Liverpool y una receta tan inquietante como efectiva para triunfar

En el sábado de “Halloween”, el Liverpool recibió al West Ham en un partido apretado y reñido hasta el pitazo final. El encuentro se decantó por el anfitrión pero dejó un sabor amargo en las acciones del equipo de Klopp. El equipo londinense trajo consigo el envión anímico de la remontada ante Tottenham e iba por otra hazaña en casa de los campeones de Inglaterra.

Desde el inicio del partido Liverpool manejò la posesión pero sin causar sobresaltos en el equipo londinense, el cual tuvo facilidad en instalar su plan de juego. Tras aguantar los ataques iniciales del local, el equipo de David Moyes logró salir sin apuros de su campo y en su primera llegada castigó al conjunto “Red”. Fue a través de un centro rechazado a medias por Joe Gomez y aprovechado por el español, Pablo Fornals, quien colocó con suma tranquilidad el balón en el palo derecho de Alisson Becker. 1-0 a los 10′ en la visita a Anfield, sin embargo, aún restaba una eternidad y un sinfín de opciones para el dueño de casa.

No fue fácil para el local volver al partido, la defensa visitante era una muy cerrada y que con confianza se potenció y frustró todas las llegadas del trío ofensivo Red. El paraguayo, Balbuena, se lució y junto a sus compañeros centrales (Ogbonna y Cresswell) brindaron seguridad en el fondo del equipo “Hammer”. Finalmente, y tras varios intentos, el ataque constante tuvo sus frutos y Salah obtuvo un penal, el cual canjeó por gol a los 42′. Por más perseverancia que eficacia, el Liverpool logró el empate y consiguió tranquilizarse aunque no logró plasmar esa mentalidad calma en su juego.

Mohamed Salah, especialista desde el punto penal

La segunda mitad no fue muy distinta a la inicial, Liverpool mantenía la pelota pero no preocupaba seriamente a su rival, entonces Klopp movió el banco y encontró la solución a sus problemas. El ingreso de Shaqiri y Diogo Jota brindó nuevas amenazas ofensivas y piernas frescas a un partido sumamente desgastante. La flamante incorporación proveniente del Wolverhampton anotó por duplicado aunque su primera anotación fue anulada por una jugada peligrosa de Mané. La segunda vez que encontró la red, lo hizo gracias a una gran jugada colectiva que destacó por un milimétrico pase filtrado de Shaqiri y una definición ortodoxa del portugués ante la salida de Fabianski. Fue a los 85′ y le dio la victoria a un equipo que no se lució pero triunfó gracias a sus múltiples opciones y a su mentalidad ganadora, la cual constantemente es puesta a prueba.

Liverpool se trepó a la cima de la Premier League pero no logra replicar sus mejores momentos futbolísticos. Debido a lesiones, contagios de Covid-19 y factores adicionales, no logra mantener una alineación fija y esto perjudica su constancia. Gana pero no disfruta, y las lesiones de Fabinho, Van Dijk y Thiago hacen que su defensa pierda jerarquía y su mediocampo quede despoblado por momentos. Definitivamente deberá cambiar algo porque son muchos partidos seguidos en los que no logra imponer su estilo y gana gracias a la jerarquía de jugadores como Salah, Manè y Jota. Este último siendo, probablemente, el mejor jugador del equipo actualmente y el más decisivo.

Diogo Jota, el héroe reciente de Liverpool.

Se aproxima una semana decisiva para los Reds, quienes visitarán Bérgamo y Manchester, para enfrentarse al Atalanta y al conjunto “citizen”, respectivamente. La defensa deberà afianzarse antes de verse las caras con dos de los ataques m

Se aproxima una semana decisiva para los Reds, quienes visitarán Bérgamo y Manchester, para enfrentarse al Atalanta y al conjunto “citizen”, respectivamente. La defensa deberà afianzarse antes de verse las caras con dos de los ataques más goleadores de Europa. Será sin duda una prueba de fuego para este equipo que ya lo ganó todo y ahora recae en él no dormirse en sus laureles.

Federico O’Donnell