de Curuchet, este se metió en paralelo al área, abrió para Baldassarra y el remate final de este último pegó en Laso y se fue al corner.

Ahí actuó Cristian González; dos variantes en Central a los 72′ de juego: Dupuy por Gamba y Torrent por Damián Martínez. En Platense, a los 78′, Hernán Lamberti ingresó en lugar de Bogado, agotado en lo físico, y Callegari por Gerzel, para armar una línea de tres zagueros y dos laterales que cerraran la defensa local.

El partido se terminó de abrir por las expulsiones. A los 84′ se fue Torrent con roja directa y a los 85′ se fue expulsado Baldassarra por doble amonestación.

Y con el campo abierto, todo se simplificó para el local. A los 90+1 de Olivera marcó de penal el 3 a 1 y a los 90+2′ Nicolás Zalazar armó una jugada individual de enorme jerarquía, para irse al ataque con fe, usar a sus compañeros de señuelo, enganchar hacia adentro y definir con un tiro fuerte que venció las manos de Broun y poner el 4 a 1.

Fue el mejor homenaje de Platense al entrenador que se iba después de un largo tiempo. El equipo ganó, goleó y gustó. Y dejó abierta la puerta al futuro.

Hernán O’Donnell

Reaccionó Independiente Rivadavia y se llevó la alegría a Mendoza

Con un penal sobre el final muy discutido, pero con atributos que también ameritaron la victoria. Independiente Rivadavia de Mendoza supo revertir el primer tiempo complicado que había vivido, remontar el marcador adverso y al final consiguió un triunfo valioso en Ezeiza, para prenderse en el lote de arriba de la Zona “B” del Campeonato de Primera Nacional 2021 y asumir el peso de ser uno de los candidatos.

Sufrió y ganó, después de un primer tiempo favorable a Tristán Suárez. Porque el equipo local supo hacerse dueño del balón y las acciones en el primer tiempo, al compás de la habilidad de Brian Miranda para mover los hilos del equipo, la vitalidad de Franco Quiroga, el quite de Muñoz en la mitad de la cancha y la velocidad del “Pony” Oyola. Con esos atributos, el local empujó al equipo mendocino contra su campo. Si bien a los 9′ Matías Quiroga quedó mano a mano con Lugo, la acción no prosperó pues el remate de Maldonado se fue al corner.

Y a partir de allí todo fue del local en el primer período. A los 12′ avisó Oyola con un tiro combado que se fue apenas arriba del ángulo superior derecho de Emmanuel Cirrincione. Y pronto llegó el gol.

Iban 23′ cuando trepó Mariano Bettini por derecha, lanzó un centro rasante, pasó de largo Molina y por la izquierda apareció Oyola para señalar el 1 a 0 para Tristán Suárez.

Era justo y el local iba por más. A los 30′ Miranda sacó un gran remate que Cirrincione logró rechazar y su compañero Luciano Sánchez ayudó para sacarla al corner; de ese tiro de esquina Muñoz metió un buen cabezazo que atrapó el arquero visitante.

Independiente Rivadavia sólo tuvo un remate de Sebastián Navarro, a los 35′, por arriba del travesaño, en su única aproximación de ese tiempo.

Para el complemento, Gabriel Gómez decidió que Leandro Berti ingresara por Félix Banega. y fue un acierto, porque el joven recién ingresado le dio vitalidad y frescura al equipo por la derecha, con una asociación positiva con Diego Cardozo, que de a poco se transformó en la figura del segundo tiempo. A los 17″ el equipo visitante avisó con un remate de su conductor, que derivó en un tiro de esquina. Aníbal Biggeri gritaba desde el banco para que el local se despertara, pues ya había arrancado el complemento y ya había pasado un sofocón.

Así fue como a los 52′ llegó el empate, tras un centro del propio Cardozo y el cabezazo de Matías Quiroga fue a la red de Lugo para señalar el 1 a 1. Y se hizo fuerte la “Lepra” mendocina. Corrigió errores, se adelantó en el campo, apreto y fue por más. A los 58′ Quiroga remató afuera tras un centro, en otra llegada visitante.

Se había quedado mucho Tristán Suárez. No encontraba la pelota, no podía sostener el ritmo y apenas aviaba de contragolpe cuando Miranda podía hacerse del balón. Recién a los 61′ encabezó el “10” local un contraataque que remató Oyola y Cirrincione sacó al corner. Por eso Biggeri resolvió dos variantes para refrescar al equipo cuando iban 71′ de juego. El “Tanque” Alexis Domínguez entró por Molina y Enzo Arreguín ingresó por Franco Quiroga, lesionado.

Pero ya el partido había cambiado de dueño y la visita era el dominador. A los 76′ Lucas Fernández ingresó en reemplazo de Ramiro Maldonado, y en la recta final llegó la jugada de la discordia.

Matías Quiroga intentaba armar por la derecha y Bruno Duarte lo tocó en la pierna izquierda. ¿Suficiente para derribarlo? el toque existió, pero creemos que fue un roce propio de la marca en la disputa por la pelota, de los tantos que hay en un deporte de contacto. El árbitro Lucas Comesaña entendió que el contacto fue de falta y sancionó el penal. En definitiva, es la autoridad del encuentro. Y Diego Cardozo no dudó: observó que Lugo se jugó a su derecha y remató suave y bien colocado a la izquierda del arquero local, para poner el 1-2 a favor del “Azul” a los 82′ de juego.

Biggeri actuó rápido: adentro Brian Giménez, en reemplazo de Ezequiel Melillo. Y Tristán Suárez fue arriba, a la carga, con toda la artillería. A los 85′ Arreguín remató al ángulo y Cirrincione la sacó al corner. A los 86′ Ferroni entró por Cardozo en el equipo cuyano, para sostener el resultado, en tanto su figura se fue agotado de tanto correr.

Al final tuvo otra chance el local; Miranda ejecutó un tiro libre que se fue apenas alto, cuando ya el reloj estaba en los 89′ y el cierre se avecinaba.

Independiente Rivadavia se llevó la alegría a Mendoza. La pasó mal en el primer tiempo, reaccionó en el complemento y ahora se postula como candidato al ascenso.

Hernán O’Donnell

Mitre fue un poco mejor, pero chocó con la solidez de Deportivo Maipú

Tarde de sol en Mendoza. Un viernes que augura un fin de semana de buen tiempo y el fútbol que acompaña, con el entusiasmo de Deportivo Maipú, el local, y Mitre de Santiago del Estero, uno de los candidatos a pelear por el ascenso.

Y el primer tiempo que salió entretenido. No brillante, ni lúcido, pero si disputado con intensidad y pierna fuerte. también con algún exceso de pelotazo, de balón largo para jugar al rebote, a la famosa “segunda pelota”. Salvo cuando la tenía Arnaldo González, el “Pitu”, quien supo ser conductor, organizador y ariete ofensivo del conjunto santiagueño.

Así, a los 17′ ejecutó un tiro libre que terminó en el travesaño del arco local. Respondió Maipú con una llegada a los 27′ del primer tiempo por medio de Sandoval, que había ingresado unos minutos antes (a los 18′) por Grosso, y a los 32′ tuvo otra chance la visita, cuando recibió Palacios y su disparo salió cruzado por delante de la valla de Bolado.

Sin más luces ni jugadas de relieve se fue el primer tiempo.

En el complemento, Mitre volvió a insinuar un protagonismo que no pudo plasmar en el marcador. Se plantó con mayor decisión que el rival, con sus defensores bien cerca del círculo central. A los 57′ su entrenador, Darío ortíz, decidió dos modificaciones: Ezequiel Cérica ingresó por el hábil José Torres y Charparin reemplazó a Donato.

Enseguida Cérica tuvo una oportunidad; recibió un centro de Rodrigo tapia y metió un cabezazo que pegó en el travesaño local, cuando iban 60′ de juego.

Pero el partido iba a traer una sorpresa; combinaron por la banda izquierda del ataque local el “Loco” Méndez y el lateral izquierdo Edgardo Díaz. Este tiró un centro pasado y por la derecha apareció Agustín Manzur, quien con un remate cruzado abrió el marcador y puso el 1 a 0 para Deportivo Maipú.

Mendoza explotaba de alegría, aunque la felicidad iba a durar muy poco, porque pronto el equipo de Santiago del Estero iba a hallar la igualdad, con una atropellada de Pablo Palacios Alvarenga a los 63′ de juego para dejar las cosas 1 a 1.

Mitre era más y tenía más ocasiones. A los 71′ el “Pitu” González metió un buen tiro libre desde la izquierda que pasó muy cerca del palo izquierdo local. A los 76′ Israel Roldán reemplazó a Palacios Alvarenga, pero no sería el único goleador del partido en salir porque a los 77′ Agustín Manzur, autor del gol de Maipú, dejó su lugar para que ingrese Luciano Ortega. También en esa ventana, en el local Moreno reemplazó a Matías Viguet.

Y los cambios continuarían su historia ya repetida de interrupciones constantes. A los 79′ T. Galvan ingresó en lugar de H. Tifner en Mitre; y a los 82′ cerró los cambios el equipo cuyano: Pussetto entró por Méndez, mientras que Lautaro Herrera reemplazó a su tocayo, Agustín Herrera.

Poco quedaba por jugarse y volvió a tener una chance el equipo santiagueño: desborde por izquierda, centro al medio y Cérica que eligió girar cuando de frente llegaba Roldán en buena posición de remate. Pero Ezquiel optó por la media vuelta y el balón se le escapó por la línea de fondo.

Fue un partido intenso, entretenido pero de bajo vuelo. Mitre pudo haberse llevado algo más, pero chocó con la solidez de Deportivo Maipú y el empate les quedó bien a los dos.

Hernán O’Donnell

Flamengo se llevó todo el mazo en el final de un gran partido

El primer tiempo fue un monólogo de Flamengo. Dominó casi con exclusividad todo ese período, tal es así que la primera llegada local se produjo a los 43′ con un remate alto. Hasta ese momento, todo había sido de la visita. Y desde el inicio.

Recién se acomodaban en la cancha y a los 2′ Flamengo abrió el marcador a través de Gabriel, quien recibió una habilitación de Everton Ribeiro y cuando le salió el arquero argentino Adrián Gabbarini, definió con un toque suave y cruzado para poner el encuentro 0-1.

Se acomodó bien el conjunto “carioca”. Con la línea de defensores adelantada, los volantes cerca y los atacantes listos para acelerar. Bien por los costados y buena elaboración por el campo interno fueron las características de la visita.

A los 30′ aumentó Flamengo con un soberbio golazo de Bruno Henrique, quien aprovechó un amague de Giorgian De Arrascaeta, y desde afuera del área grande sacó un bombazo inatajable para Gabbarini.

Lig sucumbía sin hacer pie; apenas el empuje de Ezequiel Piovi y las subidas de Perlaza para oponer resitencia, amén de las intervenciones de Gabbarini, hasta esa aproximación final en el cierre de la primera etapa.

En el segundo tiempo el equipo local apareció con tres modificaciones: Luis Amarilla reemplazó a Paulo Zunino, Ayala entró por Caicedo y Muñoz por Christian Cruz. Y los tres le iban a cambiar la cara al equipo.

En Flamengo, para sorpresa de muchos, se produjo en el entretiempo el cambio de arquero; salió Diego Alves y lo reemplazó Hugo de Souza Nogueira, aunque luego se supo que estaba lesionado.

Y los cambios le dieron rédito al equipo local; Ayala se ubicó como extremo por la izquierda y en su primera aparición sacó un remate largo que aprovechó Borja para desviar y meter el balón junto al segundo palo del arco visitante y el partido quedó 1-2 a los 49′ de juego.

Se animó el local; más participativos Muñoz, Ayala y Amarilla, el equipo de Repetto crecía con la salida permanente de Perlaza por la banda derecha, el talento de Piovi y la potencia de Borja. Se sostenía Flamengo en Viana y la amenaza de los contragolpes, pero ya el partido era otra cosa. Vibrante y entretenido.

A los 57′ Hugo Moura reemplazó a Joao Gomes en la visita, para reforzar el juego aéreo. Pero Liga seguía mejor, y a los 58′ Arce no pudo conectar bien un centro pasado, y su remate fue desviado al corner.

El empate cayó como una fruta madura; tiro de esquina desde la izquierda y Amarilla puso el pecho para desviar el balón y meter el 2 a 2 a los 61′. Liga era otra cosa, se había adueñado del partido, en tanto el equipo brasileño había aflojado y parecía no estar en la cancha.

A los 73′  73′ J. Espinoza ingresó por el argentino Ezequiel Piovi en el local; en ese momento pareció reaccionar el visitante, con un tiro libre de Gabigol. Se acomodó después del temblor. Filipe Luis tomó confianza para la salida, Everton Ribeiro buscó asociarse y volver a ser el del primer tiempo, en tanto Gabriel preocupaba con su potencia.

Sin embargo, a los 77′ Gustavo Henrique entró por Viana, en busca de mayor altura en la defensa, ya que entendía que el local lo complicaba con centros, y Vitinho reemplazó a Ribeiro.

En el final, Flamengo encontró una nueva oportunidad. Penal de Corozo a De Arrascaeta a los 81′ que entre los golpes que sufrieron en el roce, la recuperación, la intervención de los médicos y las protestas, se ejecutó recién a los 84′! Gabigol tocó con suavidad a la derecha de Gabbarini, quien eligió el otro palo, y el partido se cerró con el 2-3 para Flamengo.

Quedó tiempo para un par de cambios: a los 87′ Renê ocupó el lugar de Gabriel en el equipo “carioca” y a los 90+1′ Quintero fue por Corozo en el local.

Fue una noche a pleno fútbol, donde la visita fue el protagonista exclusivo del primer tiempo, Liga reaccionó en el complemento, y al final Flamengo encontró una carta para llevarse todo el mazo.

Hernán O’Donnell

Atlanta gana y convence con un estilo definido

Da gusto ver jugar a Atlanta. Es gratificante ver su estilo, su propuesta, su identidad. El equipo de Walter Erviti gana y trepa en lo más alto de la Zona “A” del Campeonato de la Primera Nacional, pero lo más atractivo no son los resultados sino la propuesta futbolística. De hecho, le hemos visto partidos como el que jugó ante Nueva Chicago donde no pudo romper el cerrojo visitante o el mismo de hoy, en el que el 1 a 0 quedó exiguo por la cantidad de situaciones creadas.

Atlanta salió a atacar como lo hace de modo habitual, pero además nutrido de buen juego, de asociaciones claras y progreso con el balón. A los 4′ tuvo su primera chance con una pelota que peleó “Nacho” Colombini, le ganó la disputa a Padilla, se metió en el área y sacó un remate fuerte que controló Olivera, el arquero visitante.

A los 11′ produjo la mejor jugada colectiva del partido. De arco a arco. La recibió su guardavalla, “Pancho” Rago. Abrió largo a la derecha; recibió Santiago Solari, quien de pecho se la bajó al lateral Leonardo Flores; Flores buscó a Colombini, este abrió a la derecha para el pique por detrás de Solari, y el puntero sacó un remate rasante para la llegada de Taborda por izquierda, quien no pudo rematar. Brillante de área a área.

Estduiantes apareció a los 15′, cuando Rago no pudo jugar un balón, el rebote le quedó a Ferreira y Pérez salvó al tirarla al corner. Del tiro de esquina otro rechazo le quedó al centro delantero de la visita, pero su remate fue tapado por el pecho de Flores.

El conjunto de Río Cuarto planteaba un clásico 4-4-2 para contener el envión local. Adin, Pardo, Padilla e Ihitz en la línea de cuatro; por delante Cainelli, Romero, Bottino y Hesar. Más adelante, Talpone y Ferreira. El local presentó un esquema de cuatro defensores, con Leo Flores como salida permanente, Pérez y García en la zaga pero bien adelantados, Ramiro Fernández en el lateral izquierdo. Tres volantes: Ramírez, Agustín Bolívar y Sebastián Riquelme, El primero y el último como internos, donde aprovechaban cada pasillo vertical para sumarse al ataque, mientras que Bolívar patrullaba el medio centro como el clásico volante tapón, y arriba Solari por derecha, Colombini como centro atacante y Taborda por la punta izquierda.

El encuentro se hizo un poco más equilibrado al llegar a la media hora; a los 32′ Hesar se lo perdió solo, tras no poder conectar con precisión un centro. A los 33′ Riquelme peleó una pelota por la izquierda, combinó con Taborda y sacó un disparo bajo que contuvo Olivera. A los 35′ Hesar tiró por arriba del travesaño y enseguida Atlanta abrió el marcador.

Iban 36′ cuando Leo Flores se proyectó por derecha, combinó con Ramírez, y recibió en posición de volante derecho. Adelantó un poquito el balón, se acomodó y sacó un disparo tremendo, que se metió en el ángulo superior derecho del arco visitante. 1 a 0 para Atlanta.

La etapa se cerró con un oportunidad de Ferreira para la visita, en la que su tiro se fue afuera a los 40′ y una corrida veloz de Solari, el centro posterior y el remate de Taborda arriba del travesaño a los 42′ de juego.

Erviti decidió una variante para el comienzo del segundo tiempo: Valentín Perales, defensor central, por Taborda, volante interno. El equipo se acomodó con tres defensores centrales, Flores y Fernández abiertos y adelantados, Bolívar entre ellos, Ramírez y Riquelme más cerca de los delanteros, Solari y Colombini. Y a los 49′ tuvo otra chance, con un disparo de Colombini que se fue desviado.

Era más el “Bohemio”, pero no podía aumentar el marcador. Y llegaron los cambios sucesivos. A los 62′ fue la segunda variante local: Ochoa Giménez reemplazó a Sebastián Riquelme, el hermano del ex jugador de Boca Juniors, Juan Román. Colombini tuvo otra chance, a los 67′, con un cabezazo que se fue muy cerca.

Reaccionó el equipo cordobés con una variante; a los 69′ Néstor Ortigoza entró por el lateral derecho Adín, y a partir de allí se ubicó de manera alternativa por los costados de la media cancha para recibir el primer pase de la defensa y armara las jugadas. A los 70′ Ferreira ejecutó un tiro libre que contuvo Rago, mientras que los cambios siguieron en modo continuo: A los 74′ Fabricio Pedrozo reemplazó a Solari, en lo que fue la tercera variante local. Luego, a los 76′ Marcos Asturia reemplazó a Talpone, en el segundo cambio visitante, que más tarde, a los 82′ efectuó su tercera y cuarta modificación: Ceresole entró por Romero y D’Angelo ingresó por Ihitz. En Atlanta, el entrenador dispuso la cuarta variante con el reemplazo de Ramiro Fernández y Mauro Luque ocupó su lugar.

Estudiantes se adelantó y buscó a partir de la distribución de Ortigoza, pero dejó muchos espacios libres a espaldas de pardo y padilla y sufrió varios contragolpes que pudieron liquidar el partido. A veces por falla en el último pase, a veces por intentar una de más, lo cierto es que Atlanta contó con algunas chances de aumentar. Las más claras fueron a los 90′ cuando Fabricio Pedrozo sacó un tremendo remate que Olivera sacó al corner con un vuelo magistral y a los 90+3′, un disparo de Ochoa Giménez que se fue muy cerca.

Así concluyó su presentación el equipo de Villa Crespo. Como la había empezado, a todo ritmo y con situaciones claras. Gana y convence, veremos como se mueve en lo alto de la tabla.

Hernán O’Donnell

Hamilton acelera y busca el récord, en un año arduo y competitivo

Fue una carrera espectacular, con muchas emociones, grandes condimentos y alternativas en la lucha por el triunfo que alteraron la primera posición en cuatro oportunidades. Arrancó Bottas, tras una largada magnífica, luego Hamilton tomó la punta, en un momento fue Sergio Pérez el puntero y al final el inglés Hamilton volvió a apoderarse de la punta y se llevó la victoria.

Desde el principio se notó una competencia dura y electrizante. Salió rápido Valteri Bottas, ganó la cuerda y el primer lugar, mientras detrás se apuntaban Hamilton y Verstappen. Mientras Carlos Sainz superaba a Sergio Pérez y Esteban Ocon y Lando Norris también se metían en la discusión, en la que pronto Norris pasaba a Esteban. Más atrás Kimmi Raikkonen se tocaba con su compañero Antonio Giovinazzi y debía abandonar muy pronto el Gran Premio de Portugal 2021.

Verstappen pudo superar a Hamilton, pero en una maniobra impecable el británico aceleró y al final de la recta principal retomó el segundo lugar. En la vuelta 20 pudo pasar a su compañero y se hizo dueño de la carrera. En una detención aprovecho Pérez para tomar la punta, pero poco iba a durar en ese lugar en tanto estiraba su cambio de neumáticos. Hamilton retomó ese lugar.

Hamilton, Bottas y Verstappen emprendieron una batalla larga, dura y cercana en el lapso de unas quince vueltas, de la 20 a la 35; en el giro 36 Verstappen paró en los boxes a cambiar neumáticos, mientras que en la vuelta 37 se detuvo Valteri Bottas y Verstappen aprovechó para superarlo en el giro siguiente, cuando el finlandés retomó la pista.

En la vuelta 38 se detuvo Hamilton y aprovechó el mexicano Pérez para adelantarse y llegar al primer lugar. En tanto, Chales Leclerc le ganaba la novena posición a su compañero en Ferrari, Carlos Sainz.

El Red Bull de Pérez fue exigido al máximo; pasaban las vueltas y no paraba a hacer el cambio de neumáticos, aunque en cada giro Lewis se acercaba más y más. Y para colmo, en el giro 46 Nikita Mazepin, que estaba último y no advirtió la llegada del primero, lo encerró y lo obligó a “Checo” a un bloque que le costó un tiempo valioso. Hamilton siguió adelante y realizó el ´record de vuelta en el giro siguiente hasta que en la vuelta 51 el asedio se hizo incontenible y con el DRS Hamilton apuró en la recta principal y lo superó con cierta comodidad.

Hamilton, Verstappen y Bottas se alinearon en las posiciones del podio y ya no se alteró este orden hasta el final.

Quedó el final brillante de Fernando Alonso, quien en las últimas vueltas escaló sin inconvenientes desde el 11er puesto hasta el 8vo, tras superar a Daniel Ricciardo, Pierre Gasly y Carlos Sainz.

Fue la tarde de Lewis Hamilton, la que volvió a sonreir y celebró una victoria importantísima para empezar a darle forma al sueño del ´record, en un año que promete ser arduo, duro y competitivo.

Hernán O’Donnell

Milan empieza a recobrar la memoria extraviada

Es probable que no le alcance para ser el candidato a ganarel próximo “Scudetto”. Es posible que aún le falte un par de temporadas para volver a coronarse. Es verdad que su archi rival, el Inter se corone en las próximas horas. También que arrastraba dos derrotas consecutivas que lo habían metido en una laguna de preguntas. Pero el Milan está otra vez en la senda que marca su historia, la de discutir los títulos de la Serie “A” del calcio italiano, la de ser uno de los protagonistas temibles de la Champions League. Pre pandemia nevagaba en la intrascendencia de la mitad de la tabla, con una serie de resultados que lo alejaban de los habituales primeros planos. Pero el año pasado retomó su sana costumbre enhebró victorias en cadena y se convirtió en uno de los mejores conjuntos del 2020. Y este año quiere acomodarse una vez más en las grandes marquesinas que siempre ocupó a lo largo de su rica historia.

Contra Benevento salió a jugar con la soltura que lo caracterizó el año último. Rotación, circulación, el eje en Calhanoglu, el pivoteo en la rica experiencia de Zlatan Ibrahimovic y el peligro generado en cada subida de Theo Hernández por el lateral izquierdo. Y de una combinación entre ellos, el pase de Saelemaekers, el amague del dinámico Kessie y el remate de Calhanoglu llegó el gol a los 5′ para poner el encuentro 1 a 0.

Benevento intentó salir y darle pelea al equipo local. Le costó un tiempo poder salir del asedio de Milan, pero a los 30′ tuvo una chance con un tiro de esquina que se cerró, podía entrar en modo “olímpico”, pero las manos de Donnarumma evitaron la caída de la valla.

Milan respondió con una buena jugada de Calhanoglu a los 34′ y un centro que Leao no pudo conectar bien en su cabezazo final. Y a los 36′ Theo Hernández esperó en el área, encontró el hueco y sacó un remate fuerte y cruzado que el arquero visitante logró desviar al tiro de esquina. Y a los 45+2′ Zlatan cerró la primera etapa con una escapada solitaria, tras haber recibido la habilitación de Kessie, y su disparo fue tapado por el arquero visitante.

Milan comenzó el complemento con una variante; Tonali reemplazó a Bennacer, amonestado, pero de correcto partido. Y volvió a tomar las riendas. A los 54′ Zlatan armó una jugada bárbara en el área y su disparo fue rechazado por Montipó, el arquero visitante.

Llegó la primera variante de la visita: a los 54′ Roberto Insigne reemplazó a Falque. Y a los 59′ Milan amplió la ventaja; Hernández combinó con Zlatan y fue a buscar la devolución. Ibrahimovic prefirió girar y patear al arco. Montipó dio rebote y el propio Hernández, que había ido a buscar la pared, se encontró con el balón. Así sacó un disparo fuerte y cruzado que se transformó en el 2 a 0 para el local.

Benevento fue adelante. Entre Viola y Artur Ionita buscaron asociarse con Insigne, abrir la cancha con Improta y Dabo, para llegar a la búsqueda de Lapadula. Era un poco más arriesgada su propuesta, mientras que el Milan se apoyaba en la sabiduría conductiva de Calhanoglu y el trabajo colectivo de un equipo que empieza a aparecer.

A los 74′ el local abrió una ventana para introducir tres modificaciones: S. Castillejo ingresó en lugar de A. Saelemaekers, A. Rebic entró por R. Leão y D. Calabria reemplazó a Theo Hernandez; también Benevento aprovechó para variar su alineación. Iban ya 75′ cuando Adolfo Gaich reemplazó a G. Lapadula y G. Caprari ingresó por R. Improta.

El partido no varió demasiado con las modificaciones. No tuvo la visita profundidad, le costó elaborar maniobras y Milan siempre se sintió cómodo en el partido. A los 84′ Brahím Diaz entró por Calhanoglu y en la visita Andrés Tello reemplazó a Dabo.

Los minutos finales mostraron algunas sutilezas de Ibrahimovic, quien aún es uno de los futbolistas más carismáticos y de mayor jerarquía del mundo. Milan ganó bien, con pocos sobresaltos y con la expectativa grande de la visita a Juventus en la próxima fecha, mientras que el futuro próximo aparece con una sonrisa.

Hernán O’Donnell

La agenda de la Selección empieza a vivir el año

Ya estamos en plena competencia. Falta poco más de un mes para que la Selección Argentina de Fútbol retome su agenda, muy nutrida por cierto, y comience las presentaciones oficiales. Casi sin tiempo para organizar partidos amistosos, el equipo que conduce Lionel Scaloni deberá jugar dos partidos de la Competición Preliminar de la Copa Mundial de la FIFA-Qatar 2022. Quedaron postergados los encuentros ante Brasil y Uruguay, por la quinta y sexta fecha, que es posible se jueguen entre septiembre y octubre, en tanto previo a la Copa América Argentina-Colombia 2021, se disputarán las séptima y octava jornada.

La Argentina se medirá frente a Chile el 3 de Junio próximo en condición de local; deberá viajar luego a Colombia para enfrentar al local el día 8 de Junio y deberá regresar de inmediato a Buenos Aires para volver a jugar ante Chile, el 13 de Junio, en el debut por la Copa América.

Un calendario apretado al máximo, porque deberá jugar dos partidos de eliminatorias, los cuatro de fases de grupos y si llega a la final, totalizaría 9 encuentros en poco más de un mes.

Lionel Scaloni confía en el equipo, a pesar del poco tiempo de trabajo. hay una base de jugadores que hace rato trabaja con él, que en rigor de verdad los conoce desde los tiempos en que era parte del cuerpo técnico de Jorge Sampaoli.

A esa base le agregó, con el paso del tiempo, algunos futbolistas. Hizo la renovación tan reclamada. Y armó un equipo que tuvo una participación destacada en la última competencia oficial, la CONMEBOL Copa América Brasil 2019. Y para la edición inminente del torneo más antiguo de seleccionados de fútbol, ya publicó la nómina de 50 jugadores, de los que quedarán 23 para jugar el certamen.

En esa nómina están los arqueros Franco Armani, Esteban Andrada, Emiliano Martínez, Agustín Marchesín, Juan Musso y Jeremías Ledesma. Los defensores Gonzalo Montiel, Juan Foyth, Lucas Martínez Quarta, Germán Pezzella, Nicolás Otamendi, Walter Kannemann, Facundo Medina, Nehuén Pérez, Nicolás Tagliafico, Leonardo Balerdi, Fabrizio Angileri, Fabricio Bustos, Marcos Senesi, Cristian Romero y Lisandro Martínez. Como mediocampistas fueron convocados Rodrigo De Paul, Leandro Paredes, Exequiel Palacios, Giovani Lo Celso, Ángel Di María, Lucas Ocampos, Guido Rodríguez, Marcos Acuña, Rodrigo Battaglia, Roberto Pereyra, Nicolás Domínguez, Santiago Ascacíbar, Ignacio Fernández, Agustín Almendra, Matías Zaracho y Alejandro Gómez. Y para el ataque, Scaloni citó a Lionel Messi, Lautaro Martínez, Nicolás González, Sergio Agüero, Paulo Dybala, Joaquín Correa, Matías Suárez, Adolfo Gaich, Mauro Icardi, Giovanni Simeone, Thiago Almada, Alan Velasco y Lucas Alario, quien sufrió una lesión en el tendón del muslo derecho y se aguardará la evolución para ver si llega en condiciones a la Copa. Su recuperación demandará entre seis y ocho semanas, con lo cual su presencia se ha convertido en una incógnita. “Espero estar presente en la lista de convocados para jugar el torneo, y si no se da, alentaré desde mi casa como un hincha más”, afirmó Lucas Alario en el sitio oficial de la Bundesliga.

También ha presentado una lesión el zaguero Juan Foyth en el encuentro ante Arsenal. El ex jugador de Estudiantes de La Plata sufrió una molestia en el músculo isquiotibial de la pierna izquierda y también habrá que aguardar la evolución de esa lesión.

Recordemos que la Copa será dividida entre dos países sede, Argentina y Colombia. En la tierra del tango, los partidos se jugarán en cuatro ciudades: Buenos Aires, Córdoba, Mendoza y Santiago del Estero.

El debut será el Domingo 13 de Junio a las 18 hs. en el Estadio “Antonio Vespucio Liberti” del Club Atlético River Plate, en el que la Selección enfrentará a Chile. El segundo partido lo jugará en el Estadio Mario Alberto Kempes, en la ciudad de Córdoba, capital de la provincia homónima, ante Uruguay, y luego, los partidos siguientes serán otra vez en Buenos Aires, ante Paraguay y Bolivia, en el Estadio “Monumental”.

La agenda de la selección está cargada. Y está cercana. En unos días más empieza la seguidilla de partidos y el corazón de la celeste y blanca volverá a presentarse entre su gente.

Hernán O’Donnell