Sassuolo se llevó una victoria merecida y a Lazio se le esfuman las ilusiones

Un partido a pleno sol, contra un rival digno, prolijo y audaz. Una tarde que invitaba a la ilusión. A los 3′ llegó el local, con un remate cruzado de Immobile que pasó muy cerca del palo derecho del arco de Consigli.

Sassuolo no se sentía menos y le planteaba el partido de igual a igual, con mucho trabajo en la mitad de la cancha. Locatelli, Boga y Bourabia se plantaron para asistir las llegadas del equipo visitante, que muy pronto avisó con un tanto que no fue convalidado por el VAR.

Le costaba a Lazio salir, aunque había presentado una línea de cinco volantes, perdía en el centro del campo. Lukaku era el más activo para el progreso por izquierda, pero la visita se adueñó del control en el primer cuarto de hora. Y en ese andar, Sassuolo se mostró más lúcido y con mayor adaptación al juego.

Recién a los 32′ llegó Lazio, con un remate de Sergej Milinković-Savić que se fue bien abierto. El tiro no había sido para destacar, pero sí el momento en que el local volvió a aparecer en el juego. Y enseguida llegó el gol, por esos misterios del fútbol que a veces se hacen presente. un equipo que había hecho muy poco, casi nada, y sin embargo se encontró con una ventaja. Se fue de contragolpe Lazzari por la banda derecha, sacó el centro y Luis Alberto, cuando iba a controlar para rematar, el rechazo de un defensor rebotó en su pierna derecha y el balón fue al arco para sellar el 1 a 0 a los 33′ del encuentro.

Sin haber hecho demasiado, Lazio se encontraba en ventaja. Sassuolo iba a mantener la actitud, y siguió con ese espíritu de ataque que había mostrado desde el inicio. A los 37′ Boga sacó un disparo desde afuera que pasó muy cerca del poste izquierdo de Thomas Strakosha. Y sin mucho más para agregar se fue el primer tiempo, en un partido liviano, de tono menor, con buenas intenciones pero con poco ritmo, opacado por el calor y la acumulación de partidos.

El complemento se inició con variantes: Jony por J. Lukaku en Lazio y F. Caputo entró por H.J. Traore, mientras que M. Muldur reemplazó a J. Toljan en la visita.

Sassuolo, que había sido más claro en el primer tiempo, muy pronto encontró su recompensa. A los 51′ llegó por derecha con el ingrsado Francesco Caputo, y su centro fue derecho a Raspadori, quien convirtió el 1 a 1 con un disparo certero. El marcador se parecía un poco más a la realidad.

El dominio de la visita se hizo más claro, entonces Inzaghi decidió mover el banco local: Cataldi por Caicedo a los 60′ del encuentro. Buscaba sumar manejo a la mitad de la cancha, equiparar la zona de gestación, porque la visita, hasta esa hora de juego, se había mostrado más prolijo y claro en el dominio.

Y siguió esa tónica de juego, con la visita parada en campo del local, los zagueros bien cerca del centro del campo, Marlon y Ferrari empujaban desde allí y Caputo, se movía por los agujeros, para librar espacios y buscar llegadas. Lazio volvió a meter mano en el banco: Lucas Leiva entró por Milinkovic-Savic a los 66′. Y a los 67′ L. Haraslin por F. Djuricic en la visita.

El dominio de Sassuolo se hizo más marcado. Como si Lazio se hubiera desinflado, no sólo en lo físico, también en lo anímico, se lo veía caer con el correr del juego. A los 78′ Rogerio entró por J. Boga, de muy buen partido. Lazio aprovechó la última ventana para producir dos cambios: Iban 82′ cuando D. Vavro reemplazó a S. Radu y Bobby Adekanye entró por Luis Alberto; era el último intento por torcer un partido que tenía un rumbo complicado para el local. A los 86′ hubo un pelotazo …

Sassuolo metió el último cambio a los 88′. El zaguero Giangiacomo Magnani entró por el autor del gol, Raspadori, para acomodar la defensa ante el último arrebato de Lazio, que recién al final había arrimado al área visitante.

Y la justicia apareció al final; ya en tiempo de prórroga, Sassuolo desniveló, tras un tiro de esquina desde la derecha, apareció Caputo libre por el otro sector y con un cabezazo dentro del área chica marcó el 1-2 a los 90+1′ del partido.

Sassuolo celebró con mucha alegría la victoria. Había hecho los méritos para llevarse el partido de la capital de Italia. Fue más que su rival, propuso juego desde el inicio, no se deprimió con la desventaja inicial, fue práctico, limpio y honesto. Se llevó lo que merecía y hundió a Lazio en un tobogán que lo despide de la lucha por el título, en tanto el conjunto se mostró abatido y entregado casi desde el inicio del encuentro.


Hernán O’Donnell

En su camino al título, Madrid suma triunfos y polémicas

Una nueva controversia acompañó al Real Madrid. Y esta, de movida. Porque había pasado muy poco hasta el penal. Apenas la llegada de Alavés, que tuvo la situación más clara en el inicio cuando tras el centro de la izquierda Joselu metió un frentazo que se estrelló en el travesaño. Era un aviso en el inicio. El equipo visitante señalaba que no iba a jugar con complejos, pero el partido iba a tomar su rumbo definitivo en uno minutos más.

Muy pronto iba a llegar, otra vez, la polémica por un penal a favor de los merengues. Mendy se fue por la izquierda, entró al área y el cruce del lateral de Alavés lo derriba ante una rodilla que se choca con la pierna derecha del jugador local. Pareció leve, pero el contacto existió y el árbitro sancionó penal que Benzema transformó en gol a los 11’ para que el encuentro quedara 1-0.
La sensación de dudas en el fallo y la presunción de cosa juzgada se mezclaron en el amanecer del partido. Porque a esa falta de certeza total en cuanto a la infracción, el mundo que observaba por TV el encuentro trambién sumaba una sensación de que el partido estaba acabado no más comenzar.

Por más que Alavés soltó amarras y fue por el empate. pero las diferencias de jerarquía hacían suponer que mucho le iba a costar. Encima debió apelar a una variante a los 22′ cuando se fue lesionado el defensor navarro y debió ingresar Aguirregabiria. Pero iba a dar pelea, aún con los contratiempos sufridos.

Alavés supo explotar el costado derecho del local; sabía que por ahí encontraría el camino. Y fue, con los extremos y los volante. A los 25′ Burke sacó un buen remate que Courtois contuvo con jerarquía; a los 34′ una gran jugada por la banda izquierda de Oliver Burke generó un centro que Joselu no pudo rematar con precisión. Y Madrid que descnasaba en la ventaja y en el buen desmpeño de Mendy para progresar por izquierda mientras Modric conducía las salidas y Benzema abría surcos, caminos y pasillos, para la llegada de Rdrygo y Asensio. El partido, con sus bemoles, era parejo, por lo menos hasta el final del primer período.

En el segundo tiempo la cosa se iba a definir muy rápido; así como el inicio se resolvió con un penal, el sello del trámite iba a llegara los 50′ con el gol de Asencio tras la asistencia de Benzemá y la confirmación posterior del VAR. 2 a 0 y ahora sí quedaba ya la imagen definida. Solo un milagro podía torcer la historia. No porque no pudiera Alavés achicar la distancia, sino porque Madrid amenazaba con aumentar, mientras Courtois abortaba cualquier ilusión visitante.

Con el 2-0 Real Madrid se tranquilizó y se dedicó a mover el balón. La visita propuso dos variantes: a los 53′ A. Mahmoud entró por L. Fejsa y L. Rioja reemplazó a L. Perez. Mientras, Madrid aceleraba las imagenes de superioridad. A los 57′ Benzemá sacó un fuerte remate que Roberto Jiménez desvió y el rebote de Lucas Vázquez cruzó toda la valla. mendez sacudió y respondió Courois a los 65′ y Modric disparó fuerte pero respondió muy bien Roberto Jiménez. Era lo más claro de un partido hasta la nueva ventana de variantes.

Alavés fue por dos cambios más, los últimos que le quedaban. B. Sainz ingresó por E. Mendez y el panameño José Luis Rodriguez entró por Joselu a los 68′; ahí Madrid empezó a modificar su esquema para refrescar el aire y rotar jugadores. A los 69′ Federico Valverde reemplazó a Modric y el brasileño Vinicius ingresó por Asensio en Real Madrid.

Ya el partido había entrado en la crónica conocida y anunciada. Madrid dueño del balón, del control del juego. Alavéz, como un partenaire, lo corría de atrás. Y hubo una más cuando entró Isco, a los 81′ por Rdrygo, y dos minutos más tarde sacó un buen tiro que tapó el arquero visitante.

El partido concluyó con el Real Madrid en posesión del balón, sin problemas, sin sufrir, con tiempo para que Brahím Díaz ingresara por Casemiro en la prórroga, cuando ya todo parecía que había concluido hacía un buen rato y las especulaciones sobre la resolución a de La Liga esperan por su confirmación.


Hernán O’Donnell